En casa de mi Bro …
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por didormeta.
Un día de vacaciones, quedé de ir a su casa que estaba en otra ciudad, me había invitado a ir a una fiesta, lo que no sabía es que sus padres no estaban, llagué y me encontré con la sorpresa que de que estaba solo, no me quejé pues mis intenciones ya estaban dichas, quería tirarme al tipo, él me recibió muy cariñoso con un abrazo y tomando mi equipaje, yo me pasé a la sala y pedí permiso para hablar y avisar a mis padres que ya había llegado, él subió a su habitación y me dijo que al acabar de “reportarme” subiera…
Cuando subí él estaba de espaldas a la puerta, apenas se pondría su camisita, al acomodársela pude ver su espalda y su bóxer por la parte de atrás acabando delicadamente en su culito tapado por unos jeans ajustaditos, la verdad su culito estaba lindo, apretado y muy pequeño, le di una nalgadita jugando a lo que dio un pequeño salto, -aaaa- -papi- me dijo, eso me excito mucho, pero allí lo dejé, bajé a la sala y mientras lo esperaba empecé a frotarme la verga, lo que quería es que al bajar “con el pretexto de tirarlo al suelo” pudiera rozarla contra su culo y sentir su pequeña apertura entre mi verga, obvio era un plan malo, pero supuse que jugando podría sentir su perfecto culito en mí…
Al bajar no esperé, lo agarré y traté de tirarlo, poco a poco empecé a acomodar mi verga en su culito a lo que él me dijo: -aaa no mames- se empezó a reír y trató de zafarse… -ya puto—deja de –arrimármela—me dijo, yo lo solté y un poco avergonzado dije: –sólo quería jugar— él se quedó viendo mi paquete y sacó su lengua… ufff de la nada, me empujó contra el sillón y recostándose en mí, empezó a meter su manita en mi pantalón por la parte de enfrente, agarraba con fuerza mi verga y empezaba a gemir de asombro…
Sacó su mano de mi pantalón, me paré empujándolo contra el piso, gritando: –qué te pasa??—él se rio y dijo: –quiero leche—uff de nuevo, el chavalito estaba muy caliente al parecer y bueno yo también aunque fingía, lo tomé de la cabeza y puse su boca en mi pantalón empecé a frotar mi verga con su boca, él me la sacó y empezó a chuparla, me puso las manos en la cintura, yo tenía aún las manos en su cabeza… la mamada que me estaba dando era deliciosa, como si tratara de alimentarse de mí, mi verga ya le llegaba a la garganta, metía y sacaba con mucha fuerza, después de unos minutos me corrí en su boca…
-Aaaaa- suspiró, mientras terminaba de comerse mi leche, -que buena- dijo mientras yo me metía la verga en mi pantalón y me subía la bragueta…. Al ver ello, se me paró de nuevo, lo alcé cargándolo como a una novia y lo subí por las escaleras hasta su cama, allí lo aventé, él se quitó la camisa y yo la mía, se bajó la bragueta del pantalón y yo me saqué de nuevo la verga que ya estaba parada, pero al intentar besarme en la boca lo agarré del cabello de su cabeza y lo giré bruscamente, mientras le metía la mano en su trasero, le bajé los pantalones, apoyé mi mano en su cabeza contra la cama como si tratara de ahogarlo, con la otra mano recorría una de sus nalguitas, le puse las 2 manos en su cintura y le metí la verga en su culito, él ya había levantado su cara y estaba apoyando sus manos en el respaldo de la cama como si yo tratara de arrestarlo, empezó a gritar pues le dolí mucho, recordé entonces que debía de hacer y le saqué la punta que ya había logrado medio meter, empecé a lamerle el culito virgen, después de un rato le volví a meter la punta y entró con mayor facilidad, empecé a meter y sacar, esto hacía que cada metida se clavara más, así seguí hasta que me vine en él…
Nos quedamos dormidos yo sobre él, al otro día desperté y lo veía dormido, no quise despertarlo, me subí el pantalón y puse la camisa, me paré y baje a la cocina a buscar algo de desayunar, era increíble, de pronto oí como Felipito bajaba las escaleras, cuando entró a la cocina estaba descalzo, con una playera blanca muy delgada, un pants verde muy ajustado… me sonrió y dijo: –mis papás no vendrán hasta la noche—me acerqué y lo besé en la boca, mientras que con mi mano derecha le acariciaba el culo, pronto con las 2 manos, le sujetaba el culo como apretándolo contra el refrigerador él alzó me abrazó le metí mi dedo de en medio de la mano derecha al pants, después a su calzoncillo y por ultimo en su anito, lo alcé con mi otra mano agarrándolo de la espalda mientras que mi dedo quedaba clavado en su anito y el resto de mi palma cargaba su trasero , él subió sus pies en mi cadera y así lo llevé hasta el sofá donde le volví a dar…
Nunca olvidaré ese día y como me tiré al chaval 2 veces después que me diera una mamada, quiera verlo de nuevo para hacer otras cosas que estoy seguro le encantarán…
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!