erastés y los jovenes erómenos (Jes y yo)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
He tenido la fortuna de tener un ángel para los adolescentes, uno de ellos Jes así lo llamare, joven de 16 años (con novia) llamo fuertemente mi atención, él; blanco delgado de cuerpo definido, cabello algo largo, tenía a pesar de su edad casi mi estatura 1.79, debo confesar que estas características siempre han sido me fetiche en los jóvenes, para entonces era dueño de un GYM y un amigo “heterosexual” que sabía de mis gustos, lo invito a visitar mi local y hacer ejercicios en el GYM, al verlo hice una sentencia: “este será mío” obviamente por algo mi amigo “heterosexual” lo había lleva a mi local.
Verlo allí haciendo ejercicios intercambiando miradas detallando sin pudor todas las partes de su cuerpo y escuchando su conversación de mujeres con mi otro amigo me excitaba mucho, yo hombre serio le seguía la conversación y dejaba por sentado mi seriedad en el asunto, el con sus ojos dejaba ver su satisfacción por saberme un hombre maduro que entendía su mentalidad de “Hombre”, poco a poco el joven fue ganado mi amistad, ara mi era obvio que yo representaba un importante apoyo en su vida siendo hombre y teniendo un negocio y el un joven estudiante, sabía que podía beneficiarse con mi amistad, no paso mucho el tiempo cuando lo invite a mi casa a ver una película y pasar la noche.
Terminada la película nos acostamos, Jes se quitó toda la ropa y quedo en ropa interior, yo hice lo mismo, entonces al arroparnos lo abrace, y para mi sorpresa me sobrevino un beso de su parte, mientras más sentía su lengua en mi boca más me invadía la excitación de saber que este chico que tanto habla de mujeres que se le veía tan serio con sus amigos estaba en mi cama ahora besándome apasionadamente, sentir su cuerpo delgado sobre mi cuerpo y su pene erecto chocando con el mío fue algo que me impulso a sacarme la tela que nos cubría en la cama, bese su pecho y llegue hasta su miembro y lo devoré como nunca, el gemía extasiado creo que nunca nadie le había dado ese tipo de sexo, lamí sus genitales, y a veces dejaba escapar mi lengua un poco más abajo tratando de llegar a su ano, subí de nuevo y nos seguimos besando por un rato, luego me volteo y me empezó a penetrar, sentía que hacia un esfuerzo por hacerlo lo mejor posible, y así lo hacía, era alucinante se lucia a cada arremetida de su pene dentro de mi cuerpo, le dije que me avisara cuando fuera a eyacular, quería hacerlo al mismo tiempo, entonces me dijo que se venía y me levante un poco para masturbarme y entonces se corrió dentro de mí y yo me corrí también, sacó su pene y se acostó a mi lado nos limpiamos y volvimos a costarnos, están ves desnudos nos volvimos a besar, hasta que dar dormidos……. (Continuara)
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