El chico del lavado de autos
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por dres14.
Cuando empecé a trabajar, había un lavado de coches cerca de la oficina, uno de los chavos que lavaba era un chico de unos 15-16 años, blanquito, bonito, guapo.
Pero a la hora de hablar se le notaba el barrio cosa que me encantó.
El tiempo pasó hasta que un día me anime a hablare, si estudiaba, su edad, ahí me enteré que tenía 15 años, si tenía novia, entre otras cosas.
Así pasó un año aproximadamente y un buen día lo invite a Six Flags, cosa que aceptó, yo dentro de mí dije, ya lo hice mío, pero no, llevo a su “novia” que al final resultó ser solo una amiga.
Para no hacerles el cuento largo, el lavado de coches cerró pero mantuve contacto con él, sabía que necesitaba dinero y le dije que si me ayudaba en mi trabajo, realizar cosas sencillas.
Un día nos quedamos mirando por unos segundos y al tratar de besarlo se hace para atrás y me dice: “Qué te pasa, no soy gay” y yo así de esta bien, tranquilo, no lo vuelvo a hacer.
Tendría como 17 años cuando seguía ayudándome en mi trabajo.
Un el chico andaba ordenando unas cajas cuando lo veo de reojo y noto que donde termina la espalda y empieza el cielo está lleno de vellos eso me puso al 100 y me reavivó los deseos de tenerlo.
Deje de verlo por un tiempo y un día lo llame, estaba libre y le dije échame una mano en el trabajo y si terminamos temprano vamos a mi casa; nos apuramos terminamos el trabajo y nos dirigimos a mi casa.
Compramos una pizza y le ofrecí un poco de tequila, después de unos 3 tragos él me dijo:
“Qué intentas hacer?”
A lo que le conteste que nada, que solo quería pasar un buen rato.
Cabe mencionar que para este momento él ya tenía 18 años y yo 30.
Con 2 copas más encima él ya estaba bastante mareado y le dije ven vamos al sillón para que descanses y te pongas cómodo, al estar en el sillón, le empiezo a acariciar la pierna y solo se me queda mirando, le digo que tranquilo, que se relaje, que en un rato se le pasa.
Empiezo a subir más mi mano hasta que empiezo a sobarle su bulto que por alguna razón yo me lo imaginaba grande, grueso y peludo.
Le pregunto:
“Alguna vez te la ha mamado un hombre’”
“No” dice él
“Dejas que te la mame, yo sé qué es lo que disfrutas”
Levante su playera y se veía el típico y delicioso camino de vellos que llevaban a su verga.
Se bajó su pants, traía otro pants y debajo un short tipo basketball y debajo de este su verga, peluda, unos 14cm en estado flácida, se la acaricié, la besé y me la metí, conforme chupaba su cabeza, su tronco, sus huevos y todos sus vellos acariciaban mi cara, noté que se le iba poniendo dura.
Le subí los pants y le dije que fuera a la cama y se recostara para que se le bajara el alcohol, cosa que accedió pero con algo de resistencia.
Mientras él estaba acostado le baje de nuevo los pants y el short y lo deje desnudo, su verga dura, como me la esperaba, unos 18-19cm, medio gruesa, no dude en llevármela a la boca, se la mame por un rato hasta que me dijo:
“Siéntate, que te la voy a dar puto, yo sé que es lo q quieres desde hace tiempo”
Me quito el jeans, el bóxer, unas 2 inhaladas de Popper y q me la meto toda de un jalón, él se mueve yo me muevo, los dos súper excitados me agarra la verga y me empieza a masturbar mientras me dice cosas como:
“Tenía ganas de probar tu culo”
“Eres mi zorrita, cómetela toda”
“Tienes un culo bien rico putita”
“Te voy a echar mis hijos”
Cada cosa que me decía me prendía más y más me la metía hasta al fondo, sentía sus huevos chocar con mis nalgas, su vellos rozando mi trasero.
Su verga abriéndome el culo.
Cuando maso a los 10 min siento que algo caliente escurre, era su lechita, me había echado a sus hijos adentro, cosa más rica, salía y salía leche.
Al final me dijo que nunca había sentido tanto placer con ninguna vieja y que siempre había querido cogerse a un puto.
Ya era tarde y ese día se quedó a dormir… pero esa ya es otra historia.
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