En la casa deshabitada.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por inde.
En la casa deshabitada.
Después de estar con mi vecino en la piramide, esa semana se acabaron las clases. Ese fin de semana los del otro lado armaron un equipo de futbol soccer, pero como no se acompletaron, nos invitaron a jugar con ellos, solo 4 de nosotros nos metimos al equipo.
El primer partido fue el sábado y perdimos por 3 goles, quedamos de entrenar los martes y jueves. Todos eramos buenos, pero en la calle, ya en un campo nos perdiamos, llego el martes y fuimos a entrenar, yo trataba de estar pegado con mi vecino, pero él solo se iba con Ramón (que tenía 14 años) y Pedro (que ya tenía 18 años y era el que nos había encontrado cogiendo en la camioneta).
En todo el entrenamiento no me pelo y logro que me enojara, lo mismo paso el jueves, él solo tenía ojos para Ramón, llegó el siguiente partido y volvimos a perder por muchos goles. don Luis que era quien llevaba el equipo, nos empezó a regañar por el resultado, después de 10 min. acabo y nos empezamos a despedir todos, mis amigos ya se habían ido, yo me hacía el tonto para reclamarle a mi vecino por que no pelaba.
Ya solo quedabamos el güero (que tenía 17 años), Pedro, Ramón, Mi vecino y yo; Pedro dijo.
Por qué no vamos a los baños públicos a bañarnos, todos gritamos.
¡Si!.
Yo estaba feliz, pense que por fin, mi vecino me cogería otra vez, nos fuimos todos a la calle y cada quien entro a su casa por ropa, dinero y las cosas del baño, llegamos a los baños, yo estaba seguro que mi vecino me escogería a mí, para entrar con él a las regaderas, pero para mi sorpresa él se metio con Pedro y Ramón; y a mi me mandaron con el güero, por dentro hice mi berrinche y pensé.
Voy a provocar al güero para que me coja.
Entramos al cubiculo que nos asignaron, nos desvestimos, agarramos las cosas para bañarnos, la verga del güero no se veía tan grande pero si muy ancha, claro nunca había visto una verga en reposo, nos empezamos a bañar, yo me ponía adelante de él para que me viera las nalgas, hasta las sacaba más, trataba que no fuera muy obvio, pero a él no perecía importarle, me agache como 2 veces para enseñarle mi anito, pero su verga nunca se puso dura, decidi dejarlo por la paz y acabarme de bañar.
Nos secamos, vestimos y recogimos todo y salimos rumbo al cubículo donde estaban los otros, y el güero me dijo.
Cuanto que los otros, todavía no se bañan.
Pero, si ya llevan como media hora adentro.
Si, pero se han de estar cogiendo cariño, jajaja.
Yo no entendía lo que me había dicho, llegamos a la puerta y toco, se tardaron un poco y nos abrio Pedro, que traía una toalla en la cintura, pude ver como Ramón y mi vecino corrían adentro de la regadera y mi vecino tenía la verga parada, en eso grito mi vecino.
No mames wey, para que abres, Pedro le contesto.
Para que se tardan en bañar y andas de putos jajaja.
Nos metimos a esperarlos, Pedro empezó a cambiarse y a platicar con el güero, no le di importancia a lo que decían, estaba muy celoso, de saber que mi vecino también se cogía a Ramón, cuando salieron de la regadera mi vecino se me quedo viendo y empezó a sonreir, yo estaba muy enojado, se secaron, se vistieron y nos fuimos rumbo a nuestras casas.
Llego el martes, mis cuate y yo, ya no fuimos a entrenar, el miercoles salimos a jugar y también estaban los del otro lado de la calle y nos echaron la reta, les ganamos casi todos los partidos ya eran como las 6:30 de la tarde, se empezaron a meter algunos para ir a cenar ya eramos pocos, los de mi lado ya se habían metido todos, de repente Ramón dijo.
A que no se atreven a meterse a la casa embrujada.
A la mitad de la calle había una casa que estaba deshabitada, tenía protecciones, pero los vidrios de casi toda la casa estaban rotos, el patio estaba lleno de tierra y basura solo había un pequeño paso a una de las ventanas y había una cerca de alambre de púas.
Casi todos dijieron que no, que si fuera más temprano que si, que mejor lo dejaramos para mañana, pero él se empezó a burlar de todos, en eso mi vecino le dijo.
Orale, pero primero entra tú, Ramón se dejo de reir.
Le dijo bueno, si entras tu con otro va, luego entro yo.
Mi vecino me dijo, vamos a demostrarles que no nos da miedo.
Yo le dije, bueno vamos – pero la verdad yo si me moria del miedo -.
Nos ayudaron a subirnos por el techo, y de un salto nos pasamos al patio, que estaba lleno de tierra y basura, mi vecino se arrastro por la tierra para entrar por la ventana, y me grito.
Ya arrastrate pero primero los pies para que te pueda ayudar, yo todavía no estaba seguro de querer entrar, y le dije.
Ahí voy.
Me tire de panza y me empece arrastrar, senti sus manos en mis pies, y me dijo.
Pon tus pies aquí para que te apoyes, me agarro los pies y los puso en una silla y en unos tabiques.
Apoye los pies, pero sus manos siguieron tocandome cada que yo bajaba hasta agarrarme de las nalgas, ahí se me empezó a quitar el miedo y a sentirme excitado, segui bajando me agarro del pecho y se me pego completamente y senti su bulto, yo por instinto me pegue lo más que pude a él, y me dijo.
Esperate, deja que los otros nos vean por la ventana y luego seguimos.
Hicimos a un lados las cortinas que estaban gruesas y todas llenas de tierra, nos vieron y nos gritaron.
Que hay, mi vecino les dijo.
Vamos a ver, que encontrabamos, me dijo.
Vente, vamos a ver que hay.
Los cuartos estaban casi todos vacios, eso si llenos de polvo, encontramos platos, tazas casi todas rotas, cazuelas, en un cuarto un colchon medio limpio, en otro una mesita de madera, fuimos al patio de atrás y estaba casi limpio no había basura ni tierra, la puerta estaba completa con todo y vidrios; nos metimos al baño y ahí me empezó a tocar, me besaba el cuello, me agarraba de las nalgas y me las apretaba muy fuerte, yo me quede quieto y me dijo.
Que tienes, no quieres esto, yo le dije.
Si pero, pero también te estas cogiendo a Ramón, se empezó a reír y me dijo.
Estas celoso.
Estas loco, si tu y yo no somos nada y además somos hombres.
Todavía los prejuicios morales de esa época y mi corta edad, no me dejaban entender lo que pasaba, me dijo.
No te preocupes ya corte con Ramón y por eso te elegí a ti para entrar aquí.
Y como siempre le creía, lo abrace y él empezó otra vez con el faje, pero más descarado, me levanto la playera y empezó a chuparme los pezones, se empezó a bajar los pantálones y me dijo.
Hazme una mamada.
Rápidamente me agache y le baje su calzón y me empecé a meterme su verga en la boca, el empezó a gemir, pero en eso nos tocaron, para que nos apuraramos a salir; antes de salir me dijo.
Te espero como a las 8:00 pm. en la parte de afuera, como yo estaba tan caliente le dije.
Sale nos vemos ahí.
Nos apuramos a salir, y le dijo a Ramón.
Orale ya entramos nosotro van ustedes, Ramón se echo para atrás y dijo.
No ya se hizo tarde mejor mañana.
Mi vecino se empezó a burlar de él, le dijo.
Pinche maricon.
Y pense entre mí, – no los maricones somos nosotros y me empece a reír -.
Ramón se fue corriendo a su casa y cada quien se metio a su casa, yo entre a mi casa pensando ahora como le hago para desaparecerme un rato ya eran casi las 7:00 pm., despues de mucho pensar le dije a mi mamá.
Oye, Ramón me invito a cenar, con su familia a las 8:30 pm.,
¿puedo ir?, ella me dijo.
Si, no hay problema.
Rápido me metí a bañar, salí y me acorde que a mi vecino le había gustado el short que me quedadba todo pegado, así que me puse un bikini que le había robado a mi hermana mayor, era un bikini vino de satin, que a veces me ponía y me tocaba las nalgas y me frotaba la verga, me gustaba como se sentía, me ponía muy caliente.
Espero que esto le guste a mi vecino pensé, acabe de vestirme, me puse un pants y una playera, y me sente a esperar que diera la hora para irme, se me hizo eterno pero por fin dieron las 8:00; me despedi y le dije a mi mamá.
Regreso como a las 9:30.
No, mijito te quiero aquí a las 9:00, si no, ya no te doy permiso en otra ocasión.
Pero mamá, solo es una hora.
Lo tomas o lo dejas.
Esta bien, llego a las 9:00.
Mando a tu hermano por tí, a esa hora.
No te preocupes, su hermano mayor quedo de traerme y sali corriendo.
Casi al llegar a la casa deshabitada me pare, mi vecino ya estaba a un lado, me dijo.
Apurate, junto sus dos manos para que me apoyara en ellas y me subiera al techo, me subi, luego subio él, me dijo.
Trata de no hacer ruido, fijate donde pisas, ya cuando entremos traigo una linterna para que veamos y no nos vayamos a caer o cortarnos con algo.
Ok, quien entra primero, me dijo.
Primero yo, luego tú como en la tarde.
Orale.
Se empezó a meter y luego yo, aún que traía pants me raspe un poco las rodillas, pero para esa hora ya no me importaba nada, solo pensaba en lo que iba a ocurrir, me agarro de los tobillos y me puso los pies en donde apoyarme para seguirme bajando, me detuvo a medio camino y me empezó a morder las nalga sobre el pants, no era muy duro pero me puso muy caliente solo fue un rato, acabe de bajar, nos quedamos viendo de frente yo con mi cara de enamorado y el con ojos de lujuría, me empezó a besar el cuello y a morderme las orejas, me quizó besar la boca pero no me deje, no le importo me alzo la playera y me empezó a mordisquear los pezones, y yo baje mis manos para agarrarle su bulto, el cual ya estaba muy grande,me tenía impresionado desde la tarde, me agarro de la mano y me dijo vamos a unos de los cuartos para prender la linterna y no se vea por afuera que esta alguien.
Llegamos al cuarto donde estaba el colchon, cerro la puerta y prendio la linterna, él ya había sacudido un poco y le había puesto una sabana al colchon, nos subimos arriba del colchon, dejo la linterna parada y empezamos otra vez con el faje, yo lo empecé a masturbar sobre el pantalón con frenesí y empezó a gemir de inmediato, me quito la playera y me dijo.
Hazme una mamada.
Me agache y le desabroche el pantálon y se lo baje y su verga salio disparada, no traía calzones, me la empecé a meter en la boca, primero el glande, se lo apretaba con mis labios, lo hacía de forma rápida, ya estaba llena de liquidos preseminales.
Él solo gemía aghh, aghh, siiii, siii, que rico, humm, mejooor que Ramón.
Me dieron otra vez celos y me pare un momento, él se empezó a reir un poco y le dije.
Mejor acuéstate.
Se tiro boca arriba y se quito los pantalones, me acosté entre sus piernas y empecé otra vez con la mamada, me la metia hasta la mitad, lo hacía de forma rápida, él me agarro de la cabeza y me la metía como si me estuviera cojiendo, y gemía.
Si, asi si, que rico me la mamas, humm, humm.
Pare la mamada, para escupir su presemen y la saliva que se había acumulado en mi boca y para tratar de metérmela toda, me arrodille a un lado de él, le di unas mamadas a su glande y empecé poco a poco a metérmela, metía un poco y me paraba para que no me dieran ganas de vomitar y hacía como si pasara saliva para que él sintiera la sensación de que le estaba apretando, él agarro la linterna para ver como poco a poco me metía toda su verga me faltaron solo como dos cm. pero ya me estaban dando muchas arcadas y él ya casí se venía, saque toda su verga de mi boca y me dijo.
Guauu fue genial ver, lo que hiciste.
Dejo la linterna en el suelo y se arrodillo conmigo y me empezó a mordisquear los pezones, bajo sus manos para bajarme el pants, al tratar de bajar mi calzón sintio la textura del bikini, agarro de nuevo la linterna para ver que era lo que traía puesto, me dijo.
No mames, te ves muy bien.
Y me acostó boca abajo y me empezó agarrar las nalgas sobre el bikini en forma casi salvaje, me lengüeteaba el cuello, metió su mano para agarrarme la verga pero la verdad no la tenía muy grande, pero si estaba todo mojado.
Me abrió las piernas y se acosto entre ellas, hizo a un lado el bikini y me empezó a mamar mi culito, me lastimaba con el resorte del bikini, por que me lo jalaba muy duro, pero la verdad no me importo, lo estaba disfrutando mucho, yo estaba muy excitado y muy sensible, sentía como se colaba el aire por la casa pero como era verano se sentía muy rico, él seguia mamándome el culito y trataba de meterme dos dedos, lo cual logro muy rápido, me logro meter tres dedos, yo solo gemía.
Humm, humm, humm, si metemelos más duro, más duroo, sii, sii,sii, esto lo prendio más.
Parate, me pare y él se acosto boca arriba, subete encima de mi, puse mis rodillas una a cada lado de él, poniendo mi culito sobre su verga, me acosto sobre él, y agarro su verga y me estaba haciendo a un lado el bikini.
Esperate un rato, le dije.
Para que, ya te quiero coger.
Le agarre las manos con mis manos y se las puse arriba en la cabeza, me levante un poco y con unas de mis manos, meti el bikini entre mis nalgas y acomode su verga en ese lugar, solos nos separaba el bikini, me eche saliva en los dedos y se la unte en su verga, y empecé a hacerme para adelante y para atrás de forma rápida, yo empecé a sudar y a él le salio liquido preseminal, eso ayudo para que resbalara más y él sintiera como se abrían mis nalgas cuando me hacía para atrás y apretar su verga cuando me hacía para adelante.
Acomode mis manos debajo de sus axilas, para que me pudiera apoyar mejor, él alzo sus manos y me agarro de las caderas para ayudarme a frotarme su verga entre mis nalgas, me empece a mover más rápido y luego más lento, el solo gemía.
Humm, humm, más duro, ya no aguanto, ya no aguanto.
Se levanto si avisarme y casi me tira, pero me acosto boca abajo otra vez, gire la cabeza para mirar que hacía, agarro el bikini y lo rompio hasta me saque de onda, agarro la linterna y se la puso en la boca, me abrio de piernas se puso en medio de ellas, se echo saliva en los dedos y se la embarro en su verga, puso la punta en mi anito y se dejo ir todo, yo solo sentí un poco de dolor, pero después de un rato me calente otra vez y le pregunte.
¿A quién prefieres a Ramón o a mí?.
No mames a ti wey, es que estas muy rico, humm, además a Ramón, no le entra toda mi verga y tú te la tragas hasta los huevos, es fantastico ver como te entra.
Puso sus manos a la altura de mi pecho y empezó con el movimiento de sacar y meter pero de forma lenta, yo estaba que ardía quería que me diera más duro, acomode mis pies en la pared y levante las nalgas, agarre el ritmo que tenía él, solo se escuchaban nuestro gemidos y los resortes del colchón.
Depués de un rato, yo quería que me cogiera más rápido, me desesperaba que no me podía mover a mi gusto, así que me apoye en mis manos y me eche para atrás, para quedar de perrito, pense ahora si a disfrutar de lo lindo, pero él seguía con un ritmo lento, disfrutando como entraba su verga en mi ano, me la sacaba toda y me ponía de nuevo la cabeza y me la clavaba de forma lenta, la siguiente vez que me la saco, al sentir la punta de su glande en mi ano, yo mismo me eche rápido para atrás, pero me agarro de las caderas con sus manos y otra vez me la sacaba toda, y me decia.
Pideme que te coja más rápido.
No seas malo ya cogeme bien, andale por favor.
El solo se empezó a reir, y si me empezó a dar con todo, solo se oían el ruido de nuestros cuerpos chocando, estuvimos como 10 min. así, él llevaba el ritmo de la penetración, yo me podía mover con toda libertad en esa posición, deje caer mi torso y con mi mano me agarre mi verguita y empecé a frotarmela, cuando sentí que él ya se iba a venir, por que me empezó a dar más duro y empezó a gemir más, yo también logre venirme un poco después, nos dejamos caer en el colchon el todavía largándome sus chorros de semen dentro de mí, y yo contrayendo mi esfínter por que me estaba viniendo también, quede todo embarrado de la mano, pero fue grandioso.
Fue la primera vez que teníamos tiempo de disfrutar de ese momento, después de varias veces que lo habíamos hecho, todo era a las carreras y si era muy caliente y cachondo, pero este momento si lo estaba disfrutando más, sentía su verga todavía palpitando en mi culo, me sentía lleno de él, sentía mariposas en la panza, se bajo de mí y fue al baño para orinar.
En ese momento de paz, me asuste de mis reacciones, no se que me había pasado, lo había disfrutado mucho, además no quería aceptar que me gustaba la verga, sentí ganas de ir al baño, para sacar todo el semen que tenía adentro, él regreso y me pare y me fui para el baño, como pude me quite lo que quedaba del bikini y lo tire a un lado la regadera, la cual no servía, pero el lavabo si, agarre un traste tirado, deje correr el agua un poco para que saliera toda la agua sucia, limpie el traste lo mejor que pude y lo llene de agua, me fui ala regadera y me puse como si fuera a defecar y me empezó a salir semen y un poco de excremento.
Me lave con el agua y regrese con mi vecino, el se había acostado otra vez, me dijo vente acuéstate un rato, me acosté de frente a él, y me empezó acariciar otra vez, pero esta vez de forma tranquila, pasaba sus manos por mis piernas, por mis nalgas, me apretaba los pezones, yo me empecé a calentar otra vez y él también, ya que se le empezó a parar la verga otra vez, se la agarre y lo empecé a masturbar otra vez pero tranquilo, y me dijo.
Te quiero coger otra vez.
Pero ya es tarde, tengo que regresar a mi casa a las 9:00 pm..
Me dijo no te preocupes todavía falta media hora.
Bueno, pero la verdad ya me duelen las rodillas.
Solo date la vuelta.
Quedamos de cucharita, me puso su verga entre mis nalgas y mis piernas y se empezó a mover como si me la estuviera metiendo, y me empezó a besar el cuello y apretar mis pezones, yo le agarraba una nalga y lo apretaba más a mí, luego de un rato me separo un poco de él, se ensalivo la verga, se acomodo y me la empezó a meter poco a poco, yo sentía que estaba en el paraíso, sentía como entraba y apretaba mi esfínter para que lo sintiera más, me penetro completamente y se empezó a mover pero lento, puso su mano en mi cadera para llevar el ritmo, la posición no nos permitía más o todavía no nos acomodábamos, empezamos a gemir los dos.
Después de un rato trate de moverme más, así que me separe un poco y apoye mi pierna en la pared y él se separo un poco más y se acomodo mejor y me empezó a dar más duro, estuvimos como 2 min. así me la saco y se vino en mis nalgas, me esparcía su semen con su verga, agarre un poco y me lo lleve a la boca y ya no me era tan desagradable y me lo comí, nos paramos los dos y nos fuimos al baño para lavarnos lo mejor posible, nos vestimos y nos salimos de la casa con cuidado el bajo primero y me ayudo a bajar; como quedaba un lugar que no le daba la luz entre casa y casa, me llevo para allá.
Lo volvemos a repetir mañana.
No puedo, que le digo a mis papas.
Pues que te invite yo a cenar.
No por que mis papas sospechan que tu y yo tenemos algo.
Es que quiero estar otra vez así contigo.
Me acorde en ese momento, que mis padres tenían el sábado una fiesta y como a mí casi no me gustaban a veces me encerraban y me dejaban solo, le dije.
Bueno, te espero el sabado a las 9 pm. en mi casa.
Nos fuimos cada quien a su casa, llegue y mi mamá me empezó a decir.
Como estuvo la cena.
Muy rica mamá, y sabrosa.
Que bueno, que la pasaste bien.
Bueno ya me voy a dormir, por que estoy muy cansado, hasta mañana.
Se me hizo eterno que llegara el sabado, pero eso se los cuento en otra ocasión.
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