Edson, mi amigo de la primaria. Parte II

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Dany_Hot2321.
Esto sucedió un día antes del último viernes de clases, nos hicieron un pequeño festejo- convivio con todo nuestro grupo con motivo del último año que pasaríamos en esa escuela, como en los demás convivios, nadie iba con el uniforme puesto, todos íbamos de mezclilla, teníamos permiso de llevar juego y cosas así para entretenernos, el chiste es que ese día terminó y todo normal. Después de aquel primer encuentro Edson y yo comenzamos una especie de amistad más profunda.

El chiste es que ese día caminamos de la escuela a nuestras casas hablando de cosas sin sentido, yo llevaba un par de juegos de mesa en una bolsa, llegamos a mi calle, ya me despedía yo cuando me dijo:
Edson- Oye Daniel ¿Quién está ahorita en tu casa?
Yo- Pues… no sé, tal vez no haya nadie.
-¿Puedo ir contigo? Es que no están mis papás en mi casa, sólo está mi abuela y es muy enojona.
Dudaba un poco, ya que después de la primera vez en mi casa jamás habíamos tocado el tema, y pues de cierta forma me daban nervios, pero bueno, yo estaba prácticamente en la misma condición de estar solo toda la tarde, por lo cual le dije que sí, que no había ningún problema.

Llegamos a mi casa, tomamos agua y comenzamos a planear en que haríamos (Parecía que nadie recordaba lo sucedido), y acordamos jugar un poco de videojuegos, nos aburrimos y decidimos jugar “Twister” extendimos el tapete del juego y comenzamos con lo característico de ese juego “Mano derecha… Pie izquierdo…” así seguimos hasta quedar en una posición algo incómoda, nos resbalamos “Sin querer” y quedó encima de mí, lo aparté rápidamente. Instantáneamente me dijo:
-¿Qué? ¿No repetiremos lo mismo de la otra vez?

Me dieron nervios, la verdad, temía que el fuera a decir algo al día siguiente en nuestra fiesta de despedida o qué sé yo, pero por dentro me moría por volver a sentir aquel cosquilleo en mi pene de cuando me la mamó la primera vez., por lo cual le dije lo siguiente:
-De acuerdo, pero con una condición.
-¿Cuál?
-Pues… Que no le digas nada a nadie.
-¡Ah! Claro, no te preocupes, además, si yo dijera algo también yo saldría perjudicado.

Ahora fui yo quien lo besó y proseguí con tocar su pene, todo seguía igual, puesto que solo habían pasado un par de semanas, sólo que me dijo que ahora su “pajarito” escupía unos “mocos blancos” esos términos ya se me hacían como para niños pequeños, ya habíamos visto eso en la escuela y no se me hacía nada nuevo. El chiste es que proseguimos, el comenzó a bajarse su pantalón mientras yo le quitaba su playera, después yo me quité mi pantalón y el me quitó mi playera, quedamos solo en bóxers, así, subimos a mi recámara y ahí continuamos, lo primero que hizo en cuanto entramos fue bajar mi bóxer y comenzar a mamar mi pene que ya tenía gotas de precum, ahí estuvo un par de minutos cuando de pronto sentí un extraño cosquilleo en la parte baja de mi abdomen y como una especie de contracciones en mi ano para mi sorpresa eyaculé, era la primera vez que lo hacía, y se sentía muy bien, él sin problema alguno se tragó la primera corrida que había tenido en mi vida (claro al menos la primera en forma consciente).

Después proseguí a hacer lo mismo con su pene, le bajé el bóxer y comencé a chupárselo, le daba lamidas y a la vez lo masturbaba, el solo estaba recostado con los ojos cerrados, ya me había cansado de chupar cuando me dice –Ahí te van mis mocos- Sólo que en ese instante el sacó su pene de mi boca y eyaculó en mi cara, no me incomodó, al contrario, eso se me hizo excitante, nos besamos por un rato, y me dijo que debía irse, nos vestimos, me limpié la cara y fui a dejarlo a la puerta de mi casa, antes de que se fuera le pedí el teléfono de su casa, me lo dio y se fue.
Al día siguiente fuimos a la escuela, no entregaron nuestros papeles y todos nos fuimos a nuestras casas ya que horas después sería nuestra fiesta de fin de curso.
Llegamos a la fiesta, no hablamos de nada de lo que había sucedido, en fin la fiesta terminó, ya no lo volvería a ver… o al menos eso pensé…

Ya habíamos entrado a la secundaria, nos quedamos en escuelas distintas, él se quedó en el turno vespertino y yo en el matutino, y eso me enteré por que varios amigos más cercanos se quedaron en la misma escuela. Entré a la secundaria, hice nuevos amigos y todo padre, para casualidad (por muy falso que suene) mi maestra de inglés daba clases en la misma escuela en la que Edson iba y obviamente daba clases en la tarde, así que un sábado que llegué a mi casa busqué el número de teléfono de mi amigo y marqué a su casa, contestó él y comenzamos a charlar, hablamos de la escuela y cosas por el estilo, le comenté que mi maestra de inglés daba clases en su escuela, para sorpresa mía también era su maestra.
Transcurrieron los meses, llegaron las vacaciones decembrinas, tenía pocas tareas escolares, entre esas tenía tarea de inglés, como tenía ganas de volver a verlo, un día marqué a su casa, le dije que tenía una tarea de inglés que se me complicaba mucho y que quería saber si él podía ayudarme, sin poner peros me dijo que llegaría a mi casa en un par de minutos.
Así fue, no tardó nada, entró e igual que las veces pasadas como si nada hubiese pasado, me “ayudó” a mi tarea y le dije que subiéramos a mi cuarto a platicar o a hacer cualquier cosa para no aburrirnos, subimos y comenzamos a platicar, en eso le dije:
-Bueno Edson, ambos sabemos que no sólo venías a ayudarme a mi tarea así que no hagamos más larga la espera

No dijo nada, solo comenzó a besarme y a tocar mi pene por encima de mi pantalón, nos desvestimos y comenzamos a hacer un 69, pero ambos sabíamos que queríamos algo más, comencé a tocar su ano, primero dio un pequeño salto pero se dejó, el prosiguió a hacer lo mismo, moría de ansias por penetrarlo y que él me penetrara lo cual no dudé en decirle, pero me dijo que debíamos protegernos, yo preocupado le dije que no tenía condones, mi alivió llegó cuando abrió una pequeña mochila que traía y sacó un par de condones, yo le pregunté que de donde los había sacado sólo me dijo que los tomó en su casa. Se puso el condón, inexpertamente comenzó a poner la punta de su pene en mi ano y poco a poco lo introdujo, me dolió un poco pero me acostumbré de manera rápida, me entró totalmente, ya que sentía sus testículos chocar con mis nalgas comenzó con el mete y saca hasta que eyaculó dentro de mí (no había preocupación por que tenía puesto el condón) se quitó el condón e inmediatamente se puso en cuatro para que yo lo penetrara, ahora me puse yo el condón y coloqué mi pene en su ano, lo introduje algo brusco por los nervios, entré rápido y comencé a embestirlo

Cuando iba a terminar el sacó mi pene de su ano y comenzó a mamármelo hasta que terminé en su boca, había pasado muy rápido el tiempo, se vistió y me dijo que debía irse, que sus padres lo esperaban, igual me vestí y lo dejé en la puerta de mi casa.
Quedamos en que repetiríamos, pero creo se cambió de casa, o no sé qué pasó, en fin, no volví a saber de él, por más que le marcaba su teléfono decía que ya no existía, pero en fin, me dio gratas experiencias.

Así terminó todo, una disculpa por hacerlos esperar y a la vez por en un solo relato terminar, pero si lo escribía en partes distintas sería corto.
Próximamente les contaré otra experiencia. Saludos desde México D.F con cariño su amigo Daniel ?
Y aquí el link de la primera parte: http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-18270.html