El secreto de la cabaña abandonada

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Estábamos en el año 1987, yo tenía 9 años y sabía muy poco acerca del sexo, solía jugar fuera de la casa con los niños del vecindario que tenían de 8 años a 16 años. Nada iba más allá de juegos inocentes, pero un día ocurrió que no nos eligieron en el juego a los más pequeños y nos quedamos sentados conversando con Tomasito, un niño de mi edad, alejados del bullicio. Entonces me hablo muy bajito de algo misterioso.

– ¿Quieres saber un secreto Pablito?
-Sí, claro- le dije.
-Conozco una cabaña abandonada en el campo donde voy seguido a jugar con dos chicos grandes ¿no quieres ir?
Yo estaba emocionado por lo misterioso y secreto de sus palabras y quería conocer esa cabaña, además hacerme amigo de los chicos grandes, que nunca me daban importancia, así que acepté y él me dijo que me avisaría y que íbamos a ir pronto.

Días más tarde yo estaba sentado solo en la acera de enfrente de mi casa cuando un chico llamado Rubén de 14 años se me acercó y me preguntó si yo era el niño que quería jugar en la cabaña. Le dije que si, y me dijo que él y su primo Manuel eran los dueños de la cabaña y que si quería ir me llevaba allí de inmediato, que no estaba muy lejos. Acepte, me levante y lo acompañe, íbamos por el descampado y me tropecé, entonces me agarro de la mano y seguimos, se dirigió hacia unos matorrales que estaba debajo de la línea de transmisión de electricidad, la hierba estaba muy alta y me explicó que esta zona era deshabitada y perfecta para jugar, seguimos avanzando entre matorrales y señaló:
-Allí está la cabaña-

Seguimos por un estrecho sendero hasta llegar al lugar, en ese momento salían de la cabaña Manuel, el primo de unos 16 años, con mi amigo Tomasito, que estaba todo despeinado, desaliñado y se arreglaba su short con tiradores ,apenas nos vio se sonrojó como si lo hubiéramos pillado en algo prohibido, quise hablarle pero Rubén se adelantó y le pregunto a su primo:
-¿Que tal jugaron hoy Manuel?
-¡Muy bien, ya sabes que a Tomasito le gusta jugar conmigo, y se deja hacer de todo, Ah, si… de todo!- Al decirlo le dio al pequeño un pellizco en las nalguitas, mientras sonreía cómplice con su primo, luego me miro y dijo:
–¿Tu eres Pablito no? Sí te he visto en el barrio, espero que también quieras jugar conmigo otro dìa-

Abrazo a Tomasito de un hombro y se alejaron de nosotros por el sendero, el pequeño caminaba con un poco de dificultad y se agarraba el culito.
Entramos a la vieja cabaña y vi mucho desorden, el piso era de tierra apisonada y estaba una parte cubierta con cartones, había una silla vieja y una especie de poyo o cama también cubierta con cartones y un poco de ropa amontonada en la esquina , se sentia un olor a cloro y había manchas humedas en los cartones, algunas blanquecinas como si alguien hubiera escupido (todavía no conocía como era el semen ni su olor).Rubèn me dijo:
– Aquí solo vienen los niños listos a jugar con los grandes, ¿tú no eres nada tonto verdad? Eres muy listo por venir y vamos a ser muy amigos.
Yo inocente le creí y ya quería jugar a esos nuevos juegos.
– ¿Que niños vienen a jugar aquí?
-Varios pequeños de tu edad: Tomasito, Martin, su hermano Jesús , Luisito y Josete-

A todos los conocía y tenían casi mi edad menos Josete que tenia ya 12.
-¿Josete tambien viene?
– Claro, èl vino primero cuando tenia 10 años y ahora es el favorito de Manuel, es el que mas sabe, el más entusiasta viene y le gusta mucho jugar conmigo o con Manuel, a veces juega con los dos a la vez , Si esperamos un poco no tarda en venir .
Josete era también un niño del barrio, muy delgado con su peinado honguito y pecas en la carita, hablaba amanerado como niña y por eso le molestaban todos, usaba siempre una polera verde que nunca la metia dentro de su pequeño short negro, sino por encima hasta cubrirlo totalmente y asi le quedaba como un vestido de niña, donde terminaba la polera empezaban sus largas y bonitas piernas .Todos los chicos le metian la mano a las nalguitas y le agarraban las piernas y Josete no se molestaba, se sonría.
De pronto Rubén me dijo:

-Bien, vamos a jugar, el primer juego se llamaba el "Come niños".
-¿El Come niños….y como es eso?- mi cara de tenía un signo de interrogación y asombro , que le agradò porque sabía que podía aprovecharse de mi curiosidad.
Se apresuró a explicar que el juego era como un teatro yo sería el niño perdido en el campo que llegaba asustado a la cabaña y allí me encontraría con el " Come niños".
No tardé en decirle que tenía miedo que me muerda ese "Come niños" , pero me explicó que solo era un juego, que si quería divertirme debía seguir las reglas y que no debía asustarme de un juego tan entretenido.

Le dije que ya no tenía miedo y que haría lo que me pidiera en el juego.
-Esta bien, en primer lugar vamos a prepararte para el juego, date vuelta- Le obedecí y me empujo la cabeza haciéndome encorvar y agarrar mis rodillas, pego su cuerpo a mi cuerpo agachándose un poco para estar mi altura, me tomo de la cintura y comenzó con movimientos adelante y hacia atrá , sentí que algo me punteaba entre mis nalgas.
– ¡Ahhhh! nunca he visto un culito tan bonito como el tuyo! realmente estoy disfrutando jugar contigo-
Me gustó el cumplido y que le agradara estar conmigo aunque no entendía a que nos llevaría ese roce. Me levanto más arriba el short, la tela se metió entre mis nalgas, con sus manos acaricio mis muslos y sentí eso duro otra vez en mi culito punteándome, pero no me dolía sino me daba cosquillas, todavía no entendía lo que estaba haciendo.
-Te estoy preparando porque pronto va a venir el "Come niños" y debes estar preparado porque te va a hacer lo mismo pero desnudito, así que debes tener la colita lista para que pueda comerte más tarde- Ruben jadeaba de placer detrás mío, pasó asi algún tiempo y después me dio la otra orden:

-Ahora quítate toda la ropa y colocate en cuatro patas sobre ese cartón como perrito.

Yo estaba ya entregado al juego, además a esa edad no se tiene mucha vergüenza ,asi que me quite rápidamente el pantaloncito corto, la polerita , los zapatos y así completamente encueradito me puse en la posición ordenada sobre los cartones del piso, sentia en mis rodillas y manos la textura lisa de los cartones. Se acerco saco de su bolsillo algo y sentí su dedo en mi anito untándome una grasita, me sobresalte nunca me habían tocado allí , pero comencé a sentir rico la yema de su dedo moviendose en circulos en mi anito, cerre los ojos, me estaba gustando el jueguito , movi mi culito y mi anito también reaccionò respondiendo a la estimulación, y ese placer hizo que mi pipilin se erectara.
– ¡Aja, veo que te gusta y que tu huequito ya tiene hambre, como va a gozar el "Come niños” contigo!- entonces empezó a meterme despacio su dedo.
– ¡Ay!… abrí los ojos pues me dolió un poco, pero Rubén me tranquilizo. -Así duele un poquito al comienzo pero ya te pasará -Siguió metiendo su dedo hasta tenerlo todo adentro, sentí que lo giraba o palanqueaba para que me acostumbre a tenerlo, me paso el malestar y comenzó a recorrerme unas cosquillitas desde mi anito por la espalda hasta la nuca, entonces metió dos dedos haciendo lo mismo y después vi que agarro un envase de plástico en forma de tubo con la tapa en forma de bola y también lo metió en mi anito, yo sentía que se abría mas mi ano como una flor aceptando el objeto, lo metía y sacaba hasta que lo dejo bien metido y dijo: ¡ Listo, ahora espera sin moverte que vendrá el "come niños" a jugar contigo!…

Se alejo un momento, yo espere sin moverme con ese tubo bien metido en el recto, yo apretaba mi anito y el tubo se movia. De pronto el "Come niño" salto frente a mi completamente desnudo, con un antifaz negro en la cara y con una pinga enorme en erección …era Ruben mismo ¿Como no lo iba a reconocer?, pero claro él estaba actuando y era su papel. Dijo con voz grave:
– ¡Soy el "Come niños" y he venido a comerte niño !- Se agarro la pinga, empezo a moverla frente a mis ojos y luego la froto en mi cara.
– ¡Por invadir mi cabaña sin permiso la vas a pagar niño perdido…me voy a comer tu culito como le paso a los otros niños!
Se puso detrás mío, saco el tubo de plástico coloco la punta de la pinga y me comenzó a penetrar agarrándome de la cintura, a pesar de la preparación comenzó a dolerme.
-¡Aja, tienes el anito ajustadito y esta muy rico niño, a pesar que te tragaste el tubo sigue cerradito!.
Mi esfínter hacia resistencia pero sentí nítidamente como seguía entrando su pinga grande y gruesa de adolescente dentro de mí , comenzó a empujar mas y yo a quejarme .
¡Ay me duele señor "Come niños" me duele, sáquemela por favor!.
Me la saco un momento y me dijo:
– Lo hare mas lentamente pero de todas maneras te la voy ameter toda, te la tragaras entera, ya sabes.
Me agarro de los hombros, senti que me punteó las nalgas unas tres veces buscando mi deseado hoyito hasta que lo encontró . Entonces logro meter la cabeza de la pinga , se acomodo mejor y dio otro empujon logrando penetrar mas su miembro.. sentí un dolor enorme, le pidi que parara otra vez gimiendo y lloriqueando. Èl me dijo:
¡Callate. asi es el juego, así el "Come niños" les da por el culo a los niños desobedientes que se meten a su cabaña sin permiso! Entonces me agarro de las ingles y dio un empujon mas logrando lo que tanto queria.

-¡ Ahhhhh por fin, ya te la metí toda niño, ya la tienes toda adentro!-
Se acomodo mejor, y comenzo a moverse en un mete y saca frenetico pues estaba muy exitado con su logro, yo quise salirme pero me jalaba de las ingles, como me dolia grite muy fuerte y me tapo la boca con una mano y con la otra me abrazó por la cintura y así siguió penetrándome. Yo deje escapar un grito ahogado de la mano y las lágrimas fluyeron de mis ojos. Entonces pasado el frenesi inicial se detuvo esperando que me acostumbrara a tener la pinga en el recto, me dijo que me iba a sacar la mano de mi boca, pero yo no debía lloriquear ni gritar porque por ahi pasaban vagabundos y podian escucharme. Yo acepte y más calmado y sin sacarme la pinga me estuvo acariciando un buen rato, paso sus manos por todo mi cuerpo me agarro la pijita me comenzo a besar el cuello. Yo senti que mi culito ya no me estaba ardiendo mucho ,el dolor se iba atenuando mas y mas. Sus caricias siguieron , una de sus manos fue a mi pijita que se erecto entre sus dedos, mientras el la movia rapido. Todo lo que me hacia dio resultado, comencè a jadear de gusto , un placer embriagante partia de mi anito subia por mi espalda hasta mi nuca, y a todo mi cuerpo.

-Ya ves, te dije que te iba a gustar el juego-
Volvieron los movimientos detrás de mí, ya no me dolían ,susurró muchas cosas, algunas que todavia no entendía y me elogió diciendo que mi culito era el mejor de todos por lo redondo y delicioso que era.

Ya tenia pinga un largo rato y me había pasado el dolor y sus palabras muy cerca a mi oído me calmaron , tambien me agarro mi pijita otras vez para mantener la ereccion , me comence a exitar, mas y mas , me gustaban las caricias y besos que me daba en el cuello y cara, pero mas que nada su miembro metido atras , asi que descubri el placer y me entregue por completo, dejandome hacer todo lo que quería. El percibió mi transformación y aceleró la cogida, la verga , mi recto ya se había adecuado al grosor de su miembro y lo aceptaba . Empecé a tener una grata sensación tener lleno mi recto la pinga de ese chico casi hombre entrando y saliendo hasta la mitad a veces lento a veces rapido. Como se dio cuenta de mi bienestar me preguntó
-¿Estas disfrutando jugar con la pinga del “Come niños”.

– ¡Siiiii…e me gusta jugar con el "Come niños" esta muuuuy rica tu pinga, deliciosa!!
Su pene frotaba las paredes de mi ano , me estaba dando una sensación de placer que yo gozaba y gozaba habia descubierto el placer del sexo homosexual a mis 9 años..Me movía acomodándome mejor , paraba mas el culito, abría mas mis nalgas, jadeaba con placer, estaba disfrutando el sexo anal.
Entonces el “Come niños” dijo: ¡Ahora es el momento, te voy a llenar de mi leche de macho!
Me hizo echar completamente sobre los cartones, paso sus manos bajo mis brazos agarrando mis hombros, sus piernas se enredaron con las mías , sentí la pinga empujado a lo mas profundo
Sus manos y piernas me tensionaron fuerte , su pinga me palanqueo tres veces , me senti apretado, estirado , completamente dominado y poseido y de pronto…… se relajó, había terminado.

Continuó un largo rato descansando sobre mí yo tambien descanse y no dijimos nada, después se levanto y me la saco. Yo estaba un poco frustrado porque el juego había terminado, sentí que tenía mi culito, mis piernas y hasta mi espaldas mojadas. Rubèn tomó una tela vieja y me limpió cuidadosamente.
Todavía sin sus pantalones, se sentó y observe su pene semi parado moviéndose todavía .observe ese enorme miembro grueso que me había dado tanto dolor y placer. Mientras se lo limpiaba le pregunte si me había metido todo eso …

-¡Claro que si y te lo comiste todo, solo falto que te meta los huevos!! Me ha gustado mucho tu culito bebé ¿quieres que volvamos a jugar otro dia?.
-¡Siiii, si quiero volver a jugar contigo Rubèn, si quiero!- y sin que me lo pida mi manito le agarro la pinga.

Permanecimos en la cabaña durante otra media hora antes de salir, me ayudo a vestirme y durante ese tiempo hablamos de lo que había sucedido. él me dijo que yo había sido el niño más caliente al que le había metido su pinga, lo había hecho con varios culitos pero que el mío era el mejor , y que yo sabia dar bien el poto y que podia dejar satisfecho a cualquier hombre, que solo me hacia la competencia Josete, el putito experto de 12 años.

Salimos de la cabaña y me llevo de vuelta al barrio, mientras caminábamos el me agarro tiernamente del cuello y yo me agarre el culito, que lo sentía resbaloso y con dolor pero mas pensaba en lo que había disfrutado. Me acorde que Tomasito habia salido de la cabaña igual que yo con Manuel y supe que le habia hecho lo mismo. Antes de despedirnos Ruben me dio un beso y me agarro el culito ,en ese momento tambien entendí que mi culito sería muy especial para los chicos grandes , tambien que yo no debía decir nada a nadie de lo que habíamos hecho, porque no podríamos jugar otra vez, que debía mantener el secreto de la cabaña para siempre.
Ese día fue el primero y siguieron muchos más.