El chico de atras
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Nos conocimos cuando entramos a la universidad a la edad de 18 (los dos somos de la misma edad), ambos entramos a la misma carrera y si bien en los primeros años es tronco común y hay muchos grupos, en la mayoría de las clases nos tocaba juntos; solo que en un principio yo no lo notaba mucho, ya que el siempre se sentaba en la parte de atrás en los salones, yo por mi parte siempre me sentaba enfrente en las materias, pues si me siento atrás no pongo mucha atención y me va mal en los cursos.
Regresando al tema, empecé a notar su presencia cuando lo sorprendía viendo en mi dirección, lo cual poco a poco empezó a llamar mi atención, en un principio pensé que lo hacia por las chicas que estaban sentadas al redoro de mi, o que sentía cierta predilección a mirar hacia la derecha del salón o algo así, pero luego me di cuenta que se trataba de algo más, pues sin importar donde me sentara, su vista me seguía a todas partes; esto era algo que nunca me había pasado, por lo que entre en un poco en pánico, sin embargo trate de no darle mucha importancia pues no nos conocíamos.
El primer semestre de la carrera transcurrió de esa manera, sin importar en que parte del salón, por lo regular lo sorprendía viéndome, y cuando se daba cuenta que yo lo veía a el, el apartaba la vista y la centraba en la clase.
durante ese semestre le hable muy poco, solo tuvimos conversación casuales sobre: tareas, exámenes, proyectos, etc.
Pero cuando regresamos de vacaciones y en tramos al segundo semestre las cosas cambiaron.
En un principio seguía siendo igual, me sentaba enfrente de la calases y de vez en cuando lo sorprendía viéndome; por lo que después de una semana de lo mismo decidí ser un poco más amigable, hablar con el más seguido de cosas que no fueran sobre la escuela, así de esta forma fui conociendo a un chico súper buena onda, y descubrimos que teníamos muchas gusto parecidos: música, deporte favorito, algunas comidas que disfrutábamos, en algunos géneros de películas, en fin la cosa es que nos empezamos a hacer amigos durante este segundo semestre
Para el tercer semestre nos hicimos muy buenos amigos.
sim embargo esto iba a cambiar muy pronto.
el semestre trascurrió muy rápido, entre la presión de los proyectos, el estudiar para los exámenes, por lo que casi nadie tenia tiempo de salir a divertirse o hacer otra cosa que no fuera pensar en la escuela.
Por lo que cuando llego la temporada de exámenes finales, la mayoría de los estudiantes se morían por presentar el ultimo examen y por fin irse de la escuela, los de semestres inferiores acaban antes, y los superiores ni se diga con el tiempo, ellos estaban mas presionados aun que nosotros, por lo que no salían de los laboratorios donde hacia sus proyectos o estudiaban para sus exámenes.
Por mi parte yo, yo no me moría tanto por acabar los exámenes e irme de la escuela, si me urgía ya no sentir el estrés que estos provocan, mas no me sentía la necesidad de irme a la casa, ya que iba a estar solo, pues mis padres se habían ido de viaje con mis hermanos menores.
por lo que decidí quedarme en la escuela y aprovechara la pista que tiene la escuela para correr y hacer un poco de ejercicio, ya que durante exámenes no me da mucho tiempo para hacerlo.
para poder entrar a la pista necesitaba antes entrar al gimnasio de la escuela y pedirle las llaves al encargado del gimnasio, y eso hice; pero para mi sorpresa el encargado del gimnasio no estaba debido a que un chico se accidento cargado unas pesas y se lo tuvo que llevar de emergencia al hospital.
Para mi sorpresa el chico que se sienta en la parte de atrás de las clases estaba ahí haciendo ejercicio, al llegar le pregunte por el encargado, sin embargo este me conto lo sucedido, entonces yo le pregunte si el no me podía dar las llaves para abrir la pista, a lo que este respondió que si, pero a cambio de un beso.
En cuanto vio que mi cara entraba en pánico, este soltó un pequeña riza y me dijo que era un broma, por lo cual procedió a entregarme las llaves y no solo eso se ofreció a acompañarme a correr, ya que no había nadie más en el gimnasio, a lo cual yo acepte (ni modo que le dijera que no el podía hacer lo que quisiera).
en cuanto llegamos a la pista, el recibió una llamada del encargado del gimnasio diciendo que era muy probable que ya no llegara pues aparentemente el accidente había sido más grande de lo esperado, por lo que le encargaba que cerrar el gimnasio en cuanto acabara.
el me comunico el menaje, y me comento que no me preocupara que yo empezara a correr que y el en un minuto me alcanzaba ya que regresaría a cerrar el gimnasio para que ya nadie entrara.
y así paso el me regreso y yo empecé a correr y como en 3 minutos llego y empezó a correr conmigo; estuvimos trotando durante 45 min y luego decidimos jugar carreras, lo malo fue que durante la tercera carrera que hicimos, me dio un terrible calambre en mi pierna izquierda.
en cuanto se percato, se alarmo un poco y corrió en mi ayuda y rápidamente me empezó a auxiliar; en cuanto el calambre seso, se ofreció a llevarme cargado de regreso al gimnasio, a lo cual yo me negué, en parte por pena, y en parte por que no era necesario.
Después del calambre regresamos al gimnasio para así poder bañarnos y refrescarnos después de la actividad física.
una vez dentro de los vestidores, note que otra vez me veía mientras me empezaba a quitar la ropa, en ese momento sentí la necesidad preguntarle el por que siempre me veía de ese modo, así que lo hice, a lo cual es se sonrojo un poco y me contesto que lo hacia sin razón algún, yo no le creí, entonces decidí volver a preguntarle, a lo cual el siguió sin responder y contestaba con evasivas, finalmente logre convencerlo, pero sus condiciones fueron 2 que no me iba a enojar con el por lo que me fuera contar y la segunda era que cerrara los ojos.
La verdad no sabia como cerrar los ojos influía en lo que me iba a decir, por lo cual decidí aceptar.
El se acerco a mi oído y me susurro "La verdad es que desde que te vi me gústate mucho", en ese instante entre un shock, no sabia que responder, y/o hacer, y en cuanto abrí los ojos el se abalanzaba contra mi a toda velocidad para darme un beso y ya era muy tarde para detenerlo, entonces me robo un beso.
Yo no sabia que hacer, seguía en shock por lo que me acababa de susurrar al oído, y aparte el beso, todo eso se mezclo y al final no supe como reaccionar.
El al no ver respuesta de mi parte decido soltarme del beso, y todo rojo de l vergüenza se disculpo y se giro, rumbo a la salida, pero antes de que llegara a la salida lo intercepte con un abrazo por la espalda y le dije de forma temerosa "No sé muy bien que siento por ti, pero creo que también me gustas", en ese momento el aparto mis brazos de su cuerpo, se dio la vuelta y me vio de frente, sus ojos le brillaban como nunca, me dio un abrazo muy fuerte, en ese momento pude sentir todo su ser, sus palpitación acelerada del corazón, su cuerpo fuerte siendo apretado contra el mío, y su olor, un olor tan distintivo a los demás, su aroma era fuerte, pero no era de esos aromas que huelen feo, sino que se trataba de un olor único de las personas, el de el era, solo indescriptible, si me preguntan a que olía, la respuesta es que olía a el mismo (no se si me explico).
Entonces me volvió a besar, pero esta vez si le respondí, y eso lo prendió más y poco a poco fue buscando las prendas que aun tenia en mi cuerpo y empezó a tirar de ellas, para poder quitármelas, al tiempo en que se separa del beso y nuevamente me susurraba algo al oído " desde hace tiempo que he fantaseado con poder hacerte mío, poder tenerte, acariciarte (hubo una pequeña pausa) COGERTE".
En ese momento deje de ser yo mismo, no se si era por el calor del momento, saber que estábamos solo y que nadie nos podría interrumpir, la verdad no sé muy bien lo que pesa, pero entonces ahora era yo el que estaba buscando sus labios, y nuevamente nos fundimos en un beso muy apasionado.
Ni corto ni perezoso me continuo quitando la ropa, pero lo detuve temporalmente para recordarle que un estábamos algo sucios por la actividad física, entonces como si no le hubiera dicho nada, continuo besándome, pero esta vez me cargo mientras me seguía besando, yo lo enrolle el tronco de su cuerpo con mi espalda, entonces el camino hacia las duchas, una vez dentro me bajo y proseguimos a tomar un baño juntos, mientras seguimos en lo nuestro.
el se quito su ropa, mientras yo moderaba la temperatura del agua para bañarnos, mi reacción fue grande cuando vi su miembro.
No era mucho mas grande que el mío, si el mío media unos 15 cm, el de el media entre 17- 18.
5 cm, aproximadamente, y además se encontraba súper excitado, parecía que iba a reventar o estallar esa verga tan grande, y yo ni se diga, estaba muerto del miedo ya que nunca había sido penetrado antes (créanlo o no, si era virgen), pero a la vez tenia una gran deseo de sentirlo dentro, sin embargo antes, proseguir, me puse en cuclillas y procedí a chupar esa verga que provocaba muchas sentimientos en mi, por su parte el no hizo nada que masque acomodarse en una pared y dejar que yo lo consintiera, mientras el agua caía por nuestros cuerpos.
Una vez teniendo su Miembro en mi boca, enloquecí, era toda un nueva gama de sabores en mi boca, entonces simplemente deje que esa locura se desatara, hice todo lo que a mi mente se le ocurrió con esa pedazote de carne en mi boca, succionaba la puntita, trataba de meterlo todo en mi boca, mas nunca pude, le lamia sus testículos, en fin fue toda un experiencia placentera, hasta que se vino en mi boca, llenadme toda la boca son su semen, y manchando algunas partes de mi cara con el.
Jamás había probado el semen, y la verdad no me gusto, así que lo tire rápidamente, para que se fuer con el agua, el ofreció un disculpa por lo sucedido, y yo le dije que no importaba, que todo estaba bien.
Después de escuchar eso sonrió y me pregunto que si estaba listo para ella, y señalo de nuevo a su verga, que ya se encontraba otra vez a tope, casi tan rígida, como hace unos minutos atrás.
En ese instante sentí miedo de tener esa gran verga dentro de mí, no sabia si iba a poder soportar tener todo eso dentro de mi, y siendo mi primera vez, entonces le comente mi situación; el solo asintió, y me volvió a besar profundamente, después me dijo que seria lo mas gentil posible, que no me preocupara, y que si no lo soportaba, con otra mamada que le diere estaría muy satisfecho.
El a su vez me confeso que no tenia ningún preservativo, ya que todo había salido mejor de lo que esperaba para este ultimo día de clases.
Yo sabia que no debía dejar que las cosas continuaran así, que debía parar por ese pequeño gran detalle del preservativo, el al ver mi cara de preocupación , el me juro que yo era su segunda pareja en su vida (cuando uso el termino pareja, no pude evitar sonrojarme), y que siempre se había cuidado, entonces decidí confiar el en el con los ojos cerrados, decidí entregarme a el en mi primera vez con alguien que no iba a usar un preservativo.
Entonces comenzó.
apago el agua de la regadera, me hizo girar de tal forma que lo dos queramos viendo hacia el mismo lugar, empezó a hacer que me inclinara, mientras el se iba agachando, hasta que quedo a la altura de mis nalgas, antes de de abrirlas y darme un beso negro comenzó por darme besos en ellas y hacer algunas caricias a, de vez en cuando me daba una nalgada, eso me ponía súper loco, entonces me relaje un poco y deje que el hiciera su trabajo, primero empezó pasando su lengua por mi ano, lo cual se sintió increíble y después comenzó a aplicar un poco de saliva en el; para que lubricara y después procediera a introducirme primero uno de sus dedos, en cuanto lo hizo solté un pequeño gemido de placer, realmente me había fascinado, luego procedió a un segundo dedo, y surgió el mismo efecto, solté un gemido de placer.
Fue entonces cuando dijo, ya no lo soporto, te tengo que hacer mío, y me pregunto por ultima vez si estaba seguro, a lo cual yo respondí que si que yo también lo quería tener dentro.
Le brillaron los ojos nuevamente pero no tardo nada en ponerme contra la pared mientras aplicaba un poco de saliva en su miembro, para que también se lubricara un poco y facilitar la penetración.
Entonces comenzó, primero anuncio a mi ano que iba a ser penetrado, poniendo su verga en la divisan de mis nalgas, sin ejercer mucha presión, lo suficiente como para que estuvieran separadas mis nalgas, pero no comenzara la penetración, mi cuerpo, como sabiendo lo que iba a pasar comenzó a tensarse un poco, aunque yo tratara de relajarme, el hacia mucho con sus caricias y besos en la espalda y cuello, después de unos segundos, comenzó la introducción de su glande a mi ano, estaba súper gigante ( desde mi punto de vista), este iba abriéndose paso poco a poco, hasta que entro completamente el glande, justo en es momento hubo un dolor muy muy intenso, y grite lo mas bajo que pude, el paro en ese instante de penetrarme y pregunto si quería que paráramos; estuve tentado a decirle que si, sin embargo, pensé que esta iba a ser la, por lo que le pedí, casi suplique que siguiera, el se alegró mucho y prosiguió a introducirme su hermosa verga, desgarrando cada milímetro de mi ano, mientras esta avanzaba, a su vez brotaban unas pequeña cantidad de sangre por ano, el no se inmuto, y parecía no molestarle, por lo que prosiguió en el acto.
fue avanzando poco a poco, hasta que finalmente estuvo dentro de mi.
el proceso fue muy extraño y excitante, pues lo que comenzó como algo muy doloroso, pronto se transformó en un inmenso placer.
Así que oficialmente, ya no era virgen, en estos momentos le pertenecía al chico que se sienta atrás en las clases.
permaneció como 10 segundo dentro de mi sin hacer ningún movimiento, entonces se me acerco nuevamente al oído y me dijo, " se nota que eres nuevo, estas muy apretado y calientito, me encantas"; habiendo dicho eso empezó levente a moverse lentamente sin sacar su verga de mi ano, para que este se acostumbrara; el dolor seguía ahí, pero conforme proseguía con el mete y saca este se iba disipando poco a poco hasta volverse placer, un placer tan grande que hace que tu estomago se encoja y te corre por todo el cuerpo, pronto mi ano se adapto a su verga y el comenzó a acelerar y hacer estocadas más fuertes contra mis nalgas.
Ahora si la verdadera penetración había comenzado.
El me seguía teniendo entra de la pared, mientras me seguía haciendo suyo, y fue así, al menos por 3 minutos, hasta que me volteo me volvió a cargar como cuando me trajo a la regadera, volvió a poner la regadera en agua templada y me apoyo contra la pared, para que esta le ayudara con mi peso, y nuevamente comenzó a penetrarme como loco, esta vez si perdió la razón, el se encontraba tan excitado, como yo, que perdió la cortesía y comenzó a penetrarme como loco, con una velocidad vertiginosa y una fuerza incomparable yo estaba gimiendo de un placer inigualable, mi mente no reaccionaba, solo estaba dejando que mi hombre saciara sus ganas de cogerme, mientras yo estaba súper enloquecido por el placer que me estaba provocando.
finalmente me puso a cuatro patas en el piso, el tenia una mira demencial, se podría notar que estaba súper excitado, se puso lídermente encima de mi como hacen los perro, entonces tuve que cargar un poco de su peso, mientras el seguía penetrándome, entonces me preguntó " espero que te este gustando, por que a mi me esta encadando ", después de y la verdad es que yo estaba preso del placer que el me estaba provocando, por lo que solo asentí con la cabeza y contesto "que bueno que no soy el único que la esta pasando de maravilla" entonces empezó el inicio del final, yo sentía como se estaba acercando a su clímax, cada vez que me la metía, con sus brazos me jalaba hacia el, como si con eso pudiera logara una penetración más profunda; los dos estábamos como locos presos del placer, el proseguía con las estocadas cada vez mas fuertes y yo no paraba de gemir de placer al rimo de su penetración y cuando sus estocadas se prolongaban al agarrarme por las nalgas yo alargaba mis gemidos, esto parecía que le encantaba, pues me penetraba cada vez con más y más fuerza, hasta que finalmente se vino dentro de mi.
cuando acabo, los dos estábamos muy exhaustos aun el con su mano izquierda me hizo una paja para rematar mi placer, que yo sentía ya no podía aumentar más.
nos quedamos un rato tumbados en el piso mientras el agua de la regadera seguía cayendo sobre nosotros, finalmente me levanté a cerrar, después abrí la puerta del baño, mi ano no paraba de palpitar, era como si tuviera vida propia, de hecho sentía que me molestaba para caminar, al mismo tiempo sentía como el semen de mi hombre se escurría desde mis interiores.
Sin duda una experiencia única;
finalmente nos fuimos de la escuela juntos en el transporte escolar de la universidad, el me abrazo durante todo el camino y así nos quedamos dormidos durante la trayectoria de regreso a nuestros hogares.
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