el sexo no es amor, es placer- Mateo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por alonight.
Un día, uno de los normales con mis doce horas diarias de estudios mas tres de deberes, cinco o seis horas de sueño y con tan solo trece años de edad mi mamá me llamo a su habitación, como siempre yo obedecí sin mas. Al entrar a aquel cuarto tan pequeño como el mio, pues mi casa no es de las mejores, pero al menos tenemos un techo y unas cuantas maderas a las que llamamos paredes.- “hijo, nuestro vecino el que esta a por graduarse este año en educación secundaria quiere darte clases para así poder mejorar su enseñanza y como saves que yo no cuento con dinero para pagarte profesores y oportunidades como esta de que te enseñen gratis no se desperdicia, asepte que te enseñara, aparte el es uno de los mejores en la universidad de la región y creo que te va a enseñar cosa muy buenas"-dijo mi madre, aunque no quería tomas mas clases pues para mi era suficiente don doce horas diarias y agregarle unas mas no creía que fuera de lo mejor y sin mostrar molestia alguna aparentemente le dije a mi mamá que si pues sabia que ella siempre quiso lo mejor para mi y mis hermanos aunque no se daba cuenta que yo me sentía muy cansado.

Al día siguiente con las ganas y dudas de saber como era mi vecino aparentemente “nerd" aunque yo mismo sabia que no estaba en las condiciones de llamarlo así. Después de pasarme todo el día sentado y metido en un salón de clases y sentado en una silla mucho tiempo sentía que mis glúteos iban a desaparecer. Al llegar a casa, cambiarme y cenar, agarre los útiles nesesarios para mi supuesta clase de dos horas.

Camine solo dos casa con la curiosidad de como era aquel vecino, era raro no conocer a casi todo el vecindario pues yo no tenia tempo ni para respirar. Mis pasos lento y mirando de lado a lado pues nunca ma había quedado a mirar como eran las casas de los vecino y creo que no debí hacer eso pues la unica casa que daba mal aspecto a aquel barrio era la mía.

Toque la puerta de la casa de “Mateo" pues mi madre me dijo que se llamaba así. Vi que alguien abría la puerta lentamente dejandose ver completamente, era un joven alto muy alto para mi, media como un metro ochenta y seis, comparado con mi metro sesenta y nueve yo quedaba como un alfiler literalmente, mientras yo soy totalmente delgado, cabello e ojos negro y con una cara muy afeminada el tenia un cuerpo muy marcado un cabello color chocolate y unos ojos marrones muy claros que imnotizaba. Me quede parado unos segundos en mirando aquellos ojos y poco después volviendo a la realidad y cuestionandome siendo el es Mateo realmente, con tartamudes pregunto -“es-esta el joven…Mateo"-.

Aquel parado frente a mi sonrrie dejando su hermosa sonrrisa que me cautivo y diciéndome- “soy yo, aparte de que llegas tarde no me conoces mm…eso deja mucho de que hablar sobre tu vida social, bueno que mas da pasa y sientate en la mesa que esta allí"- dijo señalándome una carpeta de colegio u una pizarra acrílica a lo que solté una sonrrisa, en sería se había tomado la molestia de armar un escenario para poder enseñarme. Me dirigi y senté en aquella carpeta mi entrar el se acomodaba unos lentes, y lo único que pensaba era “bueno si era un tanto nerd después de todo", pero sus palabras me quitaron de mis pensamientos.

-como vees yo seré tu profesor de dos horas hasta que me gradúe y esto servirá para beneficio de ambos, yo te enseñare y de paso aprendere como es ser un buen docente pues veras esa es la carrera que estoy a punto de culminar- dijo.

– si, si te entiendo no tenias que explicármelo todo pues yo ya sabia eso antes de venir, no hay ningún problema por mi parte, es mas estoy ancioso de empezar las clases- dije con ironía mostrando lo obvio de sus palabras, a lo que solo sonrrio.

– bueno sera mejor que empesemos- dijo mostrándome lecciones que en un abrir y serrar de ojos se las respondí, no le quise decir nada pues se veía entuciasmado en lo que hacia y no era capas de bajarle la autoestima.

– vale ya te he pillado…me estas cojiendo de estupido, si era fácil solo me tenias que decir y yo te cambiaba los ejercicios dijo un tanto molesto.

– disculpame…es que te veías muy entuciasmado y lindo…- dije y después me tape la boca rápido- este bueno…quise decir una linda enseñanza…si eso- trate de arreglar la situación incomoda.

– ya no importa, mañana te pasare algunos ejercicios muy pero muy difíciles y no creo que los puedas resolver y vete ya a tu casa que ya terminamos y es tarde, tienes que dormir.

– no…- dije- no dormire, tengo que terminar algunos proyectos y son para mañana- agarre mis cosas y salí de su casa sin poder dejarle decir alguna palabra.

Al día siguiente y casi sin dormir durante mucho tiempo me fui a su casa y él cumplió con su palabra, me dio ejercicios muy difíciles que rompiendome el cerebro logre responder aunque demorandome mucho y con varios intentos fallidos.

-sabes. Yo nunca resolví esos ejercicios hasta estar en quinto sic lo de la universidad y tu con tan sólo trece años lo desarrollas si mas, eres admirable- sus palabras me enamoraron tanto como el.

Desde aquel día me había enamorado de Mateo y en todas las clases no podía concentrarme por mirarle solo a el, cada ves que estaba a mi lado me ponía muy nervioso hasta que poco tiempo después el también se ponía de la misma forma que yo, nervioso y en una de las clases el se me aserca y besa, no era un beso dulce y suave como uno espera un beso, este era como si él me estuviera nesesitando durante mucho tiempo y yo como todo un inexperto solo CEDI y me deje llevar por la adrenalina. Después de aquel beso el se me declaro y yo como estaba loca y pérdida mente enamorado solo acepte.

Todas las siguientes supuestas “clases" nos las pasábamos bese y bese, aunque yo quería llegar mas lejos pero el siempre me detenía y no pasábamos de los toqueteos.

Días después yo estaba decidido a hacerlo y no sabia por que, seguro eran las hormonas de principios de la adolecencia. En su casa y en nuestra típica “clase" que se había trasladado a su cuarto, EB la csma y en pleno beso yo empese a meter mi mano izquierda dentro de su camisa y la derecha masajeaba su pantalon que contenía un bulto muy grande y que me exitaba mas, hasta que el me separa y dice “no, no quiero hacerlo, te amo y no quiero lastimarte", sus palabras me sorprendieron y yo le dije “por que se que no me lastimarás quiero hacerlo". Después de eso lo bese y empese a acariciar nuevamente el pantalón que revelaba a un gran y enorme pene que seguía creciendo. Quite su camisa de cuadros y el hizo lo mismo con mi polo para luego majestuosamente rápido se deshaga de mi pantalón y bóxer de un tirón dejando me completamente desnudo y a su merced, yo quise quitarle le pantalón pero fallando en el intento haciendo que soltara una risa y luego quitarselos tan rápidamente pues era obvio que era un experto en esto.

Quedaba solo su bóxer y yo, se lo arrevate dejando al aire un enorme pene como de veinte centímetros aproximadamente, inconscientemente y guiado por el éxtasis de la excitación me aserque a el y lo sujete con ambas manos, a ser que mi cara y olía a jabón, orina y sudor que para nada olía mal, olía exquisito, era un aroma embriagante y lo introduje automáticamente a mi boca y chupandolo como si fuera una paleta, de arriba hacia abajo, aquel enorme peno no podía meterlo ni la mitad a mi boca pero hacia el intento. Sentí que sus piernas temblaban un poco y soltó un gemido lleno de placer y llenando aquel espeso semen en mi boca y al retirar su pene salpicandome en la cara. Lo mire y el solo sonrrei para luedo decir “me toca", hechandomr y agarrandome de la cintura y colocando mis piernas en sus hombros, agarro su pene llenandolo de saliva junto a sus dedos que me introducía, primero, segundo y el tercer dedo me hacían retorcer de placer y soltara gemidos, yo ya no quería sus dedos quería mas, lo quería a él dentro de mi y al notar eso, agarro su pene y aquel grande y rosado glande se iba introduciendo en mi pequeño y estrecho ano, sentía que me estaba partiendo centímetro a centímetro hasta que entro mágicamente todo su sexo, me dolía y no paraba de apretar las sábanas

El se quedaba quieto y el dolor poco a poci cedia aunque no niego que seguía ardiendo, eso se perdía con el placer que me daba, le hice un gesto y el empeso a moverse lentamente, eso me hacia hemos muy fuerte, el dolor y el placer se habían mesclado haciendo que me combiertiera en alguien diferente, pedía mas y el me lo daba, poco a poco sus estucadas eran mas fuertes haciendo que me retorciera incesantemente pidiendo mas, cada movimiento que el hacia me alocaba hasta que toco algo dentro de mi que hizo que me viniera en mi abdomen y el siguiera aún mas rápido, él empezó a moverse mas rápido soltando un gemido muy fuerte y yo siento un líquido caliente dentro mio, después de que el se viniera, cayo exhausto a mi costado y yo no podía ni moverme por que me sentía hueco por dentro, sin duda lo amaba y mucho.

Después de aquel encuentro lo repetíamos muy seguido, casi a diario, hasta que el se graduó con honores, yo me sentía muy feliz y él me dijo que le había llegado una oferta de trabajo fuera de la región y se fue tuvimos una despedía muy triste, enserio lo amaba y el con la típica frase “te amo y te prometo que vendré pronto y te llamaré todos los días y jamas me fijare en alguien que no seas tu", como me hubiera gustado grabar esas palabras y reírme ahora de ellas, pues el cabron conoció a alguien y se caso y el muy hijo de p*** le envió una invitación a mi mamá quien se fue a su boda, obvio yo no fui tengo orgullo y dignidad aunque mucho de ambos diría yo.

Desde ese momento deje de crearme espectativas de las personas por que se que mientras mas esperas mayor es la deshilucion y el “amor" eso no existe, lo que si existe es el placer y el sexo, son las únicas cosas que de las que jamas nos arrepentimos y si lo hacemos lo hacemos por que no lo disfrutamos al máximo.

Todo lo que escribí es totalmente cierto y contare todos los siete encuentros mas que tuve si ustedes quieren claro.