Es hora de entrenar 2
…La masturbación es el mayor acto de amor y placer propio, es una actividad masculina que los hombres disfrutamos solos y acompañados de otros hombres, es nuestro mayor acto de complicidad varonil….
Ese día de entrenamiento salí muy tarde, eran las 11 de la noche y apenas nos retirábamos, olía a una mezcla de aromas, pero me sentía muy varonil, estaba sudado, compartía mi sudor y el de el entrenador, salimos, me subí a su vehículo y me llevó a casa, al llegar bajé y el entrenador Arturo se estacionó frente a mi casa, con el ruido del vehículo mi papá salió a recibirnos, camino y se asomó en la ventanilla del coche donde estaba Arturo aún con sus lycras con la mano derecha sobando su entrepierna, misma mano con la que saludó a mi papá en lo que yo baja mis cosas y caminaba a su lado.
Papá Julio- Ya está listo, todo bien?
Entrenador – Todo excelente compa, ya está, mañana igual.
En eso papá me abraza y me da un beso en la cabeza y me aspira, siento que olió mi olor a macho y voltea a ver al entrenador mientras este me sonríe.
P- Muy bien, ya estamos, buena noche.
Yo caminé a la casa algo avergonzado, no sabía que pensaría mi papá si sabía lo que había pasado, caminé a la puerta y papá me siguió hasta mi habitación. Entramos los dos y me siguió cerrando la puerta detrás de él.
P- cómo te hijo? Que tal el entrenamiento?
Y- Bien… Bien… Algo pesado.
P- Me da gusto que le estés poniendo todo, y noté que estás oliendo fuerte cabrón jeje, ya estas cambiando, ya empiezas a oler a hombre.
Yo me quedé algo avergonzado y me puse rojo.
P- tranquilo hijo es normal, el olor masculino es parte de nuestro atractivo, es lo que nos diferencia de las mujeres, debes estar orgulloso siempre de tu cuerpo.
Diciendo esto me abrazo, aspiró fuerte y salió, no sin antes darme una nalgada de juego, yo me quité la ropa y la olí, recordé lo que había pasado con el entrenador y recordé la leche que le había salido, jamás había visto nada así, recordé su sabor y olor, por qué a mí no me había salido? Me gustaría sacar leche también, mientras olía mi uniforme y mi cuerpo mi pene se ponía duro, era delgado, blanco y corto, ya quería que fuera como el de los adultos, estaba muy parado y empezadas sacar un líquido transparente, comencé a tocarlo mientras olía mi uniforme, acaricié mis bolas que tenían una leve capa de vello, me tiré en la cama y seguí acariciándome, en eso se abre la puerta y era mi papá de nuevo para preguntarme si quería algo de cenar, al verme quise parar y me asusté, pero el parecía muy contento, cerró la puerta y se acercó a mi.
P- Oh hijo, perdón, sigue, sigue!!! Que hermoso, no sabía que ya te tocabas.
Y- Papá!!!! No! No!!!!
P- tranquilo hijo, está bien, no sabía que ya lo hacías.
Yo algo avergonzado relajé la postura.
Y- No…. no… Es… La primera vez.
P- en serio rey? Espera, deja te tomo una foto para recordar este momento.
Papá sacó su celular y tomó algunas fotos mías desnudo, enfocó mi pene y me cara oliendo mi uniforme de Lycra.
P- que hermoso hijo, tu primer masturbación, ya te estás convirtiendo en hombre, sigue hijo, sabes cómo hacerlo?
Y- pues… Es que quiero sacar leche pero no sé si tengo.
P- Muy bien rey a ver, te ayudo. La masturbación es el mayor acto de amor y placer propio, es una actividad masculina que los hombres disfrutamos solos y acompañados de otros hombres, es nuestro mayor acto de complicidad varonil, lo puedes hacer dónde gustes con quién gustes y cuando necesites, es una necesidad masculina y no debemos de ignorarla, a partir de hoy tu pene será tu mejor amigo y siempre le harás caso a su necesidad.
Y- Papá…. Me puedes enseñar a masturbarme?
P- Claro hijo.
Papá se desvistió, vi su cuerpo delgado, velludo, tenía su pecho y axilas peludas, su barba se veía muy bien y en su entrepierna mostraba una mata de pelo negro que coronaba un pene largo y blanco con una cabeza rosada.
Y- Papá tienes un pene muy bonito.
P- Así lo tendrás tú hijo, míralo.
Y- Me gusta.
P- Mira, mis bolas, de aquí naciste.
Acaricié sus bolas, mientras él acarició las mías.
P- Ven acuéstate conmigo, sonríe, este momento hay que plasmarlo.
Papá nos tomó una selfie dónde salíamos los dos juntos y nuestros penes se tocaban, luego me abrazó y volvió a tomarnos otra foto.
P- Me gusta esta foto de perfil. Muy bien hijo, aquí es nuestro placer, este es nuestro momento de hombres, mira, con una mano acaricia todo tu miembro y con la otra tus bolas, siente tu virilidad, enorgullecete de tener verga y disfruta su calor, su tamaño, su humedad, ahora comienza a mover tus manos, masajea.
Comencé a hacerlo, comencé a tocarme, era rica la sensación, abría los ojos y papá también se tocaba el olor a hombre llenó el cuarto, era muy rico ver esos dos penes.
P- Crucemos hijo, toma mi pene y yo el tuyo.
Comenzamos a masturbarnos mutuamente, sentía su dureza y fuerza y su mano era una gloria, después papá se levantó y juntó su glande con el mío era una ricura, los dos penes se tocaban e intercambiamos fluidos, empezó a frotar su pene con el mío y bajó su cara a mi oído.
P- Así hijo, nuestros penes juntos rey, nuestras bolas chocando, no hay nada mejor que la unión de dos vergas, disfruta hijo.
Se sentía rico, sin querer empecé a gemir, era una sensación extraña pero muy rica, papá tomo los dos penes y los empezó a masturbar rápido, note que sus músculos se tensaban, empezó a sudar, cerró los ojos y empezó a gemir, su verga se hinchó y de ella salieron chorros de esperma que calleron sobre mi cuerpo y mi pene, papá gritó pero en lugar te descansar siguió con mi pene, con mi mano mojada de su semen, del mismo semen que había usado para procrearme tomó mi miembro y me siguió masturbando y con la otra jugaba con mis bolitas, sentí muy rico, sentia un placer que jamás había sentido, empecé a llegar al orgasmo sentí la necesidad de orinar.
Y- Papá!!! Papá!!!! Me voy a orinar!!!! Papá no puedo!!!
P- Haz rey, haz!!!
En eso me dejé vencer y de mi pene salieron chorros de orina, pensé que ya había eyaculado, pero parece que solo salía orina de mi.
Al ver eso papá puso su boca en mi pene y tomó toda la orina de mi, en eso sube y me da un beso y siento como pasa un chorro de mis meados a mi boca empezamos a jugar con mis meados en nuestras bocas hasta que terminé tomándome todo.
Para se tumbó en la cama conmigo ambos desnudos y sudados, nos abrazamos y nos quedamos dormidos.
Es un orgullo haber nacido hombre. Felicidades varón por tener ese miembro entre las piernas, un abrazo.
Danny J
como sigue
Me encanta tener pene. Me gusta la complicidad que se da entre hombres. Quiero vivir muchas experiencias así. Continúa
Maravilloso ese acercamiento con tu padre, en verdad excelente!