Era un obrero bisexual…

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Llovía mucho, él estaba ahí emparamado, me estacioné y le pregunté dónde había un restaurante cerca, estaba quemado por el sol y el viento, un poco sucio, pero muy guapo, me miró fijo, indicándome. “allá..”, instintivamente le piqué el ojo, él movió para arriba y abalo las cejas, le dije, acompáñeme y almorzamos, sin vacilar se subió a mi auto y ae se instaló el cinturón de seguridad, es un tipaso, pensé. Inicie la marcha y pregunté, ¿Cómo te llamas?, Luis a la orden, pa lo que sea, gracias, colocándome la mano izquierda en la pierna derecha. Ahí comprendí con quien estaba. Al bajarnos me dio un beso en mejilla y me llevó mi mano a su brageta, sentí algo duro, muy duro, me dijo es todo suyo.

Como estaba ya oscuro, le baje la cremallera y empecé a besárselo y a chuparlo. En ese momento me bajó el pantalón, aquí no, le dije. Nos repusimos, compramos algo de comer y le dije que íbamos para mi casa,sólo te pido que más adelante te metas en el baúl..así lo hizo, entré al garaje y una vez allí lo subí al estudio..mi hijo de 14 años preguntó: es mi apa? Instale a Luis y bajé, saludé, informándoles que no me molestaran que tenía que terminar el proyecto “medasculo”.

Una vez arriba desvestí a mi invitado, nunca había visto un joven, de unos 22 años, tan bien delineado, seguramente porque trabajaba duro, lo duche, nos duchamos mejor dicho, le hice sexo oral, lo sequé y me puse a besarlo milímetro a milímetro de su bello cuerpo, qué pene, más de 23 cms, grueso, negro, pero su cuerpo es blanco, el contraste es bello, me penetró varias veces, estaba arrechísimo, se vino varias veces, la primera, un chorro casi interminable, no había visto eso sino en películas.

Me hizo muy feliz, se quedó esa noche en mi casa y me repitió a la dosis al otro día, a esa hora 7 a.m., ya todos se habían ido a estudiar o a trabajar. Se salió de su trabajo de obrero de construcción y ahora anda conmigo, que buen encuentro, sólo que tiene mujer y tres hijos. Pero que gran padre, ahora es mi hijo mayor.