El chico del speedo rojo (Relato corto)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por eduardolanister.
No soy muy amante al mar ni al sol así que siempre procuro quedarme bajo de algún lugar sombreado, la playa no era una playa común era una área privada en la que uno de mis amigo había reservado solo para nosotros, entre las personas habían varios niños 4 y 6 años, yo disfrutaba verlos en sus pequeños speedos también se encontraban 3 chicos de entre 13 y 14 años delgados los tres y muy lindos cuerpos, hombrecitos que jugaban a las peleas y los saltos en la arena. Yo en mi techo hecho de palmas secas y detrás una pequeña habitación rustica donde de vez en cuando alguien entraba a tomar una toalla y alguno que otro niño junto a su mami para orinar, era una especie de área de baño.

En un momento todos fueron a bañarse y yo como siempre me quede sentado donde estaba, los chicos de 13 parecían muy interesados hablando algo deje de prestarles atención, luego saltaron las risas y seguido salió un de ellos era el chico mas moreno de todos con un lindo pecho y unos definidos abdominales, de rostro fino y cabello lacio un poco largo él era el chico del speedo rojo, venia un poco encorvado hacia donde yo estaba, (debo decir que el lugar donde estaba era bastante retirado de la playa), paso por un lado rápidamente y entro al cuartito de atrás, yo pensé que iba a orinar mas no escuche nada

La verdad me dio mucha curiosidad saber que pasaba, nadie veía hacia donde yo estaba así que aproveche y entre, allí lo encontré tiritando de frio con una hermosa erección cuando notó que me fije en su bulto se lo tapó, le dije: “no te asustes que se te ponga así es normal, sobre todo si tienes frio” (me puse a mil y la verdad solo quería probar ese pene que estiraba el speedo como queriendo romperlo) no sé porque tal vez una intuición pero continúe y le dije: “yo te puedo ayudar a que se te baje pero tiene que ser nuestro secreto” el no dijo nada pero inmediatamente entendió cuales eran mis intenciones

Por un momento pareció dudar luego dijo: “¿y qué va hacer?” me acerque y quite sus manos de su pene y comencé a acariciarlo, me arrodille y saque su hermoso pene que ya tenía algunos pequeños bellos muy finos, empecé a lamer su glande y luego me lo metía a la boca probando ese rico manjar, el estaba erguido no se movía, entonces con mis manos agarre su culo y empecé a meter más su pene en mi boca, mete y saca, entonces el tomo mi cabeza y empezó a perforarme la boca con su lindo pene, solo se escuchaba nuestra respiración rápida

Comenzó a temblar y empezó a descargas sus dulces chorros de semen en mi boca (creo que el semen de los chicos de 13 a 16 años es el más dulce del mundo) comenzó a dar espasmos hasta que se doblo y lo saco de mi boca me dijo: “ya” subió su speedo rápidamente, yo le pase una toalla para que se cubriera pues aun tenia la erección chequeamos que nadie nos viera y salimos, nos sentamos un rato sin hablar, entonces llegaron los otros dos chicos y le dijeron que se fuera con ellos a la playa

El se levanto tiro la toalla y salió corriendo con ellos como si nada, creo que era el sobrino de alguno de mis amigos y la verdad nunca supe su nombre, pero ese momento en el que me dio de su dulce néctar no lo olvidare nunca y sé que él tampoco.