Edificio de la fantasia (parte 1)

La historia comienza cuando me mudé a un edificio en donde cumpli algunas de las aventuras que nunca pense tener..
Este es el comienzo de un relato que va a llevar varios capítulos. Espero sepan entender la extensa introducción.

Hola, soy Carlos, un hombre de 35 años que recién termino una relación con mi mujer luego de 14 años.

Todo esto hizo que tenga que buscar una vivienda para vivir e hizo que me lleve a un edificio en donde cumplí algunas de las aventuras que nunca pensé tener.

La historia comienza cuando me mudé al edificio. Al llegar y comenzar a hacer la mudanza, tuve el primer encuentro con una de mis vecinas, que luego me dijo que se llamaba Lucia. Ella era una mujer de unos 30 y pico de años y venia acompañado con su hijo que tendría unos 11 ó 12 años. La charla se produjo en el ascensor, en donde nos saludamos y cambiamos algunas palabras y me dio la bienvenida al edificio. La charla fue breve dado que bajé en el piso 3, ella vive en el piso 4.

Toda esa semana fue normal, apenas me estaba acomodando en mi nuevo hogar. Era un edificio de lo mas tranquilo y lo que mas me llamaba la atención, era que no se veían hombres.
Eso llevo a mi curiosidad e hizo que vaya a hablar con mi vecina Lucia. Tenia que ir a su departamento pero debía encontrar alguna excusa. Así que inventé un pretexto de que necesita que me explique algo del edificio y entre charla y charla salió el tema de que en el edificio no había hombres. Ella me respondió que la mayoría de los departamentos eran madres solteras que vivían con sus hijos y había algunos departamentos, los de mas arriba que se alquilaban temporalmente y habían llegado a ella rumores de que se armaban «fiestas». No quería indagar mucho sobre lo que ella llamaba «fiestas» dado que lo que iba a averiguar ya me lo había respondido.

Pasaron los días y empezó la época que hacer calor. Como hacia mucho tiempo que no vivía solo, empece a incursionar con el nudismo. Vivía casi todo el día en mi departamento desnudo, solo me vestía para salir a comprar o cuando necesitaba hacer algo en la calle. Uno de esos días, tocan el timbre de mi departamento era el hijo de mi vecina Lucia. Justo yo me encontraba viendo una película porno en la tele y me estaba masturbando. Yo estaba completamente desnudo y bien al palo, así busqué rápidamente una toalla y me tape mis partes. Abrí la puerta y el niño me dice:
– Hola, Carlos. Como estas? Mi mama me dijo que te traiga un poco de esta torta helada que hizo para pasar este día de calor.
– Hola Bauti. Gracias, la verdad que viene bien con este día tan caluroso.
– Si, hoy esta muy pesado.

Yo veia que hablaba nervioso, no sabia si era vergüenza o si lo estaba incomodando que este desnudo solo tapado por una toalla y que se notaba un poco mi pija parada. Y fue ahí cuando paso algo incomodo cuando el niño intento darme el plato con la torta helada.
– Te lo dejo arriba de la mesa o lo agarras vos.
– Dámelo Bauti y dale las gracias a tu mama.
Fue en ese momento en que agarre el plato y sin querés se me cayó la toalla que cubría mis partes. Intente taparme lo mas rápido posible pero pude ver como el niño tenia los ojos abiertos al verme desnudo.
– Perdón Bauti, fue sin querer. Que vergüenza. Espero que esto quede en un secreto entre nosotros.
– Sssssi no te preocupes (me hablo con la voz temblando).

Se dio media vuelta y se fue al ascensor para volver a su departamento.

Yo en ese momento estaba entre avergonzado y excitado como nunca me había pasado. Siempre me gustaron las mujeres, nunca los hombres y mucho menos los niños. Esa situación me dio mucho morbo y me tuve que masturbar. Debo reconocer que no tengo un pene normal, serán unos 16 cm y soy team sangre. Lo que si, largue mucha mas leche de lo habitual, a pesar de que soy de largar mucha leche. Eso era una de las cosas que a mi ex mujer no le gustaba mucho. A mi me encantaba que me chupen la pija, pero a mi ex no le gustaba cuando acababa porque largaba mucha mucha leche.

Al otro día, me acerque a el departamento de mi vecina Lucia para devolverle el plato. Cuando me abre, lo vea a Bauti que me dice un «Hola» muy seco y me dice:
– Ya le dijo a mi mamá que estas acá.

Esa mini charla me dio un poco de miedo al pensar que le haya contado algo a la madre, pero cuando me hable con Lucia no parecía estar al tanto de la situación del día anterior.
– Hola vecino, le gusto la torta helada.
– Si, muy rico. La verdad que me sorprendió cuando Bauti me lo llevo y me alegro el día.

Me hizo entrar al depto y charlamos un rato. Debo confesar que mi vecina no era una mujer muy linda, pero tenia un cuerpo muy atlético con curvas muy pronunciadas. Ya la estaba empezando a mirar con cariño, dado que hacia muchos meses en los que no tuve sexo. Pero también, de vez en cuando, relojeaba a el hijo, que estaba a unos metros jugando a la play. De la charla con la vecina, salio que yo trabajaba como profesor de matemáticas y computación en una escuela para adultos, a lo que ella comenta.
– Ahh que bien. Justo que estoy buscando un profesor particular para mi hijo. Necesita unas clases extras de matemáticas sino se va a llevar la materia y no es lo que queremos dado que nos gustaría irnos de vacaciones y no querían quedarse el verano encerrados en el depto estudiando.
La verdad que no soy mucho de la idea de dar clases particulares y mucho mejon a chicos. Ya estoy muy acostumbrado a darle clases a los adultos. Pero la vecina le pregunta al hijo:
– Bau, te gustaría que el vecino te de clases particulares?
En ese momento mi corazón estallaba de nerviosismo, no sabia que podía responder el niño, mas teniendo en cuenta la situación del día anterior.
– mmmmmmmmmmm no se.
La respuesta fue mas un «me da lo mismo».
– Bueno hijo, un poco mas de alegría, que esta acá el vecino.
Ahí Lucia me pregunta si estaría dispuesto a darle clases a su hijo y que me pagaría por esas horas. Que prefería hacerlo conmigo dado que ni siquiera debería preocuparse en llevarlo a otro lugar y que mas confianza que con un vecino.
Como no era algo habitual en mi, no tenia un precio por mis horas, asi que le dije un valor el cual acepto de inmediato.
– Bueno, decime cuando estas dispuesto a arrancar, cuanto antes mejor.
– Si quieren podemos empezar ahora mismo.
Esa fue mi respuesta a lo cual Bauti me miro y puso una cara de que no le gustaba nada la idea.
– Jajajaja buenísimo. Después de almorzar, si podes, te mando a Bauti a tu casa. Puede ser? porque yo aprovecho y me voy a hacer unas compras.
– Si no hay problema, cuando este por ir, me mandas un mensaje y que venga.
Salude a Lucia y le dije un «hasta dentro de un rato Bauti». A lo cual me fui a mi departamento a prepararme mi almuerzo.
A las horas, me llega un mensaje avisando que Bauti esta viniendo. A lo cual termino de leerlo y escucho que tocan el timbre.
– Hola Bauti, pasa y dejas las cosa ahí arriba de la mesa.
– Ok
Entonces nos sentamos y empezó a sacar todos los materiales de estudio que le había pedido que traiga.

Lo estaba observando y lo veía desilusionado a Bauti. No me gustaba empezar de una a estudiar sino que prefería charlar de algún otro tema para distender la situación y entrar en confianza.
– Te pasa algo Bauti?
– No nada… es que mi mama no me quiere comprar un juego para la play, dice que esta muy caro. Que si lo quería comprar tendría que ahorrar.
A lo cual le empiezo a preguntar por su padre, dado que no me había animado a preguntarselo a la madre.
– Y porque no se lo pedís a tu papá?
– Mi papa nos dejo cuando yo tenia 4 años y no lo vi mas. Solo le pasa dinero a mi mamá y nada mas.
– Ahhhh que mal. Lastima que no lo ves a tu papá para pedirle que te compre el juego.
A lo cual no me responde nada y se lo notaba mas triste que cuando llegó.
Para tratar de animarlo le empece a preguntar que si tenia novia, dado que era un chico muy lindo. Lo cual era cierto, era un chico de tamaño normal, delgado, de tez blanca, pelo morocho y de ojos azules.
– No, no tengo novia. Soy muy tímido. Me gustaría hablar de eso pero me da vergüenza hablar con mi mamá.
– Si quieres puedes hablar conmigo. No te conozco tanto pero te puedo ayudar con las mujeres.
A lo cual me mira y me agradece.
Luego empezamos con el estudio un largo rato. Ya cuando terminamos y estaba guardando sus cosas me hablo y me dijo:
– te puedo hacer una pregunta?
– Si Bauti, con confianza.
– El otro día cuando se te cayó la toalla, sin querer te vi tu cosita.
En ese momento no sabia que decir, era una pregunta que no me era incomoda, pero no tenia una confianza con mi vecino como para hablar de esos temas.
– Si te pido perdón Bauti. No fue mi intención que me veas desnudo, me dio mucha vergüenza y tenia miedo que le cuentes a tu mamá.
– A mi también me dio vergüenza, pero después me dio curiosidad, porque mi cosita no es tan grande.
– No se si es un tema que esta bueno que hables conmigo. Eso es mas un tema para charlar con tus padres.
– Es que a mi mamá me da vergüenza preguntarle y a mi papá ni lo veo. Sos lo mas cercano a un «papá» que tengo.
Ese fue un momento en que me quede callado y no sabia que responder. No sabia si decirle que lo hable con la mamá o si explicarle del tema. Mi miedo era meterme en temas que por ahí a su madre no le gustaba que le hable así a su hijo.
A lo que Bauti rompe el silencio incomodo y me dice:
– Si no querés responderme, esta bien, no pasa nada.
– No tengo problemas en explicarte, el tema es que no se si es conmigo con quien deberías hablarlo.
– Es que yo no me animaría a preguntarte, pero dado lo que paso el otro día, me animé.
– Yo te cuento, pero que quede entre nosotros, por favor.
– Si, no le voy a contar a NADIE.
– Bueno, tu cosita es chiquita porque todavía no te desarrollaste, en unos años vas a empezar a crecer y vas a ver que tu cosita empieza a aumentar de tamaño y te empiezan a salir pelitos en lugares en donde antes no tenias.
A lo cual, para mi sorpresa me mira y me dice:
– Pero mira, ya tengo algunos pelitos.
Mi cara de sorpresa fue total cuando lo vi bajarse su pantalón y su ropa interior y me mostró su pequeña pija rosita en donde se le veían sus primeros vellos púbicos.
– Tapate Bauti, como te vas a mostrar así?
– Es que somos hombres, pensé que eso era normal entre hombres. Perdón.
– No tenes que pedir perdón, es que me sorprendió un poco.
– Pero viste que la mía es muy chiquita y apenas tiene pelitos.
– Ya te va a crecer, cuando yo tenia tu edad, también la tenia como la tuya.
– Bueno, ahora ya estamos a mano, ya vi la tuya y vos la mía.
Y nos empezamos a reir. Pero luego me hizo otra pregunta que me sorprendió mas.
– El otro día cuando vine acá, vi que estabas mirando algo en la tele. Que estabas viendo?
– Esos sin videos de adultos. Son cosas que vos todavía sos chiquito para ver.
– Estabas viendo una película porno? De esas yo miro todos los días a la noche cuando me voy a acostar. De ahí se que mi cosita es pequeña a comparación de lo que se ve en las películas.
– Pero en donde miras esas cosas vos? No deberías mirarlo.
– Lo hago en mi habitación, antes de dormir miro una película y siento que mi cosita se pone dura.
Mi cara ya era mas que de sorpresa, no podía entender como ese inocente niño me estaba contando esas cosas. Y a medida que hablaba me estaba pasando lo que nunca me había pasado, se me empezó a poner dura la pija. Bauti lo noto y me dijo:
– Se te esta poniendo dura? Es normal que te pase eso?
Ahí empecé a dudar si de seguir la conversación o cortar todo y dejarlo ahí. Pero Bauti hizo un nuevo comentario que me puso mas excitado:
– Porque a mi me pasa cuando miro las películas y cuando veo la cosita de otro hombre es cuando mas se me pone dura.
Ya a esa altura me di cuenta que no había vuelta atrás y decidí seguir con la charla.
– Eso es normal, para eso son las películas esas. Para que se te ponga dura y te masturbes.
– Yo me masturbo también. Se siente rico.
– Como? que haces que?
– Si hago así.
A lo cual procede a bajarse de nuevo el pantalón y su ropa interior y me muestra.
Ya mi mente empezó a cambiar de rumbo, ya no pensaba en parar y se ve que Bauti se dio cuenta porque me quede mirando esa pija pequeña y rosadita.
– Si con mi cosita pequeña se siente rico, me imagino que con la tuya debe ser mejor, no?
Ya mi pija estaba bien dura con cada palabra que pronunciaba Bauti y llego a su punto de mas dureza cuando me dice:
– Me la pueden enseñar así la veo bien y la comparo con la mía? Es nuestro secreto, porfis.
A lo cual se me acerca y me toca por arriba del pantalón mi pija que ya pedía a gritos salir.
– Tiene que ser nuestro secreto. Si quieres vamos al sillón y nos ponemos mas cómodos.
Fuimos y ya estaba con su pantalón bajo en donde me dejaba ver su pequeña pija en todo su esplendor. Y me dice:
– Puedo verla y tocarla.
A lo cual procede a bajarme el pantalón y el boxer y mi pija sale estallada de lo dura que estaba. A lo cual procede a agarrarla con su manito que estaba fría e hizo que me incomode un poco.
– Uhh perdón, hice algo mal?
– No Bauti, es que tenes la mano fría.
A lo cual se ríe y empieza a tocar mi pija, la empieza a acariciar, me toca la cabeza de la pija y empieza a jugar con ella. Luego agarra el tronco y empieza a subir y bajar su mano. Lo hacia con mucha delicadeza y su carita de inocente paso a modo diablo. Estuvimos así unos minutos. Los 2 lo estábamos disfrutando. Yo también empece a jugar con su pijita rosita que estaba muy calentita.
Como hacia mucho tiempo lo estaba pasando muy lindo, hasta que el sonido del timbre resonó en todo el departamento.
De un salto nos levantamos los 2 y nos subimos los pantalones. Bauti se fue a la mesa y yo fui a abrir la puerta.
– Hola vecino, vine a buscar a Bauti que nos tenemos que ir al medico. Aparte ya paso muchos tiempo y yo solo le di plata para 2 horas de clases y ya van mas de 3 horas.
El tiempo se había pasado volando, ninguno de los 2 nos habíamos dado cuenta de eso. Bauti agarra sus cosas y se va lo mas normal con su mamá. Mientras esperaban el ascensor, Bauto se acuerda que no me pagó las horas de las clases, a lo cual le dice a la madre que vaya ella que me da la plata y el toma el próximo ascensor. Paso eso y Bauti se acerca a mi, me da el dinero y me dice:
– Chau vecino, nos vemos la clase que viene.
Me da un beso en la cachete, me guiña el ojo y se sube al ascensor.

(esta historia continuará)