Dobles vidas

Tras la muerte de mi tío descubro una historia que aunque me parece insólita no deja de causarme morbo con los “pequeños” amigos de mi tío….
Me llamo Camilo, soy un hombre de 29 años, no tengo nada de especial en mi fisonomía que me haga destacar, soy de piel blanca casi de color papel, pelo negro, ojos negros, 1,80 mts de alto y de cuerpo atlético pero sin ser musculoso, más bien no se me “marcan” los músculos, suelo usar lentes y aunque mi yo adolescente no quiera oírlo me hacen ver más guapo ¿Porque me describo?, no sé creo que quiero dar contexto y detalles de todo.

Desde que tengo uso de razón vivimos en una casa de 2 pisos y sótano, mi abuela le heredo a sus 2 hijos su casa, mi madre y mi tío, yo fui hijo único de una pareja de ya avanzada edad, mis padres me tuvieron entrando en los 40 y mi tío tendría unos 45, mi tío era un hombre tan alto como yo, de cabellera gris y cuerpo un poco descuidado pero aun funcional por así decirlo, él era fotógrafo profesional cosa que le daba un buen flujo de dinero y a veces viajaba a otros lugares, en la casa nunca hubo problemas con la convivencia, mi padre tenía su estudio en la primera planta y mi tío su estudio en el sótano que tenía entrada independiente, había las habitaciones justas para los que vivíamos ahí y mi tío era muy cariñoso conmigo y siempre que estaba presente jugaba conmigo, era mi mejor amigo hasta que conocí a Franklin en la escuela, desde que nos conocimos fuimos inseparables, Franklin tiene mi misma edad y no ha cambiado en nada desde que lo conocí, su piel casi dorada, pelo castaño claro, ojos marrones y con su cuerpo bien trabajado hasta el día de hoy, siempre fue divertido, extrovertido y alegre y nunca lo vi llorando o triste hasta que a los 14 embarazo a su novia que tuvo a su pequeño Frank, que ahora es idéntico a su padre en cuerpo y actitud, Franklin se hizo más que un amigo para nuestra familia ya que se ganó el cariño de mis padres y tío casi de inmediato, tanto así que mi tío le enseño todo lo que sabía en la fotografía y hasta regalándole cámaras para que empezara a trabajar al salir de la escuela, Franklin hasta el día de hoy se mantiene en mi vida, está soltero y aunque vive la vida loca mi mujer lo ama y hasta es el padrino de mi pequeño de 3 años, estuvo en mis peores momentos como la muerte de mis padres y ahora hace un par de meses la muerte de mi tío, y aunque era mi familia él parecía más afectado que yo.

Mi dilema comienza cuando esta mañana me dispuse a arreglar las cosas de mi tío en su estudio y me encuentro con laptop y algunos flash drives, quise revisarlo con calma aunque tenía contraseña pero para mi profesión de informático no fue nada difícil, tenía todo el fin de semana solo porque mi esposa e hijo irían a casa de mis suegros, encontré varios folders etiquetados con nombres, edades y lugares que supuse que eran parte de su trabajo, baje hasta la fecha más lejana encontrando un nombre, Ali-11 años-Israel, mi tío había ido a ese país tras una guerra y varias de sus fotos dieron la vuelta al mundo, abrí la carpeta y me quede helado, en el tamaño más grandes que se pueda tener la vista previa de las imágenes pude observar en varias fotos a un pequeño niño desnudo junto a otro hombre con el pene erecto, el nene salía siendo penetrado en varias poses con una cara de placer única, mi cuerpo paralizado comenzó a reaccionar con una erección ante las imágenes, rápidamente revise hacia los lados como buscando si alguien me veía y abrí otra carpeta, Angel-7 años-California, en esta estaba un pequeño niño rubio mientras un tipo barrigón vestido de payaso le clavaba su bestial pene en el culo mientras el niño posaba con la típica señal de “paz”, ya tenía mi pene en la mano cuando abrí otra, Ivan-4 años-Rusia, esta tenía a un niño peli negro acostado de lado mientras un enorme pene se le restriega en la entrada, en esta carpeta venia un pequeño video donde se escuchaba como se le insistía al pequeño y este respondía que negativamente hasta que lo penetraban, yo estaba estupefacto empapado en presemen cuando encontré mi nombre desde los 2 hasta los 6 años, la piel se me heló y con miedo la abrí, solo había fotos de mi, dormido y desnudo en diferentes poses, mis piernas abiertas, mi rosado ano expuesto, un pene erecto dentro y fuera de mi boca, el mismo pene en la hendidura de mis nalgas, mi ano siendo penetrado por un dedo y mi cuerpo cubierto de mucho semen, no había duda ese pene era el de mi tío, estaba en shock pero no entendía porque se detenían ahí hasta que lo vi, Franklin-7 años-Mi casa.

Estaba petrificado sin saber qué hacer, llevaba más de 4 horas viendo las fotos, mis ojos ardían pero no quería parar así que entre, había miles de fotos y videos, Franklin estaba en todos, su culito estaba siendo penetrado por mi tío en la mayoría de ellos, encontré un video que ponía de título “mi primera vez” y en él estaba Franklin siendo desvirgado lentamente en la cama de mi tío, gimiendo despacio y con placer, Franklin parecía gozar y más cuando yo me veía al fondo de la escena dormido en mi cuarto, en algunas estaba con su cara enterrada en mi culo mientras era penetrado, no lo podía creer, Franklin estuvo por varios folders con diferentes edades pero cada vez me sorprendía mas, Franklin, Frank-14 años, 7 meses-Hotel, mi quijada cayó al piso al ver como Franklin era penetrado mientras tenía a su hijo en su vientre desnudo, su pene se erguía sobre las bolitas de su bebe y acababa en su boca infantil, Frank-10 años, su padre y mi tío lo penetraban en diferentes poses y yo me masturbaba mientras me imaginaba las veces como usaron al pequeño Frank como vertedero de esperma por tantos años, me daba asco lo que estaba haciendo pero más me daba rabia y envidia por no participar viendo como todos los involucrados disfrutaban, Frank, Caleb-11 años-Estudio, ambos niños cabalgaban a Franklin y mi tío alegremente mientras sus verguitas erectas rebotaban, quise ver cuál fue su última sesión de fotos y solo encontré un folder con un punto ¿No le dio tiempo de titularla? La abrí y me espante, Miller, mi hijo de apenas 3 años era el modelo, con ambos, mi amigo y mi tío desnudándolo con cada foto que pasaba y él con una sonrisa posaba, un pequeño dildo como un bolígrafo le fue metido en el ano, en mi cocina masturbaba y chupaba el pene de su padrino mientras su tío abuelo jugaba con su anito, no pude aguantar más cuando vi su cara mezclada con la leche de 2 hombres mientras abría la boca, descargue como nunca antes mi propia leche, cansado le doy play al último video en el folder y escuche: “¿Papi no juega con nosotros?” “Claro que si ahijado, tu papi ya ha jugado antes yo creo que pronto jugara contigo pero primero tienes que prepararte para aguantarlo” todo esto mientras le introducían otro dildo más grueso y jugaban con él, me volví a excitar al saber que mi hijo quería que yo “jugara” con él y mientras buscaba mi celular para llamar a Franklin limpie mi desastre.

Mi amigo me respondió al 3er tono: “Hola perdido, ¿Cómo anda?”, rápidamente le pregunté dónde estaba y respondió que vía un trabajo en mi misma calle, le pregunte donde y titubeo diciendo que recogería a Thomas, un niño recién mudado hace un año como de 9 años y lo llevaría al estudio a una sesión que le pago la madre, respondí: “Vale, te espero en casa, tenemos que hablar” y colgué antes que pudiera responderme, aquí estoy en el escritorio del estudio con una enorme carpa en el pantalón viendo como entra Franklin por la puerta con su gran sonrisa y su mano empujando por el trasero abultado del pequeño pelirrojo, yo también quiero jugar esta vez.