EL PADRE DE FAMILIA
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por man_1209.
Soy mexicano, tengo 25 años, 1.73, 63k, cuerpo atlético y
con algo de vello corporal, tez blanca, ojos marrones y pelo oscuro.
Cuando estudiaba la carrera universitaria me mude a la
ciudad capital del estado en el que vivía, alquilaba un departamento en el
centro, a dos cuadras de la universidad
y a 6 del malecón y el parque central de la ciudad. Siempre me ha gustado
el deporte vengo de familia de ciclistas y atletas, como en esa época no me
alcanzaba el dinero para pagarme la renta del gimnasio iba a correr al malecón. La ciudad cuenta con
dos malecones uno a cada lado del rio, uno de ellos tiene un boulevard con bastante
tráfico y el otro está dentro del parque, y a un costado hay plazas
comerciales, edificios departamentales y vendimias de garnachas, pasa por
debajo de 3 puentes. En aquel entonces yo con 20 años y un parque un tanto
descuidado por el gobierno, con arbustos, maleza crecida, algunas lámparas
fundidas y poca vigilancia por parte de policías, era poco frecuentado al no
ser por personas que íbamos a hacer un poco de cardio o algunas parejas que
aprovechaban las partes oscuras.
Iba a correr al malecón de lunes a viernes, entre las 7:30 y
8:00 pm. Me ponía una top tank y un short deportivo flojo de futbolista. Unas
veces era uno blanco y otras uno celeste. He de aclarar que siempre he sido una
persona bastante horny e ir a correr y hacer ejercicio me provoca bastante
apetito sexual, el simple hecho de verme en ese short deportivo, mis piernas
velludas y como se marcaba mi verga, me provocaba una excitación. Incluso en
ocasiones huelo mi ropa interior y los shorts que uso para el gimnasio.
Un día paso corriendo a un costado de un edificio departamental
y estaba una familia, un hombre, su esposa y dos niños pequeños uno de ellos en
un carrito el cual empujaba el niño más grande, Él como de 34 años, 1.75,
cuerpo normal, blanco, barba y bigote, ceja poblada y cara de malo. Vestía una
camisa blanca abotonada y un pantalón negro de vestir, pase corriendo a un
costado de ellos y el me miró fijamente a los ojos, cuando lo paso cuento hasta
diez, volteo hacia atrás y él me estaba viendo, cuando paso de regreso sucedió
lo mismo, me vio fijamente a los ojos y yo le sonreí pero ya no voltee a verlo.
Al día siguiente allí estaba él sentado en el malecón frente al edificio
departamental con los dos niños pero en esa ocasión ya no estaba su mujer,
desde que me diviso clavo su mirada en mí y yo en el… tanto así que cuando le
pase cercas note como desvió su mirada al bulto en mi short que ya iba un tanto
crecido de la excitación que me provocaba la mirada de ese macho barbudo, subió
la mirada y me sonrió, de regreso pase caminando y solo lo saludo con un
“buenas noches”.
Al día siguiente no pensaba en otra cosa que no fuera en la
hora de irme a correr y ver al hombre de la barba, recordé como me había visto
el bulto marcado en el short y decidí llevar el deportivo color blanco y… sin
ropa interior. Allí estaba él, con los dos nenes, su ropa de oficina y
esperando a que yo pasara. Desde que lo vi, mi verga comenzó a crecer y para
cuando pase a su lado era más que notorio lo que yo quería con él. He de
aclarar que al no llevar ropa interior era mucho, pero mucho más notoria mi
verga y al ir corriendo se movía bastante, él la vio y puso cara de sorpresa…
yo ya no pensaba en correr ni en el ejercicio, solo quería pasar de nuevo y
coquetear.
Supuse que vivía en los departamentos que estaban allí y que sacaba
los niños a jugar, porque cuando yo venía de regreso ya no estaban los niños
con él. Yo con mi verga bien parada me voy acercando hacia donde estaba y empiezo a agarrarla, él se me
queda viendo y me hace señas de que me baje hacia la parte del parque donde
había bastantes arbustos y estaba algo oscuro, bajo y el baja detrás de mí
después de un par de minutos al encontrarnos abajo el me empieza a besar con
desesperación y por la parte de abajo del short saca mi verga y me masturba
mientras me besa, se agacha y empieza a mamármela, sentía como mis 17 cm de
verga entraban en su boca y como la llenaba de saliva incluso golpeaba su
lengua con ella, me quita el short y la sigue chupando por un buen rato, me
voltea y empieza a chupar mi culo velludo, sentía como su barba y bigote rosaba
entre mis nalgas.
Las chupadas en el culo tanto darlas como recibirlas es lo
que más me gusta en el acto sexual, incluso cuando veo videos porno me corro en el momento en que los actores se chupan el culo.
Bueno, continuamos besándonos. Aquel hombre me parecía de lo más
atractivo y el simple hecho de saber que era casado me ponía a full, le
pregunte si le gustaba que le chuparan el culo y dijo que sí. Así que lo voltee
y antes de quitarle el pantalón empiezo a olerle el culo por encima, se sentía ese
ligero olor a culo y me excitaba pensar que había traído ese pantalón todo el
día, se quita el pantalón y empiezo a mamarle el culo aún más peludo que el mío
sin pensar en si estaba limpio o no, ese hombre me gustaba tanto que me lo
podría comer como sea, tenía una verga muy parecida a la mía con excepción de
que él era uncut pero se le podía pelar fácilmente, antes de chuparlo lo olí y
literal olía a verga pero era un olor suave que no molestaba, al contrario me
gustaba mucho y culminé chupándosela, me levanta y seguíamos besándonos se
agacha y saca de su cartera un condón, pensé que él se lo pondría y me follaría
pero todo lo contrario, pone el condón en mi verga y me pide que lo folle.
En ese momento estaba a tope… el simple hecho de saber que me follaría a un hombre
mayor que yo y casado, con lo mucho que me gustan los maduros matrimoniados la excitación fue total.
Ese agujero no era virgen, mi verga entro sin problema alguno y de tope, solo gimió
cuando entro la cabeza lo folle por varios minutos,
el gemía de placer y pedía más, yo solo estaba en camisa y sin
short y él con el pantalón en sus tobillos y la camisa alzada. Me percate que
había un hombre viéndonos detrás de unos arbustos y se estaba masturbando, me
éxito más y le daba más duro… no lo invite a unirse puesto quería que ese
hombre fuera solo mío y en parte el otro tío no me atraía nada. Allí estaba yo tirándome al hombre de la
barba, masculino y con cara de malo, yo sacaba la verga y se la volvía a meter
de golpe.
Ese agujero estaba totalmente dilatado, la saco y me dice
que me corra en sus cara y labios, cuando termine él se levanta
con los labios y la cara manchada y me empieza a besar haciéndome
probar mi propia leche, mientras nos besábamos él se corre, nos quitamos el
exceso de semen de la cara y con la parte del revés del short nos limpiamos, no
se notaba tanto puesto que yo iba un poco mojado por el sudor, nos despedimos
con un beso, me dijo que yo subiera al malecón antes que él y que él subiría
después.
Al día siguiente quería que se llegara la hora para volver a
ver a ese hombre pero ya no estaba, pasaron varios días incluso fui un sábado y
domingo y no había rastro de él, a la semana y media ahí estaba en el mismo
lugar solo y fumándose un cigarrillo… al verlo deje de correr y empecé a
caminar, él se levanta y empieza a caminar por sobre el malecón y yo detrás de él.
Como les mencione al principio el malecón pasa por debajo de tres puentes… al
llegar a uno de ellos él se baja a la parte del rio y yo detrás de él, volvimos
a tener sexo atrás de uno de los gruesos muros que detiene el puente y donde
era más oscuro, paso exactamente lo mismo…
excepto por el tío mirón y que en esa ocasión me corrí dentro de su culo y
condón, y el mientras yo lo follaba.
Esa fue la última vez que tuvimos sexo…
después no lo veía tan a menudo y si lo veía, lo veía con su mujer y los
nenes, incluso me lo tope en un centro
comercial, solo me sonreía. Hoy en día es complicado tener sexo en ese lugar
puesto que el parque esta remodelado, bien cuidado y vigilado, incluso es uno
de los mejores parques en el norte del país. Yo ya no vivo en esa ciudad.
Soy un chavo bastante caliente y ya les estaré contando
algunas experiencias más adelante.
Espero haya sido de su agrado.
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