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Gays, Incestos en Familia, Intercambios / Trios

EL SECRETO DE LA CASA SODOMITA 2

Te garantizo que se vas a sacar más de una paja con esta historia de incesto, perversión y crimen.

EL SECRETO DE LA CASA SODOMITA

CAPITULO 2 – SILENCIO

 

ACADEMIA DEL EJÉRCITO – 1982

Un joven adolescente Giovanni Danelli dormía en una de las literas de la habitación en las instalaciones del ejército.

 

A los días de lo ocurrido en el incendio en la Hacienda Mayor, cualquiera pensaría que heredaría toda la fortuna de su padre al ser el único hijo, con madre fallecida y sin hermanos, debió haber sido así, sin embargo al no ser mayor de edad no tendría la capacidad legal para administrarla, haría falta un tutor legal, y las autoridades contactaron a su tío Bosco Danelli, hermano de su padre.

 

Este señor era en palabras de Giovanni, un cerdo despreciable, que ni bien vio oportunidad de apoderarse de la herencia, no dudó en mandar directamente a una academia militar a su sobrino.

 

El chico de 15 años había pasado ya casi 8 meses en ese lugar y no podía dormir, tenía pesadillas recurrentes con su padre en dónde revivió los momentos angustiantes que sufrió.

 

En ellas se veía con su padre logrando concretar lo que iba hacer esa noche pero despertaba gritando.

 

_ Cállate Danelli – gritaban unos.

 

_ Llama a tu mamita Danelli – decía otro y le arrojaban cosas.

 

Giovanni se levantó sudando, solo con su boxer y bividí blancos.

 

Caminó hasta la puerta de salida, se dirigía al baño, pasando por pasadizos fríos, se lavó el rostro Pero al salir, logró escuchar unos extraños sonidos, que provenían de metros más adelante del pasillo.

 

Salió y se dejó guiar por el sonido hasta que llegó a una puerta completamente de fierro, pensó que estaba cerrada pero se percató que estaba apenas abierta; entró y el sonido cada vez era más legible, acompañado de ello el sonido del agua cayendo en unas duchas.

 

El lugar era un baño, pero, de esos muy antiguos que para ese entonces estaban clausurados, pero al parecer esa noche lo tenían en uso.

 

Se escondió de tal manera que podía ver en su totalidad del espacio de las duchas, que eran un espacio sin compartimentos y regaderas una a lado de otra, con las losetas blancas muy antiguas y desgastadas.

 

Lo que vio Giovanni lo dejó perplejo.

 

El coronel Altamira se estaba cogiendo a uno de los compañeros de escuadrón de Giovanni.

 

La diferencia de edad era notoria, el hombre de unos 50 años, que aún conservaba musculatura, y un adolescente de la edad de Giovani.

 

El tipo era alto el cabello cenizo tirando más para canoso bien recortado y un bigote plomo.

 

El coronel estaba de rodillas sobre el piso de la ducha, el agua caía sobre él y Álvarez que así se apellidaba el cadete a cuatro patas siendo embestido por Altamira

 

_ Oh, oh Señor, más duro señor – gritaba Álvarez

 

Altamira aferrado a la cintura del muchacho lo penetraba sin parar, el agua y el choque de la piel parecían que azotaban las nalgas del cadete.

 

Giovanni miró su boxer y una potente erección se visualizaba, eso hizo llevar su mano dentro y masturbarse mientras veía follar a esos dos.

 

Cuando regresó la mirada, el cadete se daba sentones en la verga del coronel Altamira.

 

_ Que rico montas cadete- le decía Altamira.

 

_ Le gusta señor – preguntaba mientras movía las nalgas.

 

_ Cadete, muévase más rápido.

 

Alvarez empezó a mover las nalgas de manera rítmica, movimientos con los cual mantenían extasiado al coronel casi al borde del orgasmo.

 

Giovani se quitó el bividí y sobándose sexymente los abdominales de adolescente en desarrollo que se marcaban, se masturbaba con la otra mano su verga de considerable tamaño para su edad, parecía un plátano que es un poquito curvo con la cabeza ligeramente hacia abajo.

 

La mano del chico con las justas cerraba en su gordo pene.

 

Los veía con detenimiento y más se tensaba.

 

Giovanni dió un profundo suspiro que no se explica cómo Altamira se percató pero en lugar de asustarse con una sonrisa lasciva invitó a acercarse al muchacho.

 

El chico caminaba con la verga en la mano, en el camino se deshizo de su bóxer quedando completamente desnudo.

 

Giovanni era salpicado por el agua que caía, y más por el movimiento de arriba y abajo de Álvarez.

 

Luego de unos minutos el hombre se retorcía de placer y eyaculaba dentro del culo del cadete al mismo tiempo Giovanni disparaba su semen en la espalda de Álvarez acompañado de bramidos de satisfacción.

 

El muchacho volvió a entrar en si, y se dió cuenta de la situación, dió vuelta atrás y con la verga aún flácida salió con el paso apresurado, recogió las prendas que había dejado tirado y se fue.

 

Giovanni llegó con el corazón en la mano a su litera.

 

_ Eso fue alucinante – se dijo para sí mismo.

 

Pasaron unos días y él volvía al baño a la misma hora para ver si encontraba la misma escena nuevamente, pero no pasaba nada

 

Día domingo de esa semana era descanso, dónde todos los cadetes podían salir del cuartel sábado por la noche y regresar domingo por la noche, pero Giovanni no tenía el permiso de las salidas, su tío ordenó que no se las dieran.

 

 

_ Danelli, Danelli – llamaba la atención atención Álvarez.

 

Él entraba por la puerta muy silenciosamente, no había nadie en el cuarto, él estaba completamente solo.

 

_¿Qué pasó? – preguntó Giovanni

 

_ Con respecto a lo que viste aquella noche -dijo él

 

_ No te preocupes, no he visto nada – respondió serio.

 

_ De todos modos, mi coronel te manda esto – dijo entregándole una navaja de plata – Y esto también – dijo entregándole un sobre

 

El sobre decía lo siguiente:

_ “La buena fortuna no viene del saber que decir, sino del saber callar” “ El silencio es la mejor arma del observador, y la mejor defensa del que está alerta”

 

_ Y esto es de mi parte – dijo entregándole una correa de pierna para el cuchillo – Que nadie se entere que lo tienes, debes esconderlo bien, así no se verán venir tu ofensiva si te subestiman.

 

Dicho eso, Álvarez se apresuró a irse.

 

_ Álvarez – llamó la atención Giovanni – Bonito trasero – dijo sonriendo.

 

_ Gracias – respondió.

 

Se quedó solo y eso de las 9 de la noche lo solicitan, porque querían apoyo por un inconveniente para la zona de un puente.

 

_ Pero si hoy no es mi turno, es mi día libre- dijo

 

_ Son órdenes, obedece – respondió uno

 

Lo dejaron para terminar de alistarse, se puso primero el cuchillo en la pierna y de resto, el uniforme.

 

En todo momento se le repetía la frase del sobre.

 

Los dos cadetes y un alférez iban delante de Giovanni, y haciéndole mucha conversación sin embargo recordó.

 

_ El silencio es la mejor arma del observador – decía.

 

Empezo a observar sus movimientos, sus expresiones corporales e incluso el tono de su voz, pero él no decía nada.

 

Algo le olía mal, no era capaz de descifrar que, hasta que llegaron al puente.

 

Era un puente colgante enorme, y abajo de él corría un caudaloso río, conocido por ser peligroso por la zona.

 

_Me estaré imaginando cosas? – Pensó

 

El alférez dijo el orden en que pasarían por el puente, primero fue él, después Giovanni, y detrás de él los dos cadetes.

 

Se detuvieron abruptamente en cierto punto y rápidamente Giovanni golpeó a los cadetes que estaban en su tras.

 

Pero por el número lo redujeron rápidamente, lo ataron de pies y manos y lo arrojaron al río.

 

La sumersión fue brutal, pero en el trayecto, recordó “ El silencio es la mejor defensa del que está alerta”.

 

Se mantuvo calmado para poder salir a flote, y de inmediato mientras la corriente lo jalaba, hizo maneras para poder sacar su cuchillo que estaba en la pierna, se logró liberar de las ataduras de las manos y agarrándose de una rama se puso a soltar los pies.

 

Giovanni respiraba muy agitado

 

_ Hijos de puta – maldecía con rabia.

 

La rama no resistió mucho y la corriente lo llevó río abajo.

 

******

 

Hacienda Mayor – Enero 2022

 

Llegaron todos a la Hacienda, y se encerraron rápidamente en el despacho. Giovanni mandó a llamar a su yerno, que además es su abogado de nombre Ricky Mills.

 

Ricky tenía 40 años, era un hombre moreno corpulento y alto, facciones muy guapas y masculinas, cabello afro bien recordado y estilizado, nariz rectas, mirada profunda y penetrante, y una barba en forma de perilla.

 

Cómo siempre con la vestimenta formal propia de un abogado, se le marcaban los bíceps y tríceps en la camisa, además de sus piernas marcadas y gruesas.

 

Una vez todos reunidos en el despacho, acordaron sus próximos movimientos.

 

El despacho era muy amplio y elegante, un escritorio de cedro muy grande, detrás del escritorio, un librero enorme de distintos libros y distintas ciencias.

 

Tenía una fotos de su familia, la única vez que todos estaban reunidos; desde que eran una familia pequeña, y conforme fueron creciendo.

 

_ Cómo ustedes saben hay un payaso o payasa, no me interesa quien sea – dijo arrogantemente – Que sabe o quiere hacernos creer que sabe sobre la verdad de mis negocios – dijo está vez serio

 

_ Hoy sufrimos un atentado, bueno papá sufrió un atentado – habló Luka.

 

_ ¿Qué? ¿Estás bien hermano? – preguntó preocupado el cuñado de Pietro.

 

_ Te juro que los mataré, sea quien sea – dijo Ricky, que así se llamaba el cuñado

 

_ Yo puedo encarglamelas – agregó Pietro – Se cuidarme solo – dijo suficientemente.

 

_ Deja la pose de defensor, lo que quiero es tu cerebro, en estos momentos – dijo Giovanni callándolo

 

_ Si me permite patrón – dijo Abkar – Yo creer que atentado y sobre, no es la misma gente.

 

_ Gracias por tu aporte Abkar pero eso ya nos habíamos dado cuenta – le respondió Giovanni cortésmente.

 

Abkar era una masa de músculo de 43 años, corpulento, cabello y barba recortados estilo militar, de hecho Abkar pertenecía a la brigada de élite de su país, solo que desgraciadamente en una operación, una bomba destruyó una de sus piernas, se la tuvieron que amputar y por azares del destino conoció a los Danelli.

 

Ricky emitió un sonido de risa aguantada.

 

Mi padre lo miró serio.

 

_ Luka, revisa los vídeos de la cámaras de seguridad, movimientos cibernéticos, quiero un perfil completo de ellos.

 

_ Bien – asintió Luka.

 

_ Abkar resguardaras siempre a Luka, no sé despeguen.

 

_Ricky, tú todo respecto a lo legal, denuncias, procesos.

 

A cada uno les repartió de acuerdo a su campo de experiencia.

 

_ Bien pueden retirarse – dijo Giovanni.

 

Todos se retiraron excepto Ricky.

 

_ Pasa algo – preguntó el coronel

 

_ No es que me quite el sueño, Pero ¿Por qué eres tan hijo de puta conmigo?

 

_ Si con callarte dices que soy un hijo de puta, no me imagino que será un golpecito – dijo sarcásticamente.

 

Giovanni prendió un puro y se puso de pie.

 

_Yo considero que contigo he sido cortés, te he abierto las puertas de mi casa, es más con los años me ha dado gusto que formes parte de esta familia, eres padre de mis nietos, tienes una mente brillante, y eso alago mucho- dijo acercándose a Ricky y plantandole cara – Si hubiese sido un hijo de puta, te hubiera matado esa la noche con la sobredosis de Pietro -dijo gritándole en la cara restregandole todo el olor a tabaco que tenía.

 

Ricky no le quitó la cara de encima tampoco.

 

_ No puedo retroceder el maldito tiempo para remediarlo, no quise que pasara eso – le restregó también.

 

_ No tengo duda de ello, pero tú falta de huevos, pudo más.

 

_ Me retiro – dijo Ricky.

 

_ Te lo agradecería

 

Por su parte Pietro había ido a su habitación y se estaba fumando un porro en su balcón que daba a la parte trasera de la hacienda, dónde estaba la piscina..

 

Dieron dos toques a la puerta

 

_ ¿Se puede? – preguntó Ricky asomando la cabeza

 

_ ¿No me queda de otra no? – dijo Pietro girándose y mirando nuevamente al balcón.

 

_ Me has tratado de manera indiferente hoy día – dijo Ricky acercándose por detrás a paso lento

 

_ Te parece, debe ser por el ajetreo de hoy – dijo fumando restándole importancia.

 

_ Pues a mí me parece que sí – dijo está vez Ricky restregandole el bulto en el trasero de Pietro.

 

_ Joder cabron, que nos pueden ver – dijo Pietro separándose y volviendo a entrar a la habitación.

 

_ ¿Te he roto el culo incontables veces aquí y ahora te apartas?

 

Ricky lo siguió y lo obligó a confesar.

 

_ No quiero que te separes de mi hermana- dijo él muy serio

 

_¿Te refieres a lo de casarte conmigo? – preguntó – Solo estaba bromeando, relájate – Dijo el moreno acercándose muchas más a Pietro invadiendo su espacio personal.

 

_ De acuerdo – dijo él

 

_ Pero yo hago lo que tú me pidas, soy capaz de mandar todo al diablo por ti – le confesó y acto seguido besó a Pietro.

 

Pietro le seguía el ritmo al movimiento de labios de Eren.

 

_ Aceptaré el día que esté muerto – respondió Pietro.

 

El moreno devoraba la boca de su cuñado le sacaba los botones a la camisa, dejó eso para quitarse el saco y tirarlo por ahí, se aflojó la corbata y quitó los botones de su propia camisa para quedar con los pectorales expuestos.

 

Acto seguido se descubrieron sus penes, y mutuamente se besaban mientras se tocaban.

 

El pene negro del hombre era de portentoso tamaño y grosor, que me costaba cerrar en la mano.

 

Ambos se dejaron caer sobre la cama de Pietro, misma cama que compartía con su esposa, se revolcaban con descaro, y sus penes se restregaban el uno al otro.

 

_ Me hacías tanta falta- decía Ricky.

 

_ Yo también te extrañé – respondió Pietro

 

_ ¿Tu culito? ¿Me habrá extrañado? – Preguntaba Ricky dedeándolo.

 

_ Ahora no pendejo- le rechazó

 

_ En la cama quien manda soy yo – afirmó con seguridad.

 

Ese dominio le gustaba a Pietro quien accedió con una sonrisa muy lujuriosa.

 

Se puso boca abajo en la cama y en esa posición alcanzó un frasco de lubricante, Ricky lo tomó y se embarró un poco en la verga y otro en el ano de Pietro.

 

Su cuñado se le colocó encima y poco a poco iba hundiendo su miembro, resbalaba por el uso del lubricante.

 

Pietro emitía gemidos silenciosos mientras sentía como entraba esa gruesa polla negra.

 

_ Mierda si que lo tienes apretado – le susurraba en el oído

 

Los 23 cm de verga de macho entraron completamente.

 

El hombre la sacaba casi toda la verga dejando solo la cabeza dentro, y la metía con una estocada al final.

 

_Oh, Oh, sí cabrón, metemela toda- pedía Pietro mordiendo las sábanas

 

_ Extrañaba sentir el calor de tu recto – Decía Ricky.

 

El hombre se restregaba de un lado a otro con la verga clavada dentro de su cuñado.

 

Unos pocos minutos después tocaron la puerta.

 

_ Hijo, Hijo, estás ahí – preguntaba Virginia

 

_ Si mamá que paso – respondía Pietro pujando.

 

_ Te estamos esperando para iniciar – respondió ella.

 

_¿ Ricky no está contigo?

 

_ No mamá, pero adelántate, ya mismo salgo.

 

Todo el tiempo Ricky estuvo metiendo y sacando su pene del agujero de su amante.

 

_ Salvado por la campana – dijo el moreno besándolo y levantándose.

 

Pietro sintió el vacío de inmediato.

 

_ Te espero mañana en el departamento, quiero partirte el culo a mi gusto – le comentó subiéndose el pantalón

 

_ ¿ Cómo sabes que iré ? – preguntó retóricamente Pietro

 

_ Por qué soy tu macho – respondió vanagloriandose y saliendo.

 

Bien dicen que activo de uno, es pasivo de otro.

 

Pietro no entregaba el culo a cualquiera, de hecho han sido muy pocos quienes habían logrado reventarle el culo a este macho tan rudo. Uno de ellos precisamente era Ricky.

 

_ Hey amor, ¿dónde estabas? te estamos esperando – dijo Cecilia la esposa de Ricky encontrándose en el pasillo.

 

_ Hablando unos temas legales con tu hermano, respecto a que sigue después – dijo naturalmente – Tú sabes cosas entre cliente y abogado – terminó diciendo

 

_ Ya veo cariño – dijo sonriendo.

 

_ ¿No vienes? – preguntó Ricky

 

_ Mmm No, ahora recuerdo a qué venía – dijo disimulando – Mamá me envió a llevarle sus pastillas para el corazón, ya le toca tomarlas.

 

_ Okey amor, te veo abajo, te amo – haciendo amago de irse

 

_ Espera amor – dijo – Tu bragueta está abierta – le dijo acercándose a subirle el cierre – También te amo .

 

A los pocos minutos sale Pietro de su habitación.

 

_ Hey Ceci – saludo Pietro.

 

_ Hermano que bueno verte en casa nuevamente – dijo ella dándole un abrazo.

 

_ Gracias Ceci – respondió.

 

_ Oye por cierto que te dijo Ricky sobre tu proceso, ¿Cómo salió todo finalmente?

 

_ Aún no he tenido oportunidad de hablar con él respecto a eso.

 

_ Oh ya veo -dijo extrañada como sospechando de algo – Afortunadamente estás libre hermanito – dijo con la dulzura que la caracterizaba – Bueno te están esperando abajo, yo voy a traer las pastillas de mamá y los alcanzo

 

Pietro continuó y su hermana esperó a que se perdiera de vista.

 

Cecilia rápidamente entró a la habitación de su hermano, encendiendo la luz se percató del saco que estaba en el piso, la cama desordenada y en las sabanas había una mancha de humedad, también consiguió el saco tirado en el suelo, y el lubricante por otro.

 

_ ¿no creo o si? – se preguntó ella misma.

 

 

Casi toda la familia estaba reunida en la mesa del comedor para cRickyonias, la mesa era grande y todos los platos y cubiertos eran finos y elegantes.

 

_ Mujer que haces sirviendo, hoy es una ocasión especial , siéntate con nosotros – dijo Giovanni a Dorotea.

 

Dorotea, la sirvienta que ayudó a Giovanni a salir de la casa en llamas, ya estaba muy anciana, alrededor de unos 75 años tendría.

 

_ Señor Giovanni, está negra le servirá hasta el día que deje de respirar – afirmó ella – Le debo tanto a usted y a su esposa la señora Virginia.

 

_ Ni lo menciones Tea – le dijo Virginia de cariño – Al contrario, nosotros estamos muy agradecidos contigo – mencionó – Es por eso que te consideramos parte de la familia – remarcó.

 

En ese momento llegó Dante, la mano derecha de Giovanni.

 

La comunicación no verbal de esos dos era evidente para Pietro. Todo había salido a la perfección, no quedó rastro de los cuerpos y desaparecido todas las pruebas.

 

_ Dante que bueno que llegas – dijo Giovanni – Sientense a la mesa y ayuda a tu madre por favor – le pidió.

 

La cena transcurrió con normalidad todos riendo y poniendo al día a Pietro de lo que se había perdido cuando estaba en prisión.

 

La hora era propicia para ir a dormir, los presentes tuvieron que despedirse.

 

_ Por cierto mañana lleva a Luka, quiero follarlos a los dos – le dijo Ricky a Pietro muy discretamente llevándoselo a un lado.

 

_ Joder, no puedes con el padre y quieres con el hijo – le respondió Pietro atacando su virilidad.

 

_ Pregúntale quién le ha estado dando mantenimiento el tiempo que no estuviste.

 

Ricky notó el rostro de Pietro y se rió.

 

_ Tu rostro me ha hecho recordar aquella vez cuando encontraste a tu hijo chupándome la polla.

 

Pietro tuvo un recuerdo fugaz.

 

_ ¿Chicos han visto a Giovanni? – preguntaba Virginia interrumpiendo.

 

 

_ No suegra, tampoco nos hemos percatado de su ausencia -respondió Ricky.

 

Virginia siguió su camino buscando a su marido.

 

Mientras tanto Giovanni quien habría aprovechado el pánico para desaparecer, se encontraba en una especie de cuarto de aspecto muy antiguo, un colchón en el piso y estaba sentado sobre una silla mirando una pantalla, los pantalones estaban por debajo de las rodillas.

 

Movía de arriba hacia abajo su mano, excitado po

r la escena que estaba viendo en una pantalla.

 

Giovanni se estaba masturbando con el video de Pietro y Ricky cogiendo en la habitación hace unas horas.

 

_ Lastima no terminaron – dijo para si mismo guardándose la verga nuevamente en el pantalón.

 

Continuará…. Se vienen capítulos más candentes.

 

Gracias nuevamente por leerme, se los agradezco un montón. Espero que les guste estos nuevos relatos.

 

 

 

744 Lecturas/31 mayo, 2025/0 Comentarios/por MorboSex
Etiquetas: hermana, hermano, hermanos, incesto, madre, mayor, militar, padre
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