Descubrí que me gustaban los hombres en un camerino de fútbol.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Me llamo Fernando y tengo 19 años, a comienzos del 2015 descubrí que me gustaban los hombres.
Desde niño fui apasionado por el fútbol, y en mi etapa de adolescente tuve novia, perdí mi virginidad a los 16 años con una chica de 18 y me gustó, pues a mi me atraían las mujeres, pero al entrar a la Universidad y más exactamente al equipo de fútbol las cosas comenzaron a cambiar en mi.
Soy un chico alto y de contextura normal, mido 1.78 y peso, 70 kl. Lo que me sirvió para entrar en la universidad al equipo de fútbol,pues desde niño me apasionaba jugar. Todos los compañeros del equipo tenían aproximadamente la misma estatura mía, entrenamos entre semana dos veces y los fines de semana dos horas los sábados por la tarde, esta era mi rutina durante el primer semestre, los compañeros de equipo eran de semestres diferentes, así los sábados después de prácticas salíamos a tomar unas cervezas o comer algo en grupo, yo por ser el más nuevo me sentía algo aislado de los demás, pues no había aún tanta confianza, ya finalizando el 2014 tenía más amistad con Gustavo, un compañero de 23 años y estudiante de Arquitectura de VII semestre.
En el mes de noviembre de 2014 habíamos clasificado para participar en un torneo corto interuniversitario por lo que viajamos hasta otra ciudad sede del campeonato. Así, al llegar al hotel donde nos alojaríamos,le dije a Gustavo para compartir la habitación entre los dos, lo cual no hubo problemas.
Todo transcurría normal, entrenamos, participamos en la competición, hasta los entrenadores del equipo nos dieron unos días de distracción, esa noche en la que nos permitieron salir, todo el equipo fuimos a un bar, había rumba, licor, mujeres lindas, el que pudo ligar esa noche bien, al llegar a la 1 de la madrugada al hotel, por supuesto había efectos del licor encima y en Gustavo éstos se hicieron notar, me dijo que estaba excitado y que le hubiese gustado tirarse a una vieja. Comenzamos a hablar de sexo, al poco rato me hice el dormido, estaba cansado, pero escuché pequeños gemidos en la habitación y cautelosamente me di cuenta que Gustavo estaba masturbándose, nose porque esta escena hizo que a mi se me parara la verga y me empecé a tocar por encima de mi bóxer, todo hasta ahí fue normal, porque no me masturbe. Al despertar y estar en la cancha le dije a Gustavo en son de juego que iba a tener que escaparse antes de irnos con una vieja para que no pasara la necesidad de masturbarse otra vez, nos fuimos en risa y bromas todo el día. Ya en la tarde que nos llevaron a zona de relajación y estábamos en una alberca con agua helada, noté como el frío le puso erecto a mucho de mis compañeros el pene, a mi eso me excitó, no podía evitar ver los bultos de los demás, lo mismo cuando estábamos en las regaderas, me fijaba en las nalgas y el pene de cada uno, sin que lo notaran y eso me provocaba ganas de masturbarme. Estaba tan confundido con ese gusto repentino.
Una vez terminado el campeonato, ya en casa, en las noches pensaba en Gustavo y en los demás compañeros, pero más en Gustavo y me hacía unas pajas sensacionales y no podía evitar llamarlo pues para preguntarle bobadas, ya que nos encontrábamos en vacaciones y por esa razón no había prácticas. Pero había noches que pasaba en vela, cuestionandome que me pasaba. Comencé a ver videos pornos gay y leer relatos, así fue como di con esta página. Durante todas mis vacaciones me la pasé en plan de ver videos y me masturbaba, sentia el deseo de estar con un hombre, pensaba más en los hombres, me quedaba mirando en los supermercados y centros comerciales a cada hombre que me parecía bonito.
El 23 de Diciembre de 2014, entré a una página de chat gay y comencé a hablar con hombres de otros lados, de otros países y de mi mismo País (Colombia), pero ciudades diferentes, teníamos conversaciones por whatsapp, por facebook, había intercambio de fotos desnudos, mostrando nuestro pene, incluso una pareja gay me mandó fotos de ellos follando, cada vez más sentía deseo de estar con un hombre.
El 25 de Diciembre llamé a Gustavo y lo invité a unas cervezas, me dijo que no podía ese día, yo moría de ganas de verlo tal vez tenía la esperanza de que pudiera pasar algo, uno nunca sabe. Esa misma noche me fui sólo a un bar gay del que me habían hablado, ahí más de cerca viví la experiencia, ver a un hombre bailar con otro hombre y besarse despertaban mi instinto gay y mis ganas de probar también. Sólo no tuve suerte de lugar con nadie,regrese a mi casa y el resto del año sólo me conformé con hacerme la paja todos los días mientras veía porno.
El 13 de enero de este año, comencé nuevamente la universidad, arrancaba el semestre, el 26 de enero ya el entrenador nos estaba citando a los jugadores viejos antiguos, ese día vi a Gustavo y no pude controlar mis miradas, me sentía emocionado al volverlo a ver, creo que él notó eso, pero no le dio importancia, el resto de la mañana lo busqué por el campus y no lo encontré, a los 3 días nos volvimos a ver y me dijo que quería hablar conmigo, que si nos podíamos ver el viernes en la noche y le dije que sí que no había problema, nos vimos en un centro comercial a las 7:30 pm y pedimos hamburguesa. Me dijo que iba a ir directo al grano, me dio algo de susto, lo notaba muy serio.
Cuando me hizo una pregunta que temía que alguien me llegara a preguntar. Tú eres marica? Quedé mudo,no sabía qué decir, tomé valor y le di un no como respuesta,pero me dijo que eso no lo convencía. Así terminó la noche, me fui a mi casa y él supongo que a la suya. Durante la semana siguiente lo evité, pero en el mes de febrero que tuvimos el primer entrenamiento me fue imposible. Ahí estaba él, algo distante de mi. Me sentía triste, pues era con el que más tenía comunicación del equipo. Pasaron más de 15 días y un día en las duchas se me acercó y me dijo al oído que nos viéramos en la cafetería a las 3 de la tarde. Dudaba en llegar, pero ahí estaba yo, cumpliendo su cita. Me invitó una gaseosa, y me entregó un papel con una dirección, me dijo que me esperaba a las 6 de la tarde ahí, que era la dirección de su casa que fuera que no me iba a arrepentir.
Pasé esas tres horas dudando de si ir no, no me podía concentrar en clases y tenía ese día clases hasta las 7 de la noche, pero el deseo que me quemaba por dentro era grande, salí de clases,tomé un taxi y fui hasta su casa, me abrió él, me invitó a pasar, nos sentamos en la sala y me invitó una cerveza, me dijo que estaba sólo que vivía con sus papás y que llegaban a las 9:00 de la noche todos los días. Y duramos casi una hora hablando y me dijo que yo le gustaba, no podía creer lo que estaba escuchando, que tenía ganas de metermelo, y yo, plop, moría con eso que decía, aunque aún no había experimentado, y se lo dije, que yo sentía atracción por los hombres, pero que no había estado con ninguno, y me dijo que él ya había tenido sexo con varios, pero que él era el que penetraba a los otros, y que mi culito le apetece. Sin más habladuría, nos besamos con que salvajismo y nos fuimos a su cuarto, ahí comenzó la explosión sexual, sólo con el roce de su piel y sus besos yo tenía mi pene al tope, se me quería estallar, me quedé sentado en la orilla de la cama y él se puso de pié indicándome que se lo sacara y se lo chupara, ya había visto cómo era pero no lo había echo, bajé su pantalón y saqué ese trozo de carne bien erecto y grande, en comparación al mío, tenía 20 cm en mis manos los cuales llevé a mi boca y comencé a lamer desde los testículos hasta el glande
Era la sensación más rica que jamás había experimentado, lo metía a mi boca y chupaba con deseo, era comida para mi boca, lo quería tragar, era tan delicioso ese pene, él mismo me lo sacó de la boca y me tiró de un empujón en la cama y me besó, mientras desabotonaba mi pantalón y sacó mi pene que estaba erecto, me lo sobaba y me masturbaba sin dejar de besarme, hasta que me pidió que sacara todo mi pantalón y no podía creer lo que estaba haciendo, llevando mi pene a su boca y dándole unas mamadas, si chuparselo a él me había gustado, sentir su lengua en mis 17cm me encantaba, me pidió que me acostara boca abajo, estaba asustado y excitado a la vez, abrió mis nalgas y sentí su lengua buscar mi culo, cuando de repente siento la punta de su lengua succionando mi ano,empecé a gemir fuerte con eso que me hacía, su lengua y sus dedos intentado entrar en mi culo, me lo estaba dilatando, me dolía pero sentía ganas enorme de ser penetrado. Me pidió que me pudiera en cuatro, y abrió mis nalgas y la punta de su pene empezó a frotarla en mi culito
Ohhh eso me hacía gritar y pedirle que me lo metiera, ya no aguantaba más el deseo, quería ser penetrado por fin, comenzó a meter suave la punta de su pene en mi culo, pero me dolía, me aferré a una almohada para ahogar mis gritos de dolor que con nada intento de él meter su pene me partía más mi culo, sentí que se aferró a mis hombros y lo dejó ir sin compasión, pegué un grito que creo que se escuchó en todo el barrio, estuvo por unos minutos sin moverse y me preguntaba si me dolía, le dije que sí con lágrimas de dolor en mis ojos, y comenzó su mete y saca, empezó el vaivén en mi culo, estaba haciendo un festival con el, se movía suave por momentos y me enloquecía, pero cuando aceleraba el ritmo me encantaba más, le decía que siguiera, mientras me pegaba en las nalgas y me decía que tenía el hoyito bien apretado,
Era tan rico sentir sus movimientos de cadera, no deseaba que acabara ese momento, me lo sacó y me pidió que se lo chupara, me puso boca arriba y me lo volvió a meter, con su solo movimiento me corrí, pero sabía que él no estaba por llegar, tocaba sus tetillas mientras me tenía clavado, me dijo que estaba cansado que me subiera arriba y así lo hice, me senté en su barra enorme y me dejé caer del todo, apoyé mis manos en sus pectorales mientras comencé el sube y baja, ahí tenía casi 10 minutos cuando me dijo que estaba apunto de llegar, que me quería llenar el culo de leche y yo le dije que sí, sentir el caliente y espeso de su semen bañar todo mi culo fue lo más hermoso que experimentaba en la vida, lo mismo cuando su pene flácido salió de mi interior y un hilo de su semen recorría mis piernas, se acostó a mi lado y nos besamos más de 5 minutos, ya eran las 8:30 de la noche y pronto llegarían sus padres, así que me dijo que podía asearme y entré al baño mientras él me buscaba una toalla limpia
Pero al llegar al baño el deseo nos invadió nuevamente y ambos nos dimos otra dosis de sexo oral hasta sacarnos la leche, yo me tragué su semen todo, ese sabor saladito es delicioso, nos bañamos juntos, yo me vestí y me fui a mi casa, dormí como un bebé esa noche. Al día siguiente ens universidad nos vimos y hablamos de lo sucedido, sólo le dije que me había amanecido doliendo mi culo, me pidió que este fuera un secreto entre los dos, yo en mayo de este año me conocí por internet con un chico y estudiamos en la misma universidad, él medicina y yo odontología, somos pareja y ambos nos penetramos, pero cuando el equipo de fútbol sale fuera de la U a jugar y duermo con Gustavo, nuestras madrugadas han sido de sexo corrido, es que la primera experiencia es inolvidable.
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