DIARIO DE UN PROSTITUTO: EL CHAVO PROBLEMÁTICO PARTE 1

En esta ocasión relato uno de los capítulos más penosos de mi vida como sexoservidor, uno de tantos problemas en los que me he metido..
La siguiente historia es una de las más fuertes que he vivido, todo sucedió hace como 5 años, ya habiendo más páginas en internet para promocionarse, contactar por WhatsApp y enviar fotografías y mensajes más rápido, aunque eso provoca demasiados mensajes y que uno no pueda responder a todos como quisieran, llevaba ya semanas recibiendo el mensaje de un posible cliente, que quería experimentar su primera vez conmigo pero por alguna razón el servicio no se había podido concretar, no dejaba de ser molesto recibir tantos mensajes insistentes de su parte pero solía ignorarlo, me enviaba los típicos mensajes de cadenitas o fotografías de mensajes, como scort es muy molesto eso, realmente estás trabajando y no ligando o haciendo amistades, pero el muchacho no dejaba de hacerlo y toca tener paciencia.

Finalmente el servicio iba a darse un Martes a las 13:00 horas, estábamos ya en Noviembre de 2015 y después de 3 meses por fin iba a atender a ese cliente tan molestoso, nos íbamos a ver en su casa, justamente por esas fechas mi auto estaba fallando y estaba en el taller por lo que usé el servicio de Uber, no le propuse en mi casa por lo latoso que era y para evitarme problemas, generalmente solo atiendo a clientes de confianza en casa y que se que no me van a estar acosando fuera o queriendo hacerme visitas, pero después me arrepentí de haber tomado esa decisión.

Llegué retrasado como 10 minutos, toqué el timbre, me alisté como él me lo pidió: con botas y jeans ajustados y camiseta sin mangas, vi a una señora salir al lado y mirarme, decirme algo pero la ignoré haciendo cara de pocos amigos, me abrieron la puerta y entré, me recibió un muchachito lindo, de piel clara, debía medir unos 160cm pues estaba chaparrito, cabello lacio y ojos cafés, con una voz dulce pero afeminada, estaba delgadito pero lindo  al fin y al cabo, me dirigió a su recámara y me percaté que no vivía solo como aparentemente me había hecho saber, me dijo que su mamá estaba en el trabajo y que llegaría a las 18:00 horas por lo que sobraba tiempo y su hermano ya se había ido a la escuela, por un momento lo miré y bien y me dije que estaba muy twink, pero a mi los twinks me gustan, porque se prestan para poder cargarlo ñam ñam y romperles el culo bien rico XD, esta vez me pagó antes y comenzamos el encuentro.

Traté de ser dulce y amable, como si fuera mi noviecito, le fui quitando poco a poco la camisa que traía y lamía sus pezones pequeños, nos besábamos como si fuéramos unos adolescentes, él me quitó la camiseta que traía y se dedicó a admirar mi torso desnudo, o tocaba y me pedía que moviera los pechos mientras ponía sus manos, de pronto sonó el timbre pero me pidió que lo ignoráramos, seguimos y finalmente nos encueramos, yo ya tenía la verga bien parada, cuando la vio exclamó: «WOOOOOWWWW QUÉ VERGOTA, JAMÁS HABÍA VISTO UNA ASÍ DE ENORME», «es toda tuya nene», le dije, se lanzó a chupármela sin éxito como en la mayoría de las ocasiones por su grosor, la sujetaba con sus dos manos y la sacudía atónito y asombrado por el tamaño, se acostó en su colchón y me pidió poner mi verga sobre la cara y tomarle fotos, todo su rostro estaba cubierto por mi trozo de carne y no tenía problemas con fotografiarme así que lo hice y le mandé las fotos por el WhatsApp, fotos abrazándonos, besándonos, con mi verga en su boca tratando de chuparla, entre su culito, etc… de nuevo se escuchó el timbre y otra vez lo ignoramos, esta vez sentía algo de incertidumbre, pero seguimos con la acción.

Continué lamiendo su cuerpecito lampiño y su verga ligeramente pequeña, comparada con la mía, muy pequeña, tal cual como me lo pedía, se retorcía de gusto, ensalivé mis dedos y froté las yemas en su virginal ano, después tomé un poco de lubricante y le metí un dedo, poco a poco fui relajándole el culo para abrirlo y cuando lo sentí listo, le fui metiendo dos y hasta tres dedos, me dispuse a penetrarlo, lo hicimos poco a poco hasta que la punta pudo entrar entre sus expresiones de incomodidad, dolor y otras, pero me abría camino y estaba dispuesto a meterle hasta el último centímetro, total ya había pagado, lo cargué con mi verga dentro y lo pegué a mi cuerpo, mientras él se sujetaba de mi cuello y gemía como todo putito afeminado, luego lo coloqué sin sacarle la verga en la cama y me dispuse a darle más velocidad al asunto, estaba tan concentrado que no me di cuenta de lo que estaba ocurriendo…

Alguien abrió la puerta de la recámara y gritó: ¡¿QUÉ ESTÁN HACIENDO?!, ¡SOCORRO, AYUDA, ESTÁN VIOLANDO A MI HIJO! Yo no supe cómo reaccionar, solo vi a una señora señalándome y gritándome, tomé mi ropa y me iba a vestir, la señora se me fue encima y me golpeaba la cabeza y seguía pidiendo ayuda, como pude intenté vestirme mientras el muchacho también se vestía y trataba de tranquilizar a la mamá, traté de llegar a la calle recordando que no traía mi coche, iba a pedir un taxi rápidamente y salir huyendo, pero no pude, al abrir la puerta ya estaba la horda de vecinos esperándome con escobas, palos y piedras, la vecina a la que había hecho el gesto había llamado a los vecinos y nos había delatado con la mamá, estaba pasando una vergüenza enorme, me estaban acusando de pederasta y pervertidor de menores, yo trataba de explicarle a la señora mientras trataba de evitar que abriera la puerta para que no entraran los vecinos, pero la señora no me quería oír, tenía una escoba y trataba de pegarme con ella, yo aún no estaba completamente vestido y no tenía forma de salir, pero efectivamente, el chavito problema era menor de edad, tan sólo tenia 14 años y aproximándose escuché que una patrulla estaba por llegar, sabía que aquello no iba a acabar bien…

¿QUIERES SABER EN QUÉ CONCLUYE ESTE BOCHORNOSO EPISODIO EN MI VIDA?