El niño pelirojo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
En ese entonces recién empezaba a ir a la universidad y también buscaba un trabajo de medio tiempo para poder ayudar a mis padres a pagarla, fui a varios lugares pero del primero que me llamaron fui contratado, el trabajo era simple y fácil, era de ser el encargado de la tienda de una escuela de niños riquillos, me molesto ver que estos pequeños bastardos gastaban mas dinero en la tienda de lo que yo ganaba en el día, pensé que seria un trabajo de mierda, pero era de los pocos que me ofrecían facilidades con los horarios así que seguí, fue hasta que vi un niño de 8 años que me llamo mucho la atención, desde que lo vi fue sorprendente lo sexi que era este niño, era pelirrojo sus ojos eran tan penetrantes y raros, entre verde y acua, sus labios tan rojos y carnosos como que si hubieran sido hechos para comerse una buena verga, incluso su nombre era de ángel, “Gabriel”. Este niño se acerco y pidió un helado con forma de un gran pene, era como si se burlara de mi, para que viera lo que hacia con su hermosa boca y que yo no podía tener; se fue con su helado y sus amiguitos a conversar entre ellos mientras comía y chupaba su helado; yo no podía dejar de verlo ya tenia mi pene muy parado, me imaginaba que mi verga era su helado incluso lo mordio y salió vainilla que se derramo en su boca, fue lo mas morboso que vi, por dios era tan sexi, sentí como si era yo viniendome en su boca, estaba tan distraído que mi compañera me dijo que me despertara y me doy cuenta que un montón de niños estaban frente a mi esperando comprar, para cuando lo volví a buscar ya no estaba, pero yo seguía tan excitado que tuve que ir al baño a masturbarme como loco para que se me bajara.
Espere hasta el segundo receso a volver a verlo, pero no apareció, termino mi día en el trabajo fui a la universidad, volví a casa y no podía sacarmelo de la mente, pasaron varios días sin que lo viera y no sabia porque e inesperadamente lo volví a ver, quería comprar golosinas, no se como reaccione pero este pequeño me hacia querer admirarlo, pienso que debió sentir que lo miraba de pies a cabeza, pero era inevitable para mi, era muy lindo y yo lo quería contemplar, casi que lo comía con mi mirada aunque sabia que nada podía pasar, después de esto el chico ahora frecuentaba mas la tienda donde yo me encontraba, luego me entere que el no solía venir a esta tienda ya que estaba muy alejada del lugar donde jugaba con sus amigos y de su salón de clases también, ademas habían 3 tiendas cerca y donde yo estaba era la mas lejana; pero aquí estaba como curioso por averiguar porque lo veía tanto y de forma extraña como si lo quería comer, empece a hablarle, era realmente poco lo que hablábamos pero ya conocía su nombre, seguimos así, sin que pasara mayor cosa. yo por las noches me masturbaba imaginando que lo cogía por todos partes.
Cada vez que lo veía, parecía que él tenía mas interés, cuando caminaba parecía parar su cola y moverla un tanto en forma descarada casi como tratando de llamar mi atención, pensé que era mi imaginación, pero estas cosas cada vez eran mas comunes, no sabia si era yo o este pequeño trataba de seducirme, era casi irreal, lo vi ponerse frente mío en posición de perrito moviendo su colita de forma sensual mientras miraba una fuente cuando me veía pasar, incluso lo vi que se lamia sus labios de forma tan erótica que yo no podía creer todo lo que este pequeño hacia.
Un día mientras ayudaba a traer cajas de mercadería lo vi solo y triste en una de las mesas del patio, lo salude y le pregunte porque estaba afuera, me dijo que lo habían castigado porque jugaban a tirar las típicas bolas de papel en el salón de clases y que fue el único a quien lo descubrieron, y estaba afuera haciendo ejercicios de matemática como castigo, pero que no entendía como resolverlos, y de no resolverlos lo suspenderían, entonces le ofrecí mi ayuda y este niño se mostró realmente contento al punto que me abrazo; fue como una explosión que sentí dentro de mi, incluso mi pene se erecto.
Mientras le explicaba el miraba mi entrepierna de reojo, yo sentía mi que mi pene explotaría por el morbo de la situación, luego me pregunto que era lo que tenia ahí y pues le dije que era mi pene, hubo un silencio hasta que dijo que no me creía que era muy grande para serlo, y el al seguir sin creerme lo rete a que lo comprobara, se lo mostraría; fuimos a un baño, primero entre yo y luego él, estando dentro saco mi pene y sin ninguna inhibición lo toma y comienza a mamarlo como si quisiera arrancarmelo, succionaba como si muriera de la mas terrible sed y mi semen era la única agua que podría calmarla, yo veía estrellas, era todo lo que siempre imagine sentía que tenia al niño mas hermoso chupando de mi pene, era todo un experto hacia garganta profunda y usaba su lengua para acariciar mi glande mientras que con sus manos jugaba con mi bolas que estaban llenas de leche, era la mejor mamada por mucho que me habían dado, tenia todo sus labios rojos alrededor del tronco de mi verga, cerraba sus ojos como en un transe de placer, como si quisiera sentir cada centímetro de carne de verga, su boca era tan delicioso y agradable, se sentía tan rico tener mi pene en su caliente y húmeda boca que no resistiría mucho, trate de aguantar pero este pequeño tan precoz, era una fiera con su verga, lo hacia tan rico que no pude mas y me vine con una fuerza, disparando en su pequeña boca, este niño no la saco en ningún momento por cada disparo el tragaba el semen, fue la eyaculación que mas semen he expulsado sentí chorros que salían dentro de mi, al haber tragado todo la saco sin ningún rastro de esperma mientras me seguía masturbando la besaba como agradeciendo la rica leche que le había dado yo aun estaba muy excitado tanto que mi pene palpitaba en sus manos, lo tome y le daba con mi pene en sus tiernas mejias pecosas jugaba con mi pene hasta que se lo introduje de nuevo en su boca, esta vez lo tome yo de sus cabellos rojos y le engullí la verga, lo tenia como si lo culiara por su hermosa boca, hasta el fondo lo tenia dandole el ritmo, la saque y vi como quería que volviera a su boca, la quería tener de chupete y no se quería desprender de su verga,
La siguió mamando con gran empeño como si fuera el ultimo caramelo del mundo que hacia que salieran gotas de semen, la mamo por mas tiempo esta vez y cuando sentí que estaba por venirme saque mi pene y dispare mi semen en su carita angelical, embarrandolo de esperma y con mi pene esparciendola por sus labios, el rojo de mi glande y de sus labios se combinaban, con su mano limpiaba la esperma de su cara para luego comersela, hasta que quedo limpio.
Salimos y el niño actuó como si nada, yo quede muy sorprendido de lo mucho que disfrutaba el sexo, por supuesto, esta no era la primera vez que experimentaba una mamada, supe que con su primo aprendió todo sobre el sexo, incluso veían porno gay, había empezado desde los 6 años y su primo de 13. Su primo se había mudado y no lo veía más por lo que había pasado mucho tiempo sin tener mas encuentros y conmigo pudo experimentar mas cosas, que luego les contare dependiendo de si les gusto la historia, les contare de la primera vez que lo penetre.
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