El tipo del cable 2.5

Pido disculpas ya que el anterior relato no salió completo, ahora si presenciamos la primera orgia de Camilo y como se traga la leche de 6 hombres.
Al despertar de la tremenda cogida que me habían dado, guarde la bolsa donde estaba la ropa y bote la nota que me habían dejado.

Al volver mi esposa a casa, quiso salir conmigo a cenar, yo le dije que me encontraba un poco indispuesto, y que mejor pidieramos algo y cenaramos en casa, ella acepto ya que no le gusta salir mucho.

Mientras hablábamos de su día como siempre, le dije que quizá mañana tampoco iría al trabajo, y me tomaría el día para hacerme unos exámenes médicos e ir al psicólogo, ella no puso problema, dijo que si quería que ella me acompañará, yo le dije que no, solo son exámenes de rutina que quiero hacerme, no hay nada malo.

Al amanecer, como todos los días la ayude a organizarse para el trabajo, prepare su café y se fue.

Inmediatamente fui al lugar donde dejé la bolsa, dentro había una diminuta tanga y un bra, tipo principiante, ambos de color rojo, muy sexys, dentro otra nota.

«Pontelos y ve a esta dirección, te tenemos una gran sorpresa,  pero debes venir solo con ellos puestos, lo más temprano que puedas»

Inmediatamente fui a ducharme, depile todo mi cuerpo, y me puse la lencería, era increíble, mi cuerpo era muy femenino, grandes caderas, mi cola se veía increíble en ese hilito, con forma de corazón, y el bra soportaba y realzaba mi ya enorme pecho, me sentía como toda una hembra, igual use un poco del maquillaje de mi esposa para acentuar aún más mis voluptuosos labios.

Me puse solo un abrigo por encima, tome las llaves del auto y mi celular, puse la dirección y me dirigí al sitio.

Al llegar note que era una parte de la empresa de cable, específicamente el parqueadero, me recibió un guarda en la entrada

G. Buen día, señorita??? Perdón podría bajar un poco más la ventana

C. Si, señorita, estoy buscando a José y Ricardo, ellos me dijeron que estarían aquí

G. Aahhh ud es la niña Camila, si ellos me dejaron encargado de dejarla entrar, que pena es que creí que seria una mujer mayor, y no una niña como ud, por favor parquee en el lugar blanco.

Ingrese el vehículo y lo parquee donde me dijo, luego me hizo señas para que entrará por un portón cerca donde había parqueado, al abrirlo, ahí estaban los dos.

R. Wow, llegaste, acércate, déjanos ver

Yo me fui caminando sensualmente hacia donde estaban ellos, me quite mi abrigo dejándolo en el piso, mientras daba vueltas para que ellos pudieran verme por completo.

J. Que » hembra» nos hemos conseguido, luce como una puta en celo.

Yo solo sonreía, mientras tomaba posición para aferrarme a sus enormes miembros, sacando sus ya erectas pollas de sus overoles, acariciando sus bolas y lamiendo una a una, estaba absorto chupando ambas vergas cuando siento que más manos empezaron a tocarme, mi cola y mi pecho, al voltear vi a otros 4 tipos con sus pollas enormes apuntando hacia mí.

C. Esta es mi sorpresa??? Que ricoooo

Y diciendo esto empecé a tocar y a la mera una por una de las enormes pollas que me rodeaban, alguien corrió el hilito de mi culo y sin dudar me penetro de una sola estocada, sentí como su enorme miembro atravesó todo mi esfinter, sacándome un grito de placer, empezó a bombear rápidamente, agarrándome de las caderas, mientras con mi boca complacía a uno de ellos y mis manos estaban ocupadas con otras dos pollas, mi boca no daba abasto a las tres vergas que tenía enfrente, a todas las chupaba una a una, mientras masturbaba a los otros dos y el otro tipo gozaba con mi culo.

El de cola empezó a venirse, llenándome la cavidad anal de semen caliente, enseguida se retiro e inmediatamente ocuparon su lugar, mi lubricada cola se sentía increíble,uno a fueron desfilando por ella, llenándome de leche las entrañas, José y Ricardo se unieron y ambos me penetraron al mismo tiempo, sentirme aún más abierto de lo que estaba hizo que mi cuerpo se estremeciera, llegué a un órgasmo sin siquiera tocar mi diminuto pene, la cantidad de leche en mi cola se rebasó cayendo por mis piernas.

Al terminar todos en mi culito, me rodearon con sus vergas aún erectas, mientras se masturbaban con mi boca o con mi pecho, uno a uno fue derramando su deliciosa leche en mi boca, que gustoso tragaba sin derramar una gota.

Todo tuvo que terminar puesto que empezamos a oír que llegaban más autos, yo me limpie un poco la cara, aunque no debía porque no tenía una sola gota de semen derramado, solo en mi cola, limpie un poco mis piernas y retuve lo más que pude en mi colita, les dejé mi lencería de recuerdo y me fui solo con mi abrigo.

Al salir, el guarda se despidió, me llamó bella, y yo salí muy contento a mi casa.

Continuará…..