Después seguí con más

Después de mi despertar con mi amigo en CU y con mi perro, se dió otra oportunidad de que me cogieran otra vez.
Hola otra vez.

Bien, pues aquí me encuentro nuevamente intentando contar una nueva vivencia. He de mencionar que después de sentirme “cogido” cuando joven, tuve una experiencia con mi primo que después contaré en la categoría adecuada.

Recuerdo que yo no tenía confianza con hombres para poder vivir mi sexualidad al 100, en verdad me daba un poco de miedo que pudieran decir que me gustaba que me cogieran. Por lo cual, me gustaba que mis perros lo hicieran. Total ellos no hablarían o contarían que me cogieron y menos tan joven.

Total, una de esas noches, mi hermano (abiertamente gay) tuvo una fiesta en casa. Todo se llevó bien y pues yo estaba en mi rollo, regresé después de un rato y de mis propios asuntos a casa y me encuentro con la fiesta, a las cuales mis padres habían accedido. Encontrando a todo tipo de personajes.

Yo saludé y entré a mi habitación por un rato, pero después pensé -por que no salir a divertirme si habían mujeres también- (a mi me gustan las mujeres para tener una relación normal) pero también debo de decir abiertamente, me gusta sentir una verga en mi.

En fin, salí a integrarme a la reunión (pequeña) no más de 12 personas, entre todos, jugamos, platicamos y contamos anécdotas.

Recuerdo que algunos se fueron a sus casas después de cierta hora, y otros se quedarían a dormir.

Los juegos se pusieron un poco intensos y yo simplemente me dejé llevar, sin embargo plantándome como buga y mi hermano manteniendo esa idea entre sus invitados.

Recuerdo ahora después de tanto tiempo que uni de ellos con el cual, tuve buena química por ser soldado, comenzamos a platicar y platicar.

En fin llegó la hora dopen la cual comenzaron todos a ir a dormir, y nos quedamos el soldado y yo atrás. Platicando temas de guerra e históricos.

Cuando todos se fueron a dormir, la verdad yo ya me encontraba borracho al igual que él. De alguna manera, él comenzó a acercarse, y la verdad yo estaba caliente.

Comenzó a tocarme, y yo lo dejé, al ver que lo permití, el se dejó llevar, al igual que yo.

Me comenzó a masturbar, pero he de decir que fue la primera vez entre hombres que me comuniqué sin palabras. Sabiendo que yo era el pasivo.

El comenzó a acariciarme y yo simplemente me dejé llevar,en la obscuridad, así que el después de masturbarme, guío mi boca a su verga. La cual lamí por un par de minutos, sintiendo la dureza.

Seguíamos platicando, como si nada pasara. Pero en algún momento me volteé, y le pregunté -¿Quieres metérmela?- a lo cual el no dudó.

Puso su verga humana de unos 15 cm en la entrada de mi culo y la metió, suavemente.

No puedo describir lo que fue sentir que me cogía  un hombre, aún teniendo miedo de que me fuera a delatar. Si embargo, he de decir que estaba dispuesto a dejarme llevar y volver a sentir a un hombre cogiéndome (un soldado).

El comenzó poco a poco a agarrar mis nalgas, y abrirlas. Notaba que quería ver mi ojete.

En ese entonces pesaba como 65 kg, blanco, pelo largo de 16 cm de verga, bien parecido con facciones finas y cabello negro largo.

En fin el soldado, me volteó, parando mi culo deseoso de verga. Y la metió.

Ah no Mamés, que rico sentí, fue todo tan sutil que ya estaba listo para él. He de decir que el día anterior mi perro me había abotonado. Pero esto era diferente. Él me podría hablar, me decía lo rico que sentía, me la metía y sacaba una y otra vez…

Me estaba cogiendo un hombre, más bajito que yo, pero yo lo estaba disfrutando. Esos embistes una y otra vez, sintiendo su verga en mi culo, rozando mi prostata. Mientras trataba de tocarme.

A lo cual hubo un ruido y nos tuvimos que detener, tuve que sacar esa verga de mi, subirme los bóxers y pretender haberme quedado dormido afuera, seguido de ir a mi cuarto.

Como él se había quedado afuera, ya no pudimos terminar en ese momento.

Mi culo se quedó con ganas de más…