El niño de las uvas parte 2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por NoTengoNombre.
Hola a todos, gracias por todos los comentarios en mi relato anterior.

http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-18433.html

Perdón por la demora pero paso hace 9 años y recordar es difícil. Anexare un poco del final para que no se queden en las nubes.

Aquí voy.

…Me fue besando las mejillas hasta el cuello… me quito la camisa y el short, el boxer también. Siguio besando mi pecho y estomago. Me beso las tetillas y las lamió, en un momento me mordió una y yo di un grito agudo de placer.,. Bajo por la pelvis y me beso alrededor de mi pene… continuo por mis piernas… agarro mis batatas y las apretó diciendo que estaban bonitas, las beso… hizo lo mismo con mis pies, hasta las olió. "Huelen *beso* a* beso* uvas"…

Fue a mi pene y lo empezó a mamar, le dio cosita al principió por ser yo un niño pero luego no le importo nada y le hizo como yo a él… se lo metía todo a la boca y lo lamia como loco. Con una mano me apretaba mis tetillas y con la otra se masturbaba…

Yo no tenia pelitos en el cuerpo para ese tiempo. Luego de mamarmelo siguó dando lenguetazos a mis bolas, me levanto las piernas y dejo a la vista mi oyo… con sus manos sostenía mis piernas y con su legua fue bajando hasta mi ano…

R: Estas limpiecito y tu culito esta rosadito… coño Gabo eres un angel…
Yo: Quiero ser tu ángel…umm…. ah…

Me movia un poco la entrada de mi ano cuando empezó a lamer…. yo sentia el aire cuando se detenia y eso me hacia estar en el cielo. Tuve 2 orgasmos en todo eso…

Seguia lamiendo mi culito, arrib, abajo… dando esocadas…y yo seguí gimiendo…

Agarro con sus manos mis dos piernas y las abrió todo lo que resistí. Sacaba su lengua todo lo que podía para comerse mi culito. Yo respiraba rápidamente, era como electricidad pasando desde mi ano hasta mi pequeño pene. Cada vez que entraba aire por la ventana podía sentir mi culito frío de tanta saliva de Ricardo que tenia. De un momento a otro se coloco encima mio, cara a cara, y curvo su cuerpo para que su pene pudiese tocar mi ano. Agarraba mis piernas para que no cambiaran de posición. Se sentía frío a nuestro al rededor pero nosotros estábamos calientes. Empezó a frotar su pene por mi culo como si me estuviese cogiendo. Me miraba como si me amara con su cabello sudado al rededor y me dio un beso, sin lengua, solo nuestro labios con una presión infinita mientras su pene se movía frenéticamente por mi culo sin siquiera penetrarme. La cama se movía al son de su cadera y nuestro beso termino con él mordiendo mis labios y gruñendo de excitación. Sentí su semen caliente en mi pene, parte de mi culo y estomago. Dejo caer mis piernas y nos abrazamos. Me daba pequeños besos por toda mi cara y susurraba "te quiero". Yo solo callaba, tantos orgasmos en mi pequeño cuerpo me habían dejado exhausto.

No sé cuanto tiempo pasó. El se levanto y busco el baño, estuvo un momento ahí y luego salio con un paño humedo y limpio mi cuerpo de pies a cabeza.

R: Acuéstate Gabriel, aja, así, toma arropate con la cobija.

El busco su ropa y se vistió. Salio un momento de mi cuarto y lo escuche llorar. Luego llego a donde estaba y me quito la cobija. Me visto poco a poco. Me decía cosas bonitas que ya no recuerdo. Busco unas media en mi ropa, no sé como las encontró tan rápido. Y me dio besos en los pies, recorriendo casa parte como si nunca los fuese a sentir jamás. Y me las colocó despacio.

Nos acostamos de nuevo en la cama y me pidió disculpas. Yo solo alcance a decir que lo quería y le di otro beso.

G: Ricardo mis papás…
R: Coño, es verdad. No digas nada y te prometo que lo seguiré haciendo.
G: Si, si, si. Te lo juro pero necesito que te vayas.

Me abrazo, me beso y me sonrió como lo hacia siempre. Me dio unas palmadas amistosas en la mejilla y salió corriendo fuera de mi casa. Esa noche llovio mucho pero yo tenia el recuerdo caliente de Ricardo y no me importó nada.

Pasaron los sías y lo seguí viendo a través de la ventana con mis pies en sus hombros. Hablábamos normal. A veces el volteaba la cara para darle una uva y me sonreía de forma picarona. Yo sentía un fuego en mi estomago supongo que de emoción, tal vez estaba enamorado. Empezó a llevarme dulces y chocolates. Tantas uvas nos tenia mareados. Obviamente ningún amigo suyo se daba cuenta de nuestra relación especial. Aveces yo le decía que jugara. Lo quería ver sudar, gritar, divertirse de forma diferente.

Un hubo mucho calor. Tanto que algunos de los chicos que jugaban fútbol se fueron pero los más fuertes se quedaron y siguieron jugando, apostado un refresco (Coca-cola). El chocolate savoy que me compro se derritió y como habia pasado unos días desde nuestro encuentro yo necesitaba un poco de chispa en mi cuerpo. Abrí el chocolate y lo pase por mis pies (obviamente limpios) siempre que hacia calor se tornaban rosados en los bordes. Lo coloque en mis dedos y cuando Ricardo llego de jugar lo notó. Me sonrió.

R: Te deje loco… y ahora?

Yo no dije nada. El miro hacia atrás pero sus amigos estaban entretenidos. Besos mis dedos y los mordió un poco. Limpiando el chocolate y mirándome con una cara de "te deseo".

R: Ya estas listo para… ya sabes.
Yo: Qué dices, no sé de qué hablas.
R: Gabrielito de eso… coño si eres bruto.
Yo: Ah ya, bruto la puta e tu madre.
R: Ah con que así es la verga ya es todo un machito para decir groserias.

Y nos reímos. Me hablo de que quería hacer algo conmigo como el otro día pero mejor y que ya sabia cómo. Yo ni idea de que se refería a terminar lo que habíamos empezado. Ahora que lo recuerdo supongo que me quería decir que ya se había informado a como tener sexo entre hombres. Como sea, pasaron otros días y yo seguía entretenido con sus partidos de fútbol. Y recuerdo decirle.

Yo: Ricardo somo novios?
R: Mmmm… creo que sí pero no pienses en eso… ni lo digas. Es entre nosotros.

Yo me alegre que dijera eso "Entre nosotros".

El día al fin llego y él se despidio de sus amigos y de mí. Yo me quedé extrañado. Y me baje de la ventana y me acosté en la cama hasta que escucho la puerta trasera. Supe de inmediato que era Ricardo y fui a abrirle.

R: ¿A qué hora llegan tus padres?
Yo: A las 7.
R: Tenemos tiempo de sobra,

Me alzo por los brazos y me cargo hasta mi cuarto. Ya no hablábamos, nuestras miradas lo decían todo. Me sentó en la cama y se desvistió al frente de mi. Se quito la gorra y dejo caer su cabello, en un mes le llegaría por los hombros. Sus ojos quedaban perfectos con sus pecas. Se quito la franela y pude ver como cada musculo de su cuerpo se contraía. Luego el short y los zapatos, las medias… tenia unos boxers negros y dejaban ver su pene flacido. Me miraba como distraido. Creo que intentaba ser sexy. Se sorprendio cuando me levante de la cama y fui hacia él. Lo tome de la mano y lo traje hasta la cama. Asi quede yo sentado en ella y él al frente. Agarre su boxer y se lo baje hasta las rodillas y Ricardo se los terminó de quitar. Vi su pene ya recto y le di besos. Lo agarré con mis dos manos y le di pequeños lengüetazos.

R: Así…oh…ummm así mi amor…. ya va espera…

Me acostó en la cama y me quito la ropa poco a poco. No tenia medias así que empezo a besar mis pies cuando estaba listo. Los olia, los besaba, los lamia. Mis tetillas se colocaron duras por la electricidad que recorria mi cuerpo.

G: Te amo… te amo…

Se acostó encima y me dio un beso con lengua. Lo sentía desesperado. Me dijo algo como que tenia que hacerlo acabar para que luego él durará más… se acostó a mi lado y yo supe lo que tenia qué hacer.

Todavia me sentia intimidado por su pene. Era grande y unas venas verdes recorrian su tronco, su cabeza rosada aparecia cuando lo empezaba a masturbar… se habia quitado todo los pelos de su sexo. Empece lamiendo su cabeza, insistiendo en el lugar donde salia su pecum… lamia el contorno y luego empece a pasarla por el tronco y bajar hasta sus bolas… las metí en mi boca y las succioné. Subia y bajaba mi lengua por su tronco y culminaba dando besos y lamidas a su cabeza. El gemia y me decia "así Gabrielito oh… así lo haces bien mi niño". Luego me motivé y empece a meterla en mi boca, su sabor extraño me gustaba, la sensación en mi boca de tener algo blando… y trague todo lo que pude… sentia mi pene parado y él lo noto. Hizo lo de la otra vez y me masturbo con su pie. Eso me excito mucho y metia y saca su pene de mi boca lo más rapido que podia.

R: Ohhhhh así Gabrielito ohhh tragate todo mi guebo, así ahhhh toma mi leche tomatela mi niño aggggghhhh

Mientras yo llegaba a mi primer orgasmo él ya habia vaciado su leche en mi boca. Yo subi y le di un beso con su leche. Fue delicioso… me sentia otro. Los dos tragamos semen. Baje a su pene hinchado de nuevo y lo limpie con mi lengua. El con su mano saco el resto de semen presionando en la base de su pene y yo me lo trague…

Me acosté encima suyo y no hablamos. Su pecho con respiración agitada me subía y bajaba. Me abrazó y nos quedamos asñi un rato hasta que su pene se levanto de nuevo…

Aquí terminamos lo que empezamos.

Se levanto acostandome al lado y fue al baño. Salió con una crema nivea para la piel reseca y un espejo… dejo el espejo en el borde de la cama y se me acerbo hasta quedar cara a cara. Sus ojos se veían casi verdes. Este chamo con pinta de querer ser malandro estaba conmigo y se comportaba como el mejor hombre del mundo, irónico.

Me dijo "Lo que voy hacer es porque te quiero Gabrielito…" y y solo le respondí " te quiero…" mi voz sonó muy aguda, con miedo.

Me colocó boca abajo y me empezo a besar las nalgas, a morderlas un poco, a decir que era muy blanco, muy sensible a dejar marcas rosadas, a decir que lo que sentia por mi era unico y un secreto…

Abrió mis nalgas y suspiró, empezo a lamer mi rosadi oyito… trataba de perforarlo con la lengua… yo gemia y me tocaba mi penecito… estaba a un millón… su lengua lamia arriba, abajo, adentro y así. Su cabello acariciaba mis nalgas, su nariz chocaba conta mu chulo y su lengua se lo comia. Me dio una nalgada y yo grite de lo excitado que estaba. Como pude agarre su mano y le hice saber que queria otra. Mis nalgas deberian estar rosadas ya…

Luego senti la fria crema untada por sus dedos al rededor de mi ano y ejerciendo un poco de presion en él. Se echo en su pene. Se acosto encima mio y con su mano acomodo su pene en la entrada de mi ano. Metio la cabeza… se sentia raro, no me dolió. Y con su peso poco a poco fue bajando todo su pene. Yo sentia andentro que me llenaba, tocaba mi prostata y ahhhh llegue al orgasmo de una vez. Tanto calor adentro mio. Me tomo de la mano como un novio y me beso el cuello y las orejas. Empezoa sacarlo y me senti incomodo. Lo metio y se escucho el sonido pegajoso de la crema… no me dolia… es más queria que siguiera.

R: Ahora eres mio Gabrielito-Me susurraba- ahora… ahora… ah… sientela… ah… ah…. ummfff ¿Te gusta?
Yo:Sí, si
R: Más duro mi amor asi *paf*
Yo-: Ah *paf* ahhhhh *paf * te amo…

El sonido que hacian nuestros cuerpos, sentir sus bolas contra mi cuerpo, llenandome con su pene una y otra vez. Me mordia la oreja. Gemia y sentia su aliento caliente. Yo lo hacia tambien… y levantaba mi culito queriendo que entrata hasta las bolas.

Saco su pene y me coloco hacia arriba. Subio mis piernas y senti como el aire frio llenaba mi culo. Metio su pene y sigui con el mete y saca. Lamia mis pies mientras lo hacia, lamia entre los dedos, chupaba cada uno. No duro mucho tiempo asi. Coloco mis pies en sus hombros y arqueo su cuerpo mientras bajaba junto con mis piernas para hacer una perfecta pose del misionerio. Y siguio metiendo su pene. Yo sentia algo parecido a terminar un orgasmo cada vez que lo metia. Me besaba, me decia cosas lindas… cosas que no recuerdo, susurros perfectos con besos.

Y derrepente empezo a metermelo freneticamente y empezamos a gemir muy fuerte los dos… Yo Llegué al orgasmo y mordi su cuello. En eso él también llegó y pude sentir su leche derramandose en mis entrañas. Nos quedamos así un rato… Su pene todavia seguia duro y yo no queria sentirlo fuera de mi.

Saco su pene y me coloco boca abajo. Yo sentia que estab lleno todavia.

R: Mira Gabrielito, ahora eres mio.

Voltee la cabeza y por el espejo que sostenia pude ver el semen ssaliendo de mi ano como si fuese gelatina blanco. Salia como una herida de sangre… el dejo el espejo y empezo a lamer el semen que salia de mi ano. Le daba besos a mi ano cada vez que salia más. Hasta que no quedo nada. Siguió lamiendo hasta que se cansó y me beso de nuevo. Nuestras bocas sabian a semen… nuestros besos era amor puro. Me quedé dormido con él como por media hora, abrazados, desnudos.

Al despertar fuimos al baño y nos metimos en la tina que había. Esperamos a que se llenara de agua y él me baño. No tuvimos sexo. Solo nos reiamos y nos besabamos. Al salir él me seco y yo a él… se le paro el pene de nuevo porque se lo seque con mucha insistencia. Le di un beso pero no lo masturbe porque le dolia.

Se cambio. Me cambio a mi y busco de nuevo las medias… me dio unos besos en el pie de nuevo y me las colocó.

Hablamos de que nos queriamos y evitabamos hablar sobre la discriminacion o de que lo que estabamos haciendo no era "normal"…

R: Tengo que irme Gabrielito…
Yo: Ya sé… pero… no te vayas dime que me quieres antes de hacerlo.
R: Obvio que te quiero, bruto. Eres mi novio…

Me abrazo y se fue de la casa…

Bueno este es el final del relato. Fue real, todo. Quiero sentirme de nuevo como en esos días. Espero y les haya gustado. ¿Qué si tengo más para contar? Obvio, hice otras cosas con Ricardo y espero contarlo.

Con amor, Gabriel.