Diario Sexual: La verdadera reconciliación…

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por aqua.boy.
I.- Hola bebe….-
Y.- Tienes tiempo para vernos hoy? – lo interrumpí
I.- Sí, claro, estoy solo en casa, si gustas venir?
Y.- No – su casa sola implicaba que las cosas fueran hacia otra dirección – ya sabes dónde encontrarme. Te quiero
I.- Esta bien, en un rato llego, te quiero – Y colgué antes que dijera algo más

Supongo que la forma en que hable lo hizo pensar, pero la situación me entristecía un poco por miedo a que terminara todo. Camine hacia aquel pequeño parque, en el cual el acepto volver conmigo, él sabía que me gustaba ese lugar, ahí el viento corría fuerte y la brisa de la playa junto a la sombra de los arboles daba un ambiente de frescura, me gustaba ir ahí a pensar o simplemente a descansar, a sentirme relajado…También cuando estaba triste. Llegue relativamente rápido pues yo me encontraba cerca de ese lugar, en cambio Iván llego justo a la hora que imagine, pues estaba a aproximadamente una hora del lugar. Yo estaba sentado en el borde de una roca enorme viendo como las olas chocaban contra esta.

Instintivamente voltee, el venia caminando serio hacia mí, me pidió bajar de ahí pues nunca le había gustado esa roca enorme, creía que se desprendería y caería al mar, fuimos y nos sentamos bajo la sombra de un árbol.
Jugaba con sus manos, nervioso – Que paso? – me pregunto, como si no aguantara más – Me preocupaste por la forma en que hablamos

Nada, bueno si – tome mi teléfono, el me observaba con seriedad, estábamos sentados frente a frente sobre el pasto – Solo que… Ya no se quien traiciono a quien primero – Le di mi teléfono, mostrando las conversaciones que Alejandro me había enviado

Mis manos temblaban – Yo te quiero, te lo digo en serio, sé que lo que hice estuvo mal y me arrepiento profundamente… Pero admito que me moleste, me molesto saber que tú te Hiciste la victima cuando yo estuve con Alejandro mientras tu planeabas dejarme por él, yo no quería dejarte, solo me sentía demasiado ajeno a ti, tú me habías echado a un lado por el, y me sentía frustrado, no hice lo que hice para vengarme porque me ignorabas, simplemente no pude contenerme. Lo siento, pero ahora quiero que tú me expliques esto
Yo estaba tan absorto en lo que decía que no note cuanto el comenzó a llorar, supongo que no medí mis palabras

I.- es difícil de entender – dijo cuándo se tranquilizó un poco
Y.- por eso quiero que me expliques, que hubiera o que haya entre ustedes
I.- No hay nada… Ya no, te lo aseguro – Con la mirada pedía más explicaciones, y él lo entendió. Así que prosiguió a contarme su historia. – Sí, es cierto que quise dejarte por el – Esas palabras me dolieron profundamente, a pesar de haber visto su conversación tenía una mínima esperanza de que todo eso fuera falso, no quería seguir escuchando a pesar de que yo había iniciado esa conversación, simplemente asentí y planeaba levantarme e irme, pero él me detuvo – Espera, aun no termino. Te lo diré todo. Yo me enamore de él y me di cuenta de que podía ser correspondido justo antes de que se fuera de aquí, pero me prometió volver y que podríamos ser novios en su regreso. Yo prometí que lo esperaría, pero te conocí y rompí mi promesa, me clave contigo, más que con él y hubo un tiempo en que me olvide de el completamente. Justo entonces el llego, y me di cuenta que… esperaba que regresara. No sabía que hacer contigo y el dio por hecho que desde el momento en que llego ya éramos pareja, y yo no hice nada por arreglar ese mal entendido. Sin embargo yo contigo guardaba las apariencias, andaba con él y contigo a la vez, con el solo hubo besos, no te preocupes por eso

Y.- ves la situación en la que estamos…Y crees que lo que me preocupa es si ustedes estuvieron cogiendo? …. Lo que me preocupa es saber si… si sabes lo que sientes
I.- No lo sabía, hasta hace poco tiempo…. Sé que a quien realmente quiero es a ti, Alejandro ha cambiado mucho, no tiene nada de lo que quiero en un chico; en cambio, tú lo tienes todo
Me quede sin palabras, ese chico, con sus palabras, logró tocar algo dentro de mí y cedi a su sinceridad. Rodee su nuca con mi mano y lo acerque a mí, nuestras frentes chocaron. Mis labios pronunciaron un "te quiero" y el respondió de igual manera. Dado por terminado ese gran problema nuestro platica comenzó a amainar, nos acercamos el uno al otro, yo estaba sentado con los pies estirados en el pasto, él se recostó y coloco su cabeza en mis piernas. En un movimiento suyo dejo al descubierto una parte de su hermosa cintura, podía ver el resorte de sus boxers, ese cuerpo tal lindo y provocativo para mí, comenzó a excitarme, cosa que el puno notar. Así que, después de lo que fueron un par de horas hablando tonterías, nos levantamos, lo tome de la mano, espere a que mi erección se bajara y comenzamos a caminar.

Caminamos por un par de calles, entonces supo que lo llevaba a algún lugar, pero tardo en preguntar

I.- A dónde vamos? – me detuve
Y.- ya llegamos – frente a nosotros, del otro lado de la calle estaba un motel
I.- Estás loco – me dijo después de una muy breve sonrisa, y me abrazo, como si tuviera miedo del lugar
Y.- Tú me tienes loco, pero sigo estando un poco cuerdo, vamos. Me detuvo antes de cruzar la carretera
I.- Noo, nos van a ver… Además somos menores de edad… – dijo con algo de pena
Y.- Y que importa si alguien nos ve, jaja tú crees que a ellos les importa nuestra edad, mientras les demos el dinero, es como si no pasara nada, somos unos clientes más, anda, vamos – lo bese, lo tome de la mano y entramos
Fui yo quien camino hacia la ventanilla con vidrios oscuros
Y.- una habitación, por favor
X.- La persona desde dentro se asomó y vio a mi novio detrás de mi – vienes a atender a tu noviecita eh? jejeje cuánto tiempo? – vi la tabla de precios en la pared
y.- quiero las 3 horas, por favor –
X.- claro, son $250 – le di el dinero y me paso por la pequeña ventanilla unas llaves con el número 25, saco la mano señalando a uno de las 3 filas de edificios – Edificio de la derecha,

Subiendo las escaleras a la derecha – mi chico y yo caminamos hacia la habitación después de dar las gracias al joven que atendió. Mi chico caminaba detrás de mí, me recordaba a esas veces cuando entras a "casas de terror" en parques de atracciones, eso me daba algo de risa

Y.- Tranquilo bebe – me coloque detrás de él y lo abrace por la cintura, subimos las escaleras y caminamos un gran pasillo hasta la puerta marcada con el 25. Entramos a la habitación, realmente estaba muy bien, la habitación era amplia, de color verde, la cama matrimonial completamente blanca, un mueble a cada lado de la cama con toallas y jabón, una tv frente a la cama y un espejo que cubría gran parte de la pared bajo el televisor
I.- "vas a atender a tu noviecita?" Idiota! – Iván se dejó caer en la cama, un poco disgustado, fui hacia él, lo bese y le dije que se tranquilizara

Me quite mis tennis y mi playera, quedando con una camiseta ajustada a mi cuerpo y mi pantalón. Me subí a la cama y me quede detrás de Iván, quien no hacía nada más que maldecir a aquel hombre. Le bese el cuello y mordía su oreja, comencé a acariciar su cuerpo y el comenzaba a dejarse llevar por la situación. Me baje dela cama y me arrodille frente a él, le quite sus tennis y poco a poco levante su playera, besando su abdomen hasta llegar a sus labios, después regrese a su cintura para desnudarlo por completo, baje su pantalón y sus boxers juntos y comencé a mamársela, su pene ya estaba súper duro y bastante precum había salido de él, comencé a saborear el pene de mi novio, lamia el glande y poco a poco me lo metía todo a la boca, succionaba su glande y era lo que más le gustaba, pues gemía más fuerte y apretaba sus manos en mi cabello, lamia sus testículos, poco después de Comenzar a consentirlo note que estaba completamente rasurado de ahí abajo, lo empuje hacia la cama y levante sus piernas y seguí mi camino, lamia sus testículos, seguía por el perineo hasta llegar su ano rosadito que tanto me gustaba y comencé a darle un buen beso negro, notaba las contracciones de su ano, me prendía mas y con mi lengua hurgaba más dentro de él, comencé a dilatar su ano, metía un dedo y hacia círculos pequeños e iniciaba ese mete-saca, volvía a trabajar esa zona con mi lengua.

Mi pene palpitaba dentro de mi ropa, Iván estaba demasiado excitado, me quite mi pantalón y boxers rápidamente y me lance sobre él, comencé a besarlo con fuerza y el apretaba todas partes de mi cuerpo, sus piernas abrazaban mi cintura y mi verga punteaba la entada de su rico culito, yo hacía movimientos frotando mi verga contra su trasero, el interrumpió nuestros besos, me alejo con sus brazos en mis hombros y en un movimiento él estaba sobre mí, presiono mis manos sobre la cama sin dejarme levantar, me beso con furia y repentinamente cambio, sus besos se volvieron calmados y tiernos, lentamente, bajo a mi pecho y comenzó a lamer y acariciar mis pezones, siguió su camino, con la punta de la lengua recorrió mi abdomen hasta llegar a mi verga que brillaba y palpitante de lo excitado que estaba, abrió la boca y se metió gran parte de mi miembro, sentir su calidez en mi pene me hizo suspirar y el comenzó a succionar mi verga, yo gozaba con esa increíble mamada que mi novio me estaba haciendo. Llego un punto en el que sentía que no podría mas y explotaría, y yo no quería eso, lo detuve en su labor, lo tome del rostro y lo bese. No habíamos tenido sexo en un tiempo y yo ya no frecuentaba mucho las pajas así que mi pene era muy sensible jaja.

Se levantó y fue por mi pantalón. Yo observaba su cuerpo, su piel blanca, su cuerpo firme y delgado, aun con poco vello sobre su piel. Ese chico me encantaba. Encontró un condón dentro de la cartera de mi pantalón – Eres un tonto, nunca te andas por ahí sin un condón entre tus cosas – regreso rápidamente y se acostó a mi lado, nos besamos un poco; abrió el condón y cubrió mi pene con él.

I.- Te quiero- me beso y respondí de la misma manera. Se montó sobre mí, yo acariciaba sus piernas, y el solo guio mi pene hacia su culo, y poco a poco fue metiendo mi miembro dentro de él, hasta que sus nalgas estaban completamente pegadas a mi pelvis. Respiro y pego su cuerpo al mío por un momento, nos besamos sin movernos, levanto su cuerpo y el comenzó a mover las caderas de arriba abajo haciendo el trabajo de la penetración, yo le limitaba a acariciar su cuerpo y mover mis caderas al ritmo de sus movimientos, el aumentaba su velocidad un poco y yo lo hacía con él, luego disminuía, así estuvimos mucho rato, volvió a aumentar su velocidad, pero esta vez no se detuvo y lo hizo más rápido, provocando que yo quedara al límite de mi aguante, estaba a punto de correrme y trataba de detener sus azotes contra mi pelvis y él estaba decidido a no detenerse. Apreté con firmeza sus nalgas impidiendo que siguiera, pero era casi inevitable, el sonreía, la situación le parecía divertida, y a mi también, pero no quería terminar aun, con mis manos firmes sobre él, levante mi cuerpo y me gire.

Quedamos en una posición conocida como "el yunque", Al instante me detuve. Verlo así me prendió aún más, su cuerpo estaba rojo de excitación, estaba sudado y respiraba con fuerza al igual que yo, su cara me indicaba placer y eso me dio más fuerza para continuar, apreté su pene con mi mano y comencé a masturbarlo y como si ya estuviera al límite, su verga se puso más tiesa y comenzó a palpitar y chorros de semen salpicaron por su pecho y cara, por mi parte, las contracciones de su culo le dieron placer a mi verga que aún estaba dentro de el. Lo bese y comencé otra vez con mi trabajo, esta vez mis embestidas fueron un poco más fuertes, le sacaba mi pene casi completamente y lo metía hasta chocar con su culo, por un segundo creí que lo lastimaría, pero el lanzo un gemido de placer y echo su cara hacia atrás, entonces seguí con la faena, el abrazo mi espalda mientras yo lo seguía cogiendo, sentía como sus uñas dejaban marcas en mi espalda, pero en lugar de sentir dolor, sentía placer.

Esto fue muy intenso y mi pene no aguanto mas y comenzaron a salir chorros y chorros de semen, hice un esfuerzo por no dejar de penetrarlo, pues mis piernas se sentían débiles al momento, pero la sensación de estar eyaculando sin detenerse era fantástica. Esto siguió hasta que sentí que ya no quedaba nada dentro de mí; mi pene comenzó a perder tamaño y me recosté a su lado. Ambos quedamos agotados y abrazados en la cama

Cuando nos recuperamos, hubo solo besos y platicas tontas. Hasta que Alejandro entro nuevamente a nuestra platica
I.- Te gusto hacerlo con el? -la pregunta la hizo un tanto disgustado, como si no quisiera saber la respuesta – dime la verdad
Y- Honestamente si, nunca lo había hecho así con una persona – quizá no fueron las palabras correctas, pero era la verdad
I.- mmm ni conmigo? – se notaba un tanto curioso ahora
Y.- no, ni contigo, con él fue diferente, con él lo único que me importo fue complacerme a mí, fui un tanto salvaje, pero me gusto. .. No quiero decir que contigo no disfrute, pero, solo es diferente, claro que me gusta hacerlo contigo, es mejor.

Decidimos cambiar de tema, platicamos lo que restaba del tiempo que nos quedaba y justo antes de marcharnos me detuvo en la puerta, me beso y dijo – a veces quisiera que no fueras tan cariñoso conmigo, también me gusta experimentar, no soy tan cerrado como parece…
Y salió de la habitación, yo detrás de él. Pensando, fui tentado por su comentario.