Dos JOvenciTOS ♡ / Parte 3

Pijamada Sexual En Casa De Félix.
Ya era fin de semana, lo que significaba una pijamada en el cuarto de Félix, poca ropa, dildos, pajas y besos

Llegue temprano a casa de Félix, estábamos solo con una camiseta y bóxers en el sillón de la sala de estar comiendo papitas, Miguel el padre de Félix estaba sentado en otro sillón mirando su teléfono… De reojo pude notar que miraba nuestras piernas, y yo a propósito me lamia los dedos con la sal de las papas mientras le miraba la entrepierna fijamente…

Felix dijo que iría al baño, y ese era mi momento, tenía ganas de pene y el papá de Felix tenía uno… No puedo aguantar cuando veo una erección.

Apenas Felix se retiró, mire a Miguel y este me miro… Me puse a 4 patas y me quité el calzón, mi culito rosado y mis blancas nalguitas redondas estaban a su completa vista, gire mi cabeza y solté una pequeña risita traviesa.
Miguel se abrió los ojos tan grandes, no podia creer que un jovencito estuviese ofreciéndole de esa manera su culo, yo no lo sabía, pero la tarde anterior el estuvo hechandose unas ricas pajas viendo nuestros culos…

Se arrodilló y comenzó a lamer mi culito, al principio empezó con movimiento circulares y de arriba a abajo, lo tome de la cabeza y le hundi la cara contra mis nalgas… Se separó y tomó un poco de aire y luego comenzó a lamer más rápido y fuerte, se devoró mi pequeño hoyito.

Félix apareció por el pasillo, venía del baño y se encontró con esa escena en la sala de estar, su padre de rodillas con la cara hundida en las nalgas de su mejor amigo… «¡¿Ay Iván que haces!?» me dijo Félix… «Ven tu papi tiene hambre de culito» Lo jale de su calzón y se lo quité… Hagamos que esta pijamada sea divertida.

Y ahí estábamos los dos a 4 patas desnudos, mientras el padre de Félix no comía el culo y nos dedeaba. (¿Se comerian dos culitos adolecentes?)

Félix se monto sobre mi, Miguel Lamia desde mis bolas hasta el culo de Félix, un largo camino por el cual pasaba la lengua y nos nalgeaba… Luego se saco la verga y comenzó a rozarla en nuestros culitos, que después de esas lamidas ya estaban palpitando pidiendo verga, comenzó con el mío, entró su cabeza y poquito todo el tronco, el papá de Félix si que estaba vergon, no se cuanto media pero era muy rica la sensación de su pene en mi interior, luego de bombear mi culo unos minutos, sigio con el de su querido hijito, el que gemia como una perra con cada metida de su cachondo padre.

Cambiamos de posición, Miguel se acostó en la alfombra de la sala, Sobre su verga su hijo se subió para jugar al caballito y yo me senté sobre su cara, su barba me hacía cosquillas…

Lo hicimos en muchas poses ya que somos flexibles, nos bombeaba el culo por turnos y estábamos dando el mejor sexo que haya tenido en su vida, ninguna vagina podia compararse con esos dos culitos tragones y esas pequeñas boquitas golosas… Miguel estaba en el paraíso, estaba de pie con la verga tiesa y de rodillas su hijito y yo mamando, mientras Félix se concentraba en mamar la cabeza, yo succionaba sus bolas y así nos turnabamos para hacer gruñir de placer a Miguel, quien después de unos segundos comenzó a masturbarse con furia, todo el chorro de leche cayó en mi boquita, no me lo trague, lo saboree en mi boca y con el semen ahí  le di un morboso beso a Félix, y comenzamos a pasarnos el semen de su padre entre nuestras boquitas, mientras el nos acariciaba el cabello y nos decía lo buenos niños que éramos.

Ahora tendriamos verga en casa siempre, y Miguel no tendría que seguir buscando alguna vagina de alguna cuarentona divorciada o casada, ahora tenía dos culos tragones a los cual alimentar a todas horas.