El Viajante 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
En un momento sintió que la verga entraba no sin dificultad en el interior del culo, de ese culo que apretaba mucho, tanto que sentía que en cualquier momento acabaría largando mares de leche, no se desesperó ya que justo en el instante que su porongo ingreso dentro del recto del chico este gimió y giro su cabeza hacia atrás para ver qué era lo que ocurría, Amado miro al muchacho a los ojos y acercando su boca, lo beso tiernamente
sin dejar de meter la verga en su culo, solo que ahora muy lentamente, ya para cuando Betito saboreaba su lengua que también estaba dentro de Betito los huevos de Amado llegaban a los cachetes blancos del muchacho, este suspiraba asustado, recibiendo dolor y placer al mismo tiempo sentía un vacío en el estómago como un vértigo muy profundo y no era para menos se le acababa de meter en su culito virgen una tremenda verga hinchada, dura caliente, que ahora comenzaba a entrar y salir haciendo que Betito involuntariamente no parara de gemir, su pene también duro largaba chorritos de semen sin tocarse, intento relajarse y abandonarse al placer que sentía, mientras era penetrado y tocado por ese hombre, por ese macho que lo estaba cogiendo como si él fuese una chica y le daba tan profundos vergazos que sentía su culo tan abierto como nunca, respiraba hondamente y al largar el aire, no podía evitar gemir como una puta en celo, estaba en las alturas y se dejaba hacer, le gustaba se sentía muy bien con esa poronga entrando y saliendo de su cola, Amado mientras lo penetraba ya cada vez a más velocidad, le abría las nalgas con la mano que tenía libre, le levantaba la pierna para liberar el camino y que su verga, entre en lo más profundo haciendo que sus pelotas se contraigan ya que su eyaculación estaba muy cerca, pero Amador siguió y siguió cogiendo a Betito
estaba tan caliente que en un momento saco su verga del culo de Betito y coloco su lengua en ese culito, para besarlo y lamerlo, del agujero del culito del muchacho comenzó a salir mucho semen salía chorreando por su culo y quedando en las sabanas, si Amador había dejado, toda su descarga de leche, de muchos días dentro de ese hermoso culito, lo más increíble es que aquel hombre seguía con la poronga aún dura producto de la calentura que le producía tener a un hermoso muchachito desnudito y entregado a él, tan dulce, sumiso toda una invitación a pasar la noche entera cogiéndolo, haciéndolo todo suyo, convirtiendo en un potencial putito con todas las letras, y a Betito le gustaba, se dejaba, se entregaba a su macho sin decir nada, como sí le perteneciera a esa pedazo de macho maduro, que no solo le rompió bien el culito, sino que también le hizo descubrir, lo inmensamente feliz que se siente, ser la putita de un buen macho .
Amado aprovecho el semen que salía del culito para usarlo de lubricante y fue entonces cuando lo ensarto de nuevo, el macho sentía el rose bien sabroso de la cabeza, de su verga, con el esfínter del chico, esta vez, sin pausa hasta el final, metiendo toda su verga dentro el muchacho, quien volvió a sentirse invadido hasta lo más profundo, entre gemidos le pidió que fuera más despacio porque le dolía, pero Amado le saco la poronga del culito, se puso de pie al costado de la cama, lo tomo de los tobillos y arrastrándolo lo ubico con sus piernas en los hombros, y así teniéndolo a su entera disposición, se la volvió a meter hasta donde terminaba su poronga, lo hizo llorar, delirar de placer, llego al máximo punto de placer, fue en ese instante que el muchachito descargo su lechita entre los dos cuerpos, Amado se echó encima de él, y se dejó ir en su segundo orgasmo, un poco más y si no hubiese sido por que los apretones involuntarios, del culito del chico al acabar, podría haber aguantado más tiempo pero la verga de Amado estaba al límite.
Ambos se fueron al baño luego de descansar un rato, se bañaron y se acostaron a dormir.
En la mañana emprendieron el viaje, trabajaron charlando como si nada pasara, regresaron a sus casas y no se habló más del tema, hasta que un día Amado le comento a Betito que nuevamente necesitaría su ayuda en un viaje que realizaría esta vez con un integrante más un hombre de negocios que también andaba por los cuarenta y tantos años.
Betito después de pensarlo le dijo que sí que no habría problemas, el viaje se extendería por una semana y que el recibiría una muy buena paga, ya que su acompañante de negocios era muy generoso.
El chico se imaginó lo que pasaría, en este viaje con dos machos dispuestos a todo, sintió un poco de temor, pero el deseo siempre es más fuerte.
Continuará….
Espero comentarios, en la priera parte se que cometi muchos errores pido disculpas espero haber mejorado.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!