duro con el niño…

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Por seguridad, cambiare nombres de personas y ciudad. Me llamaré a mi mismo: Armando, aqui en mexico, trabajo en un negocio X (para no revelar nada), donde un cliente atrajo mi atencion. Lo llamaré Yahir, el tiene 9 años y desde hace 3 años es cliente frecuente en donde trabajo, es muy delgadito, de piel blanca y ojos café. Al principio lo trataba bien y bromeabamos, pero con el tiempo agarro confianza y comenzó a llevarse mas fuerte y le puse un alto. Yo lo trataba bien porque pensaba engatusarlo para tener sexo con el, por las buenas, pero con el cambio de su comportamiento, mi demonio interior pasaría a hacerse cargo de las cosas. Su mama, con quien el vivia, ya me tenia confianza pues por mi proposito pederasta con su hijo, me la habia ganado. Aunque como ya no seria por las buenas, ya no necesitaba la confianza de nadie. Yahir siempre andaba en la calle, a veces con amigos, en veces solo, lo cual me facilito todo. El dia de mi descanzo, Pedí un coche prestado y fui al barrio de mi trabajo y espere, espere. Despues de un rato salio con un envase a la tienda y yo lo segui media cuadra, me pare a un lado de el y le dije que yo iba tambien para alla, que lo llevaba. Me segui derecho pasando de. largo la tienda, lo tranquilice diciendole que olvide el dinero en mi casa y que iriamos por el.

Yo vivo solo en la casa que me heredaron mis padres, con dias de antelacion, tape la cochera para evitar que viera alguin lo que iba a hacer…
Para apresurar esto y llegar a lo que nos interesa, brincare hasta el momento que al que le metí un pedazo de trapoa la boca y con una corbata se la tape porque no dejaba de intentar gritar. Atado tambien de pies y manos, lo desnude y lo meti a la regadera, despues de bañarlo bien, me desnude y me meti con el, bajo el chorro de agua y con el estereo a todo volumen, lo amenaze, le adverti que si trataba de gritar cuando le destapara la boca, con las tijeras que colgaban de un gancho en el baño le cortaria el pequeño pene. En cuanto le desate la corbata y escupio el trapo, lo jale del cabello hacia mi verga y se la metí a la boca. No supo que hacer con ella y comenzó a dar arcadas. Le levante la cara, sus ojos rojos, llebos de miedo me miraban suplicantes, le dije que le enseñaria a mamar la verga y agachandome bastante, me metí su pitito de unos dos cms. A la boca y se lo chupe por poco tiempo y despues lo puse a que me la mamara. Despues de un rato, lo lleve cargando a la cama y lo avente boca abajo. Le meti una almohada bajo el vientre. Con su culo levantado comence a lamerlo, metí la lengua lo mas que pude, el se remolineaba bajo mi cara y gemía con una mezcla de dolor por estar atado y placer por mis lengüetazos.

Sin poder esperar mas, bajo la mirada expectante de Yahir, fui al baño por el pequeño trapo y la corbata para acallarlo de nuevo, ya que lo que vendría lo haria mas que gritar. Saqué un lubricante de mi buró y le eche el chorro directo de la botella a su ano pequeño y apretado y en mis panos para embarrarme el pito. Cuando me recoste encima de el, sin dejar caer todo mi peso y sintio la cabeza de mi miembro en la entrada de su hoyo, intentó safarse, inutilmente las manos. Sin molestarme en dilatarlo, comence a metersela. El apretaba el culo impidiendome entrar. Sin moverme de mi postura, baje la mano y le meti dos dedos de una vez y solto a llorar, como se movia bruscamente, con mis dos manos le sujete los hombros y comence a forzar la entrada de mi verga en su ano. Despues de la cabeza, el tronco fue lo mas facil, se le fue hasta adentro quizas, por la fuerza con que se la meti. Su grito ahogado por la mordaza se debilito aun mas porque le presione la cara contra el colchon.

Comence el mete y saca un poco lento al principio porque seguia apretando. Senti correr liquido por mi pelvis y al voltear vi que era sangre, Yahir se quedo quieto, y pude cogerle con mas facilidad. Cuando sentí venirme, pare. Me vendri cuando estuviera conciente. Al sacarla el olor a mirda inundo el cuarto y volvimos juntos a la regadera. Despues de una hora, mas o menos, desperto quejandose y luego se echo a llorar. Me senté en la cama y lo puse frente a mi, pase sus piernas flacuchas hacia mi espalda y lo sente en mi miembro ya erecto, Yahir grito bajo la mordaza; llorando. La sangre que aun salia de su culito facilito la cogida y con su cabeza en mi pecho lleno de lagrimas de el, comence a cogermelo fuertemente. Con su culo desgarrado ya era mas facil la entrada. Yahir trataba de gritar y de safarce, pero era inutil, nunca podria. Al poco tiempo sentí la sensacion ya muy conocida y metiendosela hasta e fondo, me vine en el.

Cuando hube recobrado el sentido que uno pierde al poco tiempo de chorrearse, le quite la corbata de la boca y sin darle tiempo a que gritara se la puse alrededor del cuello, y comence a apretar y apretar… Era inevitable, no pretendía perder mi trabajo ni ir a la carcel, asi que tenía que borrar toda la evidencia y yo, ya había comenzado…

Obvio es un relato ficticio, de una serie de cuentos enfermos de una mente enferma, ya que fracase cuando publique mi unico relato verdadero. Ojala y les guste, que, creo que si llegaron a esta parte, es señal de que asi fue.