Durmiendo con mi hermano

Todo lo que pasa mientras estamos ¿Durmiendo?.
Hola, esto que les contare ocurrió en un lugar muy lejano en una época muy lejana, o como se suele decir, le ocurrió al primo de un amigo, si es verdad o fantasía, dejare que usted querido lector use su criterio para decidirlo.

Soy el menor de 5 hermanos, éramos 3 hombres y 2 mujeres, al tener poco espacio en la casa para tantos habitantes mis padres decidieron dividirnos entre niños y niñas, mis hermanas dormían en una habitación con una litera con una cama para cada una de ellas y nosotros en otro cuarto, el problema es que solo teníamos una litera y éramos tres, mi padre decidió que como yo era el mas pequeño compartiría cama con mi hermano mayor, así fue desde que tengo uso de memoria, los primeros años no ocurrió nada trascendente para este relato, todo cambio cuando mi hermano mayor entro a la pubertad, ya que estaba de malas todo el tiempo y ya no era tan amable, se la pasaba quejándose todo el tiempo de dormir conmigo, decía que no lo dejaba dormir que lo pateaba etc. Ahora con mas edad creo que lo que lo fastidiaba era no poder autosatisfacerse a gusto por las noches.

Mis padres accedieron a cambiar el orden de como nos dormíamos, ahora mi hermano mayor dormía solo y mi hermano de en medio dormiría conmigo; no sé cómo eso solucionaría el problema ya que mi hermano mayor y mi hermano de en medio solo se llevan 3 años, por lo que en breve tendríamos el mismo problema de nuevo, o eso pensé, mi hermano mayor tenia 12 a el lo llamaremos Alberto, el de en medio tenia 9 y lo llamaremos Marco, y yo Antonio con 7 años.

Así distribuidos, comenzamos una nueva vida nocturna, en ese tiempo al ser el menor, yo solía ser muy consentido por todos, en especial por Marco, él me quería muchísimo y yo a él, siempre estaba pegado a él, y mi hermano mayor se alejo de nosotros, ahora se la pasaba con sus amigos en la calle, con Marco tenia mucho apego, al grado que me llegue a bañar varias veces con él, todo en un ambiente de normalidad, cuando el cumplió entre 12 o 13 no recuerdo bien, su cuerpo comenzó a cambiar, pero no su actitud conmigo a diferencia de mi hermano mayor, seguíamos bañando juntos cada que teníamos oportunidad y así pude ver de primera mano sus cambios, el era de piel morena como mi madre, yo por el contrario soy blanco como mi padre, y ver a mi hermano desnudo se me hacia fascinante, los primero cambios, llegaron con la voz, y el pene se le oscureció un poco más, además de que creció y bastante, sus primero pelillos en el pubis los celebramos con bombo y platillo, hasta ahí no había nada sexual entre nosotros.

El tuvo a sus primeras novias, y yo me enteraba de que hacia con ellas, sus primero besos y fajes, el me conto de lo que era la masturbación, en fin era muy abierto conmigo, yo esperaba con ansias pasar por todo lo que mi hermano estaba pasando.

Cuando yo cambie fui mas retraído, senti que no era tan apuesto como mis hermanos, en fin era menos extrovertido que ellos, además de que me sentía inseguro, ahí empecé a creer que me gustaban los chicos, y eso me llenaba de vergüenza y temor, por lo que empecé a alejarme de todos, me volví un poco gris por así decirlo, con el único que seguía igual era con Marco, el me dedicaba menos tiempo ya que el tenia novia y amigos pero seguíamos durmiendo juntos.

Me gustaba cuando el veía a su novia en la noche por que llegaba con las hormonas alborotadas y se notaba un bulto bastante considerable.

No se realmente como comenzó todo, si fui yo o fue el, pero una noche sentí mi mano en algo duro y caliente, no se si yo puse mi mano en su pene o el la puso ahí, pero me sentía muy bien, sentía como palpitaba y brincaba de lo caliente que estaba, recuerdo solo lo sobaba despacio, como si fuera un movimiento natural de estar dormido, y así me quedaba dormido. Así como yo, supongo que el también lo noto y tampoco supo si fue el o fui yo, pero nadie dijo nada, a la mañana actuábamos como siempre, así pasaron muchas noches, dormí con mi mano sobre el pene de mi hermano, una noche, yo estaba despierto con la mano en el pene de el, debo aclarar que hasta este día solo lo ponía encima incluso de las cobijas, no lo había tocado piel con piel, pero ese día sentí que el tomo mi mano y la metió a su pijama y pude sentir ese trozo de carne dura, pero suave, sentí sus bellos, sus huevos, me hice el dormido, pero creo que solo nos engañábamos ambos, porque nuestras respiraciones estaban aceleradas, el metió su mano también y la puso encima de la mía y hacia movimientos con los que se masturbaba con mi mano, fueron momentos muy excitantes para mí, cuando el decidía sacaba mi mano y se volteaba para el otro lado, yo aprovechaba para oler lo que había tocado, y ese olor me excitaba mucho, algunas veces olía los calzones de mi hermano, para corroborar que fuera el mismo olor, y me excitaba mucho haciéndolo. Una noche yo estaba sumamente caliente y decidí ahora yo meter mi mano, lo hice, pero el al parecer no estaba de humor, ya que agarro mi mano y la saco deforma brusca y se volteaba para el otro lado, eso me lastimo mucho, llore en la noche por ese rechazo, al día siguiente, el no durmió conmigo, se quedo en el sofá, fingiendo que se quedaba viendo la TV, yo me sentía muy mal, y pensaba que había perdido a mi hermano para siempre, estaba muy muy triste.

Eso se repitió por toda una semana, yo me sienta realmente deprimido con el corazón roto, pero el me quería mucho y supongo que no le gustaba verme así, y regreso a la cama, yo decidí que no volvería a tocarlo para que no se fuera de nuevo. Sin embargo una noche coincidió que estuvo con su novia y el calor era insoportable, por lo que dormimos en calzones ambos, volvió a ocurrir, ahora estoy seguro que el tomo mi mano y la puso sobre su pene, pero esta vez, también tomo el mío, y lo estaba masajeando, me sentía genial, después sentí que el quitaba mi mano de su pene, y pensé que ahí terminaba lo de esa noche, pero no, él se sentó, me vio y se aseguro que yo dormía, y me bajo el bóxer y chupo mi pene, solo fueron un par de chupadas, pero con eso casi me vengo, supongo que hice algún movimiento involuntario por que el se espantó y se volvió a acostar rápido, al ver que no hice ningún comentario más, el me abrazo y dormimos de cucharita, yo sintiendo su pene duro entre mis nalgas, de repente sentía que empujaba y yo sentía delicioso. Eso paso también por varias noches, cada vez nos quedábamos más y más calientes, una noche decidí dar un paso más, ese día dormí con pijama pero sin bóxer, otra vez estábamos de cucharita , y el empujo su pene contra mí, yo estaba muy excitado me baje lentamente el pantalón del pijama y el se bajo su bóxer y sentimos por primera vez su pene sobre mi colita el se restregaba, ambos sabíamos que no estábamos dormidos pero no hacíamos comentario alguno, cuando sentí la punta de su pene en mi entrada, sentía que palpitaba y el intentaba meterla, no mentiré, sentí dolor, pero me aguante porque no quería que ese momento terminara, el metió la punta y yo sentí un ardor intenso, solo recuerdo que llegue a pujar, y sentía su respiración agitada en mi nuca, el me besaba el cuello, y me daba pequeños mordiscos, que me estremecían pero no mitigaban el dolor, pero aun así, me mantuve y aguante, el no la metió completa ese día, solo fue la punta y el se vino, sentí su cuerpo estremecerse y un momento después se relajó, y saco su pene de mi colita, se levantó, se puso su bóxer y fue al baño, regreso con una toallita húmeda y me limpio, hasta ahí no habíamos hablado para nada, se acostó nuevamente y nos dormimos.

Al día siguiente, tratamos de actuar como siempre, pero algo había cambiado, él era mucho mas cariñoso conmigo y ambos esperábamos con ansias que llegara la noche. Por esas fechas mi hermano mayor ingreso al colegio militar, porque lo que teníamos la habitación para nosotros solos, y aunque yo podía dormir en la cama vacía, prefería quedarme en la de abajo con mi amado hermano, ya éramos por decirlo de algún modo, más descarados, dormíamos en ropa interior y despertábamos desnudos, el aprendió a lubricarse antes, y me la metía más fácilmente, recuerdo , que sentía delicioso cuando su pene me abría por dentro, los primero segundos de ese invasor duro, y luego ese ardor agradable, y cuando comenzaba el bombeo, era simplemente glorioso, el aprendió a moverse delicioso, yo disfrutaba de esas noches siendo dominado por mi amado hermano, el conforme avanzaba la noche se ponía mas intenso, hasta que me daba unas cogidas monumentales, siempre terminaba dentro de mí, me limpiaba y se acostaba a dormir conmigo así, desnudos los dos, de día éramos unos hermanos que se querían mucho, de noche éramos los amantes mas fogosos.

Una tarde que estábamos solos, el me pidió que me sentara con él, y así lo hice, el de repente se puso a llorar, y me pidió perdón, yo le pregunte porque me pedía perdón, y el me dijo que por su culpa yo era gay, y que eso no se lo podría perdonar nunca, me dijo que me había violado, y que no podía vivir con esa culpa, yo le dije que no era así, que yo disfrutaba de esos momentos. El me dijo que no lo volveríamos a hacer, y así fue, ambos seguimos nuestras vidas, yo con parejas (hombres) el con novias, incluso tuvo un hijo, desafortunadamente mi hermano falleció en un accidente de transito y por eso escribo este relato, para dejar testimonio de algo que solo sabíamos él y yo, que para mi fue maravilloso pero que a el lo atormento toda su vida.

Descansa en paz querido hermano.