EL RETRATO
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Alejandro-1988.
Es mi tercer relato, aquí os dejo los links de los anteriores en caso de que no lo hallas leído. Gracias y feliz día.
– Cesar, mi compañero de clase:
http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-15720.html
– MI SEGUNDA VEZ: UNA DECISIÓN DIFÍCIL
http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-16449.html
EL RETRATO
Mis encuentros sexuales con Rodolfo eran más seguidos al igual que sus visitas a mi residencia. Cada momento era diferente y llenos de placer. Todo marchaba bien entre ambos, hasta que conocí a Henry por medio de un amigo del instituto, el cual desde que nos presentaron robo un poco mi atención. Él estudiaba diseño grafico su contextura física es como Harry Potter pero sin gafas, ojos color café, cabello rubio y con ortodoncia en su dentadura.
Henry poco a poco fue uniéndose al grupo que se reunía a bromear después de clase. Debido al tiempo que compartíamos, la amistad fue creciendo e iba descubriendo cosas de su vida personal en donde ni señales de ser gay había. Entre esos descubrimientos estaban los retratos a mano alzada que hacia lo cual al verlos eran sorprendentes, digno de un Leonardo da Vinci.
Nos contó que había comprado un pequeño local que funcionó como consultorio médico para allí montar su estudio de diseño grafico y nos llevo a conocer el lugar. El mismo estaba en el 2do piso de un pequeño edificio en el centro de la ciudad, era espacioso, había un escritorio, una silla, una camilla y un sofá de espera de semi cuero color melón en una de las esquina arrinconados totalmente llenos de polvo debido al tiempo en desuso.
Había gastados todos sus ahorros en la adquisición del local y esperaba la aprobación de un microcrédito para la compra de mobiliarios y equipos de trabajo para acondicionar el lugar. Al pasar los días y notar su actitud me dio curiosidad de averiguar el porqué de su desanimo y supe que era por la no aprobación del microcrédito.
Me Ofrecí ayudarlo para solicitar otro microcrédito en un Banco del Estado donde mi padre fungía como Gerente, con la condición de hacerme 3 retratos y que nadie podía enterarse.Su respuesta no fue inmediata y 72 horas después acepto. Su semblante lo decía todo. Estaba animado y con un fuerte apretón de mano me agradeció el gesto de ayuda que le estaba ofreciendo.
Era día festivo en el país, lo cual aproveche de salir a correr y hacer ejercicios en un pequeño gimnasio al aire libre que está en un parque cercano a mi residencia. Llegue a casa exhausto me deshice de la ropa que estaba completamente humedecida por el sudor y quede desnudo. Me arroje al sofá cama para reposar un poco antes de irme a duchar.
Cerré los ojos y desperté cuando escucho el sonido de llamada entrante de mi móvil.
(A) – Alo buenos días
(H) * Hola Alejandro, buenos días soy Henry
(A) – Que tal, como estas?
(H) * Estoy bien y tu?
(A) – Bien
(H) * Que haces?
(A) – Nada interesante… porque?
(H) * Ya tengo tus 2 retratos de las fotos que me distes y quería proponerte hacer el 3ero hoy
(A) – El 3ero?
(H) * Si
(A) – Oye pero te recuerdo que el 3ero es en persona y completamente desnudo
(H) * Tranquilo Alejandro lo sé, un trato es un trato y tengo que cumplirlo.
(A) – Mi residencia esta desordenada por lo tanto aquí no se puede.
(H) * No importa lo hacemos en el local. Nos vemos en hora y media frente al instituto.
No había terminado de hablar con él y ya estaba buscando la toalla para irme a duchar. La idea de posar desnudo para un retrato y el agua correr por mi cuerpo me excitaba, decidí masturbarme durante 20 minutos para que mi pene no me diera una sorpresa indeseable y evitar una erección.
Jeans negro, franela azul cielo, bóxer blanco, zapatos deportivos fueron mis vestiduras. Tome el móvil, un pequeño bolso de cintura y metí el Ipod, la cartera de bolsillo y agarre los 2 cascos de la moto, la saque a la calle y la encendí para salir rumbo al instituto que me quedaba a 45 minutos de mi residencia.
Al llegar nos saludamos, le di el casco y se monto detrás de mí para dirigirnos hacia el local que había adquirido. Mientras manejaba pensaba como iba hacer para el retrato ya que el lugar a como lo vi no estaba acondicionado para tal fin y mucho menos limpio pero mi sorpresa fue que al llegar todo estaba aseado y en orden. Coloco su moral en el escritorio y mientras sacaba sus instrumentos de trabajo me dijo: Deja los nervios, relájate y te empiezas a desnudar. Allí está el baño.
Esas palabras, mas el nerviosismo que sentía para posar desnudo ante alguien que hace dos meses era un total desconocido hicieron una composición perfecta para sentir un pequeño pinchazo en mi pene. Me quite los zapatos, coloque sobre la camilla el bolso, los 2 cascos y el móvil para así entrar al baño y empezar a desnudarme.
Me eche agua en la cara para relajarme y empecé a desnudarme guindando la ropa en un gancho que allí estaba y al quedarme solo en bóxer decidí salir. Ya Henry había colocado el sillón frente al escritorio a un metro aprox.
* Toma la postura que quieras- me dijo.
La verdad que no había pensado realmente la postura que deseaba para el retrato, Me sentía indefenso. Me quite el bóxer, lo lance en la camilla y solo se me ocurrió hacer la postura de cómo dormía (Boca abajo con mi cabeza de lado fijando mi mirada hacia él y colocando mis brazos entrelazados debajo de ella como almohada)
(H) * Relájate, pon tu mente en blanco y trata de no hacer ningún movimiento violento…. Estas listo?
(A) – Si
Usando su móvil coloco música de relajación. Volvió a revisar sus herramientas y dio inicio al retrato.
Después de un largo periodo de tiempo decidió romper el silencio que solo emitía su móvil para agradecerme nuevamente la atención prestada por la solicitud del crédito en el banco. También me hablo de sus proyectos futuros y no podía faltar el comentar sobre chicas, en especial las que estaban en mi grupo de estudio y de cómo tuvo sexo con una de ellas en el carro de su amigo.
Esa historia me la sabía, pero al escucharla de su boca, sus palabras se convertían en agujas y volvía a sentir pinchazos en mi pene haciendo que entrara en proceso de erección y antes de que continuara su historia decidí hablar haciendo el más mínimo movimiento corporal
A)- Alguna vez una persona de tu mismo sexo te has masturbado?
Hasta ahora ni yo mismo sé porque hice esa pregunta, pero la misma hizo que se pusiera rojo como un tomate e intento cambiar de tema preguntándome que haría con el retrato desnudo: No me cambies el tema- le dije-, entre ambos existe algo de confianza, o me equivoco?
Su silencio lo podía interpretar como un sí o como un no, así que le dije: Si no quieres contarme de alguno yo si te contare de una experiencia en el parque cercano a mi residencia hace dos noches. Había inventado esa historia, sin embargo, mientras le contaba como había pasado y lo bien que se sentía que otro te la hiciera, note que llevo su mano y disimuladamente la metió en su jeans quizás para arreglar la erección que estaba sufriendo su pene y yo sin poder moverme para arreglar el mío que ya lo sentía mojado por el liquido presiminal que había salido.
(H) * 5 minutos y término.
Respire profundo para tratar de bajar aquella erección y así cuando llegara el momento de levantarme no sentirme incomodo ante él
(H) * Listo…. Ya te puedes levantar y vestirte
La erección seguía y pues no me quedo de otra que levantarme pausadamente ya que sentía una de mis piernas dormidas pero al hacerlo se fue formando un hilo de líquido presiminal desde donde había estado apoyado mi pene hasta la punta del glande. Rápidamente coloque mis manos sobre mi pene y me levante por completo para ir a buscar el bóxer, quedando de espalda y así evitar que él viera mi erección.
No había terminado de ponérmelo cuando sentí a Henry levantarse de la silla y venir hacia mí, para mostrarme el retrato. Ya no podía disimular la erección por nada del mundo así que gire y pude notar que al igual que yo el también tenía una erección
(A)- Wao. Que profesionalismo. Quedo muy bueno, está perfecto. El trato está cerrado y recuerda que nadie se puede enterar.
Seguía contemplando el retrato y aun sorprendido por el mismo le dije:
(A)- Henry, aun no me has respondido la pregunta: Te ha masturbado una persona de tu mismo sexo?
(H) * No
(A) – Pero, te dejaría que otro te la hiciera
(H) * La verdad… No!!
Al parecer mi historia te ha calentado al igual que a mi… y eso me da a entender que te gustaría experimentar- le dije, tocando y masajeando su pene por encima de su jeans permaneciendo paralizado y callado como una estatua. Lo tome de la mano y lo lleve hacia el sillón, hice que se sentara y me arrodille ante él. Al colocar de nuevo mi mano encima de su pene, un cosquilleo empezó a recorrer mi cuerpo .
(A)- Creo que tu pene está deseoso de salir.
Desabroche su jeans y lo baje hasta su rodilla, dejándolo solo en bóxer. Al meter mi mano para palpar su pene suspiró y al sacarlo quede petrificado. Su pene era más grande de lo que había imaginado, por su tamaño aquello era un monstruo. Lo contemplaba y al tomarlo con mi mano y cerrarla aun quedaba un buen pedazo por fuera y decidí llevar mi boca hacia el.
* Que haces- dijo Henry
Al meterlo en mi boca dio un gemido que hasta ahora no había escuchado, sentía sus piernas temblar. Intentaba meterme todo aquello en mi boca pero era imposible. Sin embargo hacia lo que podía.
Alejandro esto no está bien, hasta donde vamos a llegar. Decía Henry mientras agarraba mi cabeza para retirarla de su pene. Apreté más mis labios y empecé a comérmela con mayor frenesí.
Comprendió que su acción de retirar mi boca de su pene era en vano, por lo cual desistió de esa idea. Ya su bóxer había sido retirado y mis lengüetazos y lamido de bolas siguieron por varios minutos los cuales lo hacían estremecer y gemir
(H) * Alejandro, estoy que me vengo ya no siento mis piernas.
Hice que no lo escuche y seguí mamándolo. Cada vez que hablaba lo hacia de manera entrecortada por sus gemidos y por la proximidad de su venida. Deje de mamárselo y quite mis bóxer, le di la espalda, coloqué saliva en mi dedos y los lleve a mi culo para mojarlo y lo puse en la punta de su pene.
(H) * Alejandro por favor…. eso no esta bien
Lo convencí para solo rozar mi culo con su pene. Era tal el deseo de tenerlo dentro de mí que empuje un poco pero me costaba meterlo por lo virgen que era mi culo. La insistencia de Henry parar detenerme me llevo a decirle que se quedara quieto, que no podía dejar ese monstruo despierto que de una u otra manera había que relajarlo antes de que le hiciera daño a alguna chica. Volví a colocar su pene en mi agujero, respire hondo y si pensarlo baje rápidamente para meter aquello en mí. Inhale fuerte y me quede sin aire hasta que emití un gemido de dolor pero a la vez de placer: Ahhhhhhhhhh.
Aquello me estaba desgarrando por dentro, el dolor era insoportable y quede inmóvil por más de un minuto. Si lo sacaba y lo volvía a meter iba hacer peor el dolor, así que empecé a menearme. La penetración me estaba generando una sensación extraña, lo que sentía por dentro había levantado mi pene a un nivel máximo y ya sentía la presión del semen deseoso de ser expulsado.
Jamás había sentido tanto placer hasta ahora, siempre había sido activo, estaba acostumbrado a ser yo el que penetraba, pero esta vez era pasivo. Cada rose de su pene con mis paredes anales producían nuevas sensaciones, sensaciones de locura, de placer, de deseo.
No aguanto más, me voy a venir- logre escuchar de Henry
Esta vez era inevitable. Henry empezó a arquearse y me empujaba para yo levantarme. Sentí su glande hincharse y empezó a gemir para así dar paso a punzadas y chorros de semen caliente esparciéndose dentro de mí. Me seguía moviendo para vaciar sus bolas llenas de semen y en búsqueda de mi orgasmo empecé a masturbarme. El momento de la explosión llego y el mismo fue inmenso. Durante medio minuto estuve en pleno éxtasis vaciando mis reservas de semen. Jamás en la vida pensé que por el ano se podía sentir esa cantidad de placer.
Permanecí inmóvil para esperar que su pene tomara el tamaño normal y así poder abandonar mi culo sin mucho dolor. Me recosté sobre el diciéndole:
– Te gusto? , No podía dejar tu pene con tanta tensión acumulada.
Cerré mis ojos y segundos después escucho el sonido de llamada entrante en mí móvil, no quería levantarme pero la insistencia de la llamada hizo que lo hiciera. Agarre el móvil y al ver que la llamada venia del móvil de Henry le pregunte: porque me estas llamando? Al voltearme no había nadie, el ambiente había cambiado, no estaba en el local sino en mi cuarto sudado y desnudo, lleno de semen por todo mi pelvis y mi pecho. Mientras el móvil seguía sonando trataba de encontrar una respuesta lógica a todo eso y en instante llego: había sido un sueño.
Decidí contestar.
(A) – Alo?
(H) * Pana deja de dormir tanto, te hemos estado llamando varias veces
(A) – Dime que paso?
(H) * Estamos cuadrando para ir a casa de David a joder y hacer una parrillada a ver si te animas a ir
(A) – No puedo, tengo un compromiso con mis padres.
Mentí al decir que no podía ir, pero aun estaba en shock, necesitaba digerir esa experiencia que aun al despertarme me mantenía excitado. Tome la toalla y me fui a duchar, no dejaba de pensar en el sueño, traje a memoria cada escena y dejando correr el agua por mi cuerpo empecé a masturbarme para así calmar esas ansias de sexo que se habían despertado a raíz del sueño.
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MUY PRONTO – LA ANTESALA
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