El niño Tímido 2

Segunda parte del relato de Eli..
Gracias por leer este relato. Si aún no has leído la primera parte, podes encontrarla en mi perfil.

Pasaron ya 6 meses de los hechos ocurridos en la primera experiencia. Fueron meses de trabajo y estudio. Normalmente me la paso en casa o entrenando. Quizá también tratado de no pensar en lo que pasó esa noche con Eli.

Suelo despertarme en la madrugada, con la pija muy dura y mojada. Regresa la sensación de tener a Eli en mi cama. La frescura de su piel de niño, la luz reflejando la figura de su pancita que baja hasta esa verga desproporcionada para su pequeño cuerpo.

Lo deseo con locura y al tiempo tiempo no soporto la ida lastimarlo de cualquier modo. Regresan recuerdos perdidos de mi propia niñez, imágenes sueltas.

Tengo 10 años. Estoy en mi habitación con un compañero de escuela 2 años más grande que yo. Él se baja los pantalones y me pide que lo siga. Su pene es bastante grande para mí en ese momento. Me pide que lo toque, que lo pajee. Nos tiramos a la cama, se pone encima mío y se pajea hasta acabar encima de mi pecho y cara. 

Llega el verano y con eso las vacaciones. Por suerte para mí, llegan también las salidas al lago con la familia completa.

Cómo explicar lo que sentí al ver el cuerpo bronceado de Eli. La pequeña zunga no podía contener el relleno de ese bulto. Unos gluteos gordos y perfectamente formados, se tragan la tela por detrás. Imagino la fuerza de ese culo sobre mi verga intentando abrirse paso hacia su interior.

Ese domingo estuvimos en el agua todo el día. Por supuesto aprovecho cualquier momento para meter mano a Eli. Lo apoyo sobre mí al jugar para que sienta mi pene hinchado. Él me mira con curiosidad también. Mi cuerpo grande y peludo llaman su atención. Lo alzo upa y toca mis biceps. Me dice que tengo grandes los brazos.

El día avanza y al llegar a casa de mis suegros, organizan una cena. Para poder tomar alcohol con tranquilidad, nos invitan a dormir. Vamos a mirar una película con pochoclos (Popcorn). Eli pregunta emocionado si se puede quedar también y finalmente logra que le den permiso.

En la mitad de la película, mis suegros se van a dormir. Al ratito, mi novio se queda dormido en mis brazos y le insisto para que también se vaya a la cama.

La película no era demasiado entretenida  y le pregunto a Eli si quiere mirar otra cosa. Eli está en el otro sillón. Tiene solo un slip y una remera que le queda gigante. No es suficiente para tapar sus gordas piernas y pies pequeñitos. Le digo que hace frío para estar solitos. Busco una manta y lo llamo para que venga conmigo.

Terminamos poniendo videos de Youtube. Eli está inmerso en lo que pasa en la pantalla. Se sienta delante mío y lo abrazo. Rozo sus tetillas por sobre la remera y su cuerpo se estremece. Al ver que no desvía la atención, apoyo por completo mi mano en su pecho. Bajo la mano lo más lentamente que pueda por su abdomen hasta la ingle. Apoyo mi mano ahí y la dejo un rato. Me acomodo un poco hacia atras sin sacar la mano y ahora si puedo sentir su hermoso miembro duro como una piedra.

No puedo evitar soltar un pequeño suspiro que llega a su oido y siento como se eriza su piel mientras comienzo a sobar ese bulto. Eli no deja de mirar la TV pero sabe claramente qué está pasando.

Pasan los minutos y ahora es muy evidente la situación. Masajeo la pija de Eli que quiere romper ese slip. Meto mi mano libre por debajo de la remera para poder tocar su tersa piel. Su olor a niñez me embriaga y me muevo como intentando cogerlo por sobre la ropa. La respiración de Eli está acelerada y comienza a sudar un poco.

La exitación es demasiado fuerte y decido desnudar a Eli. Saco su remera y lo vuelvo a acomodar encima mío. Para mi sorpresa, Eli parece no darse por aludido. Por algún moetivo, sigue mirando los videos como si fuera una droga mientras yo bajo su slip para dejar escapar por fin esa verga de mis sueños. La perspectiva es perfecta. Sus pectorales sobresalen por sobre su pancita y llegan al premio mayor.  Una pija, no solo es más grande de lo normal para su edad, unos 12 centímetros, sino que comienza en su ingle libre de cualquier pelo, un tronco mas grueso en la base. Ese tipo de penes que son los más ricos de sentir por su forma que entra con facilidad para luego terminar de abrirte al llegar al fondo.

Se me hace agua la boca y levanto a Eli para sentarlo en el sillón. Lo acomodo de tal manera que pueda seguir mirando sus videos y me arrodillo frente a él. Me tomo un segundo para apreciar y tocar todo su cuerpo. Apoyo las manos sobre su cadera y gluteos y hundo mi cara en ese delicioso pedazo de carne. Ambos nos estremecemos con lo que hacemos. Eli ahora ya no mira la pantalla y comienza a moverse para ayudarme en mi tarea. En cierto momento, Eli apoya su mano en mi nuca para indicarme el ritmo. Yo estoy en el cielo. Succiono su verga como su fuera lo más rico que probé en la vida.

Sin previo aviso, Eli me indica que me separe de él. Su reacción me desconcierta un poco. Se para y yo me corro hacia atrás. Quedo sentado frente a su pija. Eli ahora es quien manda. Golpea su verga contra mi cara varias veces para luego metermela en la garganta. Tengo un pequeño orgasmo al sentir ahora como Eli me coge la boca. De mi pene sale leche a montones aunque sigo caliente. Junto en mi mano lo que sale y se lo doy a mi bebé en la boca. Eli la come con gusto y la comparte conmigo. Junto otro poco y abro sus gordas nalgas para untarle un poco en ese pequeño agujerito que palpita de placer.

Eli está tan caliente que no se percata que intento meter un dedo con la ayuda de mi propia leche. Su culo aprieta con fuerza sobre mi mano con cada ebestida que me da. Eli ahora empuja mi cabeza contra su cuerpo. No puedo creer la escena. Veo hacia arriba su cuerpo perfecto sudado y su cara de morbo y placer mientras intenta que trague cada vez mas profundo su pene. Siento la fuerza de su brazo sobre mi cabeza y al pasar los minutos comienzo a hacer arcadas. Eso parece hacerlo calentar aún más y su agujero se deilata lo suficiente para que mi dedo entre de un solo golpe. Al llegar al fondo, llego a tocar su próstata y Eli pega un grito ahogado. Su cuerpo se tensa y siento 4 chorros en el fondo de mi garganta.

Eli está agotado y aún caliente. Sin desperdiciar nada de leche que podría haber quedado, dejo su pija bien limpia y tiro lo al sillón. Me arrodillo encima de él. Mi cuerpo se ve enorme sobre Eli. Ni siquiera tener que tocarme. Chorros y chorros de semen caen en el pecho y cara de Eli. Allzo upa a Eli y nos damos una merecida ducha.

Espero que este segundo relato les haya gustado. No sé aún si la historia de Eli seguirá. Espero sus comentarios al TG https://t.me/ElpM22