El chiquillo o juanito

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Primero que nada me voy a presentar me llamo Valente soy un hombre ya de 44 años de edad, moreno, ni flaco ni gordo fornido, con bigote, algo velludo. Soy casado y con hijos; pero la mera verdad soy bien caliente. bueno mi trabajo es algo pesado ya que desde muy adolescente no quise estudiar y lo que hacia era conseguir trabajo con conocidos de albañil, cargador a lo que sea le hago pues. lo que les voy a contar ocurrió hace 2 años, me salio un trabajo a mi y a un compañero que es mas chavo que yo un trabajo que era el pintar una casa; una casa de tres pisos con el cuarto de lavabo, en realidad estaba algo grande

Ese trabajo lo tomo mi compañero porque era conocido del dueño de la casa o mas bien de la familia. el caso es que llegamos nos dieron las instrucciones de que colores y esas cosas y me lance a la tienda de pinturas, cuando llegue mi compañero y yo no pusimos a pintar; la casa estaba sola y me empezó a comentar esa casa ya tenia sus 5 años construida que nomas que el verdadero dueño había fallecido y era el papá del nuevo dueño, me comento que ellos vivían al otro lado y que pues ya la habían mandado pintar para cambiarse de vivienda y vender la suya, ya que esta era más grande y nunca había estado habitada porque el papá vivía en los estados unidos y que se la dejo de herencia al final. yo estando pintando vi como entraban dos niños un niño y una niña la niña se llamaba Lucia de 7 años y el niño Juan de 10 años

Armando mi compañero me dijo que eran los hijos menores del señor que nos contrato y luego susurrando me dijo.- mira al cabroncito como se mueve, ¿se ve medio jotito verdad?-. yo solo me reí y me quede callado, no lo había notado pero después note como hablaba y como se movía y en realidad se veía algo amanerado. Así paso una semana y el chamaco todos los días iba y se agarraba platicando con nosotros nos molestaba y demás cosas, pero pues nosotros no decíamos nada y aguantábamos. Llego el siguiente lunes y mi compañero se había puesto una peda (emborrachado) que cuando llegue por el a su casa esta muy malo; vomitando y demás cosas así que decidí irme a trabajar solo, llegue a eso de las 8 de la mañana me puse a vaciar pintura y revolverla en barricas y comencé a pintar a eso de las 10:30 de am se asomo la señora de la casa y me dijo. -¿Valente no quieres un taco para almorzar?-. aunque yo le dije que no ella me insistió y después de que se fue a los 5 min. llego juan se acerco y me dio los tacos rapidamente me senté en una barrica a comérmelos, en eso la oigo como la señora sale de su casa y le dice a juanito. – chiquillo no este de enfadoso andele a la casa, que yo ya me voy-. y entra por el y el niño le dice que el quería ir y la señora le dice. -no que estabas malo, eh nomas me haces enojar-. ahí es cuando yo me río y la señora me dice. -tu crees con este juanito nomas me dice que le duele la barriga y ya no lo llevo a la escuela, ya me tengo que ir a trabajar que ya hasta se me hizo tarde-. (al perecer la señora trabajaba en una estética) y el chamaco ni le hacia caso andaba subiendo y bajando escaleras y yo le digo a la señora. -no se preocupe yo le hecho un ojo y ahorita lo encamino aquí a la puerta-. la señora se va…. jamas hubiera creído lo que iba a pasar. ya cuando estaba por terminarme los tacos. el chiquillo se me arrima y le comienzo a preguntar cosas tontas (porque haces enojar a tu mamá? en que grado vas? que quieres estudiar?)

Cuando yo le estaba preguntando de repente veo como sus ojos tan viendo directamente mi bulto; que claro como estaba sentado, traía pantalón de mezclilla ajustado, estaba fajado, pues se me notaba el bulto y para acabarla como el pantalón estaba gastado pues estaba rompido de la costura y tenia un agujero como de 3 cm que dejaba ver mi trusa a todo lo que daba. En lo que me distraje y agache la mirada la mano de juanito con el dedo indice iba hacia mi bulto me quedo a pocos centimetros de tocarme y me dice.- tienes un agujero valente, cochino-. en eso yo le quito la mano y me rasco mi verga por encima del pantalón; nomas de ver lo que intento hacer me calenté un chingo. y me pare a pintar pa distraerme y después tuve que bajar de la escalera fui al baño y observe como me espiaba el chiquillo, aunque no podía ver nada por la puerta entre abierta observe por el espejo que asomaba su cara, eso me calentó más. Salí del baño y cuando pasaba por donde estaba yo como tres veces me agarre el bulto y se me queda viendo fijamente, en una de esas yo estaba pintando y el se acerco se puso tras la escalera y estirandoce todo lo que podía el pinche chiquillo estiro la mano y toco mi bulto, yo me asuste y que le digo. -apoco sabes lo que hay ahí-. y el me dijo. – si un pitote como el de mi tío javier-. baje y le dije.- y tu como sabes-. me dijo que por que el con su primo espiaban a el tío javier y que esté se jalaba la verga. que no hace mucho los descubrió y se la hizo chupar a juanito en una ocasión en eso me dijo. -te la puedo chupar, ha de saber muy rica-. en un inicio le dije que no pero después de que me rogó otra vez baje de la escalera desabroche mi cinturón y le dije. -orale pues canijo, chupe, tome su biberón cabrón-. se dejo ir y me bajo el pantalón, olio la trusa y restregaba su cara por todo mi bulto, saco mi verga; que no es por presumir mide 20 cm de largo y ta de buen anchor después que la saco hizo lo mismo la olía la agarraba con su manos suaves y al final la metió a su boca no cabía toda pero a que rica mamada me hizo, jamas me habían hecho una mamada tan rica, nos subimos al segundo piso y tras una mamada deliciosa que le digo. – te enseño despues que se hace-.

El cabrón chamaco me dijo. -se coge, mi tío me lo va a hacer-. yo le dije. – yo te lo hago-. en eso me dice. -bueno pues pero pongale saliva o algo que luego me dule, esta ta más grande que la de mi tío-. habia un jabón en el baño; recordé fui por el y era liquido. ya la había hecho pensé. regrese lo unte y metí el dedo, el pinche chiquillo pujaba como no tienen idea pero pedía más; era un putito. Puse en mi verga y poco a poco se la deje caer, para no lastimarlo, claro no le metí toda mi reata pero si poco más de la mitad, después como de media hora me separe y se trago todos mis mecos, ha chupaba como no se imaginan bien rico el putito, terminamos, lo metí a bañar y lo bañe bien, me dijo que no dijera nada, después estaba algo asustado pero después de unos días me relaje el pinche chiquillo no dijo nada y lo notaba porque me pedía más pero ya no pude hacerlo solo me sobaba el bulto cuando mi compañero salia a comprar pintura o taba en el primer piso. Después terminamos el trabajo y ya no lo he visto, pero ha como a de tragar vergas, imagino.