El niño del edificio X ( capitulo final )
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Después de esa faena sexual que tuvimos Jull; José María y yo, quedamos tendidos en la sala de la casa de Jull, era algo que no podía explicar, acababa de ser objeto de una violación, un crío de 16 me había roto el culo, y lo que mas me dolía es que yo me deje; tenia sentimientos encontrados, estaba furioso y a la vez sentía que me gusto, recordaba lo pasado y me excitaba, las sensaciones vividas me ponían a mil, la verga se me ponía dura pensando y recordando los episodios hace un momento vividos, como le chupe la verga a Jull, el instante en que recibí en mi boca su leche, el juego de su lengua en mi culo, la punta de su glande hurgando mi entrada y el punto máximo donde ese trozo de carne rompe mi estrechísimo agujerito y entra hasta el fondo de mi, con los ojos cerrados pensaba, recordaba y tenia la verga durísima. Nunca ni con una mujer de las muchas con las que he estado sentí tanto placer, estaba en otro nivel de excitación, tendido en el suelo de ese departamento, sin tocarme y sobar mi pichula sentía como salía agüita de coco de mi verga, quería mas, mientras estaba hundido en mis pensamientos, sentí una mano suave que me acariciaba la espalda; abrí los ojos y vi a mi niño: José María, me estaba acariciando la espalda, me volteé y se puso sobre mi, nos fundimos en un profundo beso, nuestras lenguas jugaban mientras nuestras manos acariciaban cada parte de nuestros cuerpos, así estuvimos varios minutos, jugaba con sus cabellos, su espalda, sus nalgas, a pesar de haber sido bien trajinadas conservaban su tersura, eran duritas, grandes, mordibles, yo estaba duro como un fierro, por ratos sentía que mi bebe ya tenia una verga razonable y dura, bien dura, se encontraban y hacíamos movimientos como si nos estuviéramos cachando, el metía su verga entre mis piernas y yo entre las suyas, la sensación era excitante, el niño del edificio empezó a bajar por mi cuello, me llenaba de besos, luego chupo mis tetillas, mientras sus manos se adueñaban de mi verga y me iba pajeando, bajo despacio por mi ombligo y al fin llego a mi pichula, jugo con ella y poco a poco se la fue engullendo toda, nadie chupaba verga como el , era un experto, chupo despacio y se lo fue metiendo toda hasta el fondo, podía sentir su campanilla y yo lo tome del cabello, y lo hundí mas, veía sus ojitos como botaban lagrimas e intentaba zafarse pero no lo dejaba, el fiel al castigo continuaba su labor de darme el mejor de los placeres con esa boquita, mientras lo hacia apareció Jull, al ver esa escena sexual, se la fue parando el miembro, aprovecho que José María tenia al aire el culo, así que se arrodillo en el suelo y fue en busca del botón de mi bebe, aquel que rato antes Jull y yo habíamos gozado, mi pequeño era goloso, no se quejaba, y nosotros jóvenes y cacheros, Jull se adueño del culo de mi niño, se lo empezó a chupar duro, la pasaba la lengua y eso éxito al niño, que chupaba con mas placer y ahínco, era excitante ver todo eso, fue entonces que mi pequeño me levanto las piernas con ayuda de Jull que era mas grande, mi pequeño se adueño de mis bolas, se las metía con suavidad en su boca tibia y jugueteaba con su lengua, así una por una, y luego las dos, era intenso todo esto, yo con la piernas arriba tomadas de los tobillos por Jull, José María hundido en mis bolas, y Jull chupandole el culo al pequeño, que rico era todo esto, no sabia que pasaría después; derepente el bebe empezó a bajar con su lengua por mi ano, el mismo que ya no era virgen y que momentos antes acababa de ser roto, aun estaba irritado y adolorido, pero la lengua de mi bebe hacia un trabajo exquisito, jugo con ese huequito bastante rato, la verga la tenia bien dura, botaba litros de liquido preseminal, derepente Jull dejo el culo del pequeño y se cambio de lugar, puso su verga en mi boca y se adueño de mi verga; que rico chupaba el condenado chiquillo, se la tragaba toda, no dejo de sostener mis piernas facilitando el trabajo de nene; José María dejo por un rato mi culo y ayudo a Jull a chuparme la verga, que delicia sentir dos bocas adueñándose de mi pedazo de carne, me quería venir pero tenia postergar mas el placer; derepente Jull le dice a mi pequeño: listo José María ???, el bebe solo movió la cabeza afirmando, fue entonces que mire con extrañeza lo que iba a suceder, el pequeño apunto su verga pequeña a mi ano y empezó a empujar; yo quería zafarme pero Jull ejerció presión, con sus manos abría mis nalgas y fue entrando la verga de mi niño en mi huequito, no era tan grande como la de Jull pero se dejaba sentir, además yo recién estaba probando verga, poco a poco la hundió toda, era rico sentirla, no me dolía pero me excitaba, cuando entro toda mi bebe se vacío, pude sentir como latía su verga dentro de mi y como escupía su lechita caliente, los gestos de su rostro mostraban sus convulsiones, temblaba, era su primera vez, quiso zafarse pero Jull no lo dejo, se acomodo tras de el y lo fue penetrando, José María se agacho y me beso, yo apretaba el culo para que no se salga su verga, chupaba mis tetillas suavemente y Jull seguía hundiéndosela toda, aun vez dentro del niño, sentí que la verga del pequeño se empezaba a poner dura otra vez, creo que era la excitación, yo también lo acariciaba así empezó el jaleo, la verga de mi nene se puso dura como un fierro, Jull embistio por un rato al bebe, dirigió el ritmo a seguir del pequeño en mi culo y luego salio de su culo y se sentó sobre mi verga dura, se fue sentado dándome la espalda, yo veía como mi pichula se hundía en su culo blanco y redondo, entraba apretado, y se lo comió todo, era riquísimo penetrar y ser penetrado, se movían rico, Jull con mas fuerza y el niño despacio, Jull le ponía el ritmo por ratos, así por un buen ratos me abusaron los dos, de repente Jull se giro mirándome, y comenzó a cabalgarme como poseído, con fuerza y sin parar, parecía un pistón mi verga, entraba y salía con una fuerza increíble, ya me dolía, y no pude mas y le llene de leche el culo a Jull, el al sentir mi semen dentro suyo se quedo quieto, lo recibió con gusto, sonrío y se safo de mi, por sus largas piernas corría rastros de mi leche, luego despacio se acomodo tras mi pequeño y le hundió su verga, José María hizo un gesto de dolor y placer, Jull empezó el bombeo, y dirigía el ritmo al nene, ambos aceleraron sus embestidas, eran rítmicas, fuertes e intensas, eso me puso a mi duro otra vez, mi bebe me cogio la verga y empezó a menearmela, Jull por ratos ayudaba, fue así como el sonido de nuestros cuerpos en las embestidas llenaban la habitación, luego llegarían los gemidos, José María se quedo quieto, se puso duro, le temblaban las rodillas, se dejo caer sobre mi y sentí como su verga reventaba dentro mío, Jull acelero el ritmo tomando al pequeño de las caderas y también exploto, yo tenia la verga agarrada duro en mi mano acelere la masturbación y también explote sobre mi pecho.
Fue una experiencia inolvidable, toda la habitación olía a sexo, jamás lo olvidare; así por mucho tiempo compartimos sesiones sexuales con Jull, también seguíamos frecuentando a veces al chofer y a su hermano, a propósito ellos dos me penetraron a mi también, hacíamos tríos, cuartetos y a veces los dos solos, José María y yo no cachabamos siempre en cualquier lugar y ocasión, siempre me daba el primero y luego me lo cogia yo, me convertí en bisexual, a veces cogia alguna mujer por ahí, pero siempre deseaba una buena verga, también reventamos algunos culitos de su colegio, era rico compartir esas experiencias juntos, éramos cómplices en todo
José María creció rápido en tamaño, en todos los tamaños, su verga se convirtió en una piezota, casi mas que la mía pero delgada. Cuando termino el colegio a los 15 años su mama lo mando fuera a estudiar, no se imaginan amigos como llore, ahí descubrí que lo amaba locamente, un año estuve solo, sufría mucho con su ausencia, pero en unas vacaciones, regreso, el me dijo que me amaba y en secreto al terminar sus vacaciones nos fuimos los dos, renuncie al edificio, y me fui con el, ahora han pasado los años, aun en la actualidad vivimos juntos, me volví gay, ya no me provocan las mujeres, pero aun seguimos experimentando tríos, con algunos amigos, una de esas tantas veces me metí dos vergas en mi culo; ayyyy como sufrí, pero me gusto. Mi niño es arquitecto yo estudie diseño por computadora e ingles hoy en día vivimos en Dinamarca y somos muy pero muy felices, contra todo pronostico, me quede con El Niño del Edificio.
Adiós amigos
Hasta siempre
La mejor saga de todos los tiempos en este tema, y la wue me motivó a escribir y relatar mis propias historias. Sea quien sea el autor de estos relatos, muchísimas gracias 👏👏👏