El Chico Metalero 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por piesgay.
Había pasado ya dos semanas de lo sucedido con Ian. No había hablado con él desde entonces. A veces me lo encontraba en las escaleras del edificio pero ni si quiera me miraba. Pasaba mis noches meneándomela pensando en cómo me había cogido, en su cuerpo y oliendo sus preciados bóxers que me dio; y que yo guardaba en una bolsa de plástico para se guardara su olor. Me había gustado tanto ser pasivo de ese chico que había dejado de tener sexo con alguien más. Un día antes de acostarme encontré una hoja de cuaderno tirada enfrente de mi puerta, había algo escrito en tinta negra con letra apenas entendible: “te espero mañana afuera de mi escuela a las 3 para que te de mi chilote otra vez, no me dejes esperando PUÑAL”. Me puse tan nervioso al leer la carta pero a la vez me éxito tanto que me di una tremenda paja leyendo una y otra vez su nota.
Al día siguiente me bañe, me perfume, me puse la playera más ligera y transparente que encontré. También un short que decidí ponérmelo sin ropa interior, para que Ian fuera directo al punto jeje… Ese día tenía clases hasta las 4 y obviamente me salte unas clases para recoger a Ian. Así que Salí temprano de la universidad y conducí a su preparatoria ya que estaba algo retirada. Logre estacionarme un poco antes de la entrada con sombra; ya que el calor estaba insoportable y me quede en el auto esperando verlo, entre tantos adolescentes. Pasaron como 10 min y no había señal de el, hasta que oí unos golpecitos en la ventana. Y ahí estaba Ian, quite los seguros del auto y entro. Inmediatamente mi nariz percibió un olor a cigarro sin embargo, olía mas fuerte el sudor despedía tenia Ian, que hasta me cosquilleo la nariz pero a la vez me había provocado una erección, así que aspire lentamente. Llevaba una camiseta de tirantes negra, que estaba mojada de la parte de los pectorales debido al sudor. Unas bermudas negras con varias cadenas colgando y unos sneakers negros con franjas rojas. Sus cabellos en picos y tiesos por el gel. Note que traía varias pulseras con púas, se veía tan sexy que me contuve de comérmelo a besos ahí mismo.
Ian: que onda Carlitos me extrañaste? O extrañaste a mi amiguito? (dijo mientras se tocaba su bulto)
Yo: hola Ian… la verdad a los dos. (El hecho una risita)
Ian: qué esperas, vámonos que tengo ganas de romperte el culo todo el día.
Arranque el auto, cuando pasamos por la entrada Ian se agacho y cuando nos alejamos de la escuela se volvió a levantar. Y le pregunte que le pasaba.
Ian: No quiero que mis valedores me vean, ya te dije que no soy puto pero me gusto metértela en la cola. Eres el primer maricon que follo….Mmm pero si hasta te perfumaste verdad putito? Te preparaste para ver a tu hombre… así me gusta. (Yo me había sonrojado pues era cierto) Yo también vengo perfumado.
Alzo su brazo y olio su axila, pude ver que sus pocos vellos estaban brillosos y mojados. Un mar de olor envolvió mi cuarto, ese chico sí que olía a chivo y volverlo a ver oliendo sus axilas me prendió tanto que casi me costó un choque pero una luz roja me salvo.
Ian: que pasa? Te éxito como huelo? En mi salón ya no me soportan jaja pinches sensibles solo han pasado 5 días sin bañarme.
Yo: no te has bañado en 5 días? (yo no soportaría) y por qué?
Ian: Porque no se me da la regalada gana
Yo: pues a mí si me gusta como hueles
El se echo a reír otra vez, pero alzo su brazo mostrándome su axila y me hizo una seña de que me acercara. Y así lo hice, acerque mi nariz y di un gran suspiro, oliendo detenidamente ese olor penetrante y fuerte. Sentí como mi pene se apretaba en mi pantalón.
Ian: amm Carlitos ya está la luz verde.
Sentí una sacudida y sonrojándome otra vez volví al volante. Mientras íbamos en el camino, me conto que sus padres otra vez habían salido de viaje, pero lo habían dejado porque tenía un examen y que tendríamos la casa para nosotros ya que volverían pasado mañana. Yo estaba ansioso porque ese macho adolescente me cogiera otra vez.
Llegamos al departamento y entramos a su casa que seguía totalmente intacta de cómo la había visto, me dijo que esperara en la sala mientras iba a su cuarto. Mientras yo me bajaba un poco el short dejando ver mi raja de mi cola.
El regreso, no pude evitar admirar sus brazos fuertes, y lisos. La camiseta se le pegaba al cuerpo marcando cada musculo, a mí se me hacia agua la boca.
Ian: Mírate… hasta los pezones los tienes bien parados. (Prendió el estéreo del sofá, y coloco un CD. Empezó a sonar las guitarras eléctricas y un tipo cantar a gritos) Órale vente y complace a tu hombre. (Me dijo dejándose caer en el sillón negro, que parecía de hule.
Me había gustado tanto lo que sucedió en el auto que quiera experimentar algo nuevo así que me hinque frente a él y le quite sus sneakers , al parecer traía las mismas calcetas rotas y agujeradas que le vi cuando le conocí, con mi mano tome su tobillo y llévela planta de su pie a mi nariz pegándola contra mí y empecé a oler su pie. Su olor era más fuerte que el de sus axilas, no sabía si olía a queso, era un olor que solo la tenia. Ian se quito su camiseta mostrando su torso marcado y esos pezones deliciosos, lo cual me prendieron más.
Ian: que estás haciendo pendejo?
Yo apreté mas su planta, su calceta estaba muy húmeda, se las quite y olí directamente sus pies. Estaba en un trance de excitación así que no dude mas y empecé a lamerlos. Pasando mi lengua por su planta, entre los dedos, la parte de arriba de los pies. Mi lengua recorría su salado pie, lamiendo todo su sudor. Cuando mire a Ian, tenia cerrados los ojos y estaba gimiendo, al mismo tiempo que se sobaba su bulto. Me quite mi playera y seguí lamiendo sus pies por un rato.
Ian: ohh!! Esto es lo mas chingon que me han hecho, mmmm ahhhhh…aaarggghhh… chinga!! Eres bueno pero ya quiero abrirte la boca.
Se paro y se quito el resto de su ropa. Sus piernas algo velludas me mataban y claro no había olvidado su verga. Su glande rosita, venosa y algo gruesa y con 18cm. Se volvió a sentar, el sillón chillaba con la piel desnuda de Ian, abrió sus piernas y me puso en el centro. Se escupió en la verga ,agarro mi cabeza y me metió su verga a la boca. Sentí el sabor de su saliva y lo caliente de su verga, ese rico sabor que me fascinaba. Sentía los empujones de la mano Ian, metiéndome su verga al fondo mientras mi lengua ensalivaba todo por adentro. Ian gemía como loco mientras con la otra mano se pellizcaba un pezón. Su piel empezaba a brillar otra vez por el sudor. Saboreaba su verga, la sacaba de mi boca para lamerle esos grandes huevotes peludos, ese chico en verdad me enloquecía. Yo le dejaba esa verga bien ensalivada.
El se acostó en el sillón y yo me puse encima de él, mi lengua viajo por todo su cuerpo, lamí sus caderas, su ombligo y me deleite con el sabor de sus axilas pasando mi lengua por su arco y chupando sus vellos. Lo que más me gustaba era lamerle su pecho; pasaba mi lengua por cada línea y musculo, me detuve en sus pezones y empecé a jugar con ellos, los besaba y mi lengua pasaba por ellos en círculos. Empezó a succionarlos, como si le hiciera un chupetón en los pezones duros y grandes que tenia. Ian empezó a gemir más fuerte y a gritar de excitación, casi igual que el cantante de la banda que tocaba. Me agarro y ahora el me puso boca abajo en el sillón que rechinaba constantemente al moverse nuestras pieles desnudas.
Ian: espero que tu culo siga como lo deje. (Me quito mi short) No traes bóxers cabron? Si que eres un puto, no mames.
Abrió mis nalgas y me empezó a escupir. Sentía en mi culo como su saliva caliente me lubricaba todo. Empezó a gemir como putito en celo, yo estaba al máximo.
Ian: mmm asii chilla putita, mmm que culo primor, que culo!!
Sentí la punta de su verga en mi ano metiéndola poco a poco hasta que la metió de jalón. Sentía esa estaca en cada centímetro de mi culo, cerré mi ano para que apretara y los dos gemíamos de placer. Me encantaba sentir su verga a pelo en mí. Ian se acostó encima de mí. Sentía su pecho sudoroso recargado totalmente en mi espalda, sus peones duros y su pelvis apretándome las nalgas. Ian comenzó a follarme el culo, bombeándome fuere. Escuchaba sus gemidos en mi oído. Yo estaba excitado, nuestros cuerpos juntos y el follandome otra vez a pelo, me deje llevar y cerré los ojos gimiendo. Después de cómo 15 min en esa pose, empapados de sudor, era increíble que a sus 15 años tuviera ese aguante. Se levanto y me pidió que lo acompañara. Fuimos al comedor y me pidió que me acostara en la mesa, ya que tenía el morbo de hacerlo en la mesa de un comedor. Así que me acosté en la fría mesa de madera, después Ian se acostó, me puso de lado y me volvió a meter su verga, estuvimos follando en su mesa, los gemidos se hacían más fuertes pero Ian se reusaba a correrse todavía.
De nuevo nos separamos, el agarro una silla del comedor y la puso en la sala sentándose en ella. Se la chupe otra vez, estaba tan tensa, totalmente parada. Ian escurría de sudor, exhalaba como si estuviera cansado y daba unos gemidotes tan fuertes que me preocupo que los vecinos nos oyeran. A mí ya me dolía un poco el culo pero estaba dispuesto a seguir.
Ian: vamos cabalga, quieres verga no? Puto órale… dale
Con la fuerza que tuve dirigí su verga a mi ano y me di un sentón, su verga me atravesaba eso me gustaba. El alzo sus brazos y los cruzo detrás de su cabeza. Lo agarre de los hombros para sostenerme y empecé a dar de sentones, los dos gemíamos, el mas, era una bestia adolescente cachonda. Ya que no le gustaba que lo besara en la boca, lo bese en el cuello, en eso se agito, me miro a los ojos.
Ian: asiii aaahhh!! Aaarrrgghhhhh ohhhhhhhhhh vamos putooo vamos ahhh ahhhhhhh
Me tomo de las caderas y con sus fuerzas me levantaba y me sentaba, el ahora marcaba los sentones, estaba rojo del esfuerzo, sus músculos estaban tensos y las venas se le marcaban. Sus folladas se hacían fuertes, al igual que sus gemidos, hasta que me dio un sentón y sentí como se corría en mí. Sentía como poco a poco su semen caliente bañándome el culo. Los dos habíamos llegado a un verdadero clímax. Me corrí en su abdomen, el hizo cara de asco. Nos quedamos así un rato en lo que nos recuperábamos, me saque su verga, ya flácida que estaba cubierta de semen.
Ian: No quiero tus mocos en mi cuerpo puto, así que límpiame y después te limpias tú que se te sale mi leche del culo.
Lamí su abdomen quitándole mi semen y después le limpie su verga hasta dejarla completamente limpia. Me fui al baño a limpiar y note que tenía un poco de sangre saliendo de mi culo. Me asee y cuando salí, Ian estaba tumbado en el sillón descansando, me senté junto a él y platicamos de la follada que habíamos tenido mientras descansábamos. Esta vez pedimos tortas de milanesa para comer, Ian recibió al repartidor en pelotas. El pobre casi nos deja del susto, lo que nos provoco risas entre Ian y yo. Estuvimos el resto del día desnudos en el depa, al anochecer Ian me pego contra la pared y me volvió a follar como un animal hasta correrse de nuevo dentro de mí. Dormí desnudo en el sillón, el calor era tremendo y además seguía caliente.
A la mañana siguiente me desperté temprano y prepare el desayuno a Ian y me vestí, para después llevarlo a la escuela. En eso aparece Ian todavía adormilado y totalmente desnudo, lo que me hizo tener otra erección.
Ian: que estás haciendo pendejo? Son las 6 de la mañana.
Yo: preparando todo para que te vayas a la escuela, tienes examen recuerdas?
Ian: a la verga el pinche examen. No voy a ir, en primera tengo sueño y en segunda hoy también te voy a abrir el culo. (Decidió desayunar de todos modos).
Después se volvió ir a dormir, amenazándome que no lo despertara. Vi televisión hasta las 11 que se levanto. Fue directo hacia mí para que le hiciera una mamada. Volviéndomela a meter lo mas que podía. Al final abrí la boca y saque mi lengua y él se descargo el ella. Su semen sabía algo dulce, estaba muy espeso y caliente. Me iba a meter de nuevo su verga al culo, cuando sonó el teléfono, eran sus padres que venían de regreso. Tuve que vestirme desilusionado y lo convencí de que se diera un baño. Antes de salir solo escuche que Ian gritaba: No te preocupes puto te la voy a seguir metiendo.
Salí de su casa con una sonrisa, nunca había experimentado algo así, sin duda Ian ya era todo un hombre y sacaba lo mejor de mí.
Continuara…..
Qué rico tener un macho así uff ,eso sí que sea más aseado 😋