EL PEQUEÑO JOEL 2
Alan casi no podía creer lo que estaba viendo, y tuvo que esforzarse un poco para escuchar todo lo que estaban diciendo….
Drante su trabajo Alan pensaba en la forma de poder cogerse a su pequeño vecino. Pero debía concentrarse, así que luego de realizar algunas perforaciones y un par de tatuajes, salio en busca de una cierta cantidad de marihuana. El hombre consumía, pero moderadamente. Y mientras caminaba, vio a un niño como de 7 años que cruzaba la calle tomado de la mano de un hombre muy alto, probablemente su padre. Eso hizo que Alan vuelva a pensar en su pequeño vecino y en qué podría hacer para cogérselo. Y a pesar de que a Alan solo le gustaba las mujeres, la idea de cogerse a un niño era algo que lo excitaba demasiado. Y aunque un niño de esa edad era algo nuevo para él, Alan ya sabía lo que era probar un culito tierno ya que meses atrás, el hombre había experimentado con un chico de 12 años el cuál para su sorpresa, había aguantado bien sus 21cm.
Cuando regresó a su departamento lo primero que hizo fue revisar su cámara, pero no encontró nada fuera de lo común. Y al día siguiente, por más que se esforzó, no logró ver ni escuchar nada hasta la noche, donde en aquella casa comenzó a sonar música a alto volumen. Música que provenía de un videojuego que era de su pequeño vecinito. Desde su balcón Alan podía ver todo lo que ocurría en aquella habitación de a lado gracias a la luz que se encontraba encendida. El niñito estaba en compañía del otro niño de 11 años y de unos chicos más grandes, uno de 14 y otro de 16. Todos tenían casi el mismo color de piel, menos el de 14 que era de piel morena. La televisión estaba encendida con el videojuego, pero esos chicos estaban jugando otra cosa. Arrodillados encima de la cama, los 3 chicos rodeaban al pequeño de 4 años y comenzaron a restregarle sus bultos en la carita. El chico moreno de 14 estaba a la izquierda del niñito, el de 11 a su derecha y el de 16 en medio. Como si de se tratara de un juego, cogían las manitos del pequeño y le hacían que sienta sus penes bien duros. Luego los 3 chicos se bajaron el cierre de sus pantalones y agarrándole de la cabecita, hicieron que les comience a mamar la verga a los 3 a la vez. Uno por uno fueron sintiendo la suave boquita de ese niñito y sobretodo el fornido adolescente de 16, gemía por la tan rica sensación que sentía. El pequeño olía, lamía y chupaba con todo el gusto del mundo, en verdad disfrutaba mucho hacer eso. Alan casi no podía creer lo que estaba viendo, y tuvo que esforzarse un poco para escuchar todo lo que estaban diciendo:
-Chico de 14: Oye Cristian en serio ya se la metiste?
-Cristian: Si Josué! (sonriendo con picardía)
-Josué: Pero tu tienes 11, no creo que aguante mi verga menos la de Marlon jaja!
-Cristian: Ya te dije que le he estado metiendo el pene de juguete de mi mamá todo este tiempo, así que yo creo que sí
– Josué: Mmm será..? yo si quiero meterle!
-Marlon: De todas formas yo no me voy de aquí sin intentar penetrarlo!
Lo que Josué y Marlon no sabían era que Cristian nunca logró meter todo ese pene de juguete que mencionaba en el culito del niño. Sin embargo era cierto que aguantó los 13cm de él sin ningún problema. Pero Josué a sus 14 años ya tenía un pene de 16cm y Marlon uno de 17cm y mucho más grueso.
Aún así, el deseo de perder su virginidad con ese culito tenían a Josué y a Marlon totalmente cegados. El robusto adolescente de 16 años al ser el más alto y corpulento de todos, no dejaba de meterle los dedos en el culito al tierno niño. Y como vio que estaba totalmente limpio, recién bañadito y bien lavadito, no dudo en ponerse detrás de él para chuparle todo el culito mientras los otros dos seguían metiéndole sus penes por la boquita. A su corta edad, aquel pequeño niño estaba experimentando el sexo no con uno, sino con tres machos a la vez. Y Alan no dejaba de grabar todo lo que sucedía y se encontraba tan excitado que tenía la verga durísima y el bóxer mojado de líquido presemimal.
Los tres chicos no dejaban de manosear todo el cuerpecito delgado y blanquito del niñito y finalmente Josué le dijo a Cristian que quería ver si era verdad lo que les había dicho, quería ver si el niñito aguantaba que lo penetrara. Así que Cristian se acomodó detrás del pequeño mientras Marlon se puso enfrente de él y Josué a un lado, y para sorpresa de los dos, el pene de Cristian entró fácilmente y el niñito se quejó pero no de dolor, sino de placer. Y Marlon totalmente entusiasmado intentó meterle toda su verga por la boca y le daba azotes en el culito mientras Cristian le daba duro y Josué no dejaba que hacer que le pele la verga con su manito:
-Marlon: Qué rico! hoy te voy a romper el culito putita!
-Joel: Aaah! aaaah!
-Cristian: Ohhh! si! está muy apretadito!
-Josué: Te gusta Joelito?
-Joel: Mmmm, sí!!
La sensación que sentía Cristian era tan rica que estaba por acabar pero se detuvo y le dio paso a Josué, era el momento de ver si Joelito podía aguantar también la verga de él, y como su culito estaba bien dilatado, los 16cm del chico entraron poco a poco. El pequeño se quejó, al parecer le dolía un poco por la forma curva que tenía la verga de Josué, pero sin moverse, el muy putito terminó por tragarse toda esa verga con su estrecho culito. Marlon al ver eso se excitó aún más y no podía esperar a penetrarlo él también, le metía su verga por la boca cada vez con más fuerza y profundidad. El pequeño Joel ya estaba algo cansado de estar en esa misma posición, pero no tenía elección, tenía que aguantar. Josué tenía la verga tan dura y más grande que la de Cristian que inevitablemente hacía que el chiquito grite de dolor y de placer, y aún le faltaba aguantar una verga más. Así que Josué le dio paso a Marlon y la diferencia de sus tamaños era muy evidente, pero Marlon no tuvo mucha delicadeza y comenzó a meterle sus 17cm. Y aunque el culito de Joel ya estaba muy dilatado a Marlon le costó meterle su verga, ya que era mucho más gruesa que la de Cristian y Josué. Y el pequeño Joel comenzó a quejarse y a moverse mucho por lo que que Josué lo tuvo que sostener fuertemente y Cristian le tapó la boca con la mano. El pobrecito no tuvo otra opción que soportar. Y finalmente los 17cm de Marlon fueron enterrados por completo en su apretado pero ya abierto culito. El adolescente no paraba a pesar de los notables esfuerzos del pequeño por liberarse y gemía mucho por la deliciosa sensación que sentía en su durísima verga. Los otros 2 chicos también le seguían dando verga por la boquita y de repente y misteriosamente, la puerta de la habitación se abrió un poco pero lo suficiente como para que Alan se diera cuenta que un hombre alto, moreno y barbudo como de 27 años los estaba viendo. Alan pudo ver qué aquel sujeto se sacó la verga y se comenzó a masturbar pero no logró eyacular ya que los 3 chicos en esos mismos instantes le dejaron toda la carita llena de leche al nene.
Para ese momento Alan ya había botado su semen también por la auto-estimulación que se había estado dando al ver de nuevo a su pequeño vecino ahora con 3 chicos.
El misterioso hombre se fue y al salir de la habitación, los chicos apagaron la luz. Y Alan vio como los 3 se despidieron del nene en la entrada de la casa, pero no supo quién era aquel hombre, ya que se suponía que su pequeño vecino era el hijo único de su vecina Patricia. Y justo cuando estaba cerrando la puerta de su balcón, Alan vio que la luz de la habitación de su vecinito se encendió y ahí se encontraba el misterioso hombre con la verga afuera en frente del niñito que estaba sentado en la cama. El hombre estaba bien dotado. Alan vio como el tipo apagó la luz y a partir de ese momento no le fue posible ver nada más de lo que sucedía en aquel cuarto. Pero lo que si logró después de un rato, fue escuchar unos fuertes gritos que fueron silenciados abruptamente. Los gritos eran del del pequeño Joelito. Y a pesar de que algo o alguien los silenciaba, se podían escuchar mucho y muy claramente. El morbo y la excitación se hicieron de nuevo presentes en la mente de Alan pues logró darse cuenta que ese hombre alto y bien dotado, también se estuvo cogiendo a su vecinito.
Al día siguiente Alan vio que aquellos chicos, amigos de su pequeño vecino llegaron de nuevo a su casa, pero el nene con un raro comportamiento, no les dejó ingresar. Algo había pasado con el pequeño Joel, el lindo vecinito de Alan. Pero eso sería algo que él mismo en persona se encargaría de averiguar.
Continuará…
compo sigue
Ya quiero leer la continuación. Espero la compartas pronto.