El padrastro de Camilo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por dante1802.
Fue una noche cuando Damián llegó a la casa de Camilo, quien lo recibió con alegría, creyendo que el hombre sería como un padre para él, sin saber que se convertiría en su marido.

Habían pasado cinco años desde aquella noche, Camilo estaba por cumplir los 15 años y se había convertido en un adolescente delgado muy parecido a su madre, de facciones finas, ojos color miel, delgado, de piel blanca, labios carnosos, medía 1.
60, cabello castaño claro, era un chico muy atractivo, que llamaba la atención de todas las chicas de su colegio, pero que no tenía novia, lo cual había despertado rumores entre los demás.

Los rumores sobre su sexualidad eran ciertos, Camilo se había asumido como gay desde los 13 años cuando se dio cuenta que no le atraían las chicas y sí eran los muchachos quienes despertaban su interés sexual, pese a ello, él había decidido mantener su orientación en secreto volviéndose un chico reservado y callado.
No tenía amigos y tras salir del instituto regresaba a su hogar.
Era alrededor de las 3 de la tarde cuando Camilo volvía a casa todos los días y como siempre encontraba a Damián en su gimnasio entrenando.

Damián se había casado con su madre desde hace cinco años y era un hombre obsesionado con su físico.
Medía 1.
80, de cabello negro, piel morena, musculoso, barba y pelo pecho, ojos negros, facciones duras.
Y a pesar de tener 52 años lucía como 10 años menor por su actividad física.
Su relación con Camilo nunca fue muy cercana, no llegó a ser el padre que el chico esperaba, pero llevaban una relación cordial.

Cuando Camilo abrió el refrigerador para tomar agua, vio que entraba por la puerta Damián vistiendo solo una bermuda, sudado y con una pequeña toalla alrededor del cuello.

Damián: ¿Cómo te fue en la escuela?
Camilo: Bien
Damián: Tu mamá aún no regresa, llamó para decir que llegaría más tarde.
ya sabes cómo es su trabajo.

Camilo: Sí, ya sé.
Me iré a mi cuarto.

Damián sujetándole el brazo: Cuando te vas animar a entrar al gimnasio conmigo.
si hicieras más ejercicio, te verías más lindo.

Camilo sonrojado: Gracias, pero casi no me gusta.

Damián: Si lo haces ninguna chica se te resistiría o mejor dicho ningún chico.

Soltándose, Camilo ruborizado se fue a su cuarto y cerró su puerta.
Recostado en su cama, Camilo sabía el por qué su padrastro le había dicho eso.
Habían pasado seis meses, cuando Camilo solo en casa había decidido explorar su físico y tomando un labial de su madre se había pintado los labios, tomó unas zapatillas y se las puso, fue en ese momento cuando Damián entró a su cuarto y lo encontró.
Damián lo quedó viendo y se fue.
Más tarde y muy avergonzado, Camilo habló con él para pedirle que le guardara el secreto.

Damián: Mira Camilo, la verdad es que ya me lo esperaba, desde niño he visto que tu comportamiento era afeminado y pues si fueras mi hijo te madreaba hasta volverte macho, pero pues no lo eres y por mí no hay pedo, tú sabrás cuando decírselo a tu madre.

Camilo: Muchas gracias Damián y te prometo que no lo volveré hacer, yo solo quería.

Damián: Ya te dije que no te preocupes, no me sorprendió tanto, lo que más me sorprendió es que con los labios rojos te ves como una muñequita.

Camilo no supo que responder y sólo se quedó callado, pero a partir de ese día, las insinuaciones de Damián respecto a su sexualidad eran constantes, a pesar de ello, no había nada más.

Esa noche, la madre de Camilo les comunicó que por su trabajo y por un año estaría viajando constantemente regresando solo los fines de semana, por lo que les pidió que la entendieran y Damián le dijo que no se preocupara, que él cuidaría de la casa en su ausencia.

Los días comenzaron a pasar y sin la madre de Camilo en casa, Damián comenzó a llevar amigos a la casa con los que se emborrachaba y había días en que llevaba mujeres.
Camilo no se atrevía a decir nada a su madre, porque debía una favor a Damián.
Lo peor ocurrió una noche cuando Camilo salió de su cuarto por un vaso de agua y en la madrugada se encontraría con Damián teniendo sexo en el sofá con una puta.
Camio vio a su padrastro totalmente desnuda metiendo su verga en el culo de la prostituta que gemía como llorando y pidiendo más.
Impactado, Camilo vio por primera vez el miembro de Damián, una verga morena cabezona y gruesa de gran tamaño que como una espada se metía sin piedad en el culo de la mujer.
Camilo no pudo más y se encerró en su cuarto.

Al día siguiente, Camilo habló con Damián en el desayuno y le dijo: Yo sé que solo soy un chico que no entiende muchas cosas, pero no me parece que metas putas en la casa mientras mi mamá no está.

Damián dejó de comer y vio a Camilo que seguía: mi mamá está trabajando y tú eres su esposo y debes tenerle respeto aunque no esté porque.

Damián golpeando la mesa: ¡Silenciooo! como dices no eres más que un mocoso que no entiende nada y no tienes derecho de reclamarme nada.

Camilo: sí lo tengo porque.

Damián: Dije que te calles, aquí yo soy el hombre de la casa y hago lo que quiero.
como hombre tengo necesidades y tu madre no puede satisfacerlas por estar trabajando.
necesito descargarme y esa vieja de noche me ayudo.
claro tú no entiendes porque no tienes las necesidades de un macho, al contrario lo que quieres es que alguien te la meta a ti.

Camilo sonrojado por las palabras y molesto salió de su casa rumbo a su escuela.
Decidió no decir nada a su madre, pero empezó a repudiar a Damián hablando con él solo lo necesario.
Damián por su parte continúo siendo un descarado y otra noche cuando estaba con sus amigos tomando.
Camilo salió al baño y pasó por la sala.

Un compadre de Damián vio al chico y le comentó: oye pues sí que se ha desarrollado tu hijastro compa,,, ¿y ya salió de closet? porque mira nomas que nalgas se carga.

Damián: no digas mamadas compadre, yo que me voy a fijar si no soy puto y lo que haga el mariconcito a mi me vale madres.

Compadre: pues dirás que no y yo también tengo vieja, pero en ese culito si me meto, porque se me hace que todavía es virgen o crees que ya lo hayan desquintado?
Damián: ya te dije que me vale madres.

Y Camilo volvió a pasar para su cuarto.
el compadre lo vio pasar con mirada lujuriosa para sonreir.
El compadre tenía 55 años y aunque su físico estaba bien conservado, su calvicie era prominente así como su barriga por la cerveza que consumía.

Damián se quedó dormido en el sofá y aprovechando esto, el compadre borracho se levantó y encontrando la habitación de Camilo se metió a su cuarto, donde éste se encontraba profundamente dormido.
Camilo solo con un mini short y una playera sin mangas, lucía unas piernas bien torneadas.
Con mirada lujuriosa, el compadre empezó a desabrocharse el cinturón y el pantalón y comenzó a tocar las piernas de Camilo.

Recostándose sobre él, el compadre empezó a lamer la cara del chico que al sentirlo abrió los ojos, pero antes de poder gritar, el hombre le tapó la boca y le susurró: No grites putito, que esto te va gustar tanto como a mí.
ahorita vas a sentir a un hombre.

El aliento alcohólico del hombre y su rostro desfigurado por la lujuria, hicieron que Camilo comenzará a revolverse desesperadamente en la cama, pero la fuerza del hombre era mayor, quien comenzó a besar al chico levantándole la playera.
los ojos de Camilo comenzaron a llorar, pero el hombre sonriendo dijo: vamos mariconcito no seas chillón si bien que te va gustar, yo tengo mucha experiencia y los putos como tú son los que más me han disfrutado.
tengo buena verga, tócala para que sientas.
y el hombre dirigió la mano de Camilo a su miembro que no dejaba de luchar.

Compadre: por qué la haces de a pedo y no te dejas.
a poco no le has entregado las nalgas a nadie todavía?.
así que es eso.
no mames con ese culo cómo nadie te lo ha desquintado.
yo voy a ser el ganón.

Y cuando este se levantó un poco para bajarse el pantalón y el boxer, Camilo aprovechó para salir corriendo empujándolo y haciéndolo caer de la cama.
Asustado y llorando, Camilo llegó a la sala y le dijo a Damián que despertara.
Asustado, Damián despertó y al hacerlo vio a Camilo llorando y a su compadre con los pantalones abajo.

Camilo llorando: este miserable intentó abusar de mí.

Damián yendo hacia su compadre le propinó un golpe en el estómago y lo sacó a empujones de su casa.
Luego de ver eso, Camilo se metió a su cuarto sin decir más nada.

Al día siguiente, antes de irse al colegio, Camilo le advirtió a Damián: lo que pasó ayer es lo único que faltaba para que este fin de semana que regrese mi mamá le diga todo lo que pasa en su ausencia.

Damián; no puedes decirle nada porque si lo haces yo le diré que eres maricón.

Camilo: eso no me importa.
pero ya no me callaré.

Damián: te sientes muy seguro.
tu madre te despreciará cuando sepa lo que eres.

Camilo: eso no puedes saberlo, pero ya veremos quién pierde más.
este fin de semana, mi mamá lo sabrá todo.

Y Camilo salió de su casa dejando a Damián furioso.
Unas horas más tarde, alguien tocó la puerta de su casa y se sorprendió al ver a su compadre nuevamente.

Damián: Qué quieres aquí?
Compadre: ayer se me quedó mi cartera, no tiene lana pero necesito los documentos.

Damián: cómo te atreves a regresar.
no sabes el pedo en el que me metiste.
todo por quererte chingar al puto de mi "hijo".

Compadre: ¿violar?.
No mames compadre, ¿eso te dijo el mariconcito? pues no es cierto.
fue él quien se me ofreció cuando iba al baño y luego la hizo de pedo.
te digo la verdad compa.

Damián: ¿Camilo se te ofreció?
Compadre: sí compa.
me restregó sus nalgas en la verga, pues que querías que hiciera, si tiene un muy buen culo.
créeme compa, Camilo es una puta.

Las palabras se clavaron en Damián, por lo que decidió hablar con su hijastro para evitar que dijera todo a su esposa, para ello decidió ir a buscarlo a su escuela.
Cuando Damián llegó pudo ver como Camilo salía acompañado de un chico de su edad.
un chico con el que sonreía y jugueteaba coquetamente.
el rostro de Damipan cambió y sus puños se cerraron, lo que su compadre le había insinuado era cierto.
sin decir nada, Damián regresó a su casa.

Ese día, Camilo tuvo que ir hacer un trabajo en equipo, por lo que ni siquiera se molestó en avisar.
Eran cerca de las nueve de la noche cuando Camilo regresó a su casa, al entrar vio varias cervezas tiradas en la sala, su padrastro estaba tomando nuevamente aunque él no estaba ahí, por lo que decidió irse a encerrar en su cuarto, no quería discutir otra vez.

Camilo llegó a su cuarto y grande fue su sorpresa al encontrar a Damián sentado en el sillón de su habitación, Damián estaba solo con boxer y una playera para dormir, estaba ebrio.

Camilo: ¿Qué haces en mi cuarto? Vete de aquí.

Damián solo sonrió cínicamente y se levantó.
Camilo vio a su padrastro caminar hacía él como un tigre y llegando muy cerca de él, éste levantó su mano y le propinó una bofetada al chico.

Damián: eres una puta.
eso eres.
¿de dónde vienes? ¿a quién le entregaste el culo esta vez?
Camilo muy sorprendido no supo que responder, solo sintió como Damián lo tomaba de la cintura acercándolo a su cuerpo e intentando besar sus labios.

Camilo: Qué haces?.
estás borracho.
suéltameee
Camilo empezó a monotear para liberarse, pero la fuerza de su padrastro era superior: Mi compadre tiene razón, eres un calienta huevos, te haces el difícil pero bien que te gusta.

Damián dirigió su mano al culo de Camilo, que al sentirlo gritó y comenzó a patalear más.

Camilo: Noooo.
déjame, Daamián tú eres el esposo de mi mamá.
suéltame.

Damián: tu madre, sabes cuánto tiempo tiene que tu madre no me satisface en la cama, por eso tengo que desfogarme con putas y también con putos, porque sí varias veces se la he metido a un maricón.

Camilo: eres un cerdo.
suéltame.
voy a decirle esto a mi mamá.

Damián: jajajajaja.
después de lo que te voy hacer dudo que tengas cara para decirle algo a tu mami.

Y Damián alzó a Camilo y cargándolo como un costal lo sacó de su habitación mientras este pataleaba, llevándolo a la habitación que él compartía con su esposa.
dio un golpe a la puerta entrando y luego aventó a su hijastro en la cama.
Aturdido, Camilo vio como Damián cerraba la puerta con llave.

Camilo: ¿Qué vas hacer?
Damián sonriendo sádicamente: De verá no te lo imaginas (mientras se quitaba la playera y el bóxer quedando desnudo y revelando una enorme boa de carne entre sus piernas)
Camilo lo vio asustado y Damián agarrándose la verga le dijo: te voy a meter esto por el culo.

Camilo aterrado intentó huir, pero Damián lo detuvo y le dio otra bofetada que lo tiro en la cama y se arrojó sobre él besándolo en la boca y comenzando a desgarrar la ropa del joven que comenzó a sollozar pidiendo auxilio.

Damián: grita todo lo que quieras.
nadie te va escuchar.
hoy eres mío aunque no quieras.

La ropa de Camilo fue destrozada, primero la camisa y después el pantalón.
entonces con una malvada sonrisa, Damián despojó a Camilo de la última prenda, su bóxer, quedando ante él un joven desnudo, blanco, delgado y muy deseable.

Camilo llorando: por favor no lo hagas.

Damián: no sé por qué lloras si eres puto.
esto es lo que te gusta y te aseguro que te voy hacer gozar mucho.

Camilo sollozando: no por favor, tú y mi mamá son.
y yo.
yo nunca he hecho esto.

Damián: estás diciendo que eres virgen?
Camilo: sí
Los ojos de Damián brillaron y viendo fijamente a Camilo lo soltó por un instante solo para darle la vuelta y ver las nalgas de su hijastro que lucían hermosas, redondas y suaves.

Damián: no mames tienes las nalgas como de una vieja.
vamos a ver si es cierto lo que dices.

Y los ojos de Camilo se abrieron para luego gritar cuando sintió como Damián sin el meno cuidado metió un dedo dentro de su cavidad anal.

Damián: está bien cerrado.
¿eres virgen o ya tiene mucho que no te la meten?
Camilo llorando solo se sentía como el hombre más humillado del mundo.
Damián metió un segundo dedo y comenzó a hacer movimiento de tijera para ampliar la cavidad.
así fueron por más de cinco minutos en los que también se dedicó a tocar morbosamente todo el cuerpo del chico, así como besar y lamer su espalda.

Damián sacó los dedos y volteó al joven para tenerlo frente a frente.
el chico lloraba y sintió como su padrastro se inclinó para besarlo en la boca, apoderándose de sus labios y metiendo toda su lengua hasta la garganta del joven.
era el beso más apasionado de su vida, podía sentir la barba de ese hombre restregándose en su cara.
cuando le faltaba la respiración, Damián lo soltó y vio como el pene del chico comenzaba a despertar.

Damián: te está gustando verdad y aún viene lo mejor.

Camilo: no lo hagas.
no diré nada.
solo déjame ir.

Damián: aunque quieras ya no podrás decirle nada a tu madre.
y más te vale que seas virgen como dijiste porque si alguien más ya te metió la verga te mató a madrazos.

Damián se levantó un poco, abrió las piernas del muchacho y sin decir más, empezó a meter su verga en el culo de Camilo, que al sentir la presión comenzó a gritar: por favor, paraaaaa.

El anillo de Camilo estaba completamente cerrado por lo que la enorme verga de Damián no podía entrar fácilmente.

Damián: no mames, estás bien cerrado, pero yo me encargo de que te entre hasta los huevos.

Damián retiró toda su espada de carne y tomando impulso volvió a meter su verga en el culo del chico esta vez llegando hasta la mitad.
Camilo volvió a grita más fuerte que la primera vez, sintiendo como un intruso comenzaba a entrar en su cuerpo robando su inocencia.

El rostro de dolor de Camilo excitaba demasiado a Damián, que continúo empujando su verga dentro de Camilo hasta que finalmente entró todo chocando sus huevos con las nalgas del recién desflorado.

Camilo: Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Damián: de nada te sirve seguir gritando.
ya estamos pegados.
me perteneces.
soy tu primer marido.
yo me lleve tu virginidad, jajajajaja
Las palabras de Damián se clavaban en el corazón de Camilo así como sentía como la verga de su padrastro se clavaba en él llegando cada vez más profundo.
el dolor que sentía era enorme.

Damián: qué se siente estar siendo follado por el mismo macho que se folla a tu madre.
gime perra.
gime como ella cuando se la clavó aunque tú me aprietas más.

Camilo se mordía los labios para no emitir sonido alguno, pero cuando Damián comenzó el mete y saca, los gemidos de dolor comenzaron a escucharse por toda la habitación.
los gemidos se combinaban con los de Damián que como un semental no daba tregua al culo del chico.
también resonaba el sonido de dos cuerpos chocando.
Camilo intentaba detener el mete y saca con sus manos, pero Damián le retiró las manos y el chico solo pudo sujetarse a las sábanas revueltas de la cama.

Damián era un hombre de mucho mayor tamaño y masa muscular que su hijastro, por lo que la escena era demasiado violenta.
de pronto Damián se detuvo y al sacar su miembro de un solo golpe, vio a su verga mancha de sangre como si de una espada se tratara.

Damián soltando una gran sonrisa dijo: no mames que regalo me has dado.
te rompí todito.
he tenido a muchos putos pero ninguno había desquintado.
solo por esto te voy hacer que goces tanto para que nunca olvides al macho que te desfloró.

Damián dio la vuelta a Camilo que ya parecía un muñeco sin fuerzas y pociéndolo de perrito entró de una sola estocada en el culo recién desvirgado del muchacho que volvió a gritar como si un cuchillo lo partiera en dos.
en esa posición la penetración era más profunda y Camilo sentía más adentro a su violador.

Damián: siénteme putito.
siente a tu macho.
no puedes ni hablar de lo lleno que estás.
no mames que placer me das.

Camilo escuchaba las palabras y sentía cada una de las estocadas, pero en su mente pensaba cómo podría volver a ver a su madre a la cara después de eso.
cómo decirle que su esposo ahora también era su marido.
que el hombre que ella amaba lo había desflorado en su propia cama, lecho manchado por el sudor de ambos cuerpos y por la sangre de su desvirgado culo.
era su padrastro él que le había quitado la virginidad, su sueño de encontrar a un buen chico y entregarse a él en una maravillosa primera vez le había sido arrebatada por un hombre sin escrúpulos, un hombre que solo se estaba desfogando con él, utilizándolo como una puta, pero solo eso.

Damián se inclinó hasta llegar a morder la oreja de Camilo y susurrarle: quiero que goces tanto como yo.
dime que eres mío y nunca podrás olvidarme.

Damián aceleró sus envestidas y en una de sus estocadas dio en el punto rozando la próstata del menor que gimió de placer.

Damián: al fin lo encontré.
ahora solo gozarás.

Camilo: ah ahahahahahahahahahahahahah (Camilo comenzó a odiarse a sí mismo por sentir placer, porque aunque odiaba a su padrastro, sentía que lo llenaba de placer, muestra de ello era su miembro que estaba erecto)
Damián lo levantó y arrodiallados en la cama, siguiendo con el mete y saca, Damián comenzó a masturbaa a Camilo, tomando su pene con su mano y gozando de la excitación del chico.

Entre gemidos de placer y pasión, Camilo sentía su cuerpo arder, su cabeza le daba vueltas y se sentía pegado a Damián, sentía que en ese momento le pertenecía a su padrastro, al hombre que le robó lo mejor de él.
en su rostro sentía pegada la cara barbosa de Damián, en su espalda, sentía el pecho lleno de vellos y sudor, su propio pecho y tetillas agarradas por el mayor y su culo unido con la verga del violador, era la vaina para la gran espada de su padrastro.

Camilo no pudo más y explotó en la mano de Damián que al sentir la corrida de su hijastro le dijo: goza chiquito, no puedes negar que te gusta.

Camilo se desfalleció en la cama y Damián cayó sobre él aún pegado por su miembro y continúo con su mete y saca bufando como un toro y anunciando: Me vengoooo
Camilo abrió los ojos e intentó empujar a su padrastro, pero éste se aferró más a él y dijo: voy a correrme dentro tuyo para marcar mi territorio.
vas a recibir toda mi leche, a ver si no te dejo embarazado, jajajaja
Damián dio tres estocadas más y dando un grito de placer de macho comenzó a correrse.
Camilo sintió como la verga de su padrastro se engrosó aún más y empezó a sentir lefazos dentro de él, eran chorros que inundaban sus intestinos.
Camilo lloraba amargamente, sabía que no podía ser preñado, pero parte de ese líquido caliente se quedaría para siempre dentro de su cuerpo llevando rastros de su padrastro, su violador eternamente dentro de él.
ya estaba marcado.

En su oído, Camilo escuchaba el resoplar de Damián, aún seguía sobre de él y dentro de él, la leche había dejado de salir.
sintió como Damián se incorporaba y luego de un ¡plop! su verga salía del cuerpo mancillado.

Damián dio un gemido lleno de placer sintiéndose más macho y se arrojó a un lado de la cama, resoplando y diciendo: uhhhh, tenía mucho que no me deslechaba así, mis huevos quedaron vacíos, jajajajaja.

Y volteó a ver el cuerpo desvencijado de Camilo, que estaba ahí sin poderse mover con el cuerpo adolorido y el culo sangrante y saliéndole la leche de su violador.

Damián: Y ahora qué Camilito.
¿vas a decirle algo a tu mami? .
vas a decirle que te chingué.
dile que sus sábanas favoritas están manchadas por tu sangre virgen y por tu leche, que yo te hice venir.

Camilo humillado hizo el intento de levantarse para irse pero Damián lo impidió jalándolo hacia él y abrazándolo posesivamente: Ni madres, hoy duermes conmigo, ya eres mío y aparte de ahora vas a servirme para desfogarme cuando yo quiera.
me perteneces y cuando tu madre no esté serás mi mujer, vas a darme el culo solo a mí y cuando yo lo quiera.
a partir de mañana vas hacer todas las funciones de una vieja, en el día atenderme y en la noche entregarme el culo.
a partir de mañana eres CAMILA!!!!!