De niño ya me gustaba Tercera Parte

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sinpelitos.
Pasaron varios días desde que estuve con Sergio, no podía dejar de pensar en su verga, me quede con esas sensaciones que me hizo sentir en la cola cuando me lamia, además nunca había probado el sabor de la leche de hombre y realmente lejos de desagradarme el sabor me encanto.

Solía pasar los días mirando por la ventana a ver si podía tener alguna señal de Sergio ya que me encontraba con muchas ganas de estar con él, ya no me importaba si me quería coger con su chorizote gordo, me ponía muy inquieto con la idea de ser su putita como él me decía, pasaba por la vereda de su casa como jugando con la esperanza de que me llamara y me invitara a entrar, en eso se asoma por una de las ventanas que daban a la calle y dice:
Sergio- hola Miguelito como estas?
Yo- bien acá jugando por?
Sergio- mañana a la tarde voy a estar solo en casa si podes veni….

Yo- me subió un calor mi cara era un fuego, creo que lo noto, porque su cara era de gracia.

Sergio- si queres podemos ver una peli que te va a gustar mucho
Yo- bueno está bien
Parecía que el tiempo no pasaba más, no pude dormir en la noche pensando que otra vez iba a estar con este hombre que de solo pensar mi pitito se ponía durito y mi cola inquieta.

Al fin llegó el día, cerca del mediodía mi tía me dijo que tenía que salir y que me bañara yo lo hice pero al momento de salir le dije que me quería quedar a jugar con Sebastián, entonces ella se fue y me dejo una galletas y leche para la merienda, yo me puse un shorcito de deporte que me quedaba bien y salí a la vereda.

El estaba barriendo una escalerita que la casa tiene en la entrada y me silbo para que me cruzara, cuando llegue él se había entrado y la puerta estaba abierta, al pasar me dijo que cerrara con la llave.

El estaba como siempre de en ojotas y un pantalón corto verde que me gustaba mucho como le quedaba se sentó en un sillón de la sala y me senté a su lado, puso una película en la video en ese tiempo las películas eran en cinta, cuando mire pasaban muchas imágenes rápidas de gente desnuda haciendo lo que nosotros habíamos hecho y mucho más.
Mis ojos eran dos platos enormes y me quede duro mirando, cuando empezó la película era de un hombre con una chica mucho más joven.

Yo mire de costado y Sergio se manoseaba el bulto que ya comenzaba a crecer, entonces me abraza y me arrima a su lado.

Sergio- el otro día te me asustaste mi nenita pero hoy vas a ser mía sabes?
En la pantalla la chica ya estaba chupando el pene del hombre, entonces Sergio saco su verga negra bien dura gorda y súper caliente de su pantalón y me lo hizo agarrar.

Yo sentí que todo a mi alrededor se borró y solo se veía él y su poronga me agacho con una mano la cabeza y empecé a lamer con muchas ganas.

Sergio- así bebé que linda lengua así ha si dale chupa mis huevos también.

Yo lamia y no perdía detalle de sus pelotas que se notaban bien cargadas ya que eran pesadas y estaban como inflamadas, el me decía que tenía mucha lechita para mí, ya que no había voseado los huevos desde que estuvimos juntos la última vez.

Sergio- uff putita si métela en tu boca mámala bien…
Yo- parece que te creció más está más gorda…
Sergio- lo que pasa es que estoy muy caliente mi nena.

En eso él se quitó todo y se quedó todo desnudo y me desnudo todo a mí también, se acostó en el sillón y me acostó arriba de el pero invertido, yo me puse el choto en la boca y el me comenzó a lamer la cola, sentía como su lengua me mojaba el anillito y se me iba abriendo casi me metía la lengua, eso hacía que mis gemidos se me escaparan y notaba que cada vez que el escuchaba mis gemidos su poronga latía de golpe.

En la pantalla el hombre le metía su verga por la conchita a la chica, y Sergio me dijo bueno mi putita ya te llego la hora esta tiene que entrar en tu hermoso culito me decía mientras se sacudía la verga, no levantamos él fue al cuarto yo al verlo me asombraba de ver tremendo cuerpo morocho casi negro con ese culo bien musculoso y esas piernas fuertes caminar desnudo, cuando volvió vi cómo se movía su poronga apuntando al techo de lado a lado mientras caminaba tranquilo como si estuviese vestido ese cabezón era impresionante, no podía dejar de mirarlo, en su mano traía un pote de crema pero de algo trasparente, me dijo que con eso me entraría bien y no me dolería casi nada.

Sergio-bueno ponente como un perrito en el sillón así con la colita parada.

Yo- así está bien?
Sergio-si bebé así que linda cola nena mira como tenes ese culito…
Yo- te gusta mi culito?
Sergio- si me gusta? Me encanta y te lo quiero romper con mi chota nena.

Eso me dio temor pero ya estaba ahí y no podía echarme atrás, él me puso bastante liquido en la cola con los dedos me ponía bien adentro metiendo primero un dedo, luego dos, yo ya tenía mi pito duro y sentía como si me estuvieran cogiendo pero solo eran sus dedos.

Sergio- listo ya está ahora la barra…
Y se pasó por la chota mucho líquido, e dijo que era vaselina y que servía para coger, no termino de decir eso cuando sentí que la apoyaba en mi culo, sentía el calor de su cabezón y poco a poco me lo metió…
Yo suspire y me quede sin sacar el aire ya que ni me quería mover, sentía como si tuviese una pelota grande metida en el culo.

Sergio- ya te entro la cabeza mi nenita, ahora esperamos un poquito y te la sigo metiendo….

Yo no lo podía creer tenía un choto grande en mi interior, él fue poniendo más y más hasta que me abrazo por la cintura y sentí sus pelos en mis nalgas ya la había metido hasta las pelotas.

Sergio- ah sí que buen culito como aprieta mi amor así así….

Yo- mmm hay me duele… sácamela por favor.

Sergio- espera un poco putita ya se va ir el dolor y te va a encantar…
Yo- hay no me puedo mover me duele mucho…
Él se quedó quieto un ratito y de a poquito comenzó a ir y venir, sacaba un poquito y metía de nuevo y así hasta que ya me la sacaba casi toda para volver a meterla toda.

La sensación era tremenda me sentía lleno de verga y cuando la sacaba se sentía un vacío, nunca pensé que ser cogido por una chota grande diera tanto placer, mi pito chorreaba líquidos a medida que Sergio me cogía.

Me la metió de golpe hasta el fondo mientras me mordía la oreja y así se quedó yo apretado contra el respaldo del sillón y el abrazado a mi sentí como palpitaciones en mi interior, y su lechita caliente fue saliendo de su verga y mojando las paredes de mi culito salió tanto que cuando por fin se pudo mover y sacármela se derramo por mis piernas.

Él se fue al baño y yo me quede sin poder moverme acostado boca abajo con la cola abierta casi me desmayado, cuando volvió me pasó una toalla húmeda en la cola y las piernas.

Estuvimos acostados por un rato largo me temblaban las piernas, él me dijo que fuéramos al baño así largaba toda la lechita que tenía adentro, me acompaño porque me costaba caminar, me sentó en la taza del inodoro y me dijo:
Sergio- te gusto putita? Que cogida que te di no?
Yo- si me gusto pero casi me partís al medio, siento la cola dormida.

Sergio- te la llene de lechita, tenes un culito muy lindo me hiciste gozar mucho…
Yo- me gusto yo también sentí lindo pero con un poco de dolor.

Sergio- bueno pero por ser la primera vez estuviste muy bien.
Ahora sos mi putita y para la próxima no te va a doler tanto.

Cuando me levante de la taza mire y había largado mucha mucosidad blanca con algunas manchas de sangre.

Sergio me dijo que no me asuste, que era normal y que por hoy no haríamos nada para que mi colita descanse
Pero cuando le mire la verga ya la tenía dura de nuevo, yo no podía ni siquiera chuparla ya que se me había ido toda la fuerza, nos pasamos todo el resto del día charlando acostados en su cama, hasta que se hizo tarde y me fui a casa, caminando despacito, ya no me dolía tanto y me sentía feliz ya que por primera vez me había cogido un macho de verdad con una verga tipo chorizo, gordo, negro, hermoso y sabía que cada vez que tuviésemos oportunidad la pasaríamos cogiendo, además no me iba a doler tanto.
No pasaría muchos días para que sintiera ganas de estar otra vez con mi negro Sergio mi primer macho el que me había hecho sentir una nena como él decía, e impresionante como se dan las cosas cuando uno se pone a recordar y se da cuenta que de niño ya me gustaba.

Saludos a todos y Muchas gracias al los que hacen posible Sintabues.