El helado Chupi
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Luisor04.
Un helado Chupi
Que tal amigos lectores, me llamo Luis y les saludo desde Guárico – Venezuela, las historia a continuación se sitúa hace ya algunos años, tenía entonces 16 o 17 años con un vecino llamado Jhosep, un chico de 20 años, estatura promedio, ojos claros y cabello corto, su cuerpo en general lucia bien ejercitado pero sin exagerar, esto supongo que por sus constantes juegos de pelotas con los demás vecinos o como le llamamos aquí en Venezuela, Caimaneras (Juego de Béisbol), cosa que hacia todas las tardes.
Mi relación con él era bastante normal, es decir, teníamos un trato cordial y en ocasiones nos sentábamos en la esquina de mi casa a conversar trivialidades y que otras tantas tonterías, sin embargo había ocasiones en las que él me molestaba pero sin extralimitarse, cuando estaba reunido con sus amigos de las caimaneras pues me hacían cierto tipo de comentarios alusivos a mi homosexualidad, palabras que yo procuraba ignorar ya que siempre he tratado de ser discreto y no ando pregonando por todos lados mis preferencias sexuales, en fin manteníamos la distancia en ese sentido, aunque la verdad para mi sus comentarios no pasaban del todo desapercibidos; no obstante también caía en cuenta que solo eran palabras sin fundamento alguno y lo hacía por molestar así que sencillamente me calmaba y anulaba cualquier posibilidad en mi mente.
Jhosep es un chamo de estos alegres y que socializan con todo el mundo, a sus 20 años era normal verlo enamorar a las muchachas del barrio, y andar bromeando por la calle con los demás vecinos, yo solía disfrutar verlo sin camisa, ya que su cuerpo delgado pero hermosamente definido me hacían volar a la imaginación y más aún cuando observaba su entrepierna que denotaba un muy buen paquete, el cual soñaba con ver, oler y más que nada saborear y sentir.
Fue una tarde cualquiera, estaba yo como otras veces sentado en la esquina de mi casa, simplemente observando pasar a la gente, cuando de la nada aparece Jhosep disfrutando de un helado Chupi (así les llaman acá a los helados alargados de varios sabores, creo que en otros lugares les llaman paletas) se sentó a mi lado y luego de saludarnos comenzamos a conversar de la cotidianidad típica de cada uno, de tanto en tanto yo observaba detalladamente como saboreaba el helado y recuerdo claramente tener una erección mientras lo veía, imaginaba mil cosas y supongo que fui bastante indiscreto porque hubo un instante en que me ofreció helado chupi y los solo le mire y luego como dudando le dije no gracias, ese no me gusta.
Sentí vergüenza jajaja, fue para mí realmente incomodo que él pensara que quería helado aunque obviamente por la forma en que lo miraba eso le debió parecer, es entonces cuando él me dice:
Joshep: Ah ok, bueno y como es que le gusta el helado al señorito?!
En un tono algo sarcástico y así como quien no quiere la cosa, le digo
Yo: bueno, me gustan durito, grueso y de chocolate
Jhosep: mmm ok, bueno pero te puedo brindar uno si tú quieres, solo que tienes que chupar bastante para que le saques la cremita…
Su respuesta me sorprendió, y por un instante pensé que me estaba tomando el pelo, aunque luego su expresión cambio y se tornó en una actitud como con cierta tensión sexual y un leve grado de excitación, y completo
Jhosep: estoy cuidando la casa del vecino frente a mi casa, si quieres vamos y allí te lo brindo, que dices? Te aguantas?.
Mis ojos brillaron, mi corazón se aceleró, mis manos se pusieron frías y mis piernas temblaban un poco… estaba muy emocionado, no podía creer la propuesta que me hacía y aun así con actitud incrédula y como para confirmar le digo
Yo: naah vale tú me estas vacilando chamo, deja el peo
Jhosep: no vale de pana, anda vamos y allí te destacas un rato comiéndote un chupi que se te va a gustar.
Yo: mmm… (Sonreía) dale pues, pero en un rato, porque hay mucha gente en la vía y pueden ver que entro a esa casa ajena, tu sabes como es la vaina por aquí con las chepas… nunca falta una.
Jhosep: tranquilo, en media hora te acercas, yo voy a estar pendiente y vaina para hacer una señita para que entres y listo!
Yo: fino pues, voy en media hora
Antes de retirarse de mi lado, me dio una palmada en mi hombro izquierdo y me guiño un ojo, recuerdo perfectamente su sonrisa malévola al saber que había conseguido quien le hiciera el favor, estaba muy pero muy excitado y nervioso, me tome un momento como para aclarar las ideas y de una entre rápido a la casa en dirección al baño para darme una ducha y estar lo más limpio que pudiese para Jhosep, (aunque acostumbro ser muy aseado, pero por si acaso más vale prevenir que lamentar) me coloque un short, una franela sencilla, un poco de colonia pero sin exagerar, me lave los dientes y listo, los minutos más largos de mi vida! Jejeje fue angustiante esperar pero luego del lapso estipulado Salí de la casa y me dirigí a la del vecino que no era muy lejos que se diga de la mía y aguarde a que jhosep saliera y me hiciera la señal para entrar….
Pasaron unos minutos y veo que abre la puerta, asoma medio cuerpo, mira a ambos lados y me hace gesto con su mano para que entre… mis piernas temblaban y por un instante no me respondían hasta que logre calmarme y caminar rápidamente hacia él, mi corazón latía fuerte en todo momento y mi respiración era fuerte y rápida, de verdad estaba muy emocionado y excitado.
Una vez dentro, me percate que estaba en toalla, recién salía del baño, olía a jabón, por su piel aun escurrían gotas de agua, se veía realmente atractivo y pensé: – Verga, este chamo si esta bueno!! (jajaja) luego de escanearlo de manera fugaz, no sabía que decir y solo se me ocurrió pedir un vaso con agua.
El me miro, sonrió un poco y me dijo: – como no, ya te lo doy… me senté en sofá que estaba en la sala y se dirigió a la cocina y mientras lo hacía pude seguir con mi escaneo de su divina anatomía, su espalda blanca y con una ligera capa de vellos que descendían hacia sus nalgas, la cuales se notaban duras, levantaditas y pomposas, y algo que realmente me gusta de un hombre, sus piernas relativamente gruesas y peluditas (no se porque, pero eso me encanta) Diossss, estaba a mil, en todo momento estuve respirando de forma acelerada y más cuando al regresar con el vaso de agua me doy cuenta de la señora erección que traía bajo la toalla, manito por dios, se veía un guevo de buen tamaño, lo cual me hizo duda un poco, pero ya estaba allí y lo quería… él se percató, y al aproximarse pícaramente me dijo:
Jhosep: quieres el vaso con agua o el chupi? Esto ultimo tomando con su otra mano su miembro y moviéndolo de forma provocativa pero sin descubrir la toalla.
Yo:(reía nerviosamente) dame el agua pero tranquilo que no voy a pelar el chupi!
Luego de beber el agua, me tomo de la mano y me llevo a uno de los cuartos, donde me sente en la cama y el procedió a encender el TV como para hacer algo de ruido pero sinabusar del volumen del aparato, a lo que yo le dije:
Yo: y eso? Vamos a ver TV?
Jhosep: no vale, es para que haya algo de bulla por si pasa alguien por la calle, tú sabes para que sepan que hay gente en la casa… tú lo que vas a ver es guevo! Me decía sonriendo de forma picara mientras acomodaba las almohadas y corría las cortinas de la ventana
Yo: ah ok, pensé jejeje… y no te da pena que te vea desnudo? Le dije como por bromear un poco.
Jhosep: no, y a ti…
Yo: pues la verdad si, y más contigo, ósea no tenemos este tipo de confianza chamo…
Jhosep: soltó una fuerte carcajada… y continuo diciendo: pero y porque pues? Además la confianza ya la estamos creando, ahora si te da pena te puedes tapar tranquilo que yo poco a poco te la quito.
Ustedes pensaran que mi pregunta fue realmente tonta, y si, la verdad lo fue, pero era producto de la emoción y no se me ocurría que otra cosa decir además del hecho de que en realidad si sentía pena de desnudarme allí para el…
Yo: chamo si no te importa, voy a cubrirme los ojos y así tal vez no me de tanta pena pero no me voy a desnudar del todo
Jhosep: me miro un poco incrédulo, pero luego me dijo: dale no hay rollo, si estas más cómodo así no tengo lio
Agradecí su gentileza y me alcanzo un especie de tira o banda de tela que me sirvió perfectamente para tapar mis ojos…Me la coloque, y luego me quite los shorts, supongo que el noto mi gran erección pero yo rápidamente me senté a la orilla de la cama y me limité a esperar… oía claramente mi respiración acelerada y los latidos de mi corazón como si fuese a salir en cualquier momento…
Jhosep: tranquilo rey, la vamos a pasar chévere – me dijo mientras pasaba su mano por mi mejilla par luego sentir un suave pero húmedo beso – voy a quitarme la toalla
Yo: aja – le dije tímidamente.
Jhosep: listo, ya puedes venir por tu heladito chupi.
Estire mi mano y se aproximó, sentí su piel tersa, un poco húmeda pero deliciosamente velluda en sus muslos… acaricie un poco, mis manos temblaban.
seguí explorando su cuerpo como tratando de encontrar algo, detallaba sus líneas corporales, mi mente guardaba cada roce como si fuese un mapa, acerque un poco mi rostro y alcance el área de su ombligo, fue un momento único el que viví en ese instante, mis manos subieron por detrás de sus muslos hasta llegar a sus nalgas, las cuales apreté con fuerza pero sin ser brusco una y otra vez mientras olía y besaba con delicadeza todo su abdomen hasta quedarme sin aire, lo abrase fuerte, sentí su hombría, su pene lo sentí grande, grueso, caliente, olía a limpio, olía a hombre…
Lo abrace por algunos minutos, no quería salir de esa posición pues disfrutaba sentirlo así de cerca, el comenzó a acariciar mis brazos, mi cuello, y a jugar con mi cabello, para luego decirme: -No vas a probar tu chupi?- se agacho hasta llegar a mis labios y me dio un beso suave y húmedo como el anterior, el cual recibí con ternura… -anda, pruébalo- me dijo.
Su mano se dirigió a su miembro, para luego moverlo en dirección a mi boca, al entrar en contacto con su glande sentí algo húmedo y viscoso, me percate era precum, pase la lengua para saborear su excitación, retire mi mano derecha de su nalga para tomar mi “chupi” y así descubrir su sabor, pero antes de eso opte por olerlo, acariciarlo, presionarlo un poco mientras le masturbaba, rosarlo por mis labios, mi cara, mi cuello, yo estaba en un dejavu absoluto, no pensaba nada, solo trataba de controlar mi emoción y disfrutar el momento, seguía acariciando su masculinidad, sus bolas era grandes y le colgaban un poco, las bese, para luego enterrar mi cara en su vello púbico y oler como si de una droga se tratase (aunque nunca lo he hecho, lo menciono para tener una referencia a la expresión que adoptan los personajes cuando lo hacen en una película) era maravilloso su olor, estaba limpio pero podía percibir un ligero aroma a orines y sudor que volvía realmente loco y mi pene me lo recordaba, mi bóxer estaba todo mojado.
Estuve en eso por algunos minutos, y su guevo realmente estaba muy erecto, lo sentía caliente y emanaba mucho precum, lo lamia sin desperdiciar nada y el comenzó a moverse sutilmente como si me estuviese penetrando, yo le seguía el juego con mi lengua… hasta que me pidió que se lo mamara…
Humedeci mis labios, saboreando su néctar, e introduje un poco su glande.
–aaaaah- le oí gemir.
– Trágatelo todo – me indico.
Abrí más mi boca y engullí todo lo que pude para luego sacarlo no sin succionarlo con cierta rudeza.
– que rico, dale no te pares – decía.
Comencé entonces a disfrutar de mi chupi en toda su extensión, con mi lengua recorría todo su guevo y me enfocaba mucho en su glande que sentía grande y puntiagudo, él comenzó un mete y saca en mi boca que yo trataba de recibir lo mejor que podía, de pronto el tomo la banda que tenía puesta en mis ojos y la hizo a un lado para luego decirme – Ve lo que te estas comiendo_ sonrió con cierta malicia.
Me sorprendí realmente al ver la dimensión de su pene mis manos no me habían mentido era realmente grande y grueso, curvado un poco hacia la izquierda, era hermoso.
– que rico chupi- le dije.
Le estuve haciendo sexo oral por varios minutos más, realmente me gustaba darle placer y saborear sus babas, alternaba entre su guevo y sus bolas, las besaba las olía, las lamia, me provocaba de todo con ellas y seguía mamando lo mejor que podía.
Hasta que me indico que se iba a venir… yo para ese momento ya estaba todo mojado en mi bóxer y sin decir nada le hice saber que quería su leche en mi boca, él lo comprendió y me dijo – ok, mámamelo bien mamao pues- mientras tanto con cierto disimulo tome una sabana para cubrir mi entrepierna y comenzar a masturbarme al ritmo que le daba sexo oral a Jhosep… mame, mame, y mame hasta que sentí su cuerpo temblar y sus piernas se tensaron y una explosión de semen invadió mi boca, algunos espasmos fueron a dar a mi garganta y me ahogue un poco y otros salieron por las comisuras de mis boca, yo también había acabado…mientras su pene volvía a su estado normal termine de limpiarlo sin dejar nada… al terminar se separó de mí, me vio y comenzó a sonreír… desordeno un poco mi cabello y me dijo – mamas guevo sabroso vale – yo sonreí y le dije: – tremendo chupi, estaba muy sabroso – me respondió: – cuando quieras papa, ya sabe donde encontrarme –
Allí me vestí, él se quedó recostado en la cama, fui al baño, me lave, arregle un poco y Salí, él seguía en la cama, desnudo con su guevo en reposo, se veía hermoso… – ya me voy- le dije.
Rápidamente se incorporó, me tomo del brazo para atraerme hacia él y me dijo: – quédate un rato mas, quiero probar tu culo- le dije: – en otro momento Jhosep, Salí sin avisar de la casa y bueno antes de que pregunten es mejor que me vaya rápido, ya tendremos tiempo, mientras acariciaba su rostro y le plantaba un besito en sus labios – con caras de pocos ánimos me dijo: dale pues – y palmeo mis nalgas.
Se colocó la toalla y me acompaño a la puerta y antes de abrir me abrazo por detrás y sentí su pene en mis nalgas, para finalmente decirme al oído: – no te tardes mucho en venir por tu chupi- y comenzó a reír de forma irónica.
Por supuesto tuvimos otros encuentros, y fueron realmente emocionantes para mí, el sexo con él es lo máximo para mi.
lástima que hace algún tiempo que no sé nada de él pues se casó y tiene familia, pero espero que en algún momento más temprano que tarde me lo encuentre y quien quita podamos recordar viejas historias.
Saludos a todos y gracias por leer mi relato, espero lo hayan disfrutado.
Lui$
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