EL PEQUEÑO DEL SUPER (Basado en hechos reales)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
El pequeño no se reponía aun de la confusión que le había causado aquella experiencia de haber sido poseído por un hombre adulto, maduro, tremendamente activo y acostumbrado a coger casi a diario en plenitud sexual que lo encontró en su camino a la escuela, a donde iba tarde después de haber salido apresuradamente del supermercado en donde trabajaba como empacador de víveres.

No había dudado en subirse al coche de ese extraño porque iba tarde a la escuela y porque le inspiro confianza sus palabras y amabilidad con la que le ofreció el raid.
Pero sobre todo porque le pareció atractivo y varonil.

A sus escasos 11 años estaba confundido con su orientación sexual, había tenido experiencias de tipo sexual con compañeras y compañeros de clase, pero le atraían mas los muchachos, por lo que empezó a intimar mas con ellos y ya se había atrevido a agarrar algunos penes y lo ultimo a que se había atrevido unos días antes con un chico de secundaria de 13 años fue a chuparle el pene.

Su físico delgado y su baja estatura además de sus delicadas facciones y su pelo largo, le daban ese look de andrógino de los chicos pre púberes que aun no se definen físicamente y que viéndolos a la distancia lo mismo pasan por una jovencita que por un chico.
La propuesta del hombre, que dada su experiencia de inmediato se dio cuenta de la atracción que sentía el chico hacia el por su manera de mirarlo y de actuar, de que faltara ese día a clases y fuera con él a “dar la vuelta” lo turbo bastante y de alguna manera también “sintió” que el hombre lo deseaba.

Dudo un poco pero la curiosidad y la oportunidad de experimentar algo desconocido con un adulto mayor empezaron a excitarlo y lo hizo aceptar.
Lo inesperado fue la rapidez con que se sucedieron las cosas, pues el hombre ya también bastante excitado, pensando en la buena suerte que había tenido al encontrar a este pequeño afeminado en su camino a quien sabia ya tenía en sus manos y al cual no iba a dejar hasta aliviar con él la enorme tensión sexual que había acumulado después de haber pasado 15 días sin sexo en una embarcación donde laboraba.

Después de conducir unas cuadras, aparco el coche en un estacionamiento en un lugar poco transitado y después de un hábil y directo interrogatorio se entero de la experiencia sexual del chico y hasta donde había llegado sexualmente.

Después de enterarse y confirmar su sospecha de la tendencia homosexual del niño, lo atrajo hasta él y le dio un apasionado y prolongado beso en la boca, lo que acabo de confundir al chico que experimento un placer, deseo y excitación que no había sentido hasta ese momento.
El hombre le pregunto que si le había gustado y el contesto que si, entonces le propuso ir a un lugar donde no pudieran verlos pues era arriesgado que alguien los mirara.
El niño acepto.

De inmediato el hombre se dirigió hacia un motel cercano y le dijo que se pasara al asiento de atrás y que se agachara escondido para que no lo fuera a ver el personal del hotel, a lo cual obedeció inmediatamente, ya no pudo ver más, solo escucho cuando el auto se detuvo a la entrada del motel y el hombre hizo el pago respectivo por la habitación, después solo se dio cuenta que entraron a una cochera techada y que cerraron dicha cochera y el auto se detuvo, entonces el hombre le dijo que ya podía salir y de inmediato lo llevo a la habitación que estaba en un lado de la cochera.

Lo que sucedió después fue muy rápido, el hombre lo convenció de que se desnudara y lo beso nuevamente en la boca, pero esta vez siguió con los oídos, el cuello la nuca y finalmente le beso los pezones, lo que lo hizo sentir un placer intenso y se entrego por completo a las caricias placenteras que aquel hombre le hacia su pequeño pene adolecente se paro y el hombre se lo acaricio junto con sus pequeños huevitos.

Para cuando se dio cuenta, el hombre estaba casi desnudo y pudo ver su cuerpo macizo y peludo con piernas gruesas y algo de panza, pero lo que le impacto fue cuando se quito el calzón y dejo al descubierto un pene grande con una tremenda erección que le hacían resaltar tremendamente las venas y con una cabeza amoratada por la presión sanguínea y la excitación y por cuya uretra escurría un liquido cristalino y espeso, que emanaba de un par de bolas grandes y peludas.

El que el pene más grande que había visto era el de su amigo de 13 años al que se lo había chupado, se quedo totalmente sorprendido y excitado ante la vista de aquel hombre, el hombre lo abrazo de nuevo, lo pego contra su cuerpo y pudo sentir la dureza y el tamaño del pene que palpitaba contra su cuerpo casi a la altura de su pecho, además pudo percibir por primera vez ese olor a pene y hombre que lo termino de excitar.

Quiso tomar el pene del hombre y llevarlo a su boca, pues él pensaba que el hombre y el iban a hacer lo mismo que él y su amiguito, pero para su sorpresa el hombre que ya para entonces estaba súper excitado lo cargo y lo llevo a la cama en donde lo dejo un momento para sacar un frasquito con vaselina del que se puso solo una pequeña plasta en la cabeza del pene, que seguía escurriendo ese liquido de olor que tanto lo excitaba.

Cuando se dio cuenta que el hombre no iba a conformarse con una chupada de pene y de lo que realmente le iba a hacer, se asusto y de un momento a otro la excitación dio paso al miedo, le dijo que eso no que el solo lo quería chupar y que él no pensó que el hombre se lo iba a coger etc.

Pero era demasiado tarde, el hombre amable que le ofreció el raid, estaba ahora convertido en un macho humano, tremendamente excitado y con una erección tremenda no lo escucho, el niño se bajo asustado por el otro lado de la cama y corrió hacia la puerta, trato de abrirla pero estaba bajo llave, el macho corrió tras él, lo atrapo por la espalda, lo sometió fácilmente pues la diferencia en tamaño y peso era desproporcionada y así parado, lo puso de cara contra la pared, lo empino, y sujetándolo de la nuca para mantenerlo empinado, con la otra mano dirigió la cabeza de su pene al pequeño y rosado ano de un empujón metió casi la mitad del pene el cual dada su dureza y no obstante su tamaño, se abrió paso fácilmente a través de aquel apretado orificio gracias a la vaselina y al abundante pre cum.

Después le soltó la nuca y lo tomo por la cintura con ambas manos, el macho abrió sus piernas y se encorvo debido a la diferencia de estatura con el niño y de tres fuertes estocadas lo penetro hasta los testículos.
El pequeño sintió la fuerte penetración y un fuerte ardor en su ano y un dolor agudo en su vientre, la penetración hasta el tope lo había obligado a agacharse y encorvar la espalda de manera instintiva para aminorar la sensación de empalamiento, desde ahí vio hace atrás y miro como sus piernitas estaban en medio de las dos columnas peludas que eran las piernas del macho y detrás de su pequeño pene vio como el par de grandes bolas del macho estaban juntas pegadas detrás de las suyas.

No tuvo tiempo de observar mas porque en esos momentos el macho inicio los movimientos pélvicos con fuertes embestidas que obligaban al pequeño a dar pequeños pasos hacia adelante aunque no tenia posibilidad de caer pues el macho le sujetaba firmemente la cintura por detrás con ambas manos no obstante que los pies del pequeño solo rosaban con las puntas de sus dedos el piso, el macho lo llevo así por un buen rato por todo el cuarto, el pequeño se quejaba y empezó a llorar y a suplicar, pero el macho ya estaba en completa posesión de su personita y lo manipulaba como un muñeco a su antojo, las embestidas se hicieron rítmicas y placenteras para él y disfrutaba al máximo las penetraciones largas, fuertes y profundas que le estaba dando al niño, el placer que le proporcionaba era intenso aunado a la excitación y la larga abstención sexual que había tenido.

Logro llegar a la cama donde lo empujo boca abajo y dejo caer su cuerpo sin dejar de penetrarlo, el chiquillo sintió ahora el peso del macho y todo su cuerpo peludo pegado a sus espaldas, estaba resignado y solo se quejaba pausadamente el macho acelero sus movimientos, su respiración se volvió más agitada, sus músculos se empezaron a tensar, se le envararon las piernas, las cuales abrió al máximo en un intento por prolongar hasta el límite los espasmos y las contracciones y finalmente ya no pudo contenerse, su pene se envaro a su máxima expresión, alcanzo la máxima erección, y después de una estocada tremenda y hasta los huevos, llego el primer espasmo de placer, acompañado de un escalofrió que recorrió toda su espalda, como un latigazo expulso el primer chorro de semen en el interior del pequeño en el que estaba sumido a través de un ano tierno y extremadamente apretado y cálido, le siguieron de manera casi simultánea otros 9 chorros de espeso y viscoso liquido seminal, el pene empezó a ablandarse un poco y quedo sumido en ese delicioso sopor que produce el alivio de la tensión sexual y la liberación de endorfinas.
Sin soltar al pequeño, giro un poco para quedar de lado abrazándolo en forma de cuchara y con el pene aun dentro del haciendo las ultimas contracciones.

El coito no fue muy largo duro apenas 20 minutos, el chiquillo se quedo quieto sintiendo como el pene del macho se iba ablandando en su interior escurriendo los restos de semen con el que le había inundado el intestino, cuando el macho agotado lo soltó para voltearse y quedar de espaldas en la cama, el niño oyó el clásico sonido del pene cuando sale e involuntariamente su ano se contrajo y expulso varios pedos acompañados de semen que salió de su ano y escurrió por sus nalgas.

Adolorido se paró de la cama y se dirigió al baño donde sentado en la taza expulsa bastante semen y algo de excremento que había sido removido por las fuertes penetraciones del macho.
Cuando salió, se dirigió a la silla en donde había dejado su ropa e iba a tomarla cuando escucho la voz del macho a sus espaldas que le pregunto qué estaba haciendo, él le contesto que iba a ponerse su ropa para poder irse.

El macho le pregunto que cual era su horario de la escuela y el inocentemente le contesto que su salida era a las 5 de la tarde eran apenas la una y media y en ese momento el macho se dio cuenta que tenia todavía casi 4 horas para gozar al pequeño, ya que de ninguna manera estaba totalmente satisfecho, sabía que no obstante la tremenda eyaculación que le había provocado el niño, aun tenía bastante semen reservado en sus testículos.

Le dijo que se irían hasta que fuera la hora de salida, en ese momento el niño comprendió que le esperaba al menos otra tremenda cogida, pero también ya era demasiado tarde, el macho no lo dejaría irse, de todos modos intento diciéndole que ya se lo había cogido y que ya había hecho lo que quería con él, que por favor ya se lo llevara de ahí.
El macho le contesto que dejara la ropa y regresara a la cama a su lado, el chico comprendió que sería inútil toda resistencia y obediente volvió al lado del macho.

Otras 2 veces en esa misma tarde tuvo que soportar el niño a la lujuria del macho, quien ya después de la urgencia y la tremenda eyaculación que le provoco el primer encuentro con el pequeño, descanso unos minutos para reponerse y entonces sometió al niño a una gran excitación sexual por medio de caricias y besos por todo su cuerpo llevando la tensión sexual de ambos nuevamente hasta el máximo, la cual alivio esta vez con un coito pausado pero con empalamiento muy fuerte del chico y embestidas fuertes y profundas ayudado por la lubricación que le había proporcionado la abundante eyaculación anterior al ano del chico, poco a poco fue aumentando su excitación con las potentes embestidas y las cuales acelero al final para alcanzar nuevamente un orgasmo muy intenso casi 50 minutos duro este segundo coito y aun tuvo fuerzas para realizar después de otro rato de obligado descanso un tercero igual de intenso.
Después del cual abrazo al niño que también estaba agotado, y adolorido después de haber sido sometido de esa manera por el macho sumiéndose los dos en un profundo sueño del que despertaron justo a tiempo para que el hombre pudiera llevar al niño a su casa antes de que regresara su tía.

Después de ese día el chico perdió interés en sus compañeros de juegos sexuales de su edad, ninguna emoción se comparaba con la experiencia sexual vivida con el hombre que había conocido.
Se sentía raro y aunque excitado no sabía exactamente como satisfacer esa excitación.
La experiencia vivida lo había cambiado para siempre.

El hombre por su parte tuvo que regresar a su trabajo y a la abstinencia, ya que trabajaba en una plataforma petrolera en el mar por periodos de 3 semanas de trabajo por una de descanso, por lo que no tenía posibilidades de tener contacto sexual en esos largos lapsos de tiempo.
Además no le agradaba masturbarse y se relajaba haciendo ejercicio y mucha actividad física.
Sin embargo la tensión sexual se acumulaba.

Mientras que no podía sacarse de la cabeza al pequeño y en el gran placer sexual que le dio esa tarde.
Había estado pensando en tomar al niño como su “mujer” pero para eso tendría que tener al chico de tiempo completo, el era sexualmente muy activo y requería de varios coitos al día para satisfacer su fuerte lujuria, fue entonces que recordó que el chico le había dicho que su tía rentaba un cuarto al lado de su casa por lo que decidió rentar ese cuarto a como diera lugar, para tener acceso al niño.

El chico pensó inocentemente que el hombre había ya perdido interés en el pues ya no lo había vuelto a ver y no tenia forma de contactarlo, siguió su rutina diaria pero también no dejaba de pensar en el macho, lo que le había hecho y deseaba experimentar de nuevo todas esas raras sensaciones entre placer, dolor y excitación que le causaba.

Una tarde que regresaba de la escuela se quedo asombrado de ver en la puerta de la casa a su tía platicando con el hombre que lo había iniciado.
Por un momento se asusto, pues pensó que su tía se podría enterar de lo que había hecho, pero en ese momento el hombre, que noto su presencia volteo y le hizo in guiño de complicidad con el ojo, el niño comprendió de inmediato que no voltearía ni a verlo, saludo y paso de largo al interior de la casa.

Desde adentro escucho que su tía estaba cerrando el trato para rentarle el cuarto de al lado al hombre y que iría a vivir ahí a partir de la siguiente semana.

Mencionare como información, que el niño vivía con una tía a la que sus padres le habían confiado el cuidado del chico porque ellos Vivian en un pueblo donde la escuela quedaba muy lejos y faltaba mucho el maestro, así que decidieron mandarlo con la tía para que pudiera hacer sus estudios y a la vez hacerle compañía, ya que ella vivía sola y trabajaba en una fabrica casi todo el día, por lo que el chico también trabajaba en su tiempo libre como empacador en el supermercado a donde se dirigía el día que se encontró con el hombre y de esa manera ayudaba también con algo a los gastos de la casa.

La casa de la tía tenía un cuarto en un lado del frente que daba a la calle con entrada y baño independiente, el cual rentaba para ayudarse completar sus ingresos.

CONTINUARA.
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