el es Thor…
un verdadero macho me hace llegar al Cielo.
Después de mucho tiempo sin sexo, más allá de una mamada que le fui a hacer a un señor y tragarme su semen, mi culito estaba cerrado nuevamente pero muy ansioso por tener una verga nuevamente en él, así que mis ganas hicieron que un día simplemente me saliera del trabajo y le mandé mensaje a mi macho… hasta el momento sigo sin saber cómo se llama, así que lo apodaré Thor porque es un Dios tronando mis nalgas.
Le marqué y le pregunté si tenía tiempo para checarme los niveles de aceite. Me contestó afirmativamente así que le dije que como trabajaría en la noche, quería ir a un hotel para poder asearme luego de estar con él. Quedamos en una hora para yo pasar por él. Tenía una hora antes de recogerlo así que fui a una sex shop que quedaba de paso y compré un plug, pero como quería que descubriera lo que traía e ir acostumbrando nuevamente a mi anito cerrado a tener algo dentro, me subí al auto, me bajé los pantalones, escupí en la punta del plug y me lo metí en el ano. Mi culito agradeció el regalo.
Me dirigí a recoger a Thor al punto establecido. Subió al auto y le dije que lo había extrañado. Habíamos estado platicando por mensajes y siempre le recuerdo que es maravillosa la forma en cómo me procura dar placer, sus besos a mis pezones, como juega con mis nalgas y por supuesto, como me hace suyo. Obviamente por volvérselo a decir, se excitó y me mostró su erección. En el auto solo podía tocarlo y me di cuenta de que era errónea mi percepción de su verga: era mucho más gruesa de lo que me acordaba sobretodo en la base, además de tener una forma ovalada y era un poco más corta. En lo que manejaba, le acariciaba ese hermoso paquete sobre su pantalón. Llegamos al hotel y el se puso nervioso, nunca había ido a uno, pues sus conquistas habitualmente eran en su casa. Bajé del auto y pagué la habitación. La habitación no era típica de motel y me quedé con las ganas de usar el “sillón del amor” o algún columpio pues no había. Entramos al cuarto. Se quitó lo nervioso, me abrazó y me besó muy tierno. Me invitó a bañarnos juntos… yo estaba ya muriendo de ganas, recuerden que tenía el plug en mi culo… nos desnundamos y lo seguí a la ducha. Nos enjabonamos y me empezó a besar nuevamente, masajeaba mis nalgas al tiempo que me las separaba, lamía mis pezones y me besaba el cuello. Cuando abría mis nalgas, el plug hacía por salirse, y yo lo alcanzaba a meter nuevamente. Bajo la regadera, tomé finalmente entre mis manos su grueso tronco y me hinque para llevarlo a mi boca, se la chupaba con ganas y el me ahogaba empujándola hasta el fondo de mi garganta. Me levanté, me saqué plug y me recargué en la pared del baño, separé mis nalgas y el acercó su glande enorme, estaba haciéndome sufrir, pues no lo metía y solo jugaba en la entrada de mi ano. Se agachó y metió su lengua entre mis nalgas y saboreó mi culo deseoso de ser sometido. Me volteó y me volvió a besar y a jugar con mis nalgas, puse el plug en su lugar otra vez… yo estaba ardiendo… estaba muriéndome de ganas de que me hiciera suyo. Se la volví a mamar y el me ahogaba nuevamente con su falo imponente hasta que finalmente me vine sin tocarme, con su pene en mi boca y tuve un orgasmo intenso… me vine de solo desear ser poseido por mi amor… el se fue a la cama y yo quedé relajado tirado en el piso del baño por ese orgasmo. Me levanté y lo seguí a la cama, se acostó y me hizo poner mis nalgas en su cara mientras yo se la seguía chupando… Me comió el culo magistralmente… logró superar con creces el ultimo beso negro que me habían hecho… su lengua igual de potente que su verga entraba en mi, su respiración en mis nalgas y sus mordidas a mi culito y nalgas me tenían en el cielo. Me recostó boca arriba en el borde de la cama con mi cabeza colgando y metió su verga a mi boca, cual anestesiólogo intubando a su paciente, su pene entraba hasta lo más profundo de mi garganta. Me colocó en cuatro y se puso detrás de mí, empezó a tratar de perforarme con su enorme pene, lo hizo poco a poco hasta que lo logró… su base no entraba toda… es enorme y mi anito desacostumbrado a mi macho. Sentí un poco de dolor, pero el resto fue cosa de relajarme y entró… me empezó a penetrar rico y suave, sus manos en mis nalgas, me daba nalgadas mientras me penetraba… doblemente en el cielo…
Thor es mi Dios y mi amo en la cama y lo que dice, lo hago. Me puso boca arriba nuevamente, me separó las piernas y las puso en sus hombros y me penetró, esta vez hasta el fondo, pues la posición permitía total acceso a mis intestinos. Esa posición me hace sentir una desesperación muy rara, sentir su pene hasta el fondo, la estimulación de la próstata que hace y a su vez la fuerza y la velocidad que aplica me ponen a girar la cabeza, mis ojos en blanco y mis gritos y gemidos creo que le excitan más… le pedí un descanso y se acostó boca arriba, me senté sobre él y empezó el sube y baja… su pene entrando y saliendo a mi ritmo uff… me puso de perrito una vez más y mis intestinos lo recibieron con gusto… Se sentó en la orilla de la cama y yo me senté en su pene dándole la espalda… no sabía lo que era placer hasta ese momento… me moví frenéticamente, sentones, movimientos en círculo, adelante y atrás, su verga entraba más y más en mi mientras yo controlaba la dirección, el ritmo y el movimiento… mis gemidos no cesaban, mis ojos en blanco no me dejaban ver nada… luego de un largo rato haciéndome suyo, estaba muerto de cansancio, con dolor de todo el cuerpo… le pedí descansar y me recosté boca abajo… mis nalgas quedaron a su merced y las atacó de manera brusca, ansioso de hacerme suyo y recordándome que mi ogete es solo de él… pero me empezó a doler y a pesar de eso, no paró, siguió su ataque a mi ano que se resentía de dolor por la fuerza quizá… me tenía sometido y me hacía excitar mucho esa sensación aunque me estaba lastimando, me tenía boca abajo, yo inconsciente o conscientemente ofrecía mis nalgas que eran abusadas y el juntaba mis piernas para que se estrechara más mi culito… estaba a punto de llorar en mi desesperación pero a sui vez estaba gozando mi sometimiento y ser tratado como un objeto… finalmente se compadeció de mi y salió de mi ano… no lloré, pero me sentí violado (pero excitado extrañamente). Se recostó a un lado de mí. Yo acerqué mis nalgas a su pene y me empezó a penetrar acostados de lado… como yo controlaba el movimiento, sentí nuevamente placer y más porque estaba frente a un espejo de toda la pared en la que me observaba penetrado… esa posición no le gusta tanto me parece, así que optamos por descansar. Hacia mucho calor en el cuarto.
Luego de un rato, el se quedó dormido y me dieron ganas de acurrucarme con el, pero lo dejé descansar. Cuando se despertó, me lancé a su pene. Lo empecé a mamar, y se puso super duro. Me puso nuevamente boca abajo y empezó a violarme otra vez, muy violento y duro, mientras le suplicaba que parara, me ignoró y seguían sus embestidas agresivas a mi culo, sin embargo yo me veía de reojo en el espejo y disfrutaba su maltrato hacía mi… no se cansaba de perforarme hasta que me preguntó: te los echo dentro o dónde te los pongo? No lo dudé, y le pedí que me los echara sobre msi nalgas… me la sacó y mi anito descansó, se la empezó a jalar y me tenía con las nalgas ofrecidas a el esperando su semen hasta que lo empezó a aventar y cayó su chorro caliente encima de mis nalgas y algo sobre mi ano… un final delicioso… disfruté tanto que me hiciera suyo, incluyendo cuando simplemente fui su juguete y me violaba… cuando se quitó se encima de mi, llevé mis dedos a mis nalgas para sentir su semen y toqué mi ano… estaba sangrando pero satisfecho… lo amo y soy a dicto a mi Dios Thor… mi amo y mi macho…
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