En el autobus

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por MexiGuy.
Tome el autobús a eso de las 6 de la tarde con destino a la ciudad donde estoy estudiando, es un viaje corto alrededor de 2 horas y media.

Una vez a bordo del autobús verifique el número de asiento y me acomode en mi lugar, como es costumbre siempre que viajo me quede dormido hasta que llegamos a la próxima parada del autobús donde se subió un muchacho tal vez 6 años mayor que yo, alto, ni feo ni guapo, de buen cuerpo y para mi fortuna se sentó en el asiento que estaba vacío a un lado de mí, una vez que se sentó volteo a ver dónde estaba yo y lo salude cortésmente y el me respondió, no le di mayor importancia y trate de dormirme de nuevo.

Al pasar más o menos 10 minutos sentí que su mano estaba muy pegada a mi pierna casi rozándome de vez en cuando, a lo cual no le di importancia ya que pensé que era imaginación mía y continúe tratando de dormir, pero este seguía insistiendo y su mano rosaba mi pierna, yo disimuladamente rose mi rodilla con la de el ya que estábamos muy juntos, así para comprobar si esto era intencional o no, si lo era podría pasar un buen rato, si no me echaría una problema encima, para mi suerte el me respondió rosando su rodilla con la mía.

Una vez hecho esto él puso su mano en mi pierna con mas osadía y sin reparos, a lo cual yo no objete, ya que estábamos en la parte trasera del autobús y como ya era tarde estaba casi de noche, no había problema puesto que en el autobús no se veía mucho de lo que hacíamos.

En eso siento que su mano se mueve hasta llegar a mi entrepierna lo cual causo que mi pene que ya estaba un poco erecto se pusiera al 100!, estuvo acariciando mi pene un buen tiempo hasta que el mismo metió la mano por debajo de mi short y comenzó a masturbarme leve, yo estaba en shock no podía creer que eso pudiera llegar a pasar en un autobús jaja.

Con un poco de miedo e indecisión puse mi mano sobre su entrepierna por lo cual pude notar que él estaba tan excitado como yo, estuve un momento así hasta que el quito mi mano de su entrepierna, pensé que no quería que yo lo tocara, pero me equivoque, lo que hizo fue desabrocharse el pantalón, gracias a esto pude meter mi mano debajo de su pantalón y sentir su directamente su pene, el cual no era exageradamente grande, era normal, lo suficiente como para disfrutarlo.

Estuvimos masturbándonos un rato, yo siempre con el temor de que alguien nos pudiera ver ya que estábamos en un autobús, pero la excitación era mayor al miedo que sentía por ser descubierto, lo que más me sorprende es que todo esto había pasado sin que él o yo dijéramos alguna palabra, todo esto fue en silencio adivinando lo que ambos queríamos.

En un momento dado el comenzó a masturbarme con más fuerza lo cual me agrado y comencé a hacer lo mismo con él, el placer que sentía era inmenso, ya que al estar en un lugar público el placer era mayor, estaba tan excitado que lubricaba bastante al igual que él, a tal grado que mis boxers estaban mojados.

En un momento que puse mi mirada en él, me dio una especie de aprobación como avisándome que estaba a punto de correrse así que aumente el ritmo de mi masturbada hacia él y comencé a sentir como su miembro tomaba un poco más de grosor y a sentir esas contracciones que vienen cuanto estas a punto de correrte, esto me puso al 100 y supe que estaba punto de correrme al igual que él.

Continúe con la masturbada hasta que en un momento sentí como mi mano se llenaba de su semen caliente, lo cual hizo que yo me viniera al instante como nunca lo había hecho, no podía creer que me lo que acababa de hacer, para mí era algo que no podría pasar, continúe con mi mano dentro de su pantalón por un rato más hasta que me ti cuenta por la ventana que estábamos a 15 minutos más o menos de llegar a nuestro destino.

Fue entonces cuando saque mi mano de su pantalón y el hizo lo mismo, la sensación era fascinante, sentir como tu bóxer estaba todo mojado y aun ambos continuábamos con una semi erección, lo cual me preocupo un poco puesto que ya estábamos por bajar; una vez en la central de autobuses ambos bajamos he hicimos como si nada hubiera pasado, me dirigí al baño para cambiarme los boxers y una vez allí me di cuenta que en mi mano tenía un poco de los restos de semen de el.

Al salir del baño intente buscarlo pero ya no lo encontré y lo único que me queda es el buen recuerdo de lo sucedido esa tarde en el autobús.

Bueno eso fue todo espero les allá gustado, perdonen si está mal escrito o no es muy excitante, ya que no soy un experto en la escritura o la redacción, pero simplemente quería compartirles esta historia, que en verdad paso y es 100% real.