El poder de tu Inconsciente
Déjate llevar por el placer.
En un mundo donde la imaginación, es más fuerte que la realidad…. Siéntate en un lugar cómodo, respira profundo; siéntete deseado por ti mismo:
Imagina que estás con la persona que más deseas, sea tu amigo imaginario al cuál deseas con intensidad; y destreza. Él imposible, que te hace la vida más fácil de lo que imaginas; o él ser amado con el cuál pasas momentos de placer, sin angustias; y muchos menos tabúes de por medio.
A: Te espere día y noche,
B: Lo sé, espero de ti ese morbo – fantasía que tienes conmigo;
A: Con mucho gusto lo haré, solo relájate y déjate llevar,
Imagina que nos conocemos en las clases de la piscina, que cuando nos vemos a los ojos; sentimos ese deseo mutuo;
Te llevo de la mano a las duchas, te pongo contra la cerámica, con un brazo tiernamente te lo pongo alrededor de la cintura, mi otra brazo va a tus hombros. Mi brazo que está en tu cintura juega coquetamente con tu miembro encinar del short mojado que llevas puesto;
Me dices, por favor te lo suplico sueltame, no te hago caso, veo como tu miembro comienza a calentarse, a ponerse erecto, a marcarse encima del short. Con mi otro brazo comienzo a jugar con tus tetillas, te doy besos en la nuca. Y te muerdo el lóbulo de la oreja;
Me dices brother ya sueltame, yo no te hago caso; y sigo sobandoste el miembro erecto, que emana poco a poco precum, y traspasa por la tela del short; te empujó más contra la cerámica de las duchas, y escuchó como tú respiración se entre corta,
Descaradamente, y sin cuidado; te voy bajando el short, hasta que al fin te liberó esa pieza, caliente, gomosa, que palpita, y desea ser empuñada por una mano experta en sube y baja,
La subida, y la bajada se vuelve más intensa, súplicas que por favor pare, yo soy oídos sordos; y continuo con lo mío. Noto como tus piernas se van tensando lentamente, juego también con tus huevos peludos; noto como respiras lentamente a tanto placer indescriptible;
Te pongo un poco de lubricante, y ahora el sube y baja es más salvaje, sin compasión alguna. Me dices hey porfa para, detente; por favor te lo suplico…..estoy a punto de correrme,
Yo hago caso omiso… Y continuo con el descontrol de una paja intensa, salvaje, violenta; sin piedad, hasta que noto que la tensión de tus piernas, huevos, y tú falo están al punto máximo….. Tú respiración se vuelve mucho más entrecortada, te intentas safar; porque sabes que tu corrida será descomunal.. sin embargo cedes. Y tú falo comienza a soltar escupitajos de leche caliente.. recién ordeñada….
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