En el taxi

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Cazabultos.
Tras varios intentos fallidos, después de diez minutos de espera logre encontrar uno vacío. Al abordar el taxi olía a loción de hombre, era un ambiente embriagador y varonil. Saludo al chofer que, para mi sorpresa, era bastante guapo y vestido muy juvenil.

No pasaba de los 30 años, cabello castaño, ojos verdes, barba cerrada de dos días, playera tipo polo rosa, pantalón caqui, mocasines y sonrisa perfecta. Contesto mi saludo y le indique la dirección de destino.

Comenzamos a charlar de tonterías y de pronto sonó el celular, lo contesto rápido y desde ese momento cada que podía o había un semáforo en rojo, volteaba a charlar conmigo, pero no me miraba a los ojos, veía mi paquete. Esto me fue excitando y comenzó a pararse mi pene y marcarse el bulto. Tengo 18 cm de verga, gorda y cabezona y no uso ropa interior, así que era evidente a pesar del pantalón de mezclilla.

Cada vez que volteaba lo hacía más evidente, hasta que no puedo mas y me agarro la verga sobre el pantalón y comenzó a sobármela. Con un rápido moviendo, abrió el cinturón y el pantalón y lo sacó. En cada semáforo me masturbaba afanosamente. Cuidando que no nos vieran los demás choferes. Fue tanta la excitaciones que me pidió pasarme al asiento de adelante. Me cambie y saco nuevamente mi pene erecto y lo cubrió con su suéter. En lugar de la palanca de velocidades usaba mi verga al manejar y lo disfrutaba tanto.

No era la primera vez que ese chofer lo hacia, era diestro en el manejo del auto y mi verga a la vez. Jugaba con mi precum, mi grande y pelaba mi verga por completo. La apretaba y me decía que rica y gorda la tienes, seguro has reventado muchos culos. No te la aguantaría, pero que le encantaría sentirla en su culo.

Desabroche su pantalón y comencé a dedear ese culito que estaba muy caliente. Latía y se sentía como deseaba verga. No pudo más, se detuvo debajo de un puente en una esquina, se abalanzó sobre mi verga parada y chorrea te de lubricación. Me la mamo como loco. La devoraba hasta la base, la sacaba para mamar mis huevos y masturbarme. Saque mi dedo de su culo haciendo que lo chupara y llenara de saliva. Mientras el me masturbaba, le seguía metiendo el dedo, luego dos y al final tres. Solo gemía y puse sentir como los apretaba fuerte con el culo y vi que se venia mojando su pantalón y su calzón. El no se masturbo, solo se vino por el juego de mis dedos en su culo y las excelentes mamadas que me daba.

Desesperado comenzó a masturbarme y mamarme a la vez, era demasiada excitacion y sentí ese calambre de placer que llega al venirse. Sin dudarlo se trago todo el semen que arroje en su boca. Limpio toda mi verga hasta secarla. Me ayudo a acomodar el pantalón y me llevo a casa. Me pidió el teléfono, se lo di pero nunca marca. Ahora siempre que subo a un taxi espero que esa deliciosa experiencia se repita