El de el amigo español
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Iba saliendo de la escuela cuando recibo un mensaje, al leerlo, era un amigo español que había estado viviendo un tiempo en la ciudad y que se iba a España la próxima semana, me pregunto que si nos veríamos en la noche, le respondí que sí que lo esperaba a las siete.
Pase todo el día en cosas aburridas, realmente sólo era un amigo, incluso dudo que siquiera imaginará que soy gay, no es que lo oculte pero tampoco lo voy gritando, todavía creyendo que sería sólo una noche entre amigos, mis padres salieron por que casualmente (si se que en estos relatos siempre hay casualidades como que los padres se les ocurrió desaparecer) habían salido al hospital a cuidar a alguna tía ebria que se le ocurrió darse en su madre, dan las siete y llega mi amigo y me saluda con ese acento español que me da tanta gracia.
Vio que no estaban mis padres y jugamos al play, luego quiso beber algo y salimos a comprar cerveza, el era enorme sin mentir habría de medir 1.
96, cm más cm menos, blanco como el papel y unos ojoz azules con ojeras gigantes, la verdad no está nada mal, pero esta un poco llenito dado que ama beber y odia el ejercicio, llegamos con el alcohol y ahí inicio todo, empezábamos a hacer apuestas con estupideces mientras veíamos vídeos en youtube, el me pasó un brazo por los hombros y me retó a tomarme un vaso entero de vodka sólo, como ya estaba medio ebrio pensé "no importa" me tomé el vaso y casi le escupo en la cara por que dijo alguna idiotez, luego lo rete a el y lo bebió como si fuera lo más normal, entonces los vídeos que pasaban al azaar mostraba a una chica burlándose de un tipo con perforaciones en las perforaciones.
-Esa mierda si que ha de doler- le dije.
-Pero si las perforaciones no duelen nada, joder.
-Claro que si, una vez me hice una en la nariz y me dolió tanto que me la tuve que quitar.
-Pero que si no duelen nada, yo me he hecho demasiadas y no me han dolido, lo que pasa es que eres un mariqueta que te cagas.
-Cuales varias si solo tienes tres en la oreja?
Y ahí fue donde todo tomo otro rumbo, me miró extraño como pensando en si contarme o no.
-Pues.
Joder tío como te cuento? Que tengo varias.
Ahí abajo.
-En el ombligo?-pregunté haciéndome el tonto.
-No, en el pene.
Cuando lo dije sólo reí como idiota y el igual, entonces sin pensar pregunté.
-Me enseñarías?
-Mi pene?
-Si.
-No se si seria buena idea, que no he follado en un tiempo y.
Sentí como me subía la sangre y se agolpaba tras mis orejas, sólo lo mire y se rio haciendo menos el comentario, entonces lo hizo, lo que creí que no haría, se abrio el pantalón y se sacó el bóxer una hermosa verga circuncidada, que tenía una perforación en la punta y por la parte de abajo varias a un espacio considerado por todo lo largo, no se veía muy grande, tal vez gruesa, pero las perforaciones imponían.
-No te duele al hacerlo?
Se rió
-Y una mierda, siento más que antes al igual que mis parejas.
-Puedo?
-El Que?
Sin esperar respuesta se lo toque con una mano e hice como si examinará las perforaciones más de cerca, el sólo me observaba sin decir nada, pero muy serio, entonces vi por que si seriedad, su miembro creía en mi mano, entonces sin pensármelo me lo llevé a la boca.
-Ostia puta! -Exclamó pero no me alejo.
Sentía la sensación de su piel, pero al subir y bajar mi lengua sentía extraño como las piezas de las perforaciones se movían por mi lengua, el me empujó la cabeza para que entrara toda y sentí la pieza metálica de la punta hasta la garganta que si bien no se sentía mal no sabía cómo se sentía, yo quería algo más, no siempre se ven cosas así, entonces mientras el hacia eso le quite los ,zapatos y el pantalón y bóxer, cuando termine de hacerlo me desvestí tan pronto como pude, el se quitó la camisa y cuando me senté en sus piernas viendo hacia el me tomo de la cara y me miró.
-Estas seguro?-pregunto.
-Todo por ayudar a un amigo.
Se escupió en la mano y me pasó el dedo directo al año y sin temor me metió el dedo, gemí por lo bajo, lo bueno es que el no estaba seguro que si no me la metía en seco, se volvió a chipar los dedos y me metió dos, jugueteaba conmigo mientras yo lo abrazaba, el entonces me hizo un poco hacia atrás, creí se habría arrepentido pero lo que hizo fue meterme los dedos en la boca para ensalivarselos y meterme un dedo más, probe mi propio culo, eso fue interesante, ya que me metió cuatro me dio una nalgada muy fuerte y yo iba a gritar pero su lengua entro en mi boca y no pude emitir sonido, entonces siento frío en el año y luego como me la mete toda de golpe, ah! Ese dolor tan rico, me quería mover pero agarrándome de la cintura me mantuvo e.
Mi lugar, su lengua se enlazaba en la mía, y sus manos bajaron a mis nalgas y recibo dos nalgadas a la vez, esto me hizo levantarme y su verga estaba a punto de salir pero sus manos llegaron a mis caderas y me bajo de golpe, otra vez hasta adentro ahí si logre gemir y el lanzó un sonido gutural como un rugido y sonrió, le gustaba eso.
Entonces me cargo en vilo y se podría decir que me avento boca arriba del sofá, con la codera en mi nuca, se posicionó frente a mi y antes de poder hacer nada mis poemas pasaron por sus hombros y su cara se acercó a mí en un segundo, junto con una embestida falta de piedad, intenté retorcerme pero me sujeto contra el sofá y empezó el mete saca tapandome la boca, en esta posición se sentía lo que quería probar, las piezas daban un masaje intenso al entrar y salir su verga, el placer se hizo presente pero con dolor, dolor por lo brusco y placer por que el lo hacía increíblemente genial, mis gemidos sólo eran audibles por mi nariz, pase mis brazos por su cuello abrazándolo y entonces empezó a embestir con más fuerza, me excite demasiado y atañe su espalda, otro rugido bestial, me mordió la Oreja y aumento, yo me sentía increíblemente sumido en un placer y dolor agónico, no sabía cuál era más fuerte, entonces me la sacó y de golpe me la metió toda, gemí, repitió el movimiento y me la sacó, me decepcione al creer que ya había acabado, cuando salió de mi, sólo sentí dolor y vacío, mi cuerpo pedía más y yo apoyaba a mi cuerpo, pero lo que hizo fue levantarme y ponerme en cuatro en el sofá, se posicionó tras mío y jalandome del pelo me dio tremenda estocada
El gemido fue puro placer, de cierta forma me excitaba esa experiencia, nada de lindos toqueteos o preocupaciones, nada de palabras, el sólo hacia lo que quería hacer, se daba placer dándome placer, me hacía un mete y saca con su miembro, que si bien no era muy largo el plus de las perforaciones le daban más puntos que si fuera una de 23cm con vibrador integrado, siguió bombeandome, hasta que en un momento me puso las manos en la espalda, soltando mi cabello y no entendí como, pero puso un pie en mi espalda, haciendo que lo único al aire fuera mi culo, y así siguio embistiendo, bombeando, y cada tres estocadas me daba una nalgada, uno, dos, tres, nalgada, uno, dos, tres, nalgada, me la estaba pasando en grande, su pie se movió de mi espalda y sin salirse, sólo hizo más presión en su pelvis, como queriendo meter hasta los testículos y todo mi cuerpo se fue pegando al sillón hasta que quede totalmente acostado boca abajo y el sobre mi, me tapó la boca volvió a morder el lóbulo de mi oreja y lo supe, este era el final, su pelvis se movía salvajemente arriba y abajo y yo gritaba prácticamente, me estaba destrozando, sentía como cada bolita de las perforaciones entraba y salía, era increíble, me jalo del pelo para que girará la cara, me planto un beso , con la otra mano me abrazo arañando mi piel y se apretó lo más que pudo contra mi, su pene comenzó a contraerse compulsivamemte y pude sentir con total claridad cada chorro que me iba lanzando dentro, con cada nuevo chorro, se apretaba más y más y era delicioso sentir su peso sobre mi mientras el calor me invadía por dentro, antes de pararse mordió mi espalda y me hizo gritar una última vez.
A la mañana siguiente yo no recordaba más allá del sexo salvaje e increíble, el me comentó todo como si fuera lo más normal del mundo, ya que el es bi, no tenía ningún problema.
-Te he follado, has ido al baño seguro a cagar leche, creo que te has vomitado y al salir me dijiste que te cantará algo de Camela, pero te quedaste dormido, te cogí y lleve a la cama y ya que estábamos en confianza me he acostado a tu lado.
Después de eso el se fue y la verdad no veo el momento en el que vuelva.
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