EL NENE DEL ESTACIONAMIENTO PART 4
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por angelblack.
Me despedí de todos saliendo apresurado de aquel lugar, rápidamente llegue al parque donde había quedado en recoger al pequeño Mario, luego de dar un par de vueltas por todo el parque no pude verlo, me detuve un instante viendo al parque para poder localizarlo, aparecieron 3 niños casi de la misma edad y entre ellos estaba Mario.
Me acerque lo más que pude y con un fuerte silbido hice señas de que se acercaran, los 3 niños corrieron de inmediato hacia mí, Mario al verme empezó a reírse en cambio los otros niños de inmediato me ofrecieron su mercancía ¿nos compra unos dulces señor?
Ante un “no” por respuesta, saque algo de dinero dándoles unas monedas a cada uno, menos a Mario; a él le dije que si quería dinero lo esperaba en la siguiente calle, los otros niños se fueron de inmediato, Mario caminaba en la misma dirección que yo y podía verlo acercarse por el retrovisor.
Abrí la puerta del acompañante para que él se subiera, luego conduje buscando un lugar seguro, así que pregunte “cuéntame” ¿y cómo fue que volviste a ver a Rafael? Si él te había dicho que ya no volvieras…… el pequeño siguió contándome lo que paso después…
La verdad es que el pequeño no entendía lo que había sucedido ese día, a sus cortos 6 años de edad no sabía lo que aquel hombre le había hecho, sintió mucho miedo al sentir que no podía respirar y por primera vez se encontró con el cuerpo de un adulto completamente desnudo.
¡Así que la curiosidad hizo que volviera a regresar el día siguiente!.
A las 7de la mañana el pequeño nuevamente tocaba a la puerta de Rafael, este al escuchar fue a ver quiera la persona que tocaba…… al abrir…….
Mario: ¡buenos días señor!
Rafael: ¿Qué haces aquí? ¿te dije ayer que no vinieras más? ¿Qué quieres?
Mario: hoy no vine a vender nada señor….
¡solo vine a pedirle que me dé más yogurt!
Rafael: ya no tengo yogurt… espera te doy dinero y vas a la tienda a comprarlo…
Mario: ¡¡¡¡¡gracias señor!!!!!
Rafael cerró la puerta y fue por el dinero, cuando regreso encontró dentro al pequeño (con una pequeña sonrisa)
Rafael: ¿te dije que me esperaras afuera?
Mario: quise entrar a ver jejejeje
Rafael: ten dinero….
¿y ya no vuelvas más por aquí? ¿Entiendes?
Mario: (asintió con la cabeza), luego pregunto ¿puedo venir mañana señor?
Rafael se agacho para estar a la altura del pequeño, lo tomo de los hombros y viéndole a los ojos le dijo….
Mira pequeño, no puedes venir aquí siempre, soy un adulto y no es correcto que estés aquí… sé que no entiendes pero no quiero tener problemas….
Poniéndose de pie le Indico el camino hacia la puerta… El pequeño agradecido por las monedas le dio un fuerte abrazo sujetándose de su cintura, la cara del pequeño dio sobre el abdomen desnudo de Rafael, quien puso sus manos sobre la espalda del pequeño correspondiendo al abrazo; Unos segundos después el pequeño hizo algo que dejo a Rafael paralizado….
Rafael sintió la boca caliente del pequeño en su miembro, su pene se había salido por la abertura de adelante del bóxer flojo a cuadros que tenía puesto, el pequeño al acordase lo sucedido el día anterior, abrió la boca succionando gran parte de la verga de aquel hombre, quien cerró los ojos al sentir esa rica sensación.
El pequeño no dejo de succionar hasta tener todo ese pedazo de carne aun flácido dentro de su boca, pero poco a poco tuvo que ir retirándose pues en cuestión de segundos se puso dura y más gruesa, se quedó quieto un instante saboreando aquel pedazo de carne.
Rafael no tuvo otra opción que colocar sus manos sobre la cabeza del pequeño, para indicarle los movimientos que debía seguir, el pequeño abría la boca más grande para tratar de meter un poco cada vez más, en ocasiones Rafael hacia el intento de apartarse ya que sentía los dientes del pequeño.
Poco a poco Rafael fue retirando al pequeño de su dura verga, tomo de la mano al pequeño llevándola al sillón de la sala, se quitó el bóxer quedando completamente desnudo y se acostó en el sillón; agarrando su verga, llamo al pequeño para que vuelva a llevársela a la boca.
El pequeño se subió tímidamente al sillón, poco a poco se fue acercando a la entrepierna de Rafael, ahora no tenía vendas en los ojos, se quedó observando la desnudes de aquel hombre, sus grandes bolas y ese pedazo de carne dura que estaba cubierta por una gran cantidad de pelos.
Abrió la boca y lentamente fue tragando lo que pudo de esa gruesa verga, guidado por las manos de Rafael se dio cuenta lo que debía hacer….
Esta vez no había prisas, que más daba si Rafael llegaba un poco tarde al trabajo, así que prefirió disfrutar del grato placer que el pequeño le estaba proporcionando.
Retiro al pequeño de su verga sentándose en el sillón, luego le dijo al niño que se quitara toda la ropa quien de inmediato no quiso, pero Rafael el ofreció comprarle mucho yogurt y ante esta nueva propuesta el pequeño se fue despojando de toda sus prendas hasta quedar completamente desnudo.
Lo acomodo en el sillón en posición de perrito, colocándose el detrás del pequeño, quien no entendía lo que sucedía, así que giro la cabeza y pregunto….
Mario: ¿Qué va hacer?
Rafael: nada, pero te voy a coger pequeño….
jajajaja
Mario: ¿Qué es coger?
Rafael: ¿no sabes qué es?
Mario: “noooo” ¿Qué es?
Rafael: no me digas que no te han metido verga por aquí? (frotando su verga en su agujerito)
Mario: no, nunca….
¿Qué es verga?
Rafael: pues yo también nunca me he chingado un culito, así que nos vamos a estrenar los dos….
Jajajajaja….
El pequeño sentía raro que esa cosa dura pero suave, estuviera frotando su pequeño agujerito, luego sintió como su agujerito se humedecía con una especie de líquido, sentía muy bonito cuando la punta de aquel pedazo de carne empujaba suavemente hacia adentro intentando entrar sin lograrlo; esa situación la estaba disfrutando el pequeño, ese rico masaje en su cerrado agujerito, su diminuto pene estaba totalmente erecto, nunca había disfrutado de esa rara experiencia.
Sin previo aviso, Rafael dio una fuerte estocada, enterrando la cabeza de su verga dentro del aun virgen agujerito; el pequeño dio un grito de dolor e intento zafarse….
Rafael tapo la boca del pequeño para que sus quejidos no sean escuchados por alguien….
El pequeño intentaba cerrar su esfínter pero le era difícil, pues parte de aquella verga estaba dentro.
Ante el forcejeo por zafarse, Rafael no le quedó más opción que dejar caer su cuerpo aplastando al pequeño para inmovilizarlo, el dolor fue cediendo poco a poco mientras Rafael calmaba al pequeño con palabras.
Cuando el pequeño dejo de quejarse, Rafael empezó a moverse muy despacio, sacando la única parte de su verga que había logrado meter, el pequeño al sentirse aliviado apretó de inmediato el trasero, para impedir que volviera a entrar.
Pero Rafael no dio marcha atrás, empezó a mover su cintura logrando meter solo la punta de su verga, y Mario hacia el mayor esfuerzo apretando su esfínter anal para no dar paso más de aquellos 18 cm de carne.
El no quiso forzar al pequeño, pues sabía que si seguía podía lastimarlo.
De alguna manera sentía un gran placer al tener aprisionado su verga con aquellas pequeñas nalguitas, sintiendo el rose de ellas con cada movimiento….
Mario sintió que el dolor desapareció pero no dejo de apretar su esfínter, ahora sentía algo nuevo, algo rico cuando esa verga rosaba su culito intentando entrar cada vez más dentro e intentaba relajarse, pero se acordaba del dolor obtenido hace un momento que volvía a ponerse tenso.
Por su parte Rafael estaba disfrutando de aquella rica sensación, era la primera vez que intentaba penetrar un culito en su vida y le parecía muy placentero esta situación por lo termino quedándose quieto, el pequeño Mario sintió como ese gran pedazo de carne se movía fuerte derramando una gran cantidad de líquido, una parte logro quedarse en su interior y lo demás se salió por los bordes escurriendo por sus diminutos testículos.
Rafael: aaaaaahhhhhh muy rico peque…
Mario: señor, ¿se hizo pipi?
Rafael: no pequeño, no me hice pipi….
Jajajajajaja
Así termino el acto sexual de Rafael con aquel pequeño, se levantó poco a poco, tomo su bóxer para limpiarse la verga y luego limpio al pequeño quitando el resto de leche que no pudo entrar en su interior.
Observando el agujerito del pequeño, vio que no había rastros de ningún daño, noto diminutos rastros de sangre, ligera hinchazón y enrojecido por la gran fricción.
El pequeño se vistió lo más rápido que pudo para irse, mientras Rafael limpiaba el resto de su leche en su sillón; cuando el pequeño estuvo listo, se despidió de aquel hombre que le había enseñado una nueva experiencia a tan corta edad.
Rafael lo acompaño hasta la puerta y cuando estuvo a punto de salir pregunto ¿puedo venir mañana?.
la respuesta de Rafael fue ¡siiiii, puedes venir mañana pequeño!
¿Porque ese cambio de opinión?
CONTINUARA…….
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!