“EL MENDIGO” (PARTE 5)

Ambos hombres voltearon a ver al pequeño niño y ahí sus miradas se clavaron directamente en su pequeño traserito..

Carlitos sostenía ambos pies en el aire, pues estaba intentando meter su pie derecho en su boca, así que en ese instante, ambos vieron directamente hacia aquel culito rojo y abierto, el cual empezaba a cerrarse y dejaba salir la leche espesa que William había depositado dentro.

En ese momento, William corrió rápidamente a cargar al bebe e inmediatamente empezó a vestirlo, luego, se le quedo viendo a Nicolás y un poco nervioso le pregunto.

William: ¿y vas a revisar al niño? (volviendo hacer la misma pregunta)

Nicolás: “he, nooo” “perdona” “es que me quede pensando en algo”

William: ¿en qué? “digo” ¿si se puede saber?

Nicolas: ¡en nada, solo quiero darte esto! (entregando una nota)

William: ¿para mí?

Nicolás: ¡sí, es para ti! ¡y la verdad te va interesar mucho!

William: ¿y qué es? (dejándola en la gaveta del buro)

Nicolás: “pues averígualo” ¡bueno, ahora me voy porque ya vi que Carlitos está muy bien!

William: ¡si está bien y muchas gracias por preocuparte por el niño!

Nicolás: ¡no te preocupes y recuerda que aún tenemos unas copas pendientes! (estrechando su mano y con una sonrisa de picardía)

William: ¡claro, prometo que será pronto! ¡te llamo!

Aquel hombre se despidió de Alicia y luego salió de aquella casa rumbo a su trabajo, entonces, un minuto después, William bajó cargando al bebe Carlitos como si nada hubiera sucedido.

William le comento a su esposa, que todo estaba bien con Carlitos, así que ella se quedó muy tranquila, al saber que su primo había vuelto a revisar al pequeño niño y que este dijera, que todo va muy bien con el tratamiento.

El resto del día siguió normal para todos, cada uno hizo sus actividades correspondientes y en la noche, cuando William se encontraba viendo un programa de televisión, el recordó que Nicolás le había entregado una nota, así que con mucho cuidado abrió la gaveta del buro y sin despertar a su esposa bajo a la sala a inspeccionar su contenido.

Al desdoblar aquel papel, había una dirección de Skype, en él se le indicaba a William que se conectara a una hora específica, ya que una persona estaba interesada en conversar con él por ese medio; William estaba un poco sorprendido, entonces observo su celular y noto que aún faltaba 30 minutos para la hora que se le indicaba.

William estuvo pensando que hacer por más de 20 minutos, luego se puso de pie y fue donde su esposa, la cual vio que dormía profundamente; en ese momento, William tomo su laptop y de nueva cuenta bajo a la sala, donde, sin perder tiempo se conectó a Skype y ahí, inmediatamente agrego la cuenta que estaba escrita.

En pocos segundos, ambos hicieron contacto online, así que rápidamente, en la pantalla se mostró la siguiente conversación. ¡hola, soy Milkmen y me da mucho gusto ponerme en contacto contigo!

William: ¡hola Milkmen, soy William! ¡y la verdad! ¿me gustaría saber el motivo de esta conversación?

Milkmen: ¡tranquilo y no comas ansias! ¡pronto te diré de que se trata!

William: “sí, pero me da curiosidad saber de una vez”

Milkmen: ¡te diré, pero primero contesta las siguientes preguntas!

William: “ok, pregunta”

Milkmen: ¿edad?

William: “26 años”

Milkmen: ¿estado civil?

William: “casado”

Milkmen: ¿estura?

William: “1.69”

Milkmen: ¿hijos?

William: “No tengo hijos aun”

Milkmen: ¡ok, eso es todo por hoy!

William: “oye” ¿pero no me has dicho porque estas interesado en hablar conmigo? ¿de qué se trata todo esto?

Milkmen: ¡no te preocupes, esto no es para nada malo! ¡al contrario presiento que tú y yo llegaremos hacer muy buenos amigos!

William: ¿pero no entiendo? “dime de que se trata o ya no volveré hablar contigo”

Milkmen: ¡yo creo que si volverás a conversar conmigo! ¡observa mi cámara! (haciendo una videollamada)

Cuando la cámara se encendió, en la pantalla apareció un bulto tapado con una sábana, ese pequeño bulto estaba sobre aquel hombre musculoso, el cual no mostraba su rostro; en ese momento, la cámara hizo un acercamiento y luego William pregunto.

William: ¿Qué es eso? ¿no entiendo de que se trata?

Milkmen: ¡pues si quieres saber de qué se trata, espero que te conectes en dos días a esta misma hora!

En ese instante la videollamada rápidamente terminó y aquel hombre extraño se desconectó de Skype. William quedo muy sorprendido por lo que había ocurrido y hasta este momento, no entendía la razón de esa conversación.

Dos días después, la curiosidad hizo inquietar un poco a William, así que, siendo las 12 de la noche, encendió su computadora y se conectó nuevamente a Skype, pero estuvo esperando cerca de una hora y aquel hombre extraño nunca se conectó.

De alguna manera, el gusanito de la duda había causado efecto en William, así que en los días que no trabajaba como velador, se la pasaba conectado a Skype, pues estaba esperando a que aquel hombre se conectara y le aclarar ciertas dudas.

Había pasado una semana y William creyó, que ese hombre no se conectaría jamás, así que por la tarde, hizo un nuevo intento y se conectó a Skype, al entrar, encontró un mensaje de texto de Milkmen, el cual decía “que se conectara a las 12 de la noche, porque habría una gran sorpresa”

Esa noche, William espero a que su esposa estuviera profundamente dormida, luego bajo a la sala con su computadora y prendió una lampara para no estar en completa oscuridad, en ese momento inicio sesión en Skype y espero a que aquel hombre se conectara, pues esa noche, el pondria fin a todo ese juego tan sospechoso.

Milkmen se conectó a Skype a las 12 de la noche e inmediatamente indico que harían una video llamada, en ese instante, William acepto rápidamente, pues, aunque esto le parecía algo raro, también tenía curiosidad por saber quién era ese hombre o lo que estaba haciendo.

En la pantalla inmediatamente se observó una habitación oscura y frente de la cámara había un pequeño bulto tapado con una sábana blanca; en ese momento ninguno de los dos hombres hablo o escribió nada, entonces William, solo alcanzaba a observar cómo ese pequeño bulto se movía hacia arriba y hacia abajo durante varios minutos.

Después la cámara se puso negra y Milkmen escribió “espera unos segundos y no te vayas a ir, ahora si contestare todas tus preguntas” en ese instante, William se quedó esperándolo y tras varios minutos después, la cámara se volvió a encender, pero esta vez el panorama fue diferente, pues dejaba ver una habitación completamente iluminada.

Unos segundos después, la cara del Milkmen apareció frente a la cámara, él tenía puesta una gorra roja y un antifaz romano, en ese momento, aquel hombre se alejó de la cámara, dando la espalda y dejo ver su musculoso cuerpo totalmente desnudo.

Milkmen se agacho un poco, para ponerse una trusa color roja, unos segundos después, se sentó frente a la cámara con las piernas abiertas y tomo su teclado inalámbrico para escribir.

William no perdió detalle de aquel enorme cuerpo con poco pelo, el cual debió ser esculpido en un gimnasio; entonces, más rápido que flash, la mirada de William escaneo la entrepierna de ese hombre, donde logro percatarse de que tenía una gran erección, la cual era difícil ocultarla teniendo las piernas abiertas.

Milkmen: ¡ahora tienes derecho hacerme 3 preguntas! ¡pregunta lo que quieras y te responderé! (escribiendo con el teclado)

William: “sí, claro” (escaneando de arriba hacia abajo a ese hombre)

Milkmen: ¿sigo esperando?

William: ¿Por qué estas interesando en conversar conmigo?

Milkmen: ¡esa pregunta te la responderé al final de esta conversación!

William: “ok” “entonces” ¿Qué edad tienes?

Milkmen: ¿es enserio? “ok” “30 años” ¡ahora dime tu última pregunta!

William: ¿se vale lo que sea verdad?

Milkmen: ¡si claro, lo que sea!

William: “eh, ok” ¿Qué era ese bulto que tapabas con la sábana blanca?

Milkmen: ¿enserio quieres saber?

William: ¡sí! “dijiste que podía preguntar lo que fuera”

Milkmen: ¡ok, te enseñare! “espera y ya verás”

10 minutos después, la cámara nuevamente se volvió a encender y esta vez, enfocaba directamente al rostro de aquel hombre, el cual poco a poco fue quitando el zoom y ahí, empezó a aparecer aquel pequeño bulto que estaba sobre él, en ese instante, aquel hombre dejo ver sus hermosos dientes blancos e inmediatamente aparto una parte de la sabana.

Aquel bulto se trata nada más y nada menos, que de un pequeño niño rubio de 2 años; él cual estaba plácidamente dormidito y succionando su pulgar, como si se tratara de su biberón, ese instante, Milkmen volvió a sonreír e inmediatamente el cuerpo de ese niño empezó a moverse acompasado.

William no entendía lo que estaba pasando, pero tampoco escribía o decía algo al respecto, así que en ese momento, observo los ojos verdes de aquel hombre enmascarado, el cual, con rostro muy serio le escribió el siguiente comentario.

Milkmen: “tu tercera pregunta acaba de ser contestada”

William: “ok, muchas gracias” “pero no me has respondido la primera”

Milkmen: ¡te dije que al final de esta conversación!

William: “está bien, entiendo”

Milkmen: “ahora” ¿me dejarías hacerte una sola pregunta a ti?

William: “claro, pregunta” (un poco nervioso)

Milkmen: ¿quieres ver lo que le estoy haciendo? “contesta, sí o no”

William: ¡sí!

Milkmen: ¡ok, entonces aquí voy!

Aquel hombre tomo el control de su videocámara digital y empezó a disminuir aún más el zoom, en ese momento, William contemplo otro panorama de aquella habitación, pues ahora Milkmen, estaba semi sentado apoyándose en la cabecera de su cama y sobre él aún seguía, aquel niño dormidito, el cual continuaba tapado con la sabana.

Cuando ambos cuerpos se vieron completamente en la pantalla, Milkmen lentamente fue retirando la sabana, hasta grado de destapar completamente sus cuerpos; en ese instante, a William se le abrieron enormemente los ojos, pues noto como aquellas dos personas estaban completamente desnudas.

William observo detenidamente al pequeño niño, el cual se encontraba sobre Milkmen; entonces, al estar profundamente dormido, su espalda se apoyaba en el estómago de ese hombre, en ese momento, William continúo observando y noto que sus pequeñas piernitas estaban en medio de esas enormes piernas con pelos.

Dibujando una sonrisa de picardía en su rostro, Milkmen sostuvo cada pierna del menor en el aire y  para que el espectador contemplara lo que realmente estaba haciendo con ese hermoso niño; en ese instante, William no pudo evitar abrir la boca por la impresión, pues ante su pantalla estaba sucediendo algo realmente extraordinario.

William no podía creer lo que estaba pasando del otro lado de la pantalla, pues aquel gran hombre, tenía una pequeña verga de hule completamente enterrada en ese pequeño culito infantil, así que en ese momento, William se quedó mudo e hipnotizado por ese acontecimiento que estaba sucediendo frente a su pantalla.

Acto seguido, aquel hombre musculoso comenzó a mover el consolador y entonces, aquella verga se empezó a deslizar suavemente dentro y fuera de ese culito. William entendía lo que estaba sucediendo, pero no podía preguntar ni escribir una sola palabra, pues aún no terminaba de salir de su enorme asombro.

Minutos después, aquel hombre enmascarado volvió a sonreír con lujuria y apoyó los pies del hermoso niño a cada lado de su pelvis, luego tomo su teclado inalámbrico y escribió lo siguiente.

Milkmen: ¿estas listo para saber la respuesta de tu primera pregunta?

William: ¡claro que sí! ¡estoy listo! (nervioso e inquieto)

Milkmen: “la razón por la cual te busque” ¡es porque ya me contaron que estas entrenando a un bebe para esto! (moviendo su cintura y cogiendo al niño)

William: “noooooo, eso no es cierto” ¿Quién te dijo? (tratando de mentir)

Milkmen: “quien me haya dicho o la forma en la que me entere es lo de menos” pero ¡no temas en decirlo hombre, si a los dos nos gusta lo mismo! 

William: “no amigo, eso no va conmigo” “no me gustan los niños” (tratando de mentir)

Milkmen: ¡no digas que no te gustan! ¡Por qué en este instante, voy averiguar si es cierto! ¡haber, ponte de pie! (con su cara seria)

William dudo por un segundo, pero se puso de pie, luego coloco sus manos sobre su entrepierna y entonces, Milkmen le dio la orden de que se descubriera, en ese momento, William no le quedó de otra, que colocar sus manos en su cintura.

En ese instante, Milkmen sonrió con picardía, pues de inmediato noto, la tremenda erección que William tenía y que además, la punta de esa verga se hacía notoria, gracias a la humedad de aquel abundante líquido seminal que transparentaba la tela de su trusa blanca.

Milkmen: ¡vez que si tenía razón! ¡sí te gustan los nenes! (escribiendo)

William: ¡bueno, es que la verdad, es muy morboso lo que estoy viendo!

Milkmen: ¿te gusta lo que vez? (cogiendo al niño)

William: “la verdad” ¡siiiii y mucho!

Milkmen: ¡si quieres te presto a mi putito, pero será nuestro secreto!

William: ¿enserio? (con cara de felicidad)

Milkmen: ¡claro, pero a cambio; tú también tendrás que compartirme a tu bebito!

William: “pero no es mío” ¡además no creo que le entré esa enorme verga que tienes! ¡yo apenas le pude meter la cabecita!

Milkmen: ¡yo te enseñare y después gozaras mucho con tu bebe!

William: “claro” ¡seguiré tus consejos mi amigo!

Milkmen: ¡perfecto, espero que me muestres por Skype como lo vas a ir abriendo!

William: ¡claro! ¡pues necesitare de tu ayuda para no lastimarlo, ya que tú tienes experiencia en esto!

Milkmen: “me parece excelente” ¡así yo también te muestro como preparo el culito de mi nene! ¿te parece?

William: ¡eso sería genial! ¡intercambiemos números para avisarte cuando este solo con él bebe!

Milkmen: ¡perfecto, espero tu mensaje entonces! ¡y ahora te tengo que dejar! ¡porque como veras, me voy a coger a este niño!

William: ¡noooo, no te vayas! ¡déjame seguir viendo!

Milkmen: “ok” ¡pero solo será un momento y quitare la cámara!

Al decir esto, aquel hombre volvió a sujetar las piernitas de ese pequeño niño y mostro en la pantalla su enorme y gruesa verga, la cual fue deslizando la punta muy lentamente, dentro de ese diminuto agujerito, luego Milkmen fue retirando muy despacio su enorme verga y volvió a meter la cabeza completamente dentro de ese pequeño niño.

Este movimiento lo hizo un par de veces más, luego la trasmisión terminó, William no podía creer lo que acaba de ver frente a su pantalla y en ese momento se apretó su dura verga, pues, se había excitado viendo aquel magnifico panorama de la videollamada.

En ese instante, William deslizo su trusa blanca hasta sus tobillos e inmediatamente empezó a masturbarse, pues estaba completamente excitado; así que en ese momento, dejo caer una buena cantidad de saliva en su mano y lubrico muy bien toda la longitud de su dura verga.

William cerro los ojos y su mano empezó a deslizarse suavemente sobre dura verga, la cual expulsaba líquido pre seminal y se mezclaba con su saliva haciendo más satisfactoria la masturbación.

Con las imágenes que su cerebro acaba de guardar, el continúo masturbándose placenteramente y ahora su mano derecha había aumentado la velocidad, por lo cual, se deslizaba rápidamente por aquella dura verga y provocaba un sonido tan peculiar y excitante.

10 minutos después, William abrió más las piernas y gimió leve “aaaaaaaaaahhhhhhhh” “aaaaaaaaaaaahhhhhhhhh” en ese instante, su verga empezó a expulsar varios chorros de leche espesa, los cuales fueron a dar directamente en su pecho y estómago.

William se recostó por unos minutos en el sillón, luego respiro profundamente, pues ahora su cuerpo, ya se había repuesto de tan rica autocomplacencia; en ese momento, abrió los ojos y observo la gran cantidad de leche que tenía sobre él, así que dijo en vos alta.

¡Que desperdicio, pero yo creo una ración de leche desaprovechada no le hará falta a Carlitos, además de ahora en adelante… también comerá mi verga por el culito, para que crezca muy grandote y fuertototote! “jajajajaja”

En ese momento, William se levantó del sillón y camino desnudo hacia la cocina, tomo unas servilletas y se limpió todo el semen de su cuerpo, después volvió a la sala para apagar la computadora.

William recogió su trusa del piso y sonrió con picardía, se apretó fuerte su verga morcillona y se propuso que…

 

¡Tenia que clavar completamente su verga en el culito de Carlitos!

 

«saludos de su amigo @Angelblacks (telegram) y les dejo este relato para que disfruten de su noche buena»

 

CONTINUARA…