Desde la primaria fui pasivo y en ocasiones hacía de activo.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por camaron64.
Conocí un niño que junto conmigo estaba en la escuela internado y su nombre es Delanuez y con el que conocí muchas cosas buenas que la vida nos reparaba y cierto fue cuando un día me invita a jugar a la familia en la escuela y creo que fue ahí donde todo comenzó nuestro viaje sin retorno.

Fue algo digno de recordar por mi pues no solo marco mi infancia, sino que definiría mi vista hacia el futuro que todavía hoy llevo conmigo.

Su primera propuesta fue que hiciera el papel de mama y en mi inocencia total acepte sin más preámbulos y a la hora del baño juntos los dos con todos mis compañeros de dormitorio, pues todos nos bañábamos a la misma hora, en un baño que por lo pequeño debíamos estar por lo menos 20 muchachos todos desnudos y sin malicia de ningún tipo.
Imagino que en un lugar así hoy en día diera todo lo que fuere para poder estar, aunque tan solo fuese un instante.
Y después de la cena nos dirigimos al dormitorio para ver la televisión.

Recuerdo que debajo del uniforme y que según él me pidiera, no debía llevar bóxer puestos pues sería mucho más fácil llegar a mi ano sin tener que pasar tanto trabajo, me dispuse frente al televisor primero y después de avanzada la televisión nos separamos del grupo de muchachos hacia el pasillo de una cama en la que él se parapeta detrás de mí, comienza por decirme que en rodillas me pusiera y levantara el pecho, acción que de inmediato hago, ajeno a lo que vendría después, me desabotona el pantalón y deslizando despacito deja mis dos nalgas expuestas a él y comienza a sobarse el rabito que pronto estaría erecto.

Entonces no sabía yo bien que sucedería después y cuando doy cuenta de lo que vendría me comienza a recorrer por todo el cuerpo una sensación que solo yo podía describir como excitante y morbosa a la vez, tenía Delanuez un rabito que para aquella edad de nosotros relucía hasta en la oscuridad mediría como 12 cm pero que no era muy gorda y me dice al oído, inclínate para delante, dejando reposar mi cuerpo sobre la cama de debajo de una litera, comienza a acariciarme las nalgas y el culo que era absolutamente virgen, no podía imaginar que aquello estaba pasando en aquel lugar donde tantos muchachos aviamos, y no paso mucho tiempo cuando me presto su miembro en el ano primero y después empezó a presionar dando paso a su miembro viril.

Primero algo de dolor sentí, pero pasado un ratico y luego que solo la mitad estuviera dentro de mi estrecho recto comencé a sentir una sensación que me inundaría completamente, y él sin mucha experiencia decide retirar su miembro para ponerle más saliva, yo desapruebo esta acción del, pero me dice que le ardía que la tenía seca y debía humedecerla un poco para que entrara bien sin que me doliera nada,

Cierto fue lo que me dijo, una vez completamente humedecida con su saliva la presenta de nuevo y esta vez hasta el fondo se fue y comienza a decirme que no debía moverme que si lo hacía nos delataría ante tantos muchachos y congelados nos quédanos los dos, él con su miembro erecto y palpitando dentro de mí, sentía que había abierto las puertas del paraíso solo que no sabía cuánto tiempo duraría aquella sensación de haber sido penetrado por mi amigo Delanuez.
Que deseos se aferraron a mí, pues nunca había tenido semejante experiencia con alguien de mi edad y mucho menos sabia lo rico que se sentía tener un miembro erecto dentro de mí, creo que como aquel día no puede haber otro similar.

Estábamos en sexto grado cuando aquello sucedió y marco mi vida por completo tendría yo 11 años de edad y recuerdo que en nuestros miembros la presencia del preceminal anunciaba que pronto estaríamos listos para conocer la eyaculación que después vendría.

En el fin de semana siguiente recuerdo que Delanuez se presentó en mi casa para invitarme a salir, de inmediato hablo con mi madre que sabiendo que era un colega de la escuela me autoriza a salir y pronto me dispongo a partir con él, en el camino me explica que en su casa no había nadie que si quería venir con él y no faltaba más mi aprobación no se hizo esperar, partimos a paso ligero hasta a su casa llegar.

Abre la puerta y se cerciora que nadie está en la casa, me conduce a su cuarto donde una camita personas estaba bien limpiecita y sin perder tiempo me pide que me quite toda la ropa, cosa esta que hice sin mucha explicación y luego le pregunto que si me tocaba a mi hacer de papa esta vez y Delanuez con una sonrisa amplia me explica que cuando llego de pase de la escuela probo y resulto que se podía eyacular que lo que le había pasado aquella noche en la escuela fue el principio y que deseaba probar de nuevo para venirse dentro de mí, le dije que quería hacerme trampas, pero que en el fondo de mi ser deseaba que me penetrara de nuevo como lo hizo aquel día en la escuela y accedí a hacerle el juego con una condición, yo quería saber también que se sentía cuando penetras a alguien, sucedió lo por mi esperado, me inclino en la cama para otra vez ser penetrado por Delanuez y se levanta de la cama donde yo estaba acostado trajo otra almohada y la pone debajo de mi cintura para que mi culito quedara bien dispuesto para él, además trajo algo de mantequilla que la utilizo con sabiduría, primero se arrodillo detrás de mis pies para con su boca comerme mi culito.

Con su lengua acariciaba mis dos nalguitas lampiñas en aquellos días y después de dilatarme un poco el ano con su lengua me dice que me aliste para la penetración que en esta ocasión estaba bien caliente como mismo lo estaba yo, no imaginaba lo que después vendría y fue muy acogedor el ser cogido por alguien conocido y, además, como fue que su miembro entraba y salía de mi con tanto ímpetu, para hacerme sentir en las nubes como aquella vez en la escuela que ni moverse pudo, con la mantequilla su miembro se deslizo dentro de mí, al principio algo de dolor me causo pero que muy pronto mi culito se adaptó a tenerla dentro y comenzando a bombear y dentro de mí se vino la primera vez y pasado unos minutos de aquella inesperada corrida, se dispuso a recomenzar a bombear de nuevo y como de tanta excitación andaba y luego de una segunda metida me recorre todo el cuerpo una sensación de cosquilla y resulta ser mi primera corrida, el miembro de Delanuez masajeaba mi próstata y comenzaba a generar una satisfacción de plenitud en mí que al cabo del rato de estar siendo bombeado por segunda vez, siento que algo sale pro mi rabo y comienzo a ver que un fluido claro que con espasmos de mi sale por mi rabito y reconozco que comienzo a sentir distinto que en mi primera vez en la escuela y que decididamente me convertiría en una persona dependiente de la penetración para sentir esa satisfacción que con Delanuez aprendí.

Una vez que se viniera dentro de mi dejándome con unos deseos que nunca a acabarían, siento que en mi dentro el fluido seminal de Delanuez calentito todavía se apoderaban de mi ser, se despega muy despacio y comienza a retirarse para no dejar nada que se saliera de mi ano, me abraza y yo también lo hago pidiéndolo que por favor no se olvidara de mí, el lunes próximo estaríamos en la escuela de nuevo y repetiríamos lo mismo que hicimos esta vez en su casa lo cual el asintió diciéndome que si quería yo ser su mujercita lo que aprobé de inmediato para que se repitiera.

Con tremenda sensación de agrado y placer me quede ese día y fue tanta la cogida que me dio, no era dolor ni nada que se pareciera sino una sensación de estar completo de alguna manera que los días se hacían largos para llegar a la hora de la televisión para de esa manera, aunque no se pudiera menear meterme aquel miembro que me había desvirgado y tanto había deseado, que mío solo fuera hasta que pudiera encontrar otras sensaciones que me permitieran comparar mi primera vez con él.

Otras cosas sucedieron en aquella escuela que desearía compartir por esta vía con ustedes y espero que les allá gustado, que, aunque un poco extensa recogí de mis recuerdos, de lo que fue mi primera vez.