En el rio
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por marcostiento.
Esta historia sucedió cuando yo tenia unos 12 o 13 años, ya hacia tiempo (1 año y medio) que Carlos y yo nos encontrábamos para amarnos descaradamente.
Un día o mejor dicho una noche después de el clásico encuentro de la semana, Carlos me acerco a la casa, siempre lo hacía y me dejaba a una cuadra de mi hogar. Pero en esa ocasión me dijo que tenía que salir con su esposa así que me dejaría en el puente Tucumán a tres cuadras de casa. Acepte molesto, no me hacia gracia caminar por la avenida a las 11:00 de la noche con el frio de invierno. Baje del auto nos despedimos hasta la semana que viene, y empecé a caminar por la vereda del puente. Luego de recorrerlo y cuando estaba a punto de cruzar la calle, escuche una voz que decía Hola como estas?.
Me di vuelta de la oscura garita del colectivo salió un hombre, delgado de tez cobriza de unos 30 o 35 años. Si me hablas a mi pregunte deteniendo mi marcha. Si, como te va? volvió a preguntar. Bien ¿quien sos? pregunte curioso. No te acordas, soy Damián, el cajero del supermercado respondió mientras se aceraba a mí. Noo, no acuerdo dije sonriendo. Yo si, y ¿de donde venís? pregunto poniendo una mano en mi hombro. De ver a un amigo dije sonriente. Ahh, ¿es el mismo que encontraste un día en el súper?. No, respondí metiendo mis manos en los bolsillos de la campera. Si, es el ¿verdad? No no es respondí esbozando una sonrisa en mis labios. Si, si es el, ¿vos coges con el? ¿no?. No respondí mis ojos se abrieron sorprendidos, por lo directo de sus preguntas. No te pongas mal, ven vamos a caminar dijo sonriente. ¿Adónde? hace frio, respondí acomodándome la campera. No es muy lejos, es aquí nomas respondió mirándome a los ojos. Ay no sé, respondí con voz dudosa. Vamos no tengas miedo dijo mientras empezábamos a caminar lentamente por la fría y casi desierta avenida. Luego de unos 100 o 150 metros llegamos a unas escalinatas que vejaban hasta la orilla del rio. Descendimos con cuidado, y luego de caminar unos 20 metros, llegamos a un pequeño camping donde había un asador y una mesa con dos bancas de cemento.
Esta oscuro, dije mirando alrededor. Si, respondió mientras sus manos me tomaban por la cintura, para luego estrechar mi cuerpo al suyo. Sin decir nada, y en la oscuridad de la noche sentí como sus labios se acercaron a los míos, donde se unieron en un profundo beso. Sus tibias manos lentamente comenzaron a deslizarse por debajo de mi ropa para comenzar a explorar mi infantil espalda. Sin decir nada y con el sabor de su boca en la mía, subí mis manos y desprendiendo el cierre me saque la campera. Damián, lentamente deslizo sus manos por debajo de mis ropas, hasta llegar a mis pequeñas tetillas, donde sus dedos comenzaron a jugar con ellas. AYY, exclame con voz temblorosa. al sentir el suave rose de sus yemas, para luego comenzar a subir mis ropas hasta dejar mi pequeño torso al descubierto.
Damián abrió su boca y acercándola a mis pequeños pezoncitos, comenzó a chuparlos lentamente. MMM, MMM, gemí al tiempo que mis manos se hundían en su oscuro y crespo cabello. Te gusta? pregunto mientras sus manos desprendían su pantalón. SII, respondí, al tiempo que mis manitas se deslizaban por su ropa hasta llega a su caliente sexo. Me arrodille en silencio, y tomando su pantalón por la cintura, comencé a bajarlo hasta dejar libre su latente miembro. Abrí mi boca, y mientras acariciaba sus testículos con mi mano derecha, comencé a chupar su rozado glande. lenta muy lentamente mi boca comenzó a saborear su tibio liquido pre seminal de su pija de 18 por 5 cm. Ay ven amor, dijo mientras me tomaba por los hombros, indicándome que me parara. Me puse de pie, con sus manos en mi cintura, me dio vuelta hasta dejarme de espaldas a el, lentamente deprendió mi pantalón, que suavemente se deslizo por si solo hacia abajo, dejando mi culito al descubierto. Ay amor no tenes calzoncillo, exclamo con voz morbosa. NO, HOY NO ME LO PUSE, respondí, apoyándome en la fría mesa de cemento, mientras sentía como su pija se apoyaba en mi agujerito, para luego entrar en mi (ya dilatado) esfínter de una sola estocada. AYY, AHH, AHHH, gemí al sentir su miembro tan profundamente. Qué lindo que entro, dijo Damián al tiempo que me cogía casi de una manera salvaje. AYY, SII, AASSIII, AASSII, gemía mientras me mordía los labios.
Si, entro casi todo, exclamo al tiempo que una de sus manos me acariciaba las tetillas. AYY, AYY, AHH, AHH, exclamaba al sentir como su pija se deslizaba fácilmente por mi ser. Ay qué lindo que te entro, dijo moviéndose más lento. AYY, AHH, AHH, gemía con voz suave. Hoy te cogió tu amigo, no?, pregunto con voz obscena. AHH, SIII, SIII, exclame con voz afeminada, mientras apretaba y soltaba mi esfínter ante cada una de sus estocadas. Ay, me voy, me voy, dijo Damián, dejando explotar su pija dentro mío, mesclando su semen con el de Carlos. Se quedo quieto, dentro mío sentía los últimos espasmos de su pija, sin sacarla y con voz suave pregunto ¿adonde cogiste hoy?. En, en un hotel, exclame suavemente. ¿Con el verdad? exclamo con voz tierna mientras comenzaba a moverse nuevamente. AYY, SIII, respondí con un leve gemido de placer. Ay nene exclamo sacando su pija de mi ser, me dio vuelta y sentándome en una banca de cemento me recostó de espalda, muy cerca del borde. Se paro frente a mi y tomando mis piernas las piso sobre sus hombros al tiempo que con su mano derecha aceraba su miembro a mi agujerito. AHH, AHH, AHHH, gemí al sentir su miembro nuevamente dentro mío.
Ay entro todo amor exclamo, mientras sentía como sus testículos comenzaban a golpear mi cola con cada una de sus estocadas. AYYY, AYYY, repetía al tiempo que subiéndome el pulóver de lana, sus labios empezaron a chupar mis pezoncitos. Una sensación de placer recorría mi cuerpo, si bien la pija de Damián no era la Carlos (grande y gruesa), su miembro entraba muy bien adentro mío. Ahh, ya, ya termino amor dijo Damián llenándome con su leche por segunda vez mi esfínter. Se quedo quieto, dentro mío sentía como latía su agonizante miembro, que lentamente se quedaba dormido. Luego de unos minutos saco su pija, nos acomodamos la ropa y subiendo nuevamente por la escalera, nos dirigimos hacia la parada donde yo continúe mi camino hacia mi casa. Bueno espero que les haya gustado les recuerdo que la historia es 100% real.
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