El tipo del cable
Comienzos de un nuevo mundo para el joven Camilo, y su gusto por la enormes pollas.
Mi nombre es Camilo, tengo 22 años, casado hace 2 años, ella es mucho mayor que yo, tiene 55 años, nos casamos porque ella ofreció ayudarme con mis estudios y además me consiguió un buen trabajo en su empresa, ella es una trabajadora compulsiva, por lo que busco en mi más bien un compañero y amigo que la esperara al final del día para contarle todas los pormenores de su día, y no al esposo macho para que la follara sin parar.
Tengo una figura muy femenina desde pequeño, caderas anchas, enorme trasero y una boca rosada y voluptuosa, nunca había sentido ningún tipo de atracción, por ningún género, es más, cuando nos casamos, como mi vida siempre era estudio-casa-estudio, nunca había tenido ningún tipo de relación y tanto ella como yo nos consideramos asexuales.
Todo cambio el día que decidimos cambiar de operador de cable, ella me pidió que los esperara para atenderlos ya que ella iría a trabajar como siempre, y obviamente su cargo es mucho más importante.
Como siempre, dijeron a una hora temprana de la mañana, pero terminaron llegando casi al finalizar la tarde, eran casi las 5 pm cuando llegaron, mi esposa llamó que debía quedarse en una importante reunión y no llegaría hasta después de las 8pm
Al abrir la puerta habían dos tipos, uno joven, de la misma edad mia pero se veía imponente, enorme en su overol, el primer pensamiento que corrió por mí mente fue correr asustado del Jason de viernes 13, por lo que al saludarlo emiti una sonrisita que hasta a mi me pareció bastante coqueta. El tipo me dio la mano de una manera casi sexual rosando la palma mía con su dedo medio mientras hacía un gesto de satisfacción y me guiñaba el ojo, el otro era un señor 50enton, con barba poblada y una gran barriga.
Entraron a la casa, revisaron donde podrían poner sus aparatos, al entrar a mi habitación el viejo se dio cuenta que habían olvidado el módem, y aunque la empresa quedaba un poco retirado de mi casa, el se ofreció a ir para poder terminar el trabajo, aparte eso les daría unas horas extras. El joven dijo que mientras el iría abriendo los huecos en la pared para tirar los cables, acordaron hacer eso y el viejo se fue.
Yo le dije al joven que estaría haciendo algo en la cocina, por si me necesitaba, el me dijo que si, ya que estaba solo, necesitaba que por favor sostuviera la escalera mientras el hacia un agujero en la pared pero cerca al techo para no se vieran mal los cables.
Yo acepte, sostuve la escalera, cuando el estuvo unos escalones arriba, vi que su paquete, quedaba exactamente a la altura de mi cara, no se porque pero eso hizo que algo en mi despertara, mis manos sudaban, mi corazón se agitó y mi anito a contraerse y a expandirse, sentías unas extrañas cosquillas en mi cuerpo y sobre todo en mi colita.
El tipo lo noto y se puso aún más cerca de mi cara, mientras decía que por favor lo sostuviera bien, yo acercaba aún más mi cara y en un instante inhale el aroma a macho que emanaba de su enorme paquete.
Estaba completamente extasiado disfrutando de la vista y el olor cuando el me dijo si por favor le acercaba un martillo y diciendo eso volteo dándome la espalda, para mi fue como si se acabará la diversión, así que fui por el martillo.
Al regresar el seguía de espaldas, le di el martillo y el me dijo que estuviera listo para seguir sosteniéndolo, volví a mi posición inicial y el empezó a girar, mi sorpresa fue ver que el tenía su enorme verga fuera del overol.
T. Por favor sostenme
C. T.t.tienes tu..tu… pene por fuera
T. Lo siento, este overol tiene el cierre malo, ya no lo puedo arreglar, solo por favor sostenme para poder tirar este cable y listo, así podre bajar.
Ahora su aroma era aún más delicioso y ver su enorme verga con la cabeza enorme y morada, marcado por unas gruesas venas hicieron que perdiera la razón, acerca aún más mi cara, lo que el tipo aprovecho para tomar mi cabeza y empezar a frotar su verga en mi cara.
C. No por favor, su pene está rozando mi cara.
T. No te preocupes muñeca, no solo voy a rozar tu cara, y no es un pene, esto es una verga
Bajo de la escalera y era aún más imponente al lado mío, tomó mi camisa y la rasgo, igual con la pantaloneta que llevaba puesta, dejándome solo en mis bóxer, que por mi enorme trasero quedaban como sensuales cacheteros
El me hizo girar para mostrarle mi cola, bajo mi interior y me dio una fuerte nalgadas que estremeció mi cuerpo, luego me hizo girar de nuevo para quedar de frente a él
T. Tienes una boca de puta, desde que te vi supe que eras toda una perra, ahora usa tu boquita
C. N.n.unca he hecho esto, pero me encantas, deseo sentir tu verga
Agarre su enorme polla y me puse de rodillas, era tan inmensa que incluso con mis dos manos lo masturbaba y aún quedaba espacio suficiente para chuparsela.
Lamia su enorme cabeza, pasaba mi lengua por toda su polla sintiendo sus venas, abría lo más que podía mi boca para poder tragarmela toda pero solo podía chupar la cabeza.
Casi a la media hora me dijo que era hora de probar mi culo, busco en mi mesita de noche y había una crema para manos de mi esposa, me puso en 4 y me echo cremita en mi ano mientras se lubricaba la polla con su otra mano, acomodo su inmensa cabeza en la entrada de mi hoyito e hizo presión, yo sentía que me partía en dos, pero era un dolor delicioso, el siguió empujando,mis ojos se llenaron de lágrimas pero no quería parar, el siguió hasta que toda su verga entró en mi cola.
T. Que apretadito estas, me encanta
Yo gire mi cabeza para verlo y el era majestuoso, sus músculos se marcaban mientras se agarraba de mis caderas y empezó a meter y a sacar lentamente, el dolor se convirtió en placer, mis gémidos eran cada vez más fuertes y más sensuales, más femeninos, solo pedía más y más, el bombeaba con suavidad, acomodando mi trasero a su enorme verga, consintiendo mi colita, luego fue aumentando sus movimientos, yo pegaba más mi cola a el, acelerando cada vez más, mi pequeño pene colgaba sin vida, era solo un pequeño pedazo de carne que jamás usaría porque mi vida la dedicaría a gozar con vergas tan enormes como la que tenía ahora, esa polla había aclarado mi mundo, sería una puta sumisa a enormes vengas, sentía como su verga se ensanchanba y derramaba toda su leche dentro mío, sus potentes descargas golpeaban mi ano haciéndome sentir un placer indescriptible.
Saco su polla, me dio un beso en cada nalga, luego me puso en pie y me dio un enorme beso en la boca, que correspondi rodeando su cuello con mis brazos.
Sonó el timbre, el viejo había regresado, yo entre a mi baño a limpiarme un poco, escuché que el anciano le dijo que no podían seguir haciendo el trabajo porque no autorizaron el módem sino hasta el otro día
T. Señor Camilo, dice mi compañero que debemos regresar mañana, hay algún problema?
C. No claro que no, los estaré esperando.
Comieron sus cosas y salieron, antes de salir, el tipo, que se llamaba Ricardo, agarro mi cola y me dijo:
R. Mañana regreso, nos seguiremos divirtiendo, tienes una cola deliciosa y me la quiero seguir comiendo, no hay problema, cierto?
C. Claro que no, le pertenezco a tu polla, mi culo te esperara con ansias, y dime Camila, mañana encontrarás a tu puta esperándote
El se sonrió, y me dio otro beso en la boca sin que nadie se diera cuenta.
Al rato llame a mi esposa a decirle que no se había podido realizar el trabajo, que volverían mañana por lo que debía quedarme nuevamente en casa, ella acepto.
Continuará…..
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