El viaje del pequeño migrante. 2

Continuo el relato de lo que paso con Víctor al ir a estados unidos al encuentro con su familia..
Como todos mis relatos, nada es verdad, nada es mentira, todo depende con el cristal con que se mira, por lo que no es cien por ciento real, aún así espero les sea de su agrado.

Desperté antes que el mirando que tenia parada la picha, era la más grande que había visto, encendí la pantalla y después de un rato despertó.
— buenos días descasaste bien —
Me miro notando que también tenía la picha parada bajo la panti, me la tape con las manos.
— si señor gracias —
Se puso de pie sonriéndome.
— me voy a dar un duchazo rápido para ir a desayunar y trabajar, si quieres después te duchas o vístete para salir —
Fue a rasurarse, ducharse y al salir yo ya estaba con la ropa que me compro y me cepillaba el cabello peinándome, entre a orinar, las manos y cara, el saco su labtop de la caja de seguridad, me dio uno de sus portafolios para que lo ayudara y salimos, al ir bajando por el elevador.
—- Víctor, no me digas señor, dime tío para que crean que eres mi familiar y no piensen mal en el hotel —
Lo mire sonriendo entendiendo a lo que se refería.

Dejo la llave en la recepción y fuimos a desayunar, mientras lo hacíamos me dijo.
—- Víctor, anoche estuve pesando que hacer contigo, para mí lo más sencillo seria llevarte a migración para que te regresen y no corras peligros en la calle —
Mire a la mesa saliéndole unas lágrimas, me acaricio el cabello agregando.
—– te prometí ayudarte por lo que no te puedo hacer eso, la única manera que pienso que te puedo ayudar es que en la noche le hablemos a tu mamá y papá y le digas lo que pasó, después yo hablo con ella a ver que deciden ellos, te parece bien —-
Me pare y le di un abrazo.
— gracias señor por ayudarme, es muy bueno —
Terminamos de desayunar y fui con él a trabajar visitando a sus clientes aunque a veces me aburría porque hablaban mucho con ellos, llego la hora de comer y después fue a ver a dos clientes más antes de regresar al hotel.
Descansamos un poco tomando unas Coca-Colas mirando la televisión hasta que dijo.
—- Víctor déjame ver qué cosas traes en tu mochila y dame el teléfono de tu mamá —
La puse en mi cama sacando la ropa, una de las pantis cayó al piso la recogió rápido.
—- estas son de mi prima porque mi tío se queda con el dinero que manda mi papá y lo gasta todo, solo me daba la ropa usada de mis primas y primo, por eso tengo más pantis porque las trusas de mi primos están chicas y rotas, solo eso tengo y unos libros de la escuela —
El sonrió sin comentar nada de la panti, le di el número del teléfono.

—- le voy a marcar a tu mamá directo para yo pagar la llamada para que no se preocupe de pagar ella, cuando conteste te lo paso para que hables y le cuentes todo lo que te paso, después me la pasa para que hable con ella a ver qué hacemos. —-
Marco el numero y cuando contesto mi mamá me lo paso, le conté lo que me hizo el señor Pedro y que me dejo abandonado en México y no iba a llegar a estados unidos, empecé a llorar cundo le decía que el señor me amenazo que si no hacia sexo con él no me daban el dinero que me quito, el señor se sentó a mi lado y me abrazo para calmarme un poco, al final le dije que estaba con un señor bueno que me estaba ayudando y le pase el teléfono a él, me senté en la cama en flor de loto para calmarme.
El saludo a mi mamá le dijo su nombre y en lo que trabajaba, hablaron un rato y me la paso para que me despidiera, me dijo que me cuidara y que obedeciera al señor, al cortar la llamada.
—– que le dijo mi mamá —
Me limpio las lágrimas.
— Víctor no te preocupes, tu papá y mamá van a pensar que es lo mejor para ti y mañana les hablamos para que nos digan lo que decidieron —
Me acaricio el cabello.
— quien te enseño a sentarte así —
Respire profundo para calmarme.
— una señora de Australia que da clases de yoga en san Pedro Atitlán, le ayudaba a limpiar su salón y ella me enseñaba yoga —
Otra vez movió mi cabello.
— nene, me parece bien sigue haciendo yoga para que te calmes mientras me ducho —
Hizo una pausa y agrego.
—- se me olvidaba, tu mamá me dijo que si podía denunciar al señor que te robo y quiso abusar de ti, sabes las placas del camión o como era para reportarlo a la policía —
Agarre mi mochila y saque la libreta porque ahí había dibujado el camión y le puse el número de placa, le enseñe el dibujo.
— así es el camión solo me falto colorearlo, es amarillo y las letras donde dice trasporte da bananas en azul y ese el número de placa y este el numero del camión porque hay muchos iguales —
Lo miro.

— también dibujas muy bien con mucho detalles, con esto mañana hablo de un teléfono público y hago la denuncia para que detenga a ese mal hombre —
Se desnudo y fue al baño al mirar sus bolas y picha se me puso dura a mí, sentado así metí las cosas a la mochila dejando fuera los libros y un cuaderno para ver unas fotos que traía metidas entre las hojas de los libros hasta que salió el señor y me mando a duchar, me quite la ropa quedando en panti al caminar al baño me tape con una mano el frente para que no viera que tenia parada la picha, mientras me duchaba me hice la paja pensando que se sentiría si me metieran una picha de ese tamaño.
Salí del baño tapándome otra vez el frente de la panti porque aun la tenía parada, vi al señor que hojeaba y leía mi libreta, recordé que ahí estaba un borrador de una carta que le deje a mi amigo Alan que decía —- Alan, te amo con todo mi corazón pero tengo que ir con mi familia, voy a extrañar mucho los momentos felices que pasamos a solas. Nunca te voy a olvidar mi amor, espero que también me recuerdes y conteste las cartas que te mande, no le cuentes a nadie lo nuestro. Al final le puse un corazón con nuestros nombres. Te amo mucho.
El señor al verme cerro la libreta, agarro uno de los libros sacando una de mis actas de nacimiento.
—- Víctor tienes una letra muy bonita, estaba viendo que traes tus actas de nacimiento, notas de la escuela, tenías buenas calificaciones y algunas fotos de tu familia y tuyas —
Fui a sentarme sin saber si leyó lo que le escribí a Alan.

—- mi mamá me dijo que llevara esos documentos y mi credencial de la escuela como identificación por si la necesitaba —
La saque de una de las bolsas laterales de la mochila y se la di, la miro y me la regreso, agarre el cuaderno y lo metí a la mochila, me movió el cabello porque creo le gustaba hacerlo, se puso de pie y fue a su maleta mirándole las nalgas, saco algo y regreso enseñadme una panti.
—- Víctor, no eres el único que usa panti, cuando yo era nene también me gustaba ponerme las pantis de mi hermana y primas, aún ahora a veces uso pantis, así que no te de verguiza por eso —
No lo podía creer, el señor era hueco pero no se le notaba como a mí.
— no me da vergüenza, es que si mis amigos veían que traía panti me molestaban mucho —
Otra vez me movió el cabello.
— te entiendo, también me pasaba eso, muchos no entienden que no todos somos iguales, cepíllate el pelo y vamos a dormir —
El fue a guardar la panti y se acostó a ver las noticias, fui a pararme al espejo a cepillar el cabello para que se secara sin importar que me viera en panti, me acosté y no tarde en estar dormido.
Al otro día cuando me despertó, el ya se había duchado y vestido.
—- Víctor, no seas dormilón ya es tarde párate y vístete —
Al abrir los ojos vi que miraba como la picha hacia carpa de circo en la panti por lo dura que estaba, puse una mano para tapar sentándome rápido.
— disculpe señor me quede dormido —
Fui al baño a orinar lavarme la cara y las manos, regrese a ponerme otra vez la misma ropa que me compro me peine y salimos del cuarto.
Bajamos y al caminar al auto mire la piscina.
—- nene sabes nadar —
—- si seños, desde muy chico aprendí en el lago —
Llegamos al auto subimos rumbo al restaurant.
—- me voy a apurar a visitar a los clientes de hoy para que en la tarde nos metamos un rato a la piscina —
Lo mire sonriendo.
—- gracias señor si me gustaría —

Al salir del restaurante busco un teléfono público para denunciar al señor Pedro, fuimos después a varias tiendas de dulces, pero esta vez no hablo mucho y salía rápido, a las dos de la tarde fuimos a comer.
—- Víctor, solo me falto un cliente, después de comer vamos a un centro comercial para comprarte un bañador para que te metas a la piscina, veo al cliente y regresamos al hotel —
Estaba feliz con una gran sonrisa.
— gracias señor, en la piscina uno se refresca del calor —
Al salir del restaurant fuimos caminando a una plaza comercial y entramos a una tienda de deportes a comprar el bañador, el agarro un bikini azul claro de Adidas que se miraba muy chico.
—- nene te gusta este o quieres de otro color —
Le sonreí.
—- señor, está muy chico no me va a quedar —
El miro la etiqueta.
—- este es para nenes de diez y doce años es de tu talla —
Me lo dio para que lo viera dándome cuenta que además era muy caro, jugo con mi cabello.
—- es que lo veo muy chico a lo mejor no me queda y demás cuesta mucho dinero —
Se dio cuenta que estaba indeciso, me miro a los ojos.
—- Víctor con estos bañadores uno se ve muy sexy, por eso también me voy a comprar uno así andemos igual —
Sonreí al imaginarlo con un bañador así.
— si lo compra me lo pongo, pero va a gastar mucho dinero —
Jugó con mi cabello y se puso a buscar uno de su talla del mismo color y me lo enseño.
—- nos los compramos de este color o quieres otro color —-
Le enseñe el que tria yo en la mano.
— si me gusta este color —
Al ir a la caja agarro un pantalón deportivo gris oscuro, un short azul claro y dos playeras Adidas de mi talla.
—– también te voy a comprar esto te parece bien —
Lo mire a los ojos.
—- señor, es que va a gastar mucho dinero, acá la ropa es cara a lo mejor la encuentra más barata en otra tienda —
Jugó con mi cabello.

— nene tú no te preocupes, te la estoy regalando —-
Pago y salimos a ver al cliente que le faltaba y regresamos al hotel.
En el cuarto él le quito las etiquetas a la ropa, me dio mi bañador.
—- vamos a ponernos el bañador para bajar a la piscina —
Se desnudo para ponérselo, con algo de vergüenza lo hice cuidando que no me viera la picha, ya con los bañadores se acerco a mí parándome frente al espejo acomodando el bañador.
—- te ves muy bien con el bañador —
Al sentir sus dedos tocándome la cintura la picha empezaron a ponerse dura, gire quedando frente a él y me atreví a poner las manos en su cintura.
— señor, a usted también se le ve muy bien el bañador —
Solo fue un momento me retire nervioso.
—- ya bajamos a la piscina —
Agarramos unas toallas y bajamos, estuve nadando, echándome clavados y jugando con el por tres horas.
— Víctor, ya tenemos que subir al cuarto para hablarle a tu mamá —-
Salimos nos secamos y subimos, el señor le marco a mi mamá y me paso el teléfono para que hablara yo primero con ella, después de saludarla.
—- mamá, me dijo el señor que ustedes tienen que decidir qué tengo que hacer —
Se escuchaba a mis hermanos hablando en ingles.
—- así es hijo, estuvimos hablado tu papá y yo, gastamos todos nuestros ahorros para pagarle a este señor que nos robo, por lo que no podemos enviar dinero para que termines el viaje, así que lo mejor es que el señor nos haga favor de llevarte a la frontera con Guatemala y regreses con tu abuela mientras juntamos dinero, si el señor no te puede llevar pues que te entregue en migración y ellos te regresan a Guatemala —-
Al escuchar eso se me salieron las lágrimas.
—- no llore mi tesorito eso es lo mejor, es muy peligroso que andes solo por las calles que son peligrosas para un nene, la otra es que el señor nos hiciera el favor de traerte a la frontera de Reynosa Tamaulipas pero sería aprovechase mucho del señor que te está ayudando, pásame al señor —-
Le di el teléfono al señor me recosté llorando de impotencia de no poder ir con mi familia, el hablo bástate rato antes de darme el teléfono.

— tesorito no llores, pórtate bien, obedece al señor, quedo de hablarme mañana otra vez para ver que se decide, te queremos mucho hijo —-
Respire profundo para calmarme.
—- también los quiero mucho mamá —
Ella también lloraba y colgó, el señor me abrazo.
—- nene, cálmate recuerda que lo primero es que estés bien y no te pase nada en las calles —
Al abrazarme el señor me sentí protegido.
—- gracias, gracias, muchas gracias señor por ayudarme —
Cuando estuve más calmado.
— Víctor, ya es tarde voy a pedir que nos suban unos sándwich para no bajar al restaurante, lo quieres de jamón y queso o de pollo —
No quería que me dejara de abrazar.
—- no tengo hambre, me siento muy triste sin ganas de vivir —
Me dejo de abrazar agarrándome con las dos manos la cabeza mirándome a los ojos.
—- Víctor, en la vida nunca hay que darse por vencido, tienes que seguir luchando para lograr lo que quieres —-
Me seque las lágrimas.

—- gracias señor, no tengo hambre pero me comeré uno de pollo —
Fui al baño a ducharme con agua fría para calmarme más, al salir el se metió a duchar, me puse el pantalón que me compro para ver cómo me quedaba, tocaron la puerta diciendo servicio, fui a la puerta del baño que estaba entre abierta y le dije al señor.
—- traen lo que pedio al restaurant —
—- habré para que lo meta, te va a dar la nota, pones tu nombre y le das treinta pesos en monedas ya sabes donde las tengo —
Fui a abrir y entro el joven con la charola y me dio la nota.
— Acá esta el servicio chéquelo —
Vi la nota y me dio una pluma, le puse mi nombre fui a la mesa de noche por el dinero y se lo di
—- gracias nene, provecho —
—- Gracia a usted —
Cerré la puerta y regrese al espejo a probarme las playeras y short, al terminar la doble y puse en una silla, el salió.
—- te gusto todo —
— Si, Gracias señor —

Fue a la charola con la comida.
— vamos a comer esto para dormir, mañana hay que trabajar temprano —
No podía dormir de estas pesando que iban a decidir mi papá y mamá porque quería ir con ellos y no regresar con mi abuela, si la quería a ella pero mi tío, su esposa y primos me trataban mal quitándome el dinero que me enviaban, me sentía tranquilo con el señor pero no quería abusar de el haciendo que gastara su dinero en mí, a veces lloraba y me quedaba dormido, despertaba y era lo mismo lloraba y me dormía así pase la noche.
Al amanecer me puse de pie y me fui a sentar en flor de loto mirando la salida del sol, me sentía cansado, desesperado y triste, por llorar no dormí bien, no me di cuenta cuando despertó el señor hasta que se paró a mi lado desnudo y movió mi cabello.
—- Víctor, no te preocupes todo se va a arreglar, lo impórtate es que no te arriesgues estando solo en las calles —
Me limpie las lágrimas.
—- lo se señor, solo que estoy muy triste quería estar con mi familia y no voy a poder—
Se agacho y me abrazo.
—- nene, no te des por vencido, aun no deciden tus padres que se hará y estuve pesando en la noche lo que me pidió tu mamá —
Cuando me abrazo me tranquilice un poco.
—- si señor, solo es que estoy desesperado y con miedo de no saber que va a pasar —
Me acaricio la cara.
— nene, me voy a duchar para salir temprano a visitar a mis clientes, para ir a comer con un amigo para ver si él me puede ayudar a darme algún documento para que pases como mexicano, así que cálmate dúchate para que te calmes y te vistes —
Me llevo al baño y me quito la panti, con una mano me tape las bolas y picha.

—- nene no tengas vergüenza, ya te dije que he visto a muchos nenes desnudos —
Me metí a duchar y él se puso a rasurarse la barba y el cuerpo incluido el pubis, al estarlo mirando se me puso dura la picha se dio cuenta y sonrió, al terminar salí y me puse la última panti bikini verde claro con lunares de colores que me quedaba limpia, me puse a cepillar el pelo para que se secara, cuando salió de ducharse yo ya me había puesto el short y una de las playera que me compro.
Cuando él estuvo listo salimos del cuarto para desayunar, de ahí hablo con el amigo para invitarlo a comer a un restaurant, al salir de desayunar.
—- Víctor, voy a apúrame con las visitas a los clientes porque estoy algo atrasado para estar libre a las dos para ir a comer y hablar con mi amigo —
Fuimos a varios negocios de dulces y esta vez hablaba menos con los señores y les vendía lo que le pedían para salir rápido, fue a seis tiendas y saliendo de la ultima fuimos al restaurant, al entra vi que era un restaurant de lujo porque en las mesas había muchos platos, cubiertos, vasos y copas, un señor nos llevo a una mesa y nos sentamos, nos pregunto si queríamos algo, el pidió una cerveza y me pidió una Coca-Cola, al quedar solos como veía que mitraba lo que estaba en la mesa.
—- Víctor, no te preocupes cuando traigan la comida solo has lo mismo que yo, no es difícil vas a aprender rápido, para empezar la servilleta se pone en tu muslos —-
El mesero tajo lo que pedimos, no paso mucho en que llego el amigo, al verlo lo reconocí porque fue con el que más hablo cuando le vendió los dulces, el señor se puso de pie para saludarlo y hice lo mismo.
—- Diego este es el nene que te dije que quiero ayudar —

El señor me saludo y nos sentamos, regreso el mesero y el señor pidió una botella de vino rojo, hablaron un poco y regreso el mesero destapando la botella frente a ellos y les sirvió en las copas dejando unas carpetas con el menú, se pusieron a verlo así que hice lo mismo, viendo que todo estaba muy caro y había platillos que ni sabía que era, el se dio cuenta.
—- Víctor en la parte de atrás hay un menú para nenes, porque los platillos acá son muy abundaste y a lo mejor no te lo acabas —
Les sonreí y vi lo que dijo pero estaba igual de caro, al final me decidí por una sopa y arroz, con filete de pescado y ensalada, ellos seguían hablando por lo que me supuse que se conocían desde hace muchos años, también me di cuenta por la manera de hablar del amigo que era hueco como yo, llego la comida y nos pusimos a comer casi sin hablar, como me dijo fui agarrando las cosa como él, el mesero a veces venia a serviles el vino en la copa y Coca-Cola en mi vaso.
Al terminar pidieron café y yo un pastel, fue cuando el señor le conto todo lo que me paso y porque me quería ayudar, el amigo a veces me miraba, cuando le termino de contar mi historia el señor le dijo.
—- Luis entiendo tu preocupación de andar con un nene indocumentado porque podrías terminar en la cárcel acusado de tráfico de menores mientras averiguan si es cierto lo que dices —
El amigo me miro.
– Víctor se ve que eres un pícaro, los voy a ayudar porque Luis es un gran amigo que siempre se preocupa de la gente necesitada —
Lo mire a los ojos.

— gracias señor por ayudarme a llegar con mi familia —
Terminaron su café y el señor pidió la cuenta pagándola con su tarjeta, al salir el amigo me acaricio el cabello despeinándome como lo hacia el señor.
—- no te preocupes en unos días estarás abrazando a tu familia —
Abrazo al señor.
—- amigo mañana te espero a las ocho en el colegio para darte documentos que acrediten que el nene estudia en el colegí desde la pre escolar —
El amigo se fue y acompañe al señor a ver dos clientes más antes de regresar de noche al hotel, me dijo que no podríamos bajar a la piscina porque quedo de hablar con mi mamá, a las ocho le marco y me la paso para saludarla.
—- como estas tesorito, te portaste bien —
—- bien mamá y ustedes como están —
— preocupados por ti para qué puedas regresar con la abuela o con nosotros, dependiendo lo que el señor decida —-
—- mamá te lo paso para que el te diga —
Le pase el teléfono para que hablaran, él le dijo lo que hablo con el amigo y que si le daba los documentos él me llevaba si estaban de acuerdo, pero cuando terminara su ruta y reporte en la oficina de la ciudad de México, podía pedir unos días de descaso para llevarme a la frontera de Reynosa Tamaulipas.
Hablaron un poco más y me paso el teléfono.
— tesorito ya escuchaste lo que dijo el señor, tu papá y yo decidimos que si nos hace el favor de traerte vamos a estar muy agradecidos en el, tardaremos unos días más en poder abracarte y darte muchos besos —
Escuche que lloraba y también llore y agrego.
— tesorito, solo pórtate muy bien con el señor, no molestas y ayunándolo en lo que puedas —-
— si mamá, también quiero ya abrazarte a ti, papá y mis hermanos —-
Nos despedimos y colgamos, el señor me abrazo.
— Víctor, estoy seguro que en unos veinte días o un poco mas ya podrás abrazar a tu familia, ya es tarde voy a pedir algo para cenar porque tenemos que dormir para estar a las ocho en el colegio con Diego —
Comimos una pizza que pidió mirando una película, me metí a duchar y aproveche para lavar las pantis porque ya no tenía limpias y nos acostamos a dormir.

Más tranquilo me dormí rápido y descase, nos despertamos a las seis él se ducho mientras me puse ropa y cepille el pelo para peinarme, al salir el señor fui a orinar, lavar manos y cara.
Antes de llegar al colegio nos metimos a desayunar rápido unos tamales por primera vez y café.
Entramos al colegio y fuimos a la oficina del amigo, lo saludamos y nos sentamos.
—– ayer estuve buscado entre los alumnos que en el curso pasado se cambiaron de colegio, encontré cinco que coinciden con la edad de Víctor, pero me decidí por un ex alumno que lamentablemente falleció por un accidente el año pasado, ya corregí sus dato en la computadora —
Hizo una pausa mirando al señor y agrego.
— con esto voy a cambiar el nombre de este nene por el de Víctor para que aparezca que en este colegio curso pre escolar y primaria, solo cambie el segundo apellido de el por el primer apellido tuyo como si fuera tu sobrino, así no habrá sospechas, que te parece —
El señor me miro sonríete.
—– Me parece buena tu idea Diego muchas gracias. —
El amigo se puso de pie.
—- entonces manos a la obra, vamos a que le hagan la credencial del colegio —
Salió de la oficina y fuimos tras de él caminando por unos pasillos mirando el colegio, entramos a otra oficina donde estaba una señorita y la saludamos.
— quiero que le repongas la credencial a este alumno porque la extravió y la requiere para unos trámites, en este papel están los datos de su registro —
La señorita escribió en la computadora algunas cosas y después me sentó en un banco, me acomodo el cabello, me sonrió.
— que lindo corte de pelo tienes Víctor —
Le sonreí.

— mi abuela es la que me arregla el cabello —
Me saco la foto, el amigo le dijo que cuando estuviera la llevara a su oficina, salimos y caminamos por otro pasillo diciendo.
—- para hacerlo más creíble en los retenes le voy a dar a Víctor dos playeras, un short y pantalones deportivos que dejan olvidados los alumnos y no los reclaman. —-
Entramos a una bodega y se puso a buscar lo que dijo escogiendo los que estaban casi nuevos pero se veían usados, nos los enseño.
—- Como pueden ver la ropa tiene el nombre del alumno y grado de estudio, pero se los voy a llevar a doña Lupita, en un rato les quita esos nombres y le pone el de Víctor, pero antes le voy a buscar una mochila con el escudo del colegio y libros usados —
Se puso otra vez a buscar hasta que encontró una que no estuviera rota, saco todo metiendo otra vez lápices de colores plumas, regla y otras cosas, busco unos libros de sexto grado y los metió.
— ya está solo falta unas libertas pero esas te las doy nuevas y de tarea vas a tener que escribir mucho para que se vean usadas con tu letra —
Salimos y fuimos a donde estaba doña Lupita, le dio la ropa y mochila diciéndole que les cambiara el nombre a la ropa y mochila y las llevara a su oficina, el amigo me dio un papel.
—- escríbele tu nombre y apellidos para que la señora lo ponga en tu ropa, con letra bonita —
Lo escribí y se lo di a la señora, regresamos a la oficina y en el escritorio ya estaba la credencial, la vio y se la pasó al señor que me la dio, mirando la foto a color y tenia los datos de mi edad y desde cuando estudiaba en el colegio, el amigo mando hacer dos credenciales para protección si se perdía una.
Ellos estuvieron hablando hasta que la señora llevo la ropa y mochila, cuando se fue el amigo me dio una playera.
—- nene, mira qué bonita letra tienes —
La mire dándome cuenta que el nombre estaba bordado con mi letra.

—- se ve como si yo lo escribí —
Ya con todo arreglado el amigo dijo que tenía una junta con su papá, el señor se despidió agradeciéndole y después lo abrace.
—- muchas gracias señor por ayudarme a llegar con mi familia —
De nuevo me movió el cabello y acaricio la cara.
— lindo, es un placer ayudarte en este momento, cuídate mucho y siempre lucha por lo que te gusta, sin importar lo que algunos hablen de ti —
Me dio un beso en la mejilla, agarre mis cosas y salimos del colegio, ya era tarde y teníamos habré al no desayunar bien.
Fuimos a comer y ver a sus clientes porque decía que estaba retrasado y el sábado teníamos que salir a Tapachula, regresamos tarde al hotel el señor pidió que nos subieran una pizza y Coca-Colas para cenar, mientras la subían le hablamos a mi mamá para decirle que el señor si me iba a llevar a la frontera para reunirme con ellos poniéndola feliz la noticia, hablo con el señor para ponerse de acuerdo en algunas cosas y me despedí de ella.
Llego la piza y la comimos mirando una película, cuando termino me fui a duchar saliendo en panti bikini rosa, el se desnudo y metió a duchar al mirarlo de inmediato se me paro la picha mientras me puse frente al espejo a cepillar el cabello para que se secara a veces me la tocaba.
Cuando salió del baño tenia la picha dura, se fue a parar tras de mí por el espejo se la veía, me quito el cepillo y él me cepillo el cabello.

— desde el primer día que te vi me gusto mucho corte de cabello, además lo tiene bien cuidado pocos nenes se cuidan el cabello como tu —
La otra mano la puso tocándome la cintura, por el espejo seguro el también miraba como la picha levantaba la panti, me quede quieto ya no tenía miedo que me tocara.
— mi abuela me lo enseño a cuidármelo porque me gusta traerlo largo como lo usaban los mayas —
Continúo cepillándome lo que me puso caliente porque me acaríciala la cintura cerca de las nalgas, tenía ganas de girar agacharme y meterme su picha a la boca para que me diera leche, pero me controle, el estaba igual de excitado y a lo mejor quería saber cómo reaccionaría si intentaba sexo conmigo, dejo de cepillar.
— ya es hora de dormir —
Gire mirándole la picha parada, sonrió y me toco la mía sobre la panti.
— nene, tú también la traes parada pero la ocultas porque te da vergüenza jajajaja —
Lo mire a los ojos sonriendo, tenía nervios y si me daba vergüenza que él me la viera así, respire profundo y me quite la panti saltando la picha apuntado al ombligo.
—- no me da vergüenza señor, solo que no estoy acostumbrado a que me vean desnudo —
Fui a dejar la panti a la silla y me acosté desnudo, el fue a su cama a acostase.
—- buenas noches nene que descases —
Me levante de la cama y le di un beso en la mejilla.
— muchas gracias señor por ser bueno conmigo, dígame como quiere que le pague lo que hace por mí —
Se sentó acariciándome la cara.

—- Víctor, no te ayudo para que me pagues de la manera que estas pensando —
El me beso en la mejilla agregando.
—- nene, nunca hagas sexo a cambio de dinero, si lo haces que sea con alguien que te guste y lo quieras hacer —
Me acaricio el cabello y cara.
—- desde que te vi cuando me pediste para comer me di cuenta que eras gay, te ayude porque en tus ojos vi que tenias miedo y hambre, nunca pensé en ayudarte para después cobrarme con tu cuerpo, yo no soy así Víctor —
Le puse una mano en el pecho un poco marcado por el gym.
—- se que usted no es igual que el señor que me robo y quiso hacerme sexo a fuerzas, disculpe si peso que le quería pagar así —–
Me iba a pasar a mi cama pero me agarro de la cintura.
—- Víctor, dejemos pasar unos días y si nos entendemos, podemos hacerlo porque nos queremos no por dinero —-
Lo mire a los ojos.
—- señor le aseguro que yo ya lo quiero porque me ayuda, gracias —
Le di un beso y me pase a mi cama, nos dimos las buenas noches y miramos televisión hasta quedarnos dormidos.
Al otro día me movió para despertarme.
—- dormilón ya despierta, es vieres y tengo que terminar de ver a los clientes porque mañana tengo que viajar a Tapachula —
El ya estaba vestido, fui al baño a orine, me lavarme las manos y cara, me puse el short que me compro con otra playera, cuando íbamos a salir.
— llévate el libro de historia que te dio Diego y uno de los cuadernos y pluma para que mientras yo trabajo tú copies algunas páginas del libro para que aprendas algo y los cuadernos no estén en blanco —

Agarre lo que dijo, fuimos a desayunar al terminar a ver a sus clientes y después de la comida fue a ver al último cliente.
— ya terminamos a los clientes de Tuxtla Gutiérrez, vamos a una plaza comercial a cómprate algo de ropa antes de ir al hotel a la piscina —
No quería que se gastara más dinero en mí.
—- señor, con la ropa que tengo me puedo aguantar hasta que llegue con mi papá y mamá para que no gaste —
Llegamos al auto y nos subimos.
— Víctor, vas a estar más de veinte días conmigo necesitas mas ropa incluida algo de ropa interior, no te preocupes ya te dije que no me tienes que pagar —
Me puse el cinturón de seguridad y lo mire.
—- ya me dijo eso, pero ya me ha ayudado mucho y no quiero cáusale más molestias y gastos —
Me movió el cabello.
—- lindo no me causas molestias, tranquilo lo que te doy es con gusto no es molestia para mi, así que tu tranquilo —-
Fuimos a una plaza comercial entrando a una tienda de ropa, donde me compro unos bermudas, pantalón de mezclilla, un conjunto de playera y short, agarro una trusa bikini enseñádmela.
—- Víctor quieres que te compre trusas bikini o prefieres pantis bikini —
Lo mire sonriendo.
—- me da igual de las dos me gusta usar —
El mismo escogió varias panti bikinis y solo tres trusas bikini y pago.

Regresamos al hotel, nos pusimos los bañadores y bajamos a la piscina, nadamos me estuve echando unos clavados, después de un rato él se puso tras de mi agarrándome de la cintura me levanto aventándome para caer, jugando me aleje hasta que me agarro y aventó otras vez, seguimos jugando pero el al levantarme empezó a meter la mano en las nalgas lo que provoco que se me pusiera dura la picha, continuamos jugando así que yo trataba de que no me aventara y él me seguía, en una de esas cuando me agarro le pase los brazos por el cuello, le puso una mano en mi axila y otra en las nalgas, al levantarme nuestros cuerpos y cabezas se pegaron, seguro sintió mi picha dura pegada en su pecho porque con la mano que tenía en las nalgas me pego mas a él, nos mirábamos a los ojos fue solo un instante metió la mano entre los muslos tocando el ano y me lazo al aire, jugando así me estuvo manoseando y yo dejándome porque me gustaba lo que sentía, jugamos así hasta que tuvimos que salir porque la piscina la cerraban a las ocho para limpiarla y no molestar a los huéspedes que dormían temprano.
Subimos al cuarto y pidió por teléfono unos sándwich y Coca-Colas, antes de ducharnos le hablamos a mi mamá para que el señor le confirmara que él me llevaría a la frontera y estaríamos en contacto por teléfono cuando colgamos, me metí a duchar y el espero que subieran lo que pedimos, mientras me duchaba me jalaba la picha recordado la manoseada que me dio en la piscina, entro al baño se quito el bañador y se metió a duchar conmigo viéndome la picha dura, me dio vergüenza pero no me la tape con las manos, a él le colgada pero al verme se le fue parando, me salí primero de la ducha y me puse a enjuagar los bañadores y los colgué en un gancho para que se secaran.
Cuando salió el fuimos a comer los sándwiches y ver una película, al terminar de cenar me pare frente al espejo a cepillarme el cabello, aun tenia la picha parada a él se le había bajado, como la noche anterior se fue a parar tras de mi quitándome el cepillo.
—- nene, déjame cepillar tu lindo cabello —
Mientras me cepillaba vi por el espejo que se le iba parando la picha, el estaba de caliente como yo pero por lo que me había dicho no quería hacer sexo conmigo, al estar seco el cabello me regreso el cepillo.

—- Víctor, ya vamos a dormir porque quiero salir temprano a Tapachula —-
Nos acostamos viendo una película y me quede dormido rápido, al estar caliente soñé que hacia sexo con el señor despertado en la madrugada con la picha punzando, la agarre jalándola despacio imaginado que me metía su gran picha, no pare hasta sacarme la leche cayendo en mi cuerpo y me la unte, me quede dormido otra vez hasta que el me despertó mirándome la picha parada, el ya estaba vestido, me levante a orinar, lavarme las manos y cara, cuando salí.
—- Víctor, saca todo de tu mochila y mételo en esta caja de cartón y mete en ella la ropa que te compre, como vamos a pasar unos retenes ponte el pantalón deportivo y playera del colegio de Diego —
Me puse una panti bikini anaranjada que me había comprado y lo que me dijo, el me ayudo a hacer lo que me dijo.
—- nene esa caja al rato se la vamos a enviar por paquetería a tu mamá, no podemos traer tus documentos de Guatemala pues en algún reten los pueden ver —-
Ya todo preparado llamo para que subiera un empleado que bajo todo en una carretilla, fue a pagar lo del hotel y el empleado llevo las cosas al auto, el señor metió todo a la cajuela menos la mochila con el escudo del colegio que la puso en el asiento trasero.
Al subir al auto me dijo que me fuera en el asiento trasero por mi edad y estatura, cuando ya íbamos en el auto me pregunto desayunábamos ahí o parábamos por el camino, no tenía hambre así que le dije que en el camino.
Unos kilómetros adelante.
— ahí está un reten, espero no nos revisen ya que vamos rumbo a Tapachula, pero hazte el dormido —
Me recargue y cerré los ojos, el auto paro y escuche que decían que pasáramos, casi a medio día paramos en el pueblo de Arriga a desayunar, para continuar con el viaje pasando tres retenes unos de policías o otros de migrantes, llegando a Tapachula por la tarde.

El hotel se llamaba Tapachula como la ciudad, al entrar vi que tenía piscina y era bonito como en el que habíamos estado, el señor fue a registrase y fue un empleado al auto por nuestras cosas, al llegar al cuarto vi que tenia lo miso que el otro, después que guardo las cosas de valor en la caja de seguridad.
—- nene voy a ir un rato al gimnasio para hacer ejercicio, ponte un short para que me acompañes, después nos duchamos para ir a comer —-
Saque el short que me dio diego para ponérmelo, el señor se puso una camiseta de tirantes, una malla corta de licra negra donde se le marcaban las nalgas y su bulto al frente, fuimos al gimnasio que tenía el hotel, al entrar no había muchos personas.
—- nene, estas muy chico para hacer algo de pesas, así que mejor te pongo en una bicicleta fija —
Me monto en una, le hizo algunos ajustes y programo algo, me acaricio un muslo.
— Víctor ahora a pedalearle para que se fortalezcan tus muslos, no pares hasta que te canses —
Empecé a darle a los pedales en frente había una pantalla que pasaba imagen como si fuera por una calle, el fue a otros aparatos para cargar pesas con los brazos y piernas, a veces los pedales se ponían más duros y empecé a sudar por el esfuerzo, a veces descansaba un poco porque estuvimos como una hora.
—- nene, ya vámonos a ducharnos para comer algo y meternos a la piscina —
Fuimos al cuarto y se metió a duchar conmigo por lo que al verlo desnudo no me controle y se me paro la picha, nos vestimos salimos a comer y después caminar por el centro para que lo conociera, regresado a poneros los bañadores para meternos en la piscina un rato porque me dolían los muslos y piernas por la bicicleta, antes de subir al cuarto en unas mesas de la piscina cenamos unos tamales que decía que eran típicos de ahí y tenían buen sabor.

Subimos al cuarto y cansado por el viaje y el ejercicio, me metí a duchar y él se metió provocando que se me parara la picha y al verme a él se le paraba, salimos a secarnos y yo enjuague los bañadores y los colgué, se dio cuenta que le dolía las piernas.
— nene, por falta de ejercicio te dolieron los muslos y piernas, antes de dormir te pongo un ungüento y te doy masaje —
Fui por el cepillo me lo quito.
—- deja que te cepille el cabello me gusta hacerlo —
Se puso tras de mí y por el espejo miraba su picha parada, pensando que él estaba caliente como yo por mirarnos desnudos, tenía ganas de agarrarme la picha y jalarla pero me aguante, me cepillo hasta que se me seco el cabello.
—- nene acuéstate boca abajo para darte masaje —
Le hice caso, el fue a su maleta y regreso con una pomada relajante se subió a la cama y la puso en los muslos, me lo unto acariciándome lentamente las piernas y muslos tocando la parte baja de las nalgas, lo que me puso hacia que sintiera algo caliente al estarla frotando, la picha me punzaba pegada al colchón, lo hizo un rato y me dijo que me pusiera boca arriba, puso más de esa pomada untándola por enfrente frotándolo con las manos tocando a veces con la punta de los dedos mis bolas haciendo que la picha saltara, a veces me saliera unas gotas del liquido que me salía antes de la leche cuando me pajeaba, mientras él lo hacía yo le miraba la picha que la tenia igual de dura como la mía, el estaba igual de caliente por la manoseada que me estaba dando pero no se atrevía a decirme que me dejara hacer sexo, también tenía ganas de meterme su picha a la boca y mámasela para que me diera leche y que me la metiera pero también no me atrevía porque pensaría que era un fácil para dejarme hacer sexo, me gustaba lo que sentía y lo disfrute, de repente paro y con dos dedos me agarro las bolas.

— nene, mejor le paro porque si no se te va a salir la leche jajajaja —
Tenía razón cuando se me pegaban las bolas al poco rato se me salía la leche, cuando se puso de pie para pasarse a su cama vi que también sus bolas no le colgaban porque también casi se le salía, nos pusimos a ver una película sin hablar, quede tan caliente que la picha punzaba y quería jalarla para descargar la leche, decidí hacerle como en casa de la abuela, cuando no me podía pajear porque estaba ella, me ponía a imaginar que hacia sexo con alguien y terminaba echando fuera la leche sin tocarme.
Empecé a imaginar que le mamaba la picha a él y que me la metía, dio resultado no tarde ni cinco minutos y me salieron disparados varios chorros de leche cayendo en el cuerpo, el vio como termine, lo mire y le sonreí sin decirle nada untándome la leche en el cuerpo, seguimos mirando la película y me quede dormido.
Desperté hasta que sentí que movía.

—- dormilón ya es muy tarde, aun estas adolorido —
Cuando abrí los ojos vi que tenia la picha dura, me estire.
— si me duelen los muslos y piernas un poco —
Me toco un muslo.
— ese dolor también sale con ejercicio, ponte short y playera y vamos al gimnasio para que le des a la bicicleta otra vez —
Me Pare con flojera para ir a orinar y lavarme la cara, al regresar el ya tenía puesto la malla de lira notándose su picha dura, me puse la panti y la misma ropa, fuimos al gimnasio me subió a la bicicleta acariciándome los muslos y nalgas porque estábamos solos.
— nene, te voy a programas la bicicleta para solo treinta minutos, para que se relajen tus músculos, cuando termine me esperas —
La encendió y empecé a pedalear, él se fue a otros aparatos a cargar pesas, al estar sentado en el pequeño asiento y sentirlo en las nalgas provoco que se me pusiera dura, me ponía en el pico del asiento para que la punta me picara el ano, termino el tiempo se apago la computadora y pantalla pero seguí ahí pegando al asiento las nalgas y ano hasta que termine echando fuera la leche mojando la panti, espere un minuto y fui a pararme a su lado punzándome la picha.
El estuvo otro rato haciendo ejercicio y fuimos al elevador, aun estaba muy caliente al ir subiendo decidí dejar que viera la panti mojada de leche a ver que decía, al entrar al cuarto.
—- vamos a ducharnos para desayuna y salir a dar una vuelta para que conozcas la ciudad —
Parado frente a él me quite la playera y short, el vio la panti mojada y levantada por la picha dura pero no dijo nada, doble la ropa y la metí a la mochila, regrese a pararme frente a él que miraba la panti.

— señor, me ducho yo primero —
Me agarre la picha sobre la panti agregando.
—- al estarle pedaleando a la bicicleta me moje la panti —
Me sonrió.
—- si ve a ducharte ahorita te alcanzo —
Me metí a la ducha con la panti, no tardo en meterse con la picha dura, me quite la panti para lavarla y la avente al lava manos, tenía ganas de agacharme y mamarle la picha pero me aguanta, de la forma que me miraba el seguro también tenía ganas de hacerme sexo, al salir me fui a cepille y vino a ayudarme, mientras me hablaba de a donde podíamos ir, cuando se seco el cabello el fue a donde estaba la ropa que me compro, agarro una panti bikini blanca de tela muy delgada con elásticos rosas y un moñito al frente.
— nene, deja te pongo esta a ver cómo te queda —-
Me la puso y acomodo, me toco las nalgas.
—- con esta panti se te ven muy ricas las nalgas porque se te nota hasta la rayita —
Me giro para que por el espejo me viera, a muchos hombres les gustaban mis nalgas para que se las diera, le sonreí.
— si me quedan bien y están cómodas —
El mismo me puso la bermuda naranja y una playera naranja.
—- te ves muy lindo Víctor —
Me mire en el espejo viendo también su picha parada, por andar de caliente conmigo para que le diera las nalgas, tenía ganas de sentir su gran picha dentro de mí, pero decidí aguantarme y insinuarme para ponerlo más caliente hasta que el me lo pidiera, gire mirándole fijamente la picha, después lo mire a los ojos le sonreí al tiempo que me lamí el labio superior, y fui a guardar el cepillo, el se fue a vestir y salimos para ir a desayunar.

Fuimos caminando a desayunar y después al parque central, el museo de antropología y una iglesia, cuando íbamos a comer nos alcanzo un nene como de mi edad saludando al señor, él le dijo que esta vez no iba a podía salir con el porqué venía acompañado, el nene me miro de pies a cabeza, por lo que hablaban entendí que el señor cuando venia le hacía sexo al nene, quedo de velo en la siguiente visita, le dio dinero y se fue.
Después de comer antes de ir al hotel para meternos a la piscina fuimos a una plaza comercial a una tienda de deportes para comprarme dos mallas cortas de licras una negra, otra blanca y otro bañador bikini rojo.
Regresado al hotel me puse el bañador rojo y bajamos a la piscina, donde entre juegos aprovechaba para tocarme las nalgas y otras partes, antes de subir al cuarto cenamos ligero.
Al subir al cuarto me metí a duchar y el no tardo en entrar para mirarme, al salir enjúgale los bañadores y los colgué, fui a cepillarme al ver que él venía para cepillarme, deje caer el cepillo y me empine a recogerlo para que viera las nalgas y ano, mientras me cepillaba empecé a imaginar que hacíamos sexo para calentarme más y que se me saliera leche sin pajearme, el a veces se pegaba mas para que su picha rosara mi cintura o un glúteo, cuando estuvo seco el cabello nos acostamos a ver una película y continúe imaginado que le mamaba la picha o me la metía, el me miraba mas a mí que la película con su picha también dura, al sentir que terminaba subí un poco la cadera y empezó a salir los chorros de leche sobre de mi pecho y abdomen lo mire sonriendo, cuando termine

— no sé porque a veces se me sale la leche aunque no me jalo la picha, a usted no se le salí así —
La picha seguirá punzando y saliendo unas gotas, el se sentó para verme más cerca.
—- los nenes de tu edad se ponen calientes por cualquier cosa, por eso se les sale la leche sin jalársela —
Con dos dedos toque la leche.
—- entonces para que le salga a usted se la tiene que jalar o hacer sexo —
Se agarro la picha.
—- así es, para que me salga tengo que hacer lo que dices —
Me lleve a la boca los dedos con leche y los limpie con la lengua tres veces lleve con los dedos a mi boca con su atenta mirada.
—- es malo que uno se tome su propia leche —
Me toco un muslo.
—- no es malo, cuando yo era nene también me tomaba mi leche a veces —
Dejo de punzar la pija y disparo dos chorros de leche tan fuerte que fueron a parar a mi barba y cara.
—- nene estas tan caliente que seguro quieres hacer sexo —
Con la palma de la mano junte la leche que estaba en el cuerpo y la lamí tragándola.
—– cuando me trago mi leche siempre se me sale más —
Al terminar de tragar la leche.
—- ya me voy a dormir, buenas noches señor —-
Me acosté boca abajo para que me viera las nalgas, el se acostó y no tarde en escuchar que se estaba pajeado porque lo deje muy caliente, tenía ganas de voltear la cara para su cama y verlo jalarse la picha pero me aguante, dejo salir un pequeño gemido cuando se le salió, no tarde en dormirme.

Desperté antes que él, le mire la picha dura así que empecé a jalármela mirándolo, cuando vi que despertaba deje de jalarla, me pare entre las camas para que me viera la picha con las bolas pegadas al cuerpo.
—- buenos días señor descaso —-
Se estiro.
—- buenos días nene, bien gracias y tu —-
Puse una mano tocándome las bolas.
— bien gracias, me voy a duchar porque si no se me sale otra vez la leche —
Sonrió y fui al baño, no taro en estar duchándose conmigo al salir me cepille mientras él se vestida porque ya teníamos que salir, cuando termine de peinar.
—- Víctor ahora estrénate esta panti a ver cómo te queda —
Era una panti bikini rosa claro con pequeños corazones rojos, ya puestas me acaricio las nalgas.
—- lucen mejor tus nalgas con panti —
Me puso el short de mezclilla de mi prima que me quedaba muy pegado y corto, me puso una camiseta de tirantes negra que me llegaba a la cintura, me toco las nalgas sobre el short.
—- vestido así seguro muchas nenas, nenes, mujeres y hombres te van a ver las nalgas jajaja —
Lo mire sonriendo.

—- lo malo es que muchos van a querer que les de las nalgas como en mi escuela —
Bajo la mano acariciado más abajo tocando con un dedo el año.
—- con lo caliente que eres, me vas a decir que nuca le has dado las nalgas a nadie —-
Lo mire sonriendo y me retire sin contestarle dejándolo con la duda y agrego.
—- a ver si no mojas la panti por andar así en la calle —
Agarre mi mochila con los libros y cuádrenos para escribir mientras veía a los clientes, el agarro sus cosas y salimos, al bajar por el elevador.
—- Víctor se ve que te gusta andar vestido así sexi para poner caliente a la gente —
Sin pesarlo se me salió decirle.
—– sí me gusta, a veces en los pueblos del lago de Atitlán me metía a nadar desnudo al lago para que me vieran las nalgas o me vestida de nena y me iba a caminar por la zona turística del lago para que me vieran y muchos turistas señores me decían cosas —
Me miraba sin creerme.
—- entonces te gusta que te vean desnudo y vestirte de nena —
Ya no me podía desmentir.
—- si me gusta pero casi ya no lo hago porque me dicen cosas y quieren que hiciera sexo —
Salimos del hotel me dijo.

—– nene, acá hay mucha gente de migración, así que no te separes de mi, primero vamos a mandar por mensajería la caja con tus cosas a tu mamá —
Ya no continúo la plática del elevador, fuimos caminando al restaurant y después a mandar la caja y a ver a sus clientes porque estaban todos en el centro de la ciudad, al entras con él a ver a los clientes se me quedaban mirando y el les decía que era su sobrino, mientras él trabajaba me sentaba para escribir en los cuadernos y aprender lo que decían los libros.
Después de comer caminamos unas calles para ver otros clientes de repente paro y regreso un poco parándose en una tienda de ropa de mujer, afuera estaban colgados vestidos, faldas y blusas, agarro un vestido floreado de una sola pieza sin mangas.
— nene quieres que te lo compre para ver cómo te vez de nena —
Pensé que se le había olvidado lo que le conté.
— señor para que solo me lo pondría un rato, para que gasta dinero —
Se me quedo mirando.
— vamos a ver al cliente y mientras estoy con él, piénsalo y regresamos a comprarlo —
Caminamos hasta donde iba y entramos, mientras escribía pensaba que si me compraba el vestido, al verme vestido de nena se iba a poner más caliente y a lo mejor me decía que hiciéramos sexo, tardo en terminar la venta y al salir.
— que decidiste del vestido Víctor —
Di unos pasos más y me detuve.

— es decisión suya, usted lo va a pagar, si lo compra si lo uso no me daría vergüenza —
Vi en su cara que se puso feliz y camino hacia la calle donde estaba la tienda, al llegar agarro el mismo vestido.
—- te gusta así floreado o de un solo color como el de alado —
Los mire bien, el otro era blanco con rayas rosas delgadas horizontales.
— es el mismo modelo, solo cambia por la tela así que puede ser cualquiera de los dos —
Salió una empleada preguntando que queríamos.
— ando buscado un vestido para su hermana —
La mujer me miro y el agrego.
— la nena es un año más chica que el —
Entramos y nos enseño otros vestidos, el señor al fin fue el que decidió pidiendo uno de una sola pieza cuello redondo, sin mangas de tirantes delgados, pegado al cuerpo y de la cintura para abajo más amplio a medio muslo, en color rosa fuerte con rayas delgadas horizontales azules.
—- Víctor crees que este le guste a tu hermana —
Lo agarre poniéndolo frente a mí.
—- si te gusta a ti tío, creo le gustara a ella —
Me miro sonriendo por lo que dije, él le dio el vestido a la empleada.

—- a ver si tiene un conjunto de corpiño y panti porque por los tirantes se le va a ver el corpiño —
La empleada fue a buscar y regreso con una corpiño rosa fuerte con tiratas de encaje y moño rojo al frente, una panti bikini rosa fuerte con un moño rojo, las miro y me pregunto si las quería, hay mismo me compro unas zapatillas para vestirme de nena.
Regresamos al hotel para bajar a la piscina, me puse el bañador bikini azul, al estar ya en bañadores agarro el vestido y se acerco.
—- Víctor, antes de quitarle las etiquetas pruébatelo a ver cómo te queda —
Mientras lo decía me lo puso, fui a veme al espejo, si me quedo pero me llegaba un poco más arriba de medio muslo.
— te ves muy lindo o linda —
Gire mirándolo.
— si me gusta, pero me queda cortó y me pueden ver la panti —
Metió la mano bajo el vestido tocándome un mulo.
—- si te cuidas como las nenas no dejaras ver nada —
Me vi otras ves al espejo.
— y si me ven las nalgas no importa, ya estoy acostumbrado jajaja —
Sonrió por lo que dije, me quito el vestido y bajamos a la piscina.
Nade un poco y me eche clavados, el empezó a jugar con migo manoseándome y yo lo dejaba, estuvimos hasta que teníamos que salir por la hora, habíamos comido tardé así que antes de subir solo comimos unos tamales, Coca-Cola y café.
En el cuarto se metió a duchar conmigo, al salir enjuague y colgué los bañadores para ir a cepillarme, en se paro tras de mi quitándome el cepillo.

— deja que cepille tu lindo cabello —
Las pichas se nos fueron poniendo duras.
— Víctor, en la mañana no me contestaste si has hecho sexo —
El seguro quería saber si ya me habían metido picha para saber si me iba a dejar coger, decidí contarle para quitarle su curiosidad.
—– si me han hecho cosas de sexo —
Siguió cepillado, de curioso quería saber más.
— que cosas has hecho, o te da vergüenza contarlo —
Me quede pesando si contar como me forzaba mi primo Alberto o saltarme eso, decidí no ocultarle nada.
—- no me gusta recordar como empecé a hacer sexo, porque empecé a los ocho años cuando mi primo Alberto un día me forzó a que le mamara la picha —
Me quede en silencio y siguió cepillándome sin decir nada el así que agregue.
—- una tarde me llevo jalándome de los cabellos a un lugar oculto y me metió la picha a la boca, se la chupe aunque yo no quería porque me daba asco —
Me acaricia la cara.

— disculpa nene, no quería hacer que recordaras eso, si no quieres no me lo digas ——
Decidí decirle todo para que supiera que cuando él quisiera me podía meter su gran picha.
—- no se preocupe señor, de todos modos a veces recuerdo todo lo que me hizo mi primo de sexo a fuerzas —-
Termino de cepillarme en silenció, fui a guardar el cepillo él se fue a acostar me senté en flor de loto en mi cama, la picha apuntaba al ombligo.
—- Alberto me hizo que se la chupara varias veces, me acostumbre y ya no me daba asco, mientras se la mamaba se me ponía la picha así como la tengo ahorita —
El se sentó en la orilla de su cama frente a mí mirándome la picha, atento a lo que le contaba.
— después de unos meses el empezó a llevar algunos de sus amigos pera que también se las mamara a ellos y les pedía dinero —
Me acaricio la cara.
— ese te hacia tu primo, era como para darle una golpiza —
Lo mire a los ojos.
— yo tenía diez y ellos doce o trece no me podía defender, además me amenazaba que si se lo dacia a alguien él me pegaría con todos sus amigos —
Hice una pausa y agregue.
— a esa edad un día cundo se la mamaba me quito a fuerzas el short y trusa y me metió la pija al ano, me dolía mucho me hizo llorar y aunque le suplicaba que no me lo hiciera no paró hasta que la metió toda y me echo su leche —
Se me salieron unas lagrimas al recordar eso, el me las limpio.

—- ahora entiendo el porqué no querías regresar a san Pedro Atitlán —
Respire profundo para calmarme.
—- después me la metió muchas otras veces, a veces solo y otras con algún amigo, mientras él me cogía se la tenía que mamar al amigo, también empezó a hacerme lo mismo mi primo Julio.
Cuando salía de casa me fijaba que no me vieran mis primos, pero no servía si andaban calientes desde el colegio me amenazaban que si no iba en la tarde a mamárselas le contarían a mi abuela y tío que se las mamama y como era hueco a mi me regañarían —
Me quede en silencio respirando profundo para calmarme.
— cuando Alberto me empezó a forzar me sentía sucio, malo que no merecía vivir por ser un hueco que lo mejor era que me murriara.
Pero creo dios hizo que encontrara a la señora que me enseño yoga, porque me ayudo a relajarme de lo que me pasaba, nunca le conté lo que me hacia mi primo pero si sabía que era hueco porque me dijo que no era malo ser así que en el mudo había muchos que lo eran —
Aun que recordaba cosas tristes, la picha seguía muy dura y punzaba a veces, me acaricio la cara y cabello.
—- tu maestra de yoga tiene mucha razón, en el mundo hay muchos que somos gay y nos tienen que respetar, no por ser así tienen que abusar de los gay —
Espere un poco a calmarme.
— en la escuela algunos compañeros también me molestaban diciendo que era hueco que tenia nalgas de nena y me gustaba la picha, entre ellos Alberto, Julio y los amigos que llevaba para que les mamara la picha.

Por eso decidí retarlos, si me decían que me gustaba la picha les decía que si querían que se las chupara se sacaran la picha —
El miraba mi picha punzando y con dos dedos se tocaba la punta de la suya porque estaba caliente como yo por lo que le contaba.
—- y que te decían los compañeros —
Me toque las bolas sintiendo que estaban muy pegadas a punto de dar leche.
—- los más atrevido si se sacaban la picha y nos íbamos a donde nos viran y se la mamaba, a los que se ponían más calientes dejaba que me la metieran.
En la escuela en mi grupo solo tenía a un gran amigo, Alan el me quería aunque era hueco y no me molestaba —
Me miro sonriendo.
— era tu novio, estaban enamorados —
Por lo que dijo supe que si leyó lo que le escribí de despedida a Alan.
—- si estoy enamorado y él me quiere también, solo con el hice sexo sin ser forzado porque nos amábamos a los dos nos gustaba hacerlo solo por amor —
Al recordar cómo me cogía, la picha empezó a echar los chorros de leche, con la atenta mirada del señor.
—- amas tanto a Alan que al recordarlo se te salió la leche —
Con dos dedos junte leche y los lleve a la boca chupándolos.
—- si lo amo mucho y me gustaba sentir en la boca su leche rica —
Con lo que le conté él se puso caliente y no se aguanto, se agarro la pija y empezó a jalársela mirando como con los dedos levaba mi leche a la boca.

—- Víctor me puse caliente y tengo que sacarme la leche —
No sé si lo dijo para que lo ayudara, lo mire sonriendo mientras seguía llevando mi leche a la boca, no paso ni un minuto cuando soltó su picha y vi salir disparados los chorros de su leche cayendo en el pecho y abdomen al estar sentado, casi se me salen los ojos al ver la cantidad de leche que le salió, quería pararme y limpiarlo lamiéndolo pero mi controle.
—- a usted si le sale mucha leche, a mí poco —
Se enderezo un poco para que la viera mejor.
— en unos años más también a ti te va a salir como a mí —
Termine de tragar la mía mirándolo me agarre la picha.
— a mi me empezó a salir hace cuatro o cinco meses, a lo mejor por eso me sale poca, buenas noches ya me voy a dormir —
Me acosté boca arriba mirándole la picha, se unto la leche en el cuerpo como lo hacía yo y se acostó también.
— buenas noches Víctor, gracias por tenerme confianza y contarme lo que te pasó —
No tarde en estar dormido despertando cuando salía el sol, me pare y fui a hacer unas posturas de yoga mientras despertaba él.
Cuando se levanto nos duchamos, se puso a cepillarme el cabello.
—- nene, hoy te estrenas el vestido para que andes de nena —
Los dos estábamos con las pichas paradas.

— si usted quiere si me lo pongo, pero al salir del hotel me van a ver con vestido —-
Termino de cepillarme y mientras me ponía el corpiño y panti.
—- te pongo el corpiño y panti, con una playera y short, nos llevamos el vestido y en el auto te lo pones te parece bien —
Me mire en el espejo, la panti me quedaba pega notándose las nalgas, me puse el short.
— está bien señor como usted diga —
El se fue a vestir mientras me puse la playera y los zapatos deportivos, el en una bolsa metió el vestido y las zapatillas de nena, agarramos nuestras cosas y salimos.
Llegamos al auto y abrió una portezuela diciendo que me quitara la playera, me puso el vestido y quito el short, me sentó en el asiento para quitarme los tenis y ponerme las calcetar rosas y las zapatillas, me puso de pie haciendo que girara.
— ya eres una linda nena —
Le sonreí, dejo en el auto mi ropa y tenis porque íbamos a ir caminando, fuimos a un restaurante para desayunar, al caminar por la calle vestido de nena me sentía incomodo pesando que se diaria cuenta que era nene, me acaricio el cuello.
— Víctor no te preocupes, te ves como nena nadie sabe que eres nene —
Desayunamos y fuimos a ver los últimos cliente de Tapachula, me fui acostumbrando a andar con el vestido cuidando que no se me viera la panti al sentarme o agacharme, después de comer ya no tenía clientes y caminamos por el jardín central viendo artesanía.
Regresamos al hotel y fuimos al auto a cambiarme para entrar, ya en el cuarto me pregunto si quería bajar a la piscina o al gym y preferí la piscina, nos pusimos los bañadores y metimos a nadar y jugar manoseándome, cenamos antes de subir al cuarto.
Nos duchamos juntos, al salir se puso a cepillarme pero esta vez no me pregunto nada de sexo.

— Víctor mañana tenemos que salir muy temprano porque camino a Tabasco, tengo que pasar a ver a unos clientes en Comitan, San Cristóbal de las casa, Ocotsingo y dormimos en palenque, vamos a pasar varios reten de de migra, de Palenque en adelante casi ya no hay —-
Cuando termino de cepillar me puso una mano en las nalgas.
—- hay que dejar todo listo para salir temprano, solo deja fuera la panti que te vas a poner y el uniforme de escuela que te dio Diego, mañana guardamos los bañadores cuando estén secos —
Nos acostamos a ver una película y me dormí rápido, hasta que me desperté al escuchar que él se puso de pie para ducharse, me iba a duchar pero paro no tárdeme al cepilladme para secar el pelo, solo me fui a orinar lavarme las manos y cara para ponerme la ropa.
A las seis de la mañana hablo por teléfono y subió un empleado por las maletas, portafolios y mochilas para bajar a la recepción, pago el hotel y nos llevaron las cosas al auto, metió todo a la cajuela, me dijo que la mochila que me dio Diego la pusiera en el asiento de atrás, saco cinco cajas de muestra de dulces también me dijo que las pusiera en el asiento de atrás y me subí atrás.
Puso el auto en marcha por las calles de Tapachula.
—– Víctor esperemos que nos vaya bien en el viaje y no tengamos problemas, ya sabes si estas despiedro no hables al menos te pregunten algo, vamos a desayunar a Huixtla —
Apenas saliendo de Tapachula nos pararon en un reten, el guardia saludo al señor que parece lo conocía
—- ya va de regreso —

Él le contesto que si que ya había visitado a sus clientes, como me vio el guardia le pregunto quién era, le contesto que su sobrino y me trajo de paseo, le dio una de las cajas de dulces y nos dejo pasar.
— lo bueno que muchos guardias de migración me conocen, espero no encontremos uno nuevo y pregunte mas —-
Tardamos dos horas en llegar a Huistla donde estaba otro reten que nos dejo pasar sin revisión, paramos a desayunar y continuó el viaje pasando varios pueblos, después de tres horas llegamos a Amatenango de la frontera.
—- Víctor acá esta una de las fronteras con Guatemala, seguro más adelante hay reten de migración, recuerda no hables al menos te pregunten algo —–
Saliendo del pueblo nos pararon, le pidieron identificación al señor, preguntado a donde iba y a que se dedicaba, el guardia me miro y pegunto quien era yo —
— vengo de Tapachula y voy a Comitan, vendo duces, el es mi sobrino lo llevo de paseo, pásame tu credencia Víctor —
Saque de la mochila la credencial y se la di el guardia miro la foto y después a mí.
— está bien pasen buen viaje —
El señor me pidió una de las cajas muestra de dulces y se la dio, la carretera tenía muchas curvas porque eran montañas y tardo cuatro horas en llegar a Comitan a la un de la tarde pasando dos retenes sin problemas, fue a ver a el único cliente mientras estaba vendiendo vi que entraron a la tienda unos señores y nenes con el pelo largo y vestidos con uno como camisones blancos, escuche a los nenes hablar en maya, mi abuela me enseño un poco a hablar en maya porque ella lo sabía, no les entendí todo porque era de otra zona, los salude en maya y hable un poco con ellos.

Al salir de la tienda.
— te vi hablado con los nenes lacandones les hablaste en español o maya.
—- hablamos en maya, mi abuela me lo enseño —-
Me movió el pelo.
—- son lacandones y mayas viven en la selva de Chiapas —
comimos ahí rápido para seguir el viaje llegando tres horas después a San Cristóbal de las casas, solo paro en una tienda a vender rápido, para ir a Ocotsingo donde paro con otro cliente y de ahí ya no paró hasta llegar a Palenque como a las nueve de la noche.
Llegamos a un hotel, nos dieron un cuarto dejamos las cosas fuimos a cenar, nos duchamos y nos acostamos a ver una película, el se quedo dormido rápido como yo dormí en la carretera no tenia sueño me tome una Coca-Cola del refrigerador y me puse hacer unas posturas de yoga para relajarme y descasar, cuando me dio sueño me fui a dormir.
Desperté cuando empezó a salir el sol y cantar los pájaros, me pare y me puse a hacer yoga hasta que el despertó.

En el siguiente relato les escribo lo que paso entre el señor y Víctor en Palenque y en los siguientes días que continuo el viaje hasta entregárselo a su familia.

Sebas.