El pequeño Alex, su Papá y sus Amigos.

El juguete preferido de papá..
Esta historia contiene escenas sexuales gráficas entre hombres mayores y menores de 18 años. Material de esta naturaleza si te ofende, entonces no deberías leer esta historia bastante fuerte para muchos lectores.

Por favor, comprender que esta es una obra de ficción. Las acciones descritas en las historias no son reales ni se fomentan o toleran en la vida real. Es ficción amigos, y recuerden eso, por favor.

(La historia original de incesto de padre / hija fue publicada por primera vez en un sub de ASSTR.ORG por el autor «Lil G Lover», bajo el título «Little Lisa». Ese sitio ha estado muerto durante casi 7 años y el autor no pudo ser localizado. Debido a que me gustó tanto la historia original, decidí asumir el control, cambiar la historia para inclinarme hacia el sexo gay y darle una nueva secuela según mi propio gusto y fantasía. No reclamo derechos de autor.)
HISTORIA TOMADA Y TRADUCIDA AL ESPAÑOL.

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PARTE 1 (papá / hijo, incluido, oral, anal, semen)

El pequeño Alex vivía en una gran granja a las afueras de la ciudad, con sus padres y una hermana menor de 9 años Jenny Tenía, él con solo 11 años ya estaba terminando el quinto grado en la escuela local.

Alex era bastante pequeño para su edad, pesaba setenta libras como máximo, sus pedacitos de niño apenas comenzaban a desarrollarse,ya con un lindo y redondo trasero nunca besado por el sol.

 

Su código de vestimenta escolar requería que usara pantalones cortos azules hasta la rodilla y una camisa blanca estampada, una chaqueta verde (pero solo en condiciones climáticas adversas), calcetines y zapatos negros; odiaba el atuendo, pero honestamente, vestía de esa manera y con su cabello rubio rizado y sus profundos ojos azules, el pequeño Alex era la esencia de la belleza e inocencia del niño de escuela.

 

Alex era un extraño en la escuela: mientras que todos los otros niños hablaban de novios, novias y sexo, Alex nunca se había tomado de la mano con una niña, ¡mucho menos besar a una! Estaba escribiendo pequeños poemas, soñando con autos de carreras o mirando las nubes volando alto en el cielo despejado de Nebraska

Desde que su madre se lesionó, Alex había comenzado a ayudar a su papá con las tareas del hogar. Era un día caluroso de finales de primavera y Alex disfrutaba caminando la corta distancia a casa desde la parada de autobús.

 

Después de llegar a la puerta de la granja, recordó esa tarde que su papá quería que él ayudara con los caballos y así, sin cambiarse la vestimenta de la escuela, fue a la parte trasera de la casa, a los establos. A pesar de que vivió toda su vida en la granja, Alex nunca había montado caballos ni alimentado a los pollos o esas cosas; odiaba el olor de los animales y solo recientemente comenzó a hacer cosas en la granja. El niño le gritó a su padre y él le respondió que fuera al granero y lo esperara allí.

 

Alex habría seguido las órdenes de su padre si no hubiera sido por los ruidos fuertes provenientes en el establo. Con pasos pequeños y haciendo el menor ruido posible, Alex se arrastró hasta el corral grande donde su padre y Trey, su ayudante de granja negro de 30 años, estaban haciendo algo extraño con dos caballos, un semental marrón oscuro llamado Fury y un blanco – yegua gris. Echó un vistazo al puesto y vio al semental detrás de la yegua, con las piernas en la espalda, haciendo algo que Alex nunca había visto antes.

 

Su padre Jim era un hombre muy grande y peludo, 1.87 de altura y un peso de alrededor de 98kg; Trey, por otro lado, no era tan alto, tal vez 1.72 y bastante más delgado y musculoso, un paquete de bien definido y una línea en V a la vista. Ambos estaban sin camisa y sudando profusamente bajo el sol ardiente.

 

Papá parecía estar ayudando al semental en sus acciones, mientras Trey mantenía a la yegua tranquila y quieta. «Dios, ¿qué le va a hacer Fury a esa yegua? ¿Y qué es esa cosa grande y larga entre sus piernas?» el pequeño Alex pensó. De repente, Fury se lanzó hacia adelante y empujó la enorme cosa entre sus piernas en algún lugar hacia la yegua, y Alex jadeó ante la obscena acción animal. El jadeo del chico fue lo suficientemente fuerte como para que su padre lo oyera e inmediatamente gritó:

«Alex, ¿eres tú? Vete, sal de aquí. Iré a buscarte cuando termine». «Está bien, papá.» Alex respondió y comenzó a alejarse, sonrojado y profundamente avergonzado.

 

Alex nunca había aprendido sobre sexo: así que, cuando salió a mitad del establo, decidió que aún quería ver más acción con los caballos y regresó al establo, tratando esta vez de permanecer muy callado. El niño se subió a una caja y miró por encima de la cabina; lo que vio lo sorprendió, pero se las arregló para guardar silencio.

 

«Esa cosa enorme debe ser su pene», pensó Alex, «escuché a muchachos en la escuela hablar sobre penes y vaginas». La voz de papá interrumpió sus pensamientos cuando le gritó al semental:

 

«Vamos, mete tu verga allí, vamos ahora Fury, tienes que poner tu verga en su coño mojado. ¡Trey! ¡Mantenla quieta, por ¡El amor de Dios!» Alex se dijo a sí mismo: «Dios, papá, ¿qué están haciendo?

 

Por qué llamas a su pene una verga? ¿Qué es un coño? «. Vio al gran semental clavando esa enorme verga dentro de la yegua, supuestamente dentro de su vagina, luego saliendo y conduciendo de nuevo. Alex miró con asombro, aún no había aprendido nada sobre sexo, y estaba celoso de los muchachos en la escuela que siempre hablaban de sexo. Para él, este sería el comienzo de su educación sexual.

 

Alex notó cómo Fury continuaba bombeando a la yegua de una manera más errática ahora, y se preguntó si algo iba a suceder pronto. Luego, con un gran tirón, el semental salió de la yegua y su verga comenzó a arrojar algún líquido en chorro y blanquecino por todo el lugar. El chorro cayó en la parte posterior de la yegua, el piso y pintaron las paredes del corral.

 

El papá de Alex se enojó mucho porque el caballo se retiró de la cría y arrojó obscenidades de izquierda a derecha «Dios maldita sea , ¿por qué no te corriste adentro? Tuviste que salir para correrte, ¿verdad, hijo de puta? Trey se rió en voz baja.

 

Alex estaba confundido pero excitado, «¡Así que ese es el semen! Todos los chicos de la escuela hablan de eso e incluso las chicas lo hacen. ¡Parece un poco asqueroso, como un moco!» se dijo a sí mismo al ver por primera vez la sustancia blanca que había salido disparada de la verga del semental. Una parte de él tenía mucha, mucha envidia porque sus compañeros de clase parecían saber todo sobre semen y él no. Se preguntó cómo se sentirían las cosas, y luego pensó en una niña de 12 años de su clase, llamada «Bitchy» Becky, quien dijo que en realidad había probado semen «fuera de la verga». Ascoo !!!

 

Aunque lo que Alex vio no era el esperma de un hombre, pensó que debía ser lo mismo y una parte enferma y desconocida de él solo quería probarlo. En este punto, su cerebro astuto tomó el control y desvió el flujo de sangre a su pene sin pelo, que de repente se volvió dura como el acero en el espacio confinado de sus pantalones cortos escolares.

 

Después de que el caballo se calmó, el padre de Alex y Trey pusieron a los caballos en diferentes puestos y luego abandonaron el establo, pero el niño tenía curiosidad y se quedó donde estaba. Aunque estaba completamente avergonzado por haber sido atrapado, quería ver más de cerca la enorme «cosa» que colgaba entre las patas del caballo.

 

El niño abrió la puerta y entró en dónde estaba Fury; el semental estaba más tranquilo ahora, pero cuando Alex se agachó, todavía notó que la enorme erección que colgaba entre las patas del caballo todavía rezumaba lentamente una mancha blanca.

 

Alex realmente se excitó al ver el semen del caballo, y quería una mirada aún más cercana. Se quitó el pantalón de la escuela de sus piernas color grisáceo y se arrodilló debajo de la barriga del caballo, la cara del joven justo en frente de la verga de unos 40cm de largo del caballo.

 

Sintiendo la presencia de algo cerca de su verga, el caballo volvió a excitarse y su polla comenzó a crecer a toda su longitud y circunferencia. Al ver el crecimiento, el pequeño Alex se volvió más valiente y extendió la mano derecha para tocar su verga que se sentía caliente en su mano.

 

Él rio. «Dios, es tan grande. Y mira esas cosas», dijo, mirando las grandes bolas del caballo que colgaban de su saco de nueces. Con su mano libre, Alex extendió la mano y la colocó en el fondo de las bolas del caballo. Su mano era tan pequeña que apenas podía sostener una de las grandes bolas, la carne caliente y sudorosa le llenaba el puño. Alex amasó suavemente el saco lleno de semen por un segundo antes de volver su atención a la verga del semental. Envolvió su pequeño puño alrededor de la enorme verga, pero era tan gruesa que su mano solo agarraba la mitad.

 

Deseando sentir más, se movió hasta quedar de rodillas, el pene ahora apuntaba directamente a su cabeza, a solo unos centímetros de su rostro, y envolvió su otra mano alrededor del enorme eje del caballo. Todavía no podía meter sus pequeñas manos alrededor de la circunferencia de esa enorme verga de caballo, pero el niño estaba satisfecho con solo sostenerlo por ahora.

 

Alex estaba excitado de ver la espesa sustancia pegajosa. Con una sonrisa en su rostro, Alex estaba satisfecho con su aventura sexual hasta el momento y examinó la cabeza acampanada del pene del caballo.

 

De repente, el caballo dio un paso adelante y la gran cabeza chocó directamente con la boca del niño de quinto grado, plantando un beso de semen en los labios y la barbilla del niño antes de retroceder.

Los labios de Alex ardieron con la sensación de la cosa pegajosa en su rostro; realmente se preguntaba a qué sabía. «Es ahora o nunca», pensó. El niño lamió vacilante su labio inferior, tomando un poco de semen en su boca; no parecía gustarle el sabor, pero aun así quería más. «Eso sabe raro, algo asqueroso. Pero si Becky puede hacerlo, entonces yo también. Dios, espero que nadie se entere de esto, simplemente moriría». Se tomó un segundo para mirar a su alrededor; sintiéndose seguro, acarició el enorme órgano con las manos hacia arriba y hacia abajo, estimulando aún más al caballo, con más esperma comenzando a salir de la cabeza de la verga. Al ver esto, el pequeño e inocente Alex supo que era el momento adecuado y, con las manos todavía sosteniendo con precaución la verga, se inclinó hacia delante hasta que el espeso semen se derramó sobre sus labios cerrados. Alex abrió la boca, sacó la lengua y comenzó a atrapar el semen caliente en su lengua. Después de un segundo, su lengua estaba cubierta de semen blanco, la trajo y cerró la boca para saborear el tibio esperma.

 

Inmediatamente se inclinó y escupió el agrio semen e hizo una mueca para mostrar su disgusto. «Ewww, eso es asqueroso. Dios, ¿cómo podría Bitchy Becky tragarse esas cosas?

 

«Nunca volveré a hacer esto «. Mientras escupía el espeso semen, sus manos accidentalmente tiraron de la verga del caballo, que ahora estaba al borde de una gran eyaculación. El niño estaba listo para irse, pero sus celos hacia la chica Becky que dijo que había comido semen lo hizo quedarse.

 

El preadolescente una vez más levantó la vista y su rostro estaba al nivel del órgano del caballo. Mientras el caballo seguía sacando su semen, Alex preguntó si sabía tan mal como él pensaba. un minuto estaba convencido de que había reaccionado de más en su primer intento de semen y que el semen no había sabido tan mal, así que nuevamente se inclinó y sacó la lengua para recoger un poco más del espeso semen, cerró la boca para probar el jugo del animal, sin embargo, esta vez sabía igual de mal, si no peor, y nuevamente se inclinó y escupió un bocado del semen agrio del caballo. , mantuvo sus manos sobre la polla del caballo, acariciándola cuando se encorvó.

 

Después de este segundo intento, el niño de 11 años estaba convencido de que no le gustaba el sabor y estaba listo para partir.

 

Sin embargo, la ulitma estimulación que logro hacer, hizo que la verga del caballo se sacudiera en sus pequeñas manos. Congelado por las nuevas acciones y con la boca abierta de asombro, la polla del semental se sacudió una vez y luego roció una enorme carga de semen caliente directamente en la boca abierta del pequeño Alex. La carga agria llenó su boca por completo y se echó hacia atrás en reacción, pero el caballo avanzó y continuó arrojando su corrida sobre la cara del preadolescente.

 

Después de darse cuenta de lo que había sucedido, Alex escupió rápidamente la carga de esperma que llenaba su boca y retiró las manos del pene del caballo. Intentó salir de debajo del caballo, pero sus apresurados movimientos lo asustaron, por lo que se quedó quieto debajo de su gran barriga. El caballo aún no había terminado y procedió a arrojar su jugo espeso por toda la cara y el pecho del niño. Disparos de esperma caliente rebotaban en su frente y le resbalaban por la cara, hasta los labios carnosos, que mantenía bien cerrados. El semental continuó disparando su carga durante los siguientes segundos, cubriendo completamente la cara del niño; fluía por su cuello delgado para empaparse la camisa y hacerla pegajosa al tacto. El pequeño Alex se quedó allí sentado, indefenso, mientras el caballo arrojaba su cálida carga sobre él. El espeso semen comenzó a salir de la enorme verga del caballo y goteó sobre los muslos y piernas de Alex, derramándose sobre los calcetines y zapatos de su rodilla.

 

Después de otro minuto, Alex sintió que era seguro y, con los ojos cerrados por el semen salado del caballo, trató de salir de debajo del vientre del semental. Pero en ese momento el caballo avanzó y su gran verga chocó con la cara del niño; el caballo continuó hacia adelante, Alex sintió sus dos grandes bolas golpear su barbilla.

Se estremeció en reacción, pero el caballo aún avanzó y su enorme saco de nueces subió por la cara de Alex, sobre su nariz, manchando semen caliente de abajo hacia arriba. Después de que el caballo pasó sobre él, el niño de 11 años se puso rápidamente de pie y se secó la cara cubierta de semen con las partes de su camisa que no estaban empapadas en esperma, l salió corriendo del establo hacia la casa con los shorts escolares en mano y el culo casi expuesto.

 

Alex había logrado limpiarse la mayoría del semen blanco de la cara, pero aún quedaba mucho en su cabello, y una mirada a su camisa no dejaba mucho en duda de lo que había estado haciendo. Entró corriendo a la casa y, por suerte, evitó a su padre camino al baño. Cuando llegó al baño, se miró en el espejo de la pared y lo que vio lo sorprendió. Todavía tenía una gran cantidad de semen de caballo goteando en su cabello, su rostro brillaba con los restos del esperma blanco, y su camisa estaba completamente empapada en la cálida sustancia pegajosa del animal, tanto que se podían ver claramente sus pequeños pezones. Inmediatamente se quitó las prendas pegajosas y se paró en el baño usando solo sus calzoncillos blancos, calcetines hasta la rodilla y zapatos, y comenzó a enjuagarse la cara y el cabello con agua.

 

El preadolescente todavía tenía el sabor agrio del semen de caballo en la boca y trató de hacer gárgaras para deshacerse del sabor, pero no funcionó. Entonces su padre Jim lo llamó. «¡Alex! ¿Estás ahí arriba?» «¡Sí papá! ¿Qué pasa?» gritó de nuevo entre gárgaras. «Te dije que esperaras en el granero por mí». «Lo hiciste? «¿Por qué no vienes aquí? Quiero hablar contigo un minuto». Le gritó.

Alex estaba un poco asustado de lo que papá quería hablar.

Él pensó que papá podría haber visto lo que hizo en el establo, pero rápidamente desechó esa idea, y pensó que iba a ser castigado por no ayudarlo con las tareas domésticas. Alex arrojó rápidamente sus prendas pegajosas en el cesto de la ropa, fue a su habitación y se puso un par de pantalones cortos de mezclilla y una camiseta blanca. Bajó las escaleras todavía con los calcetines y los zapatos hasta la rodilla y encontró a su padre con sobrepeso solo con un par de pantalones cortos sentados en el sofá de la sala de estar. Eran las únicas dos personas en la casa; la pequeña Jenny todavía estaba en la escuela mientras mamá estaba de visita en el centro.

 

Jim estaba en el sillon relajado con el control remoto de VCR en su mano derecha y el volumen bajo.Dio unas palmaditas en el espacio junto a él y Alex corrió hacia el sofá y se sentó, su pequeño cuerpo parecía aún más pequeño sentado al lado de su gran padre.

 

«¿Cómo estás cariño?» Dijo Jim. «Bien, ¿qué pasa papi?»

«Bueno, me preguntaba por qué no querías ayudarme con las tareas hoy». – Jim

Alex respondió: «No, lo hice papá, solo … no sé».

Jim presionó: «No sabes qué Alex, puedes hablar conmigo».

«Estaba cansado, eso es todo». -Alex

«Te escucho, la escuela puede ser difícil, ¿no?» Alex asintió sí. «Entonces, ¿te llevas bien con tus amigos?» Una vez más, asintió, a pesar de que realmente no tenía amigos de verdad. Jim preguntó más, «¿Qué pasa con las chicas? ¿Encuentras una que te guste? Ya lo sabes».

Al escuchar las palabras, el pequeño Alex se congeló en su lugar. ¡El fue atrapado! Él habló, notablemente nervioso,

«¿Qué quieres decir papi?» -Alex «Bueno, a veces te veo caminando a casa con esa chica de la granja de Jefferson, eso es todo». ¡Uf! Tomó un respiro profundo. Definitivamente solo estaba siendo paranoico.

«Realmente no me gusta su papá, ella es como cualquier otra niña». Dijo con más calma.

«Oh, ya veo. No la has estado tomando el pelo, ¿verdad? A las chicas de esa edad no les gusta que las molesten, las vuelve locas y hacen locuras». -Jim

 

Alex, de 11 años, pensó por un segundo y luego se dio cuenta de lo que estaba diciendo: «Oh, eso. No te preocupes, papá, no hago nada de eso».

«¿Ni una sola vez?» Jim preguntó. «¡Papi! ¡No!»

«¿Estás seguro?» -Jim

«Lo prometo papi». Alex dijo con un ligero rastro de culpa en su linda voz de niño.

«Ok, confío en ti. Sabes que si alguna vez sucede algo de lo que quieras hablar, estaré aquí para ti». Jim respondió.

«Lo sé papi». Dijo Alex,que luego se subió al regazo de su padre para darle un fuerte abrazo. Al hacerlo, Alex se colocó las espinillas en las piernas de Jim, lo que le permitió al papá sentir los calcetines empapados de esperma de su hijo. El niño no se dio cuenta de que los calcetines habían sido bañados por el semen del caballo y, a su vez, nunca se los quitó.

 

Su papá inmediatamente se dio cuenta de lo que había en los calcetines hasta la rodilla del niño, pero mantuvo la calma; luego se inclinó y besó a Alex en la mejilla, todavía capaz de oler el semen de caballo que previamente había cubierto su bonita cara.

 

Después del abrazo y el beso, Jim empujó al pequeño Alex de su vientre peludo a sus pies, le dio una cinta de cassette y lo dirigió a la videograbadora.

«¿Qué es esto papi?» preguntó. «Es una película que quiero que veas».- Jim

«Ok, ¿de qué se trata?» – Alex

«Ya verás, solo ponlo». Jim respondió.

Curioso por lo que había en la cinta, Alex se puso de pie y se acercó a la videograbadora mientras su padre observaba sus pequeñas nalgas redondas sacudiéndose mientras caminaba.

 

La verga de Jim comenzó a hincharse, y frotó su creciente erección mientras miraba las nalgas de su pequeño niño balancearse de lado a lado hasta que llegó a la videograbadora y deslizó la cinta. Jim dejó de frotarse y dijo: «Ahora ven y siéntate al lado de mi cariño «. Un poco nervioso por lo que estaba pasando, Alex caminó lentamente hacia donde estaba sentado su padre en el sofá y se dejó caer a su lado.

«Nunca has jugado con alguien? ¿sabes cosas de sexo?»-Jim- Lo miró

«Lo juro, papi». -Alex

«Okay.» Jim respondió, con el control remoto subió el volumen y presionó play, iniciando la cinta que Alex acababa de poner en la videograbadora.

La escena comenzó, la cámara estaba claramente configurada en su establo y apuntaba al puesto de Fury; la fecha mostró que fue filmado hoy. Podías ver a los dos caballos yendo hacia él, con Jim y Trey parados cerca. Alex estaba un poco confundido y un poco nervioso

«¿Qué es esto papá?» preguntó. Jim respondió: «Solo sigue mirando cariño, suceden más cosas».

«Suceden más cosas», pensó Alex, «¿sabe lo que hice?» Justo cuando el semental salió y su primera carga de esperma salió disparada, Jim detuvo la videograbadora.

«Ahora cariño, en este momento no te había dicho que fueras al granero y me esperaras allí?»

Alex hizo una pausa, cada vez más nervioso, «Sí, papi».

Pero si miras la parte superior de la pantalla, puedes ver la parte superior de tu cabeza asomándose por encima de la pared. Ese eres tú, ¿no es así Alex?

«Entonces, por un momento, pensó que estaba enojado, que solo quería castigarlo por no dejar el establo,

A:»Sí, papá. Me quedé y observé». J:»¿Y en qué estabas pensando cuando estabas mirando?»

A:»No lo sé.»

Jim preguntó: «¿Eras feliz?»

A: «No, tenía miedo, supongo. No sabía lo que estaba pasando». J:»Pero te excitó y te puso duro, ¿verdad?»

 

Alex se alejó y solo asintió con la cabeza. Sus mejillas se pusieron rojas de vergüenza.

«Creo que debes haber estado excitado, para que pudieras hacer esto». Jim respondió y luego reenvió rápidamente la cinta hasta que el video se cortó y la cámara estaba en una nueva posición, mirando a través de un agujero en el puesto del semental, donde se podía ver al semental cuando Alex, caminaba hacia su vientre. Alex miró la pantalla y se congeló en estado de shock.

J:»¿Por qué volviste al caballo ?» Alex estaba demasiado petrificado para hablar.

J: «No hay nada de qué avergonzarse».

Finalmente habló:

A:»Por favor, papá, detén la cinta y deshágase de ella. Lo siento mucho». «Por favor, papi, por favor, nunca lo volveré a hacer, odiaba su sabor …»

J:»¿El sabor de qué cariño?

A:»No sé cómo se llama realmente. Pero todas las chicas de la escuela lo han comido; solo quería probarlo».

Su padre respondió: «Bueno, se llama semen, cariño. Y dudo que el semen que las chicas de la escuela tragaron fuera de un caballo».

A: «No me gusta su sabor, era tan asqueroso, pegajoso y agrio, y todavía puedo saborearlo» J:»Suenas como si tuvieras una mala experiencia Alex. ¿Aprendiste tu lección?»

A: «Lo hice papá. Nunca lo volveré a hacer»

J: «¿Entonces por qué intentaste probar el semen del caballo tres veces?»

Alex sabía que fue derrotado y nada de lo que dijo podría sacarlo del problema. Alex estaba casi llorando y suplicó: «Nunca lo volveré a intentar, por favor papi, no le muestres esta cinta a nadie». Jim había estado esperando esas palabras exactas, «Hmm. Nunca pensé en mostrarle la cinta a nadie, ¿qué crees que pensarían tus amigos? ¿Crees que les gustaría salir con un chico que come semen de caballo?» Él no respondió, pero gimió al lado de su padre.

Para entonces, la cinta había avanzado a la parte justo antes del primer disparo de chorros de semen en la cara del pequeño Alex.

 

«Subete en mis piernas, cariño», dijo Jim mientras tiraba a su pequeño hijo en su regazo. La espalda de Alex ahora estaba sentada contra el vientre peludo de su padre, la verga cubierta por los pantalones cortos de Jim descansaba entre las nalgas de su hijo. Jim se mesia varias veces, golpeando su verga en el trasero suave del niño, quien no se movió ni un poco.

«Ahora Alex», comenzó Jim, mientras detenía la videograbadora, la pantalla mostraba la verga de 50 de largo apuntando directamente a la boca abierta de Alex. «¿Recuerdas lo que pasó después, verdad?» El niño ahora estaba temblando un poco, pero asintió con la cabeza, sí.

J:»Entonces dime qué pasó».

Alex dijo suavemente, «chorreó en mi boca».

«¿Que hizo?» Jim preguntó.

A:»El semen del caballo».

J: «¿Y qué lo echó a chorros?»

A: «La verga del caballo lo hizo». J:»Es grande, ¿no?»

A:»Supongo.» dijo mansamente. J:»¿Nunca has visto una verga antes, ni siquiera una foto?» Él negó con la cabeza.

Jim puso sus grandes manos sobre las caderas de Alex e hizo que sus nalgas, apretaran su verga con la suavidad de su hijo. Alex emitió un gemido y Jim rápidamente lo puso de pie y, sin que su hijo lo supiera, comenzó a quitarse los pantalones cortos en silencio mientras aún estaba sentado en el sofá. No llevaba ropa interior y su cuerpo peludo y gordo pronto se desnudó, su despistado hijo de 11 años de pie, de espaldas a él, con las nalgas redondas colgando de sus pantalones cortos.

 

Jim dijo: «Voy a quitarle los pantalones cortos, cariño». Alex paralizado por lo que estaba sucediendo; antes de hoy nunca había estado expuesto a ninguna cosa sexual, ¡mira lo que estaba sucediendo y con su propio padre! Jim extendió la mano con sus grandes y ásperas manos y agarró las suaves nalgas de Alex, apretándolas, frotando y luego separándolas, amando la sensación de la tierna carne. El hombre ahora desnudo extendió la mano hacia el frente y desabrochó el botón de los pantalones cortos de su hijo, bajó lentamente la cremallera y luego agarró la parte inferior y comenzó a tirar de ellos.

 

Finalmente, Alex habló: «Por favor papi, no hagas esto, haré cualquier otra cosa, pero por favor detente».

J:»Sé que harás cualquier otra cosa, pero harás lo que quiero ahora, o me aseguraré de que cada uno de tus amigos y compañeros de clase obtenga una copia de esta cinta».

Con eso, Alex se calmó y Jim bajó los pantalones cortos de su hijo hasta los tobillos, donde lo hizo salir de la prenda de mezclilla, sus nalgas redondas se marcaban en sus calzoncillos húmedos. Jim extendió la mano y masajeó bruscamente el pequeño trasero de su hijo, sobando y nalgueando hasta que estuvo satisfecho y Alex gimoteó un poco más.

 

Jim quería volver a poner a su hijo en línea y le dio una palmada rápida en las nalgas expuestas. «¡Ay!» Alex gritó.

J:»Entonces deja de quejarte, puedo parar ahora y enviar la cinta si quieres».

A:»No, adelante», admitió suavemente.

Jim nalgueo de nuevo sus redondas nalgas Alex, la carne suave rebotando bajo su mano. J:»Habla mas fuerte.» Ordenó a su hijo.

Él respondió: «No, no envíes la cinta».

Con eso, Jim agarró las bandas elásticas en las piernas de los calzoncillos blancos de su hijo y los jaló hacia arriba, hacia la grieta del culo del niño, su suave trasero se sacudió con el movimiento, hasta que parecía que llevaba una tanga de mujer. Ahí estaba el pequeño de quinto grado en su sala con una camiseta blanca, con los calcetines hasta las rodillas y los zapatos negros aún cubiertos de esperma de caballo y sus calzoncillos se metieron en la grieta de sus nalgas, Jim se inclinó y metió su nariz en el lugar más secreto de Alex, su ano. Envió una ola de asombro al niño, A:»¡Oh! Papá, por favor, para», se quejó

Pero Jim continuó frotando su nariz entre las nalgas de su hijo por un minuto, deteniéndose de vez en cuando en su arrugado agujero rosa. Jim agarró los calzoncillos de Alex, de entre sus nalgas y tiró de los calzoncillos a un lado, dejando al descubierto su ano arrugado y sin pelo. Rápidamente metió su lengua húmeda en el tierno agujero de su hijo, saboreando el culito aún virgen.

El pequeño Alex se encogió ante la sensación, «¡Papi! ¿Qué estás haciendo?»

J:»Solo cállate cariño.» y continuó con su diversión.

Jim introdujo ligeramente la lengua sobre el pequeño ano del hijo y lo observó fruncirse con más fuerza, luego retrocedió y luego lo volvió a nalguear. Después de un minuto, el culo del niño estaba cubierto con la saliva de su padre y ya no estaba tenso al tacto.

La verguita dura de 10 cm de Alex también estuvo expuesta a Jim, pero decidió dejarla en paz, principalmente porque quería entrenar a su hijo para que le tomara gusto a recibir verga por el culo en lugar de follar chicas con su pequeña polla.

Un pequeño maricón fue lo que soñó en los últimos 11 años, para ser honesto. Un «hoyo con boca» para ser utilizado para su propio placer en cualquier momento, y tal vez compartido con algunos amigos confiables de él.

 

Jim le dijo a su hijo que se abriera las nalgas; Alex hizo lo que le dijeron y Jim presionó sus labios alrededor del ano del niño, luego presionó su lengua directamente contra el suave ano. Continuó presionando la lengua hacia adelante. Cuando la punta de su lengua finalmente se deslizó más allá del primer anillo anal, Alex se retorció pero mantuvo las nalgas bien separadas. Jim amaba la sensación de ese ano apretado, y continuó, empujando su lengua más profundamente en el recto mientras el pequeño Alex gritaba en estado de shock:

«¡Oh! ¡Oh, Dios!»

Después de unos minutos de forzar su lengua en el pequeño, finalmente estaba lo suficientemente flojo como para que él follara a Alex. Empujando toda su lengua sobre el ano apretado de su hijo, luego sacándola por completo, esperando que se cierre, luego empujando su lengua por el agujero nuevamente, haciendo que el niño gozara cada vez que su lengua lo penetra. Jim estubo follando el culo con la lengua unos minutos y luego retrocedió. Alex exhaló un suspiro de alivio, creyendo que papá había terminado de molestarlo, el niño soltó sus nalgas y su ano húmedo se ocultó nuevamente en la hendidura de su trasero.

 

Pero su padre le dio una palmada rápida en el trasero y le dijo: «Todavía no he terminado contigo nene. Inclínate un poco más y separa más las nalgas que antes». No queriendo molestar a su padre, el pequeño Alex hizo lo que le dijo y volvió a inclinarse hacia adelante, luego extendió la mano y agarró sus nalgas y las separó hasta que su ano quedó totalmente expuesto.

 

Jim ahora se humedeció el grueso dedo medio con la boca y lo colocó en la entrada del trasero de su hijo. El niño rápidamente tensó su ano ante la sensación del dedo gordo, pero Jim iba a salirse con la suya y comenzó a empujar su dedo grande hacia el agujero de Alex. Después de unos segundos sin éxito, Jim nuevamente colocó su boca sobre el trasero de su hijo, y rápidamente forzó toda su lengua para abrir el hoyo de Alex.

 

Él se follo con su lengua el culo del chico por un momento, luego retrocedió y rápidamente movió su gran dedo medio hacia el agujero arrugado y empujó el dedo hacia el segundo nudillo. Alex chilló en estado de shock, más por la sorpresa que por el dolor. Sus gruñidos pronto se hicieron más fuertes mientras Jim continuaba presionando su grueso dedo empujando hacia arriba en el apretado ano. Jim jugueteó con el ano de su pequeño hijo, empujando su dedo lentamente, sacándolo y luego forzándolo al segundo nudillo muy rápidamente causando que Alex jadeara de dolor. Después de un par de minutos, Jim estaba empujando todo su dedo medio por el apretado agujero, su palma descansaba sobre los pequeños testículos de Alex, Jim amaba cada minuto.

 

Acarició la dura verguita del niño con su mano derecha para masturbarlo, mientras su dedo penetraba su ano, hasta que los jadeos de dolor de su hijo comenzaron a disminuir. Luego la lengua de Jim cogió el ano de Alex por un minuto, mojándolo realmente con su saliva, hasta que volvió a insertar su dedo medio y lo empujó hacia adentro, sintiendo las profundidades calientes y el calor del recto del niño. Jim sacó su dedo y luego, con el ano del niño todavía parcialmente abierto, presionó tanto su dedo medio como su dedo índice contra el apretado agujero, empujó el dedo lo más lejos que pudo, luego lo sacó de nuevo.

El pequeño Alex se estaba cansando del abuso pero mantenía la boca cerrada y las nalgas bien abiertas. Luego, Jim forzó rápidamente sus dos dedos hasta el culo, hasta que gritó de dolor. Luego sacó sus dos dedos casi por completo del trasero de Alex, y procedió con el dedo follando su pequeño agujero del trasero lo más rápido que pudo, forzando salvajemente sus dedos en el culo del niño hasta que estuvo casi llorando, mientras se le bajaba la erección.

Entonces Jim sacó los dedos y besó a su hijo en su ano ligeramente maltratado. Él le habló: «Mmm, eso estuvo bien cariño. A papá le encanta tu pequeño culito. De ahora en adelante puedo lamerlo cuando quiera, ¿de acuerdo?

» El pequeño Alex se mostró reacio a responder.

J: «Tomaré eso como un sí. Bueno, espero que te estés divirtiendo cariño. Voy a darte un regalo en un minuto si eres bueno. Y de esta cinta parece que sé exactamente qué te gusta.» Se sentó al borde del sofá y acarició su verga dura de 21 cm; Luego metió la mano en un cajón y sacó un tubo de lubricante anal, y cubrió su verga con él. Volvió a poner el lubricante y continuó: «Ahora Alex, quiero que vuelvas a sentarte en mi regazo. Pero esta vez voy a empujar mi polla por tu pequeño culito».

Todavía inclinado el niño, respondió: «¡No, papá! Me dolerá, por favor, no, papá. No quiero, mi culito está muy adolorido en este momento».

J: «Bueno, realmente no me importa hijo, esto es por tu propio bien, confía en mí. Sé lo que es bueno para mi niño. Ahora recuéstate y pon tu culo justo en la cabeza de mi verga»

A: «¡Papá, no puedo! ¡No puedo hacerlo, me duele!»

Jim le dio al niño una palmada rápida en el trasero y le habló: «Esta es tu última oportunidad, ¡haz lo que te dije o enviaré esa cinta!» Al darse cuenta de que no podía hacer nada más, el niño obedeció a su padre.

 

Aún con su camiseta blanca, sus calcetines y zapatos cubiertos de esperma y con sus calzoncillos a un lado, el niño forzó sus nalgas completamente separadas y se inclinó hasta que el agujero de su trasero se apoyara contra la punta de la verga de 20 cm de su padre. Alex parecía muy pequeño con sus piernas color canela dobladas y el trasero redondo y agachado sobre el gordo cuerpo de su padre: su pene parecía demasiado grande para caber en su pequeño culito, pero iba a hacerlo encajar sin importar el costo y «el cierto dolor». Jim sostuvo su verga en la entrada del ano de Alex y dijo: «Cariño, tienes que forzarlo para entrar, si no puedes hacerlo, enviaré la cinta a tus amigos, ¿entiendes?» Él asintió con la cabeza y respiró hondo. Ahora listo para el dolor inminente, el pequeño ejerció más presión contra la cabeza del pene erecto de su padre, aplastándola contra su ano fuertemente fruncido. El niño era implacable y no importaba cuánto doliera, quería enterrar esa verga en su culo. Mientras luchaba, Jim le acarició su penecito para mantener su erección, apareó el precum babeando la cabeza y lubricando el pequeño agujero.

 

Frustrado un poco, el pequeño Alex se acomodo un poco, hasta que la punta de la verga de su padre estaba tocando su ano, y luego, con un movimiento rápido, aplastó su ano contra la verga dura y cabezona, pero apuntó mal y simplemente se estrelló contra sus nalgas. Sin renunciar a la técnica, el pequeño se reposicionó como antes y otra vez con todo su peso aplasto su ano sobre la verga de su padre; esta vez su ano finalmente cedió y antes de darse cuenta, la cabeza gorda de Jim fue enterrada en su tubo anal. La primera reacción del niño fue de sorpresa y descansó con la cabeza de la verga de su padre en su culito, llegó el dolor y gritó ante la invasión, «¡OW! ¡DIOS, PAPÁ! ¡DUELE, DUELE COMO EL INFIERNO!»

Jim lo consoló, «Oh, eso es bueno cariño, está tan apretado, adelante, respira hondo y pon más en ti, tienes que poner todo en tu culo, puedes hacerlo «.

Todavía jadeando por la penetración y no listo para más, obedeció a su padre. El niño puso sus manos sobre los muslos gordos y peludos de Jim y dejó que más de su peso cayera sobre su verga invadiendo aún más su ano.Muy lentamente, enterró 8 cm de verga de 20cm de su padre en su agujero, Jim veía obscenamente a su pequeño tragando su verga .

 

En ese momento, hizo una pausa, todavía llorando por la incomodidad. Su padre dijo: «Mmm, delicioso, que rico!!! estas tan apretado y caliente, pero vas demasiado lento. Pídeme que te coja. Grítalo, cariño».

«Papi, me duele mucho, ya no puedo más». Dijo el pequeño Alex e intentó levantarse.

«Oh no, no lo harás». Jim dijo y evitó que se moviera de su polla agarrándolo de la cintura. Jim continuó: «Voy a asumir el control. Pideme que te coja el cimo . Y dilo en voz alta».

Con esa enorme verga quemándole las entrañas, su hijo le suplicó: «Por favor, papi, ya no puedo hacerlo, duele demasiado, sácalo».

J:»No voy a decírtelo de nuevo, ahora dilo».

Finalmente, lo obedeció y débilmente dijo: «Cojeme el culo Papi».

El papá respondió: «¡Más fuerte! Y di por favor».

Nuevamente, Alex, de 11 años, obedeció: «Por favor, Cojeme el culo . Por favor, Cojeme el culo. ¡Por favor, Cojeme el culo !» Con eso, Jim agarró las dos manos de su hijo pequeño con una de las suyas y las levantó por encima de su cabeza, y luego colocó sus pies justo detrás de los talones de Alex, que ahora soportaban todo su peso. Luego, Jim tomó el control remoto de la videograbadora y quito la pausa de la cinta mientras en la pantalla aparecía una enorme carga de corridas de caballo en la boca del pequeño Alex. Al observar la cinta y sus acciones desagradables, el niño se puso rojo, pero continuó observando mientras el caballo cubría su rostro con su semen espeso. Con la cinta sonando, Jim le dijo al pequeño Alex que repitiera su frase nuevamente. Él gritó: «Cojeme el culo . Por favor, Cojeme el culo. Por favor, Cojeme el culo. ¡Por favor, Cojeme el culo!» Con 8 cm de su verga ya dentro del ano de su pequeño hijo, Jim puso sus pies hacia adelante, lanzando los talones y pies del niño hacia suelo.

 

Sin ningún lugar a donde ir, el pequeño agujero de Alex fue forzado a caer sobre la enorme verga de Jim hasta que sus nalgas golpearon contra los muslos gordos de papá, la verga paterna completa de 20 cm se enterró el culo de su hijo. Alex inmediatamente gritó de dolor, mientras su suave trasero se golpeaba contra el hueso púbico velludo de papá, el pequeño trató de sacar al miembro muy grande de su trasero. Jim gimió de placer y con su mano libre sostuvo las caderas de Alex sobre sus muslos, su verga descansando profundamente en las cálidas entrañas de su hijo.

Alex gritó, su anillo anal ardía de dolor, «¡PAPÁ! ¡Oh papá, por favor sácalo! ¡Papá! ¡Sácalo de mi culo!» J:»Oh cariño, se siente tan bien. Pronto, aprenderás a amar la sensación de una polla en tu culo. Mmm, sí, ahora te voy a coger bien». La vista era fascinante, el pequeño niño de 11 años sentado en el regazo de su obeso padre, empalado en su enorme verga . Los delgados brazos y las piernas huesudas del niño se agitaron sin éxito cuando el padre lo sostuvo hacia abajo, apretando las redondas nalgas contra los gordos muslos de su padre, su pelo áspero picaba en el suave trasero de Alex.

La gran barriga de Jim se frotó contra la espalda de Alex mientras respiraba pesadamente y gimió ante la tensión del recto de su hijo. Jim movió las piernas flacas de Alex hacia el exterior de las suyas y retrocedió un poco en el sofá hasta que los pies del niño no pudieron tocar el suelo, y Jim pudo controlar los movimientos. Con eso, Jim sacó unos cm de su enorme verga del ano de su hijo y luego, después de esperar un segundo, volvió a meter su verga en el culo de Alex, haciendo que sus muslos gordos golpearan fuertemente las nalgas y que su hijo gritara. En agonia. Entonces Jim comenzó la embestida, lentamente sacó la mitad de su verga del culo de su hijo y luego rápidamente se la dejo ir , sus vello púbico golpeaba las suaves nalgas de Alex . Con fuerza lo hizo tres veces más, haciéndolo gritar cada vez, luego aceleró el paso, cogiendo al niño con embestidas rápidas, queriendo traer su propio orgasmo. Estaba casi fuera de control cuando golpeaba su pene en el ya desvirgado ano de Alex, jadeaba en cada empuje, «¡Oh, oh, oh, ow, ow, ow, ow, owie!» «¡Oh sí, tómalo cariño!»

. Sabiendo que ahora Alex no podría detenerlo si lo intentaba, Jim liberó las manos de su hijo y colocó ambas manos ásperas sobre los frágiles hombros del niño, lo que le permitió embestir con más fuerza. En la sala, se llenó con el sonido rítmico de las nalgas de Alex golpeando contra los muslos de su padre mientras el embestía repetidamente su pene de 20 cm en su ano.

Cada vez más cansado, Alex jadeó, «¡Oh, no puedo,ya no aguanto, por favor! ¡Por favor, para!», Su voz interrumpida por la conmoción de su papá embistiendo su verga profundamente sus entrañas Sin preocuparse por sus quejas, Jim continuó cogiendo a Alex mientras el niño sacudía sus brazos y piernas en el aire en un intento de detenerlo. El padre continuó esa faena unos minutos más ahora el ano del niño de 11 años había sido usado lo suficiente como para sacar la mayor parte de su polla antes de volver a empujarla en el culo,y asi las suaves nalgas golpeando repetidamente sus muslos peludos.

 

Cerca del clímax, Jim le habló a su hijo sobre su plan:

«Ok, cariño, estoy casi listo». Él jadeó una respuesta mientras lo cogía , «Oh, cariño, tengo un regalo para ti. Ya que probaste el caballo, ahora puedes probar el mío; puedes ser un niño grande como tus amigas en la escuela». Chocando con fuerza contra él, continuó: «Oh, cariño, voy a correrme en tu dulce boca. Y vas a tragarte todo, no importa cuán amargo sea».

Asustado, el pequeño Alex guardó silencio, excepto por los repetidos gemidos que hizo cuando su ano fue golpeado por la verga de su padre. Jim habló: «Sí, cariño, puedes comer mi semen, ¿no estás emocionado? Mmm, tu trasero es tan suave y tu agujero tan apretado, no puedo esperar a ver tu boca llena de mi leche pegajosa».

 

Después de decir eso, Jim apretó su agarre sobre los frágiles hombros y golpeó su enorme verga contra el trasero del pequeño Alex con más fuerza que nunca, haciendo que las nalgas del niño golpearan fuertemente sus muslos y el ano se abrazara fuertemente contra su vello púbico. El pequeño estaba indefenso y se retorcía de dolor por la embestida anal. Jim lo sostuvo sobre él por un segundo y luego habló: «Está bien, cariño, cuando saque mi polla quiero que te sientes en el sofá y abras mucho la boca, ¿me oyes?» Él simplemente asintió con la cabeza, tratando de luchar contra el dolor que la verga hinchada de su padre le estaba causando en lo profundo de sus entrañas.

«Ok bebé, aquí va». Jim dijo mientras levantaba el trasero de su hijo de 11 años de su polla. Cuando estuvo despejado, Jim mantuvo sus ojos en el ano de Alex y observó cómo permanecía muy abierto y se saboreo el culito «Ahora siéntate en el sofá y ábrete de par en par», se movió y le indicó que se sentara. El pequeño niño se sentó, aún con su camiseta blanca, que ahora podría servir como un babero de semen si se derramaba, también llevaba sus calzoncillos, y sus calcetines hasta la rodilla empapados en semen y zapatos negros. Su muy dolorido ano golpeó el material áspero del viejo sofá mientras se sentaba.

«Ahora abre bien la boca, hijo», dijo Jim, su barriga gorda elevándose sobre la pequeña cabeza de Alex. El cabello rubio se balanceó cuando papá usó sus manos para inclinar la cabeza del hijo hacia atrás y forzar su boca abierta; Luego colocó la cabeza de su verga justo en frente de su boca y acarició el enorme pene. Después de unos pocos restregos , estaba listo para explotar, «Ok, cariño, aquí viene, ¿tienes que tragarlo todo? ¿Me oyes? Si no tragas todo mi semen, voy a enviar esa cinta. ¿Okay?» Alex asintió con la cabeza, Cuando la primera carga de esperma salió disparada de su pene directamente a la boca abierta. Se echó hacia atrás, pero Jim tenía su mano detrás de la cabeza de su pequeño hijo, no permitiéndole moverse cuando el cálido semen cayó en la lengua del pequeño Alex y probó el semen salado. Los siguientes tragos de semen aterrizaron nuevamente en la boca abierta de Alex. Jim continuó arrojando su carga caliente en la boca de su hijo, pero rápidamente se estaba llenando con su esperma.

«Ok bebé, traga lo que hay en tu boca». Jim dijo, todavía disparando su carga en la boca de su hijo. Alex cerró rápidamente su pequeña boca, ahora completamente llena del semen de su padre. Alex intentó tragarse el semen, pero no pudo hacerlo. Mientras lo intentaba de nuevo, la verga de su padre no había terminado de sacar todo su jugo y continuó, ahora disparando sobre las mejillas y la nariz del niño. Una vez más, el pequeño Alex trató de tragarse el semen, pero se atragantó y no pudo. Con la verga de Jim todavía rociando su cara, el niño escupió la boca llena de pegajoso semen en su barbilla, donde comenzó a resbalar por su cuello hasta que comenzó a empapar su camiseta.

«Alex, ¿qué carajos? Te dije que te lo tragaras». Sin escuchar, Alex continuó escupiendo los restos del esperma de su padre.Al no querer que se saliera con la suya al desobedecerlo, Jim rápidamente pensó en una forma de castigar a su hijo. «Lo siento cariño, realmente pensé que te gustaría probar mi semen». Alex gritó, aún escupiendo su esperma, «No lo hice, y te dije que no lo haría». «Tienes razón, lo siento, abre bien la boca y veré si todavía tienes algo en la boca». Ingenuamente, obedeció a su papá, abriendo su boca una vez más, su barbilla y cuello ahora cubiertos con la cálida carga de su padre, y su camiseta empapada hasta su pálida piel. Con el pequeño ahora listo para recibir una lección, Jim puso ambas manos en la parte posterior de la cabeza de Alex y, sosteniendo su cabello rubio y rizado, rápidamente empujó su verga entre los labios de su hijo y dentro de su pequeña boca. Alex trató de alejarse, pero las manos de su padre mantuvieron su cabeza firmemente en su lugar. Jim continuó su movimiento hacia adelante y pronto su verga estaba en la parte posterior de la boca de su pequeño niño, listo para ser forzado a bajar por su garganta. Alex luchó por la invasión, tratando de alejar las caderas de su padre con sus pequeños brazos, pero falló miserablemente. Luego, infligiendo el castigo completo, Jim empujó lentamente la cabeza de su miembro dentro de la garganta de su hijo, forzándolo a bajar por el esófago hasta que sus bolas se apoyaron contra su barbilla, los 20 cm duros enterrados más allá de sus amígdalas.

«¡Qué me está haciendo!» pensó el pequeño Alex, luchando por respirar. Jim mantuvo la cabeza de su verga enterrada profundamente en la garganta de su hijo y avanzó varias veces hacia adelante, aplastando los labios de su hijo contra su áspero vello púbico, con el vientre gordo y peludo golpeando su frente. Entonces, Alex comenzó a vomitar en el enorme órgano de su padre. Jim, sintiendo al fin un poco de lástima, retiró la mitad de su verga, hasta que descansó en la entrada de la garganta del niño mientras el niño, tosiendo y escupiendo baba, succionaba rápidamente algunas grandes respiraciones de aire. Rápidamente metió el resto de su verga en la garganta de Alex, sus bolas golpearon ruidosamente contra la barbilla del niño. Una vez más, sacó la mitad el niño aspiró una bocanada de aire, y Jim golpeó su verga por la pequeña garganta de Alex, las bolas peludas golpearon nuevamente su barbilla. El niño trató de expresar su angustia a su padre, pero todo lo que dijo salió como un gemido, lo que fomentó los impulsos de Jim intensificados en la cara de Alex. A pesar de las náuseas casi constantes de Alex en la verga de su padre, Jim se volvió más errático con su bombeo, sacando repetidamente su verga, luego metiéndola en la garganta de su hijo, a su vez rebotando sus grandes bolas en la barbilla con cada metida.Golpeaba la cara del niño con tanta fuerza que le dolieron las bolas al golpearle la barbilla, pero no importó porque el castigo de su hijo casi había terminado. Ahora, tirando de los cabellos rubios de Alex, Jim hizo un último empujón en la cara del niño, forzando nuevamente sus 20 cm por la garganta, y apretando su vello púbico en la nariz de Alex. L Jim se soltó con su segundo orgasmo y su gruesa carga comenzó a dispararse directamente en la gargante de su pequeño niño. Alex sintió la verga de papá moverse en su garganta, luego sintió el cálido semen llegar directamente en su estómago. Estaba indefenso para detener las acciones de su padre y simplemente se dejó hacer, su suave barbilla presionada fuertemente contra las peludas pelotas de Jim, su verga descargaba chorros espesos de semen en la garganta. Después de lo que pareció una eternidad para el pequeño Alex, la carga caliente de Jim dejó de chorrear, cogió con fuerza la cara de su hijo por última vez, casi lastimando los labios del niño, luego sacó su enorme pene paternal de la boca húmeda. Alex inmediatamente dejó escapar un gran jadeo y luego se desmayó en el sofá por el agotamiento de ser abusado sexualmente. Jim, sexualmente saciado por el momento, recostó a su hijo longitudinalmente en el sofá y se levantó para admirarlo. El niño pequeño era la imagen de la inocencia, su cabello enredado con sudor, su linda nariz y los labios enrojecidos. Sin embargo, su hijo también se parecía a una zorra infantil con la cara cubierta en su espeso semen, que todavía resbalaba por su cuello, y sus pequeños pezones asomaban por su camiseta, que servía como un babero de esperma. El niño todavía tenía los calcetines hasta la rodilla y los zapatos puestos, y sus calzoncillos seguían puestos en su trasero como una tanga. Jim se paró,feliz con su nueva esclava sexual. Sabía que con la cinta de Alex y el caballo podía obligarlo a hacer lo que quisiera, y sabía que quería verlo divertirse más con animales y hombres adultos por igual, incluso si requería que lo amarraran, pero primero él tenía que ser entrenado un poco más. Jim dejó al niño desmayado en el sofá y escondió la cinta que mantenía a Alex atado a él. Luego comenzó a planear las próximas aventuras con su pequeño putito….Alex realmente iba a ser un juguete sexual para su perverso padre!