DE VUELTA EN TEMUCO DEGUSTADOR DE CULITOS TIERNOS. FINAL
Estimados lectores, heme acá de regreso con los relatos de las andanzas de Nachito y su padre Cristian en viaje de vacaciones al sur de Chile, aqui la despedida de la ciudad de Temuco y sus amigos que hicieron mejor el disfrute de todos..
Y siguiendo con las vacaciones en plena zona mapuche, los días siguientes salen a cabalgar los chicos recorriendo grandes extensiones, observando el modo de vida de auténticos mapuches, que siempre fueron bien recibidos dado que Lorenzo se cuidaba de llevar buenas relaciones con sus vecinos, prestado su colaboración cuando es requerida, lo cual era bien recibido y agradecido por ellos.
Por las tardes, y ya de regreso al hogar y dada la complicidad que había en el grupo, se duchaban y posteriormente vestidos simplemente en bóxer, compartían la cena y posteriormente el deseado “postre” en grupo, donde siempre los platos principales eran Nachito y su amiguito José que recibían las atenciones de los adultos, lo cual también aprovechaba Juan quien con su gruesa verga era normalmente el último en casi destrozar la cuevita de Ignacio a la vista de Cristian quien daba cuenta de José doblemente excitado al ver como Juan hundía su estoque en el lampiño hueco de su hijo lo que él replicaba mientras es observado por Lorenzo y Miguel que no obstante haber disfrutado sendas eyaculaciones en los chicos, se masturban de forma cadenciosa para aumentar y repetir su dosis de placer.
Como ya se acerca la fecha en que deben continuar viaje hacia el norte, Lorenzo le comenta a Cristian que le gustaría hacer una fiesta de despedida e invitar a algunos amigos, a los cuales ya ha visto en el video de cumpleaños de José y del cual disfrutaron el primer día. Le señaló que son amigos de confianza, la mayoría casados en un numero de 6 y que harán inolvidable la despedida para Nachito y por supuesto para todos. Además, y como “bonus track” le cuenta que están iniciando a uno de los hijos de uno de ellos de 12 años y que tuvo su celebración de esa edad tal cual José en su oportunidad, y que ese día podrá incorporarse a la fiesta. Ante tal invitación, Cristian con mayor razón aceptó tal despedida.
Y así, llegó el día de la gran despedida, un viernes lluvioso, pero con el ambiente cálido al interior de la casa por la gran chimenea que, al centro de la habitación central, prodigaba calidez para todas las habitaciones. Los chicos vestidos en shorts y bermudas se entretenían jugando consola en el gran televisor empotrado en la pared y que antes ya había mencionado.
Poco a poco se van presentando los invitados. No abundaré en sus nombres para no crear confusiones, pero todos andaban entre los 35 y 45 años, y cada uno llevaba algún presente para compartir, así llego además de cervezas y licores, un par de tortas, bombones y algunas pizzas y así poco a poco se fue armando el panorama.
Uno de los invitados, que se veía de los mayores, se presentó con un hermoso niño rubio de ojos color turquesa menudito de estatura similar a Nachito quien sonriente fue saludado por el dueño de casa con un “piquito” en la boca y un fuerte apretón de manos de parte de los adultos, y que fue presentado a Cristian como Emiliano, mismo nombre de su padre. El chico muy amistoso saludo con una amplia sonrisa a Cristian, y al ver a José se fue corriendo a saludarlo y jugar con la consola, momento en el cual se conoció con Nachito a quien regaló un potente Hola, con una sonrisa que resaltaba su hermosura.
Cristian apenas lo vio, se saboreó íntimamente, al saber que ese tierno y hermoso chiquillo estaría sometido a su lujuria y placer, y más aún cuando se enteró que recién había cumplido los 12 años y su fiesta de bienvenida grupal había sido apenas un par de semanas antes, con lo que entendió que el chico no había participado demasiado en sesiones de sexo grupal, lo que exacerbó su calentura.
Lorenzo invitó a sus amigos a ponerse una vestimenta más cómoda, dado que venían con gruesos abrigos producto del mal tiempo, de lo que no se hicieron de rogar y pasaron a una habitación anterior donde se despojaron de sus ropas regresando cada uno en boxers de diferentes colores y que tenían algo en común. El impresionante bulto en la parte delantera que decía a las claras cual era el estado de excitación de cada uno de ellos.
Por su parte Emiliano (hijo) no había esperado a ser invitado a ello y de mutuo propio se había sacado la mayor parte de la ropa gruesa quedando en una camisa y bóxer con dibujo de súper héroes dando a entender por un lado su inocencia, pero por otra que estaba claro cuál sería el punto central de la fiesta.
El padre de Emiliano conversa en susurros con Lorenzo y le pasa un objeto pequeño. Los demás ya en amena conversación y con sus tragos en la mano, son invitados por el anfitrión a ver el video de la celebración del cumpleaños de Emiliano, que como ya dije fue un par de semanas antes, por sus 12 años. Se acercaron pues a la zona de la pantalla y se acomodaron en los sillones. Lorenzo desconecto la consola y preparó el pendrive con la grabación.
Inicia el video, y ante el asombro de todos se ve a Emiliano sentado a la mesa con una corona de rey, rodeado de otros chicos de su edad, con torta, confites y caramelos sobre la mesa, mientras todos le entonan el cumpleaños feliz, tal imagen dura algunos segundos, los invitados se miran desconcertados, mientras una sonora risotada del padre del chico se escucha, y el video se corta abruptamente dando paso a una imagen de Emiliano, desnudo sobre la misma mesa, rodeado por los mismos adultos presentes que también le cantaban cumpleaños feliz, pero todos ellos desnudos y con sus amenazantes garrotes dispuestos para darle en forma individual su “regalito” de 12 años.
Distendida ya la situación, el padre de Emiliano lo toma de la mano y lo lleva donde Cristian y le dice que salude a su nuevo tío, lo que el chico sonriente se abalanza en sus brazos y le da un sonoro beso en la boca. Por su parte, éste llama a Nachito a su lado para que a su vez salude al padre de su nuevo amigo y así ya entrar en mayor confianza a lo cual no se hicieron esperar.
Mientras la imagen del video mostraba como Emiliano recibía su primer “regalo de 12 años” por parte de su padre, ante la mirada atenta y caliente de sus amigos, Cristian se desnudó y el pequeño Emiliano sin perder tiempo se introdujo la verga en su boca demostrando cierta practica por la maestría al hacerlo. Nachito por su parte daba cuenta del pene del nuevo tío, mientras los demás hacían un circulo y procedían a empezar a acariciar a los niños. Miguel pidió un poco de atención y ubico a su hijo José junto a los otros dos y éste también empezó a recibir atenciones de los adultos presentes, incluido Juan que en esta ocasión estaba en posición de adulto.
Cristian estaba embelesado con Emiliano, sus hermosos ojos daban un brillo especial mientras lo observaba tragar su verga hasta el fondo de su garganta, transformándose en una verdadera garganta profunda dando a entender que hacía tiempo había sido iniciado en dicha arte. Cristian se éxito a full rápidamente y anticipando una eyaculación temprana, buscando un lubricante el cual empezó a aplicar en el estrecho huequito de Emiliano, luego en su ardiente pene a punto de explotar, y sentándose en el sillón fue acomodando al niño, observando su carita y lentamente lo empezó a empalar en su palpitante miembro. Hazlo tú, le dijo al niño para que fuera a su propio ritmo, y poco a poco se fue ensartando todo aquel pene de adulto, haciendo algunos gestos de dolor a ratos, pero siguiendo en su cometido, hasta que, en un momento, se sentó violentamente quedando completamente clavado dejando solo los huevos fuera de su culito. Inmediatamente los demás estallaron en aplausos, excepto el padre del chico que ya tenía ensartado a Nachito con las piernas sobre sus hombros y bombeando en un delicioso mete y saca del pene, que era absolutamente blanco, grueso y rodeado de vellos rubios como su cabellera, el resto del cuerpo absolutamente lampiño, tal como Emiliano que no tenía ni un solo pelo salvo los de la cabeza, mas amarillos aun que los de su padre lo que le daban un aspecto angelical.
Por supuesto, el agasajado principal fue-una vez más-Nachito, quien vio desfilar por su culito todos los penes disponibles, incluido Juan, con quien había estrechado amistad, seguramente impulsado por el gran tamaño del pene del joven que llenaba absolutamente el hueco bien dilatado y bien lubricado por los antecesores, de su amiguito santiaguino.
No quiero hacer creer con ello que los otros chicos, Emiliano y José no recibieron sus atenciones. Por supuesto que sí, que se dio todo tipo de folladas en todas poses y en distintos sitios de la casa. En un momento de la madrugada había algunos durmiendo sobre las mullidas alfombras y despertó Cristian con el rubio pequeño a su lado, y suavemente lo fue acomodando de costado, para empezar a penetrarlo –una vez más- mientras el chico seguía durmiendo. Dicho movimiento fue percibido por el joven Juan que a su vez acomodó su gruesa verga en la boca del niño, empezando poco a poco a llenársela de carne ardiente, lo que si despertó al chico quien sintió la larga verga de Cristian perforando su traserito y la gruesa de Juan por su boca, la que tomo con ambas manos y empezó a lamer y tragar como tan bien sabe hacerlo consiguiendo en poco tiempo el ser inundado anal como bucalmente por caliente semen que si bien no en grandes cantidades considerando el desgaste de la noche, no por ello fueron cantidades despreciables. Arrancando suspiros a sus violadores como él mismo al sentirse lleno de carne y leche de 2 machos.
Al recobrar noción de lo que ocurría a su alrededor, pudo ver a Nachito que en posición de 4 estaba siendo taladrado en su linda colita nuevamente por el padre de Emiliano, mientras que Lorenzo sentado en el sillón disfrutaba de su boca, que, al ser empujado por su follador, hacía que su pene llegara hasta las mismas amígdalas del chico, quien, ya acostumbrado a tales tratamientos, se acomodaba para que entrara sin producirle ahogos o arcadas. Cristian se acercó y ubicándose de espaldas bajo su hijo, empezó a chupar su erecto pene, que como sabemos tiene un tamaño bastante interesante para su edad, cercano a 15 cms y que anuncia un buen tamaño cuando ya llegue a la adultez. Mientras está en esa posición, siente que alguien empieza a lamer y mamar su propio pene, que prontamente recuperó su rigidez, más al ver que era Juan, el joven adolescente quien le estaba dando aquel nuevo placer, siguieron en esa posición, hasta que el follador empezó a acelerar los movimientos y a lanzar exclamaciones y gruñidos anunciadores de la próxima lechada, la que efectivamente se derramó dentro del profundo culito de nachito, chorreando hasta la boca y rostro de Cristian, momento en que su hijo también le regaló su joven lechecita caliente, que su padre amoroso engulló con mucho placer, situación que también se repitió con Lorenzo y el mismo Cristian en la boca de Juan, sacando nuevamente la cada vez menos abundante lechada de todos los participantes, lo que daba cuenta de la sesión de lujuria y disfrute grupal que ya llegaba a su fin.
Luego de ello, nuevamente durmieron para al despertar iniciar un desfile a los distintos baños para asearse y poder compartir un desayuno reponedor y de paso despedirse formalmente de las nuevas amistades. Luego subir al auto y marchar.
Hasta la próxima…………………([email protected])
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