El papá de mi hermano 2

“Y bien, ¿Me dejas probar tu leche?” Le dije sin ningún tipo de pena, mirándolo con picardía y mucho deseo “ay mijo, ya eso es pasarse contigo” me dijo con un tono apenado intentando quitar mi mano de su miembro.
Parte 1:

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Hola de nuevo, si bien deje la ultima parte hace poco mas de un año, con base en que me la e pasado varios días esperando a por alguna jugosa historia con un maduro gordo en esta pagina, decidí finalmente continuar mi anterior relato, el cual desde ya les digo involucra a este semental del cual fantaseaba hace un año

Por si no quieren leer el anterior relato, el cual tiene algo de contexto de la situación pero si te lo saltas no pasa nada, resumo nuevamente, mi nombre es Daniel y tenia en este entonces 19 años, cuerpo medio delgado y trabajado por el gym, 1.65 cm y 19 cm (de verga algo gruesa por los genes)

El protagonista de esta y la anterior historia es Carlos, el esposo de la ex esposa de mi padre (suena enredado pero ya explique mejor todo en la parte 1, digamos que es mi padrastro indirecto) físicamente es para mi todo un semental, en la parte uno lo describo como “un poco mayor que mi papá, de aprox. 50 años, 1.75 de estatura, gordo, de tez café no tan oscuro, sin barba y con un corte de pelo tipo militar, ojos color negro y bastante callado y amargado, sin embargo nunca a sido irrespetuoso conmigo, al menos hasta ese momento jeje”

Aquí les voy a contar como fue irrespetuoso conmigo, si saben a lo que me refiero. Como me estaba quedando en su casa en ese momento, en múltiples ocasiones hacia lo mismo de la parte uno, cuando Carlos y la ex de mi padre se iban a buscar a los niños al colegio, yo aprovechaba y olía las trusas sudorosas y olorosas de Carlos, hacia esto por varios minutos hasta que ya era hora de que ellos regresaran.

Después de pasar tiempo fantaseando y mirando al bulto de Carlos disimuladamente, mi mente y mi cuerpo pedían a gritos estar con Carlos, pero también sabia que era imposible que algo pasara pues Carlos es un señor con esposa e hijos; y su actitud siempre fue la de un macho al 100%, con comentarios machistas y homofóbicos de vez en cuando, incluso hablando de su día a día, era el típico señor mayor que se la pasaba en el trabajo (un taller de autos) luego llegaba a su casa y era para andar todo malhumorado un rato y luego irse a beber, y por supuesto, ya borracho se ponía super caliente y todo el apartamento escuchaba como le hacia el amor a su mujer.

Aunque en los dos días que llevaba con ellos, no los escuche en ningún momento coger, así que solo cubría la parte en la que llegaba a su casa tomado o a punto de emborracharse y poco más, la verdad ver a Carlos todo borracho también me prendía demasiado, su comportamiento pasaba de pensar con la cabeza a pensar con su verga, nalgueaba a su esposa, hablaba de viejas conmigo cuando ella no estaba cerca y después de cierto tiempo ya su bulto se veía más grande supongo yo a causa de alguna erección

Durante mi 4 o 5 día en mi estancia, un sábado, el taller de Carlos abría un poco mas tarde por lo que a eso de las 8 de la mañana, desperté y Carlos estaba en la casa, su esposa por otra parte estaba con los niños en el entrenamiento de fútbol de mi hermanastro, del cual llegaban siempre a eso de las 2 pues Carolina aprovechaba para hacer vueltas en la ciudad. Yo por mi parte me había dedicado estos días a ayudar con los niños y fantasear sobre Carlos, poco más.

Estaba en la cocina haciéndome desayuno cuando siento como Carlos sale de su cuarto, con los ojos chiquitos y el pelo despeinado, en trusa y camisilla blancas y unas sandalias, verlo de esa manera me puso a mil, se podía ver claramente su erección de recién despertado, a la cual no miré para nada disimulado, supongo que por estar medio dormido también, Carlos notó esto y rápidamente se acomodo su verga a un lado para no mostrar tanto, yo lo saludé como si fuera algo normal “buenos días Carlos, que raro verte a esta hora, ¿el taller esta cerrado los sabados?” A lo cual respondió “No, los sabados abro mas tarde, ¿estas haciéndome desayuno?” Me preguntó entre risas a lo que respondí con un breve “No” y luego de reírme yo le ofrecí hacerle de desayunar

“Esta bien mijo, voy a bañarme mientras tanto” dijo regresando a su habitación; desde la cocina se puede ver directamente a su puerta, pues es un gran pasillo que finaliza con la habitación principal; sorpresivamente, Carlos no cerró la puerta de su habitación, por lo que pude ver como se quitaba esa camisilla blanca, mostrándome su muy peluda espalda a la cual yo me sentía tan atraído, aunque honestamente digo esto de todo lo que veo en Carlos, luego pude ver como se agachaba mientras se quitaba su trusa y me dejaba ver ahora su gran culo gordo

La verdad es de esos culos que son grandes gracias a que la persona es gorda y no por otra cosa, era grande, pero algo plano si lo vemos de perfil, y estaba repleto de pelos también; durante unos segundos pude ver a este semental de espaldar y adorar todo ese cuerpo peludo, lo cual fue interrumpido cuando Carlos se dirigió al baño, escucho la puerta del baño y luego la regadera.

En estos días algunas puertas estaban recién instaladas, por lo que aún no tenían de un tomo para abrir y cerrar, lo que dejaba la puerta con un agujero dónde va el tomo respectivamente, esta era la primera vez que podía oler su ropa interior justo después de quitársela, por lo que sigilosamente me fui a su cuarto, con el corazón a mil de los nervios y de lo caliente que estaba, tomé su ropa interior y como de costumbre comencé a olerla, aun estaba caliente y el olor no se compraba a las anteriores veces, esta vez estaba extremadamente fuerte, el olor a verga en su máximo esplendor.

Con una erección por mi parte, me di cuanta de que la puerta de su baño no tenia el tomo, por lo que me acerque a mirar a través de este, con su ropa interior en mi cara me incliné a ver a través del agujero, lo que vi para mi fue el paraíso; la vista daba justo en su pelvis y tenia una vista directa a esa verga tan jugosa que era motivo de mis fantasías y de la cual mi nariz se estaba deleitando en ese momento.

Su verga era demasiado gruesa, si bien estaba flácida, se veía bastante grande y carnosa, solo me podría imaginar como se vería erecta y de verla como era de grande flácida le podía deducir fácil unos 22 centímetros, eso sin contar cuan gruesa se pondría; estuve viendo por unos minutos mientras Carlos se echaba jabón y restregaba todo su cuerpo; para no dar ninguna sospecha me regresé apresuradamente a la cocina, hice el desayuno para ambos y para el tiempo en que estaba sirviendo la comida ya Carlos estaba saliendo de su habitación

Me senté en la mesa y Carlos se sentó junto a mí, pude sentir el olor de su perfume enseguida, “y entonces, ¿A que hora abres hoy?” Le dije “a eso de las 10, tengo que salir rápido porque después se me hace tarde, hoy me tardé por el desayuno, me toca desayunar siempre por allá” me respondió

“Osea que te vas sin desayunar?” Le pregunté “si mijo, el tráfico en este mierdero es horrible y no me da tiempo” me respondió. Luego de terminar se despidió y salió camino al taller, dejándome solo en casa como de costumbre; con la diferencia de que esta vez ya no podía aguantarme más, llevaba casi una semana sin masturbarme y todos los días mi verga se ponía a mil gracias a mis fantasías y a jugar con su ropa interior, así que volví a su habitación y agarré nuevamente su ropa interior, me fui a su baño y me masturbe finalmente recordando esa gran verga y con la otra mano sujetando su trusa en mi cara.

Poco después me bañé en su baño y me regresé al mío a cambiarme, pasó el tiempo y llegó la ex de mi padre con los niños y así pase el resto del día con ellos, en la noche no llegó Carlos, a lo cual después de preguntarle a su esposa porque no había llegado me responde con un tono algo enojado “quizás donde estará bebiendo” pues ya se le hacia de costumbre hacer esto los fines de semana

A eso de las 2 de la mañana, siento como alguien esta intentando abrir la puerta principal, puesto que mi habitación estaba justo al lado de esta, pasó un rato escuchando esto y nada que se abría la puerta así que fui yo a ver que pasaba; al abrir la puerta veo a un Carlos súper borracho y tambaleante, quien al verme me balbucea algo que yo deduzco fue el típico “mijo, ¿Cómo estas?” de siempre, entró a la casa y esta vez se dirigió a la sala en vez de a su cuarto “Que pasa Carlos?” Le pregunté, al no tener respuesta le dije “¿te traigo algo para tomar?” A lo cual asintió y yo fui a la cocina a por un vaso de agua, cuando regresé Carlos estaba en el baño orinando

Está vez pude acercarme a la puerta del baño con toda la tranquilidad, pude ver esta vez su gran verga desde cerca, como se le veían esas venas marcadas a pesar de no estar erecta; le di el vaso con agua y regresamos a la sala, irónicamente Carlos se pone mas hablador cuando está borracho, me contó como hace unas semanas que hace lo mismo, cada fin de semana se va a beber con sus amigos y llega a estas horas, su esposa ya harta de todo esto cierra la puerta dejándole a el durmiendo en la habitación de huéspedes (que es la mía)

Ya un poco mas sobrio, siguió hablando conmigo, me confesó que todo inició pues no le estaba yendo tan bien en el trabajo, y su esposa cuando llegaba a su casa siempre estaba cansada y no quería pasar tiempo con él y que prefería pasar el rato con alcohol en vez de serle infiel a su mujer con alguna puta que se le atraviese, pero que no sabia cuanto más podría aguantar “uno tiene necesidades” me dijo intentando excusarse “no digas eso” le dije “que tal que ella te haga lo mismo” le dije intentando hacerlo entrar en razón “no me sorprendería, después de todo ella está joven y yo soy un viejo” me dijo algo melancólico “pues hasta donde se a ella le gustas así, todo viejo y gordo” le dije entre risas “bueno pero yo no dije nada de estar gordo” me respondió riéndose también “yo se qué hay gente que le gustan los maduros, así como a mi me gustan jóvenes” añadió.

Ya se notaba mucho mas animado, volvía a ser el mismo borracho caliente de siempre “que mas quisiera yo que Caro me dejara cogérmela, estás mujeres ya solo saben joder y joder” me dijo, yo no supe cómo responder al comentario así que solo le sonreí brevemente “Cuanto llevas tu sin coger?” Me preguntó “pues sólo llevo aquí 5 días, hace unas 3 semanas que me dieron un polvo de despedida” le respondí “no podía irme sin darle la despedida a una amiga del colegio” añadí entre risas, aunque las risas pararon cuando Carlos me pregunta “mijo, a todo esto, ¿a ti te gustan las mujeres o los hombres?” Me quedé en silencio unos segundos, y luego respondí “¿como?” Y me dijo “así mismo, la verdad no pareces un marica de esos” a lo que reaccioné “¿de esos como?” Carlos toma un poco mas de agua y me dice “Si, que parecen viejas” otra vez no supe que responder a tal comentario así que le dije “pues, no parezco vieja” sonreí “pero la verdad es que me gusta todo, hombres y mujeres” a lo que sorprendido me dijo “¿si? Pues no se te nota lo maricon” algo enojado le respondo “pues no se me tiene que notar nada, yo veré donde meto la picha»

Luego de una risa me miro directamente y me dijo “pues yo pensaba que tu ponías el culo, con eso de que agarras mis calzoncillos” en ese momento mi corazón se aceleró, aterrado por lo que me acababa de decir, intenté hacerme el loco y dije “¿Como así?” A lo que me dijo “jajaja no te hagas, esta mañana puse mi ropa en el canasto, y cuando salí de bañarme las encontré sobre el canasto y no adentro” luego de una pausa dijo “y en la tarde que no estaban pase a buscar una cosa y estaba en el suelo ahora, cuando yo la había guardado ya dos veces” no supe como mirarlo a la cara, mi cabeza solo podía mirar hacia abajo y yo no tenia nada que decir.

“Entonces te gusta la verga” me dijo, levanté mi cabeza otra vez y respondí con un leve “si” la reacción de Carlos hasta entonces había sido muy calmada, a pesar de los comentarios homófobos y machistas; pude ver como se agarraba su bulto con su mano para rascarse su miembro, llevándose mi mirada en esa dirección “¿Que pasa? Se te antojó?” Me dice mirándome con una sonrisa, yo sin saber si estaba jugando conmigo seguía inmóvil, lo único que pensaba era en como me podría pegar por intentar algo, para mi sorpresa Carlos era todo risas “jajaja, ya no respondes tanto” me dijo mientras me seguía viendo a la cara, se agarra el bulto nuevamente y me hace señas con la cabeza de que me acerque

Yo súper nervioso me acerqué a él, sentado al lado de él en el sofá acerqué mi mano cerca suyo, entonces agarrando mi mano la lleva a su bulto “siéntela pues, no que te gustaba” me dice, yo agarro su bulto, podía sentir como mi mano se llenaba completamente al agarrar su entrepierna a pesar de que no estaba erecto todavía; seguía agarrando su bulto por unos minutos mientras sentía como su verga crecía poco a poco “a es verdad, a ti te gusta es oler ¿no?” Me dice con una sonrisa “ven pues, acércate”

Mi corazón y mi cuerpo estaban a mil por hora, no me podía creer que iba a oler el origen de mis fantasías directamente de la fuente; con Carlos sentado en el sofá, me arrodillé en el suelo al frente de él y me acerqué a su entrepierna con mi cara, a lo que bruscamente él coloca su mano sobre mi cabeza y restriega mi cara en sus pantalones, yo miro hacia arriba como la típica puta caliente y procedo a quitarle el cinturón “déjame olerla mejor” le dije mientras le bajaba sus pantalones para oler directamente a su ropa interior, mi nariz estaba sumergida en su verga sudorosa y podía sentir como el olor impregnaba mi cara, esto me excitaba demasiado, no podía creerme lo que estaba haciendo y tampoco podía parar.

Carlos agarra mi barbilla y acerca mi cara hacia él despacio y mirándome a los ojos “mira, yo no te quiero faltar el respeto, pero si me paras la verga me la tienes que mamar” me dijo como pidiendo permiso, o tal vez dándome una orden, sin pensarlo dos veces y mientras soltaba mi cara fui agarrando su trusa de la parte de arriba para sacar esa verga tan jugosa que tenía, al verla tantas veces el día de hoy estaba ansioso por devorarla, al bajar su ropa interior vi esa carnosidad gruesa ante mi, estaba semi erecta y ya se veía bastante grande, me detuve a verla unos segundos mientras mi mano la agarraba y comenzaba a masturbarla

Semi erecta y con pre semen en la punta, llena de pelos y sudor, esto para mi era lo mas jugoso que podría desear, empiezo con varias lamidas desde la base del pene hasta arriba, pasando por sus bolas peludas también, al llegar a la punta mi lengua comienza a saborear su jugo, dándole lamidas en círculos sobre su cabeza, segundos después me agarra de la nuca y me empuja hacia él introduciendo su verga en mi boca; si bien lo que conté antes era cierto y mi ultima vez había sido con una chica, no era la primera vez que probaba un rabo, así que sabía como hacerlo disfrutar al máximo de mi mamada

Poco a poco fue creciendo su verga entre mis caricias y lamidas, cuando finalmente creció por completo pude ver la semejante verga que se traía, unos 20 centímetros de pura carne gruesa ante mi, del tamaño de mi cabeza, pensé; con algo de trabajo introduje gran parte de su verga a la boca, la abría todo lo que pude y cada vez mas rápido daba mis chupadas, mientras lo miraba desde abajo directamente a los ojos, podía ver como estaba disfrutando de todo esto, con una sonrisa de oreja a oreja mientras soltaba un suspiro de vez en cuando, su otra mano también fue colocada en mi nuca, acariciando mi cabeza hasta ponerla arriba del todo, ambas manos sujetando mi cabeza empujándome cada vez más hacia él

Su verga estaba entrando y saliendo de mi boca sin parar, cuando agarraba mi cabeza para que yo fuera hasta el fondo sentía como se me iba el aire, con dificultades para respirar pero sin seguir chupando, ya estaba con casi toda su verga dentro de mí, por momentos me soltaba para tomar aire, pero luego volvía a ahogarme con tremenda verga, soltando arcadas y tosiendo de vez en cuando; no podía pensar en nada más, ni siquiera me estaba masturbando yo a pesar de la tremenda erección que tenia, estaba dedicado plenamente en esa verga sudada de maduro, como el sudor la hacia algo salada y su pre semen le daba un sabor distinto pero también salado.

Luego de un rato de estarme metiendo esa verga a la boca, pude sentir como su movimiento cambio un poco, de vez en cuando se movía un poco mas lento, como queriendo recuperarse y evitar eyacular dentro de mi boca; yo por otro lado, estaba buscando justo eso, ya me estaba cansando la boca y quería saborear finalmente toda esa leche que se estaba guardando desde hace un tiempo. Si bien entre chupadas y lamidas, usaba ese tiempo para respirar, por primera vez luego de casi 30 o 40 minutos de estar dándole a su verga con mi boca, me retiré completamente de su entrepierna y seguí masturbandolo solo con mi mano.

“Y bien, ¿Me dejas probar tu leche?” Le dije sin ningún tipo de pena, mirándolo con picardía y mucho deseo “ay mijo, ya eso es pasarse contigo” me dijo con un tono apenado intentando quitar mi mano de su miembro, supongo que su intención era detener todo y volver a su cuarto, mi pregunta fue como devolverlo a la realidad de la situación, y al recordar que andaba un tanto ebrio, haciendo cosas sexuales con lo que bien podría ser su hijastro, le hizo tener dudas de todo “¿Que pasa? No te puedes echar para atrás ahora, ya comencé algo, así que déjame terminarlo” le dije mientras volvía a incorporarme y seguir mamandole la verga, la cual seguía erecta pues nunca deje de usar mi mano.

Está vez, mi performance era mucho mejor que antes, al principio sentía como Carlos intentaba quitar mi cabeza de su miembro, pero no lo hacia con tantas ganas, por lo que ignorarlo era muy sencillo para mi, luego de unos 10 minutos de estar pegado como becerro, pude sentir como su mano se sujeta a mi, esta vez demostrando su fuerza al sacarme su miembro de la boca “me vengo” me dice en voz baja al ver que reaccioné a que me quitara de su verga “Déjame tragármela” le dije mientras mi mano lo masturbaba a gran velocidad y mi boca estaba lamiéndole la punta de la verga; su cuerpo se estremeció y su mano esta vez me agarraba hacia él, introduciendo la cabeza de su verga en mi boca “ahora te la tragas toda mijo” me dice mientras sus piernas todas gordas y peludas se apretaban, sus nalgas se hacían para adentro mientras su cintura se acercaba a mi.

De su gran miembro comienzan a sentirse corrientazos, y de su verga salen muchos chorros de su espesa y caliente leche, al estar con su verga en mi boca, pude sentir como 5 o 6 lechazos saltaban en mi boca, llegando hasta mi garganta, yo por mi parte, me encargué de tomarme toda esa caliente y deliciosa leche, sin desperdiciar ni un poco de esta, succionando todo lo que salía y también intentando succionar todo lo que no salía de su verga.

Luego de esto ambos nos hicimos para atrás, al mismo tiempo admirando uno del otro, yo que desde abajo veía a todo un semental completamente vaciado por mi, con su verga limpia de cualquier rastro de semen, únicamente brillante gracias a mi saliva, desde mi vista podía mirar todo su cuerpo, sudado y oloroso, con su gran barriga y pecho peludo; él por su parte, miraba desde arriba hacia mi, completamente cansado, con la boca llena de su leche, desde arriba podía verme como estaba literalmente a sus pies, algo que para un macho como él es un grandísimo logro el tener a alguien así.

Luego de unos minutos de recuperación, acordamos en que no le íbamos a contar a nadie de lo sucedido, con la condición de seguir haciendo este tipo de cosas siempre que Carlos quiera y esté de acuerdo, yo obviamente accedí y estaba súper emocionado de volver a tener un encuentro con él (mas adelante les contaré más de nuestras aventuras, desde como me destrozó el culo y mucho más)

Muchas gracias por leer mi relato, si veo bastante apoyo seguiré subiendo historias! En mi relato anterior les dejé mi twitter, pero hace unos meses cambie de username y el nuevo es @LDGhost28 por si gustan seguirme, la verdad es que si me escriben probablemente no les responda jajaja pero si son gordos, maduros o como los que ven en mi perfil, invitados son a enviarme sus fotos 😛 y si no son así pero les atraen este tipo de hombres, pueden ver todo lo que comparto 😉